III. ESTABILIZACION DE LADERAS MEDIANTE EL EMPLEO COMBINADO DE MATERIALES MUERTOS Y VIVOS

    Pueden lograrse estructuras eficaces para corregir la erosión, estabilizar ciertas secciones de laderas, lechos de cauces o cárcavas de erosión empleando una combinación de materiales muertos y materiales vivos. Cuando se comparan con las construcciones de ingeniería convencional, los sistemas vivos tienen muchas ventajas, incluyéndose entre ellas: una mayor duración, una eficacia superior, menos mantenimiento, la reducción del costo total, y una compatibilidad estética mejor con el paisaje circundante.

3.1 Construcción de muros de sostenimiento con lechos de ramas

    Muros de sostenimiento de madera

Procedimiento

    Se construyen muros de sostenimiento sencillos o dobles a base de postes redondos o de madera escuadrada que se sujetan entre sí mediante clavos o clavijas. Los muros de sostenimiento de madera nunca deben colocarse verticalmente, sino formando un ángulo de inclinación de 10:1 como mínimo en la dirección de la ladera. Estos muros no deben tener una altura superior a 4 m. Las juntas entre maderas deben tener aproximadamente la misma anchura que el diámetro de éstas (Fig. 13, 14).

Fig. 14 Muro de sostenimiento de madera con lechos de ramas para la estabilización de un cauce erosionado.

    Durante la construcción del muro, se deben colocar ramas de plantas vivas en los espacios libres entre maderas de tal forma que no sobresalga más de una cuarta parte de su longitud. Cuando se vuelca el material de relleno en las aberturas entre maderas, hay que evitar grandes espacios huecos para poder tener la garantía de que las ramas van a enraizar adecuadamente. Si es posible, el extremo inferior del corte de las ramas debe llegar al suelo situado tras del muro de sostenimiento. No hace falta tierra de la capa superior del suelo ni humus para el relleno de los muros, pero el material de relleno debe contener suficientes elementos finos para posibilitar el desarrollo de la vegetación.

Materiales

    Para la construcción del muro o pantalla se necesita madera redonda o escuadrada, de 10 a 25 cm de diámetro (Foto 22). El material vivo debe consistir en ramas fuertes de especies que enraicen fácilmente, con un metro por lo menos de longitud y gran número de ramas laterales. Se necesitan por lo menos 30 ramas por metro de longitud.

Epoca

    Los muros de sostenimiento de madera con materiales vivos deben instalarse durante la estación de reposo, esto es, en una época en que las ramas no tengan hojas. En condiciones favorables (clima húmedo, tiempo corto de transporte, etc.), se pueden plantar también plantas con raíces durante la estación vegetativa, pero hay que tener un cuidado especial para asegurarse de que no se dañan las plantas durante la construcción del muro.

Eficacia ecológica y técnica

    Este sistema se emplea para la estabilización de ciertas partes de laderas, cursos de agua y bases de laderas. Con el paso del tiempo, la madera del muro se pudrirá y será sustituida por las plantas que crezcan (Foto 22). Las plantas establecidas drenan la ladera de forma muy eficaz mediante transpiración.

Foto 22 Muro de sostenimiento de madera con lechos de ramas. Arriba, después de un año. Abajo, después de tres años.

    El añadir plantas leñosas pioneras de fuertes raíces, como las empleadas en la construcción de lechos de ramas de setos vivos, tiene ventajas, pero se pueden emplear satisfactoriamente sólo plantas con raíces.

    Esta forma de construcción es muy conveniente en lugares en que la vegetación local no cuenta con especies que enraicen a partir de estaquillas o cuando no se dispone de material apropiado para estaquillas. Cuando se emplean en taludes próximos a carreteras, hay que tener cuidado asegurándose que las plantas no lleguen a ser tan grandes que obstruyan la visibilidad de la circulación.

