IV. EL SECTOR FORESTAL EN 2.020
Tras analizar la información contenida en la en las páginas precedentes, con el claro de describir el futuro del sector forestal, el grupo ha estimado que, siguiendo las mismas tendencias, el sector forestal ecuatoguineano podría sufrir los siguientes cambios:
La producción caerá enormemente debido al agotamiento de la medera en los bosques destinados a la producción; los esfuerzos que durante los últimos años viene haciendo el Gobierno llevarán probanlemente a consolidación de la industria forestal, pero ésta se vería truncada con la escasés de recursos para cubrir sus necesidades en materias primas, por lo que, seguramente, irá desapareciendo.
Ante esta situación el país se verá obligado a recurrir a las importaciones de madera para cubrir las necesidades del mercado local, tanto en materias primas para las industrias como en productos industriales para la población en general.
Las actividades del sector se centrarán mas probablemente en los sevicios ambientales como la protección de la diversidad biológica, y el eco turismo. Los programas de conservación que se están llevando a cabo actualmente en el país habrán dado fruto, las especies amenazadas estarán más protegidas.
En cambio en la Isla de Bioko las actividades de explotación del Prunus africana desaparecerán ya que la explotación de esta especie sera ya imposible debido a que, probablemente, solo se encontrará en lugares inaccesibles por la explotación iracional que se está llevando a cabo actualmente.
La población, sobre todo la de la Región continental, se enfrentará a serios problemas de desempleo, lo que originará consigo un masivo éxodo rural.
En cuanto a la oferta/demanda de madera, cabe destacar que, como ya se ha dicha anteriormaente, la oferta disminuirá considerablemente por la escasés de madera a nivel nacional, mientras que la demanda crecerá de forma sensible; este se deberá principalmente al buen comportamientp de la economía y a la ampliación de la renta de los ciudadanos; esto conducirá sin duda al aumento de los precios de la madera en los mercados locales. A nivel internacional se incrementará la cocurencia debido a la amplia oferta de madera procadente de las plantaciones, lo que conducirá, probablementen, a una caida de los precios de la madera en los mercados internacionales.
Este mismo comportamiento de la economía alzará al sector terciario, sobre todo el hostelero, que podría, a su vez, incidir en el consumo de leña; no obstante este consumo no experimentará un gran incremento, ya que dentro del consumo energético es cada vez ma´s patente la presencia de otras fuentes de energía, tales como el petroleo, el gas e incluso la electricidad.
La participación de las ONG,s incrementará; pues esta reciente y nueva estructura en Guinea Ecuatorial, está en plena expansión y tiene un papel muy importante que jugar en la gestión de los bosques.
La gente será más conciente de la importancia de los bosques y la presión humana sobre los mismos será más controlada y más responsable; esto, aunque nunca haya supuesto un gran problema en Guinea Ecuatorial, por la escasa densidad de la población si excluimos la actividad de las empresas madereras, es muy importante para los fines de conservación de la biodiversidad y la lucha contra la desertificación de los bosques.
En definitiva el sector forestal, que actualmente es uno de los principales sectores de la economía nacional, empezará a costarle dinero a las arcas del Estado por el alto coste que tienen los programas de conservación. Los ingresos provenientes del turismo en la naturaleza y de la escasa activida productiva del sector no serán suficientes para cubrir los costes de conservación; por lo tanto sería muy importante que nuestra economía nacional disponga de otro sector que pueda cubrir el vacío que dejará el sector forestal como sector productivo. La pregunta es ¿qué sector será, industria o turismo?