Muros de sostenimiento de hormigón y de material vivo a base de elementos prefabricados

Procedimiento

    Las distintas partes de hormigón se ensamblan de acuerdo con las instrucciones del fabricante y seguidamente se llenan con el relleno disponible (excepto la arcilla). Durante el proceso de construcción, se colocan en los huecos ramas vivas y plantas con raíces de modo que lleguen al terreno situado tras del muro de sostenimiento. Hay que compactar firmemente el material alrededor de las plantas para favorecer la formación de raíces. También se puede emplear césped pero debe garantizarse un fuerte contacto con el material de relleno (Foto 23).

Foto 23 Muro de sostenimiento de hormigón recubierto de vegetación mediante la siembra hidráulica, dos años después de la instalación.

Materiales

    Elementos de muros de sostenimiento de hormigón. Ramas de plantas que enraizan a partir de estaquillas (algo más largas que la anchura del muro de sostenimiento, con 10 ramas como mínimo por metro de recorrido, o plantas en raíces o césped del tamaño de los huecos existentes entre las vigas del muro (Foto 24). En zonas urbanas, se pueden utilizar plantas ornamentales trepadoras para cubrir las componentes de hormigón.

Foto 24 Muro de sostenimiento de hormigón con lechos de ramas. Arriba, durante la construcción. Abajo, después de un año.

Epoca

    Cuando se emplean estaquillas o ramas con raíces, la mejor época es la estación de reposo, siempre que el clima sea apropiado. La siembra o el relleno con planchas de césped se puede realizar durante todo el período vegetativo.

Muros de sostenimiento metálicos construidos a base de elementos prefabricados

    El uso de muros de sostenimiento metálicos hay que considerarlo en lugares en que se dispone de elementos metálicos que son más económicos que los otros materiales de construcción. La construcción es análoga a la de los muros de sostenimiento de hormigón

3.2 Muros de piedra y montones de piedra recubiertos de vegetación (sin mortero)

Procedimiento

    Durante la construcción de muros o montones de piedra o roca se colocan plantas vivas en las juntas existentes entre las piedras, de modo que lleguen al suelo existente tras el muro (Fig. 15). Si los muros tienen que rellenarse con grava para drenar el agua, las ramas o las plantas con raíces deben llegar al suelo a través de la grava. Para evitar la desecación, las ramas no deben sobresalir del muro más de 30 cm (Foto 25). Es conveniente podar las ramas de forma uniforme con una longitud máxima de 30 cm al exterior del muro después de la plantación. Cuando sea inadecuado el uso de especies arbustivas o arbóreas por razones ecológicas, las juntas se deben rellenar con césped. La combinación de césped y piedras para muros bajos en campos abiertos es un método muy antiguo.

Foto 25 Muro de piedra recubierto de vegetación durante la construcción. Obsérvese que las ramas llegan al suelo del fondo.

Fig. 15 Muros de piedra con vegetación.

    Este sistema de construcción de muros de piedra con césped, requiere tepes de césped muy gruesos. Los muros no deben tener una altura superior a 10 m y deben estar fuertemente inclinados hacia la ladera. Después de la construcción, los muros y los montones de piedra con la coronación plana se pueden rellenar con material fino y cubrirlos de vegetación con ayuda de paja. También se puede emplear una combinación de ramas vivas, plantas con raíces y césped (Foto 26).

Foto 26 Muro de piedra recubierto de vegetación, combinando plantas enraizadas y planchas de césped, de dos años.

    No hace falta tierra de la capa superior del suelo siempre que se pueda obtener localmente material de grano suficientemente fino para garantizar el desarrollo y crecimiento de las plantas.

Materiales

    Además de las piedras empleadas para la construcción principal, se necesitan ramas delgadas vivas en proporción de 2 a 5 por metro cuadrado. Pueden emplearse arbustos con raíces o césped cortado con las dimensiones de las aberturas de las juntas, pero no son apropiados los árboles.

Epoca

    Los muros de piedra con vegetación deben construirse durante la estación de reposo.

3.3 Gaviones rígidos con vegetación

Procedimiento

    Se extiende sobre el terreno una tela metálica fina en el lugar de construcción, cubierta de grava gruesa o piedra machacada, y se entremezcla con ramas vivas y plantas con raíces. Para garantizar que se cubran adecuadamente las ramas, hay que levantar y sacudir repetidamente la tela metálica para facilitar que se asiente la grava. Hay que sacar un poco las ramas y las estaquillas de las plantas a través de la tela metálica. Pueden colocarse plantas con raíces de modo que se introduzcan en las juntas por la tela metálica. Finalmente, se tira del conjunto de la tela metálica y se cose con alambre dándole una forma cilíndrica, apropiada para el sitio. Si el gavión puede ser desplazado por fuerzas mecánicas (de tensión o compresión), debe sujetarse con fuertes estacas de acero introducidas en el terreno con un compresor o con un martillo grande. Para proteger los gaviones contra su lavado y arrastre (especialmente en construcciones longitudinales siguiendo los márgenes de los cursos de agua) lo mejor es colocarlos encima de lechos de ramaje.

    Con gaviones fabricados con tela metálica muy pesada y que se rellenan con piedras grandes, no se pueden colocar ramas ni plantas vivas entre las piedras, sino únicamente en las juntas existentes entre gaviones (Fig. 16).

Fig. 16 Gaviones rígidos con vegetación.

Materiales

    Se necesita una tela metálica con un tamaño máximo de malla de 5 cm, grava gruesa, alambre para atar, estacas de acero (si es necesario), ramas vivas y plantas con raíces. Si el agua es extraordinariamente ácida, se corroerá rápidamente la tela metálica; en este caso, deben emplearse mallas hechas de materiales flexibles, como por ejemplo el polipropileno.

Epoca

    La mejor época para la construcción de gaviones rígidos es la estación de reposo. De hecho, la instalación subsiguiente es casi imposible. Sin embargo, dependiendo de las condiciones climáticas, se pueden añadir cuidadosamente plantas con raíces durante el período vegetativo.

3.4 Gaviones flexibles

    Los gaviones flexibles consisten en geotextiles que no se pudren, por ejemplo hojas de fibra sintética o alfombras sintéticas con una anchura de malla inferior a 5 mm. Resisten mucho a la tensión y son por tanto diferentes de los gaviones antes descritos. Para la construcción de gaviones flexibles puede emplearse material de grano fino.

Procedimiento

    Hay dos métodos principales de construcción:

    a) Se hacen contenedores en forma de saco de diversos tamaños y se rellenan con arena o grava, sin arcilla o con cantidades mínimas. Estos sacos se utilizan seguidamente como si fueran piedras o ladrillos para formar muros y se sujetan en el lugar (Fig. 17, Foto 27). Se introducen ramas o estaquillas de plantas leñosas vivas o plantas con raíces, en las juntas existentes entre los sacos de tal forma que lleguen al suelo original. Cuando se emplean sacos largos como salchichas, hay menos juntas. Los "muros de sacos de arena" altos se pueden fijar eficazmente mediante la incorporación de anclajes de materiales de aluvión o a base de barras de acero que lleguen muy profundamente (del tipo empleado en la construcción de hormigón).

Foto 27 Gaviones flexibles de tipo de saco combinados con plantas leñosas enraizadas para reforzar una margen erosionada.

Fig. 17 Gaviones flexibles con vegetación.

    b) También se pueden producir muros artificiales mediante la extensión de alfombras geotextiles cubriéndolas seguidamente en su mitad con una capa de material de 30 a 50 cm de grueso. Cuando la capa se ha solidificado, la mitad vacía de la alfombra se dobla sobre la capa para cubrirla. De esta forma, se pueden erigir, uno sobre otro, gaviones flexibles que están abiertos por el extremo de atrás.

    El mejor metodo es combinar gaviones flexibles con plantas leñosas. Durante la construcción hay que colocar lechos de ramas, lechos de ramas de setos vivos o lechos de setos vivos entre las distintas capas de material.

    Ambos tipos de gaviones flexibles pueden cubrirse de vegetación después de su construcción mediante siembra hidráulica o mediante aplicación de estaquillas fuertes o la instalación de plantas en los contenedores. En este último caso, deben hacerse agujeros en las alfombras de geotextiles.

Epoca

    El tipo más eficaz de gaviones flexibles es aquél en que se colocan durante el proceso de construcción ramas vivas de fácil enraizamiento o plantas leñosas con raíces. Por lo tanto, la época mejor de construcción es durante la estación de reposo. La aplicación suplementaria o la incorporación de vegetación puede extenderse durante un periodo más largo; la construcción de gaviones puede realizarse entonces durante todo el año. El recubrimiento con césped es posible durante el verano, dependiendo de las condiciones climáticas del sitio.

3.5 Emparrillados vivos de laderas

Procedimiento

    Los emparrillados de laderas consisten en una estructura de madera construida de tal modo que' se soporta a sí misma desde la base. Por ello es fundamental una cimentación sólida. Se echan sobre la ladera postes sencillos o madera escuadrada y se unen entre sí mediante madera cortada y colocada horizontalmente. La distancia entre las maderas verticales y las horizontales no debe ser de más de 2 metros, dando lugar a cuadrados individuales que no son mayores de 2 m x 2 m aproximadamente. Todo el espacio existente entre los postes de madera se rellena entonces con grava permeable o con material del terreno (Fig. 18, Foto 28). También se pueden emplear, para la construcción de sistemas de emparrillados de laderas, elementos de prefabricados de hormigón (Foto 29).

Fig. 18 Emparrillados vivos de ladera

Foto 28 Emparrillados de ladera con elementos prefabricados de hormigón.

Foto 29 Emparrillados vivos de ladera para la estabilización de un talud muy inclinado. Arriba, durante la construcción. Abajo, después de ocho años.

    Estos emparrillados se deben recubrir de vegetación lo antes posible para lograr una solución permanente.

    Se pueden construir emparrillados más pequeños a base de postes vivos largos, o cualquier material disponible. El espacio entre las maderas se puede llenar también por completo a base de ramas vivas y tierra, con lo que se obtiene rápidamente una vegetación muy densa (Fig. 19).

Fig. 19 Emparrillados vivos de laderas, llenos completamente de ramas vivas.

    Otra alternativa consiste en hacer los emparrillados a base de madera muerta, recubriéndolos seguidamente de vegetación con el método normal de siembra, después de cubrir la superficie con tierra de la capa superior o con césped. El método más eficaz para recubrirlos de vegetación consiste en una combinación de parrillas de ladera con lechos de ramas o lechos de ramas de setos vivos, estaquillas, plantas leñosas con raíces y métodos de siembra.

Materiales

    Se necesita madera en rollo o madera escuadrada o elementos prefabricados de hormigón, dependiendo del tipo proyectado de construcción y de las dimensiones totales. Para el recubrimiento con vegetación se necesitan ramas vivas, estaquillas, plantas con raíces, planchas de césped y semillas.

Epoca

    Cuando se emplean estaquillas vivas y plantas, la construcción puede realizarse únicamente en la estación de reposo; cuando se emplean técnicas de encespedado o de siembra, la mejor época es en la estación vegetativa.

3.6 Construcción de enrejados

Procedimiento

    Se echan estructuras de tela metálica sobre la superficie del desmonte y se sujetan al terreno con piedras o con anclajes. La longitud de los anclajes depende de las condiciones geológicas (Fig. 20)

Fig. 20 Construcción de mallas.

    Las estructuras de tela metálica se atornillan seguidamente a una chapa de acero, presionándolas contra el terreno. Se pueden usar barras de acero horizontales y verticales para un refuerzo adicional. A fin de evitar que salgan las partículas finas del suelo, se pueden instalar también hojas de fibras naturales (paja, heno) o de poliester y alfombras de tela metálica. Dependiendo de las condiciones del sitio y del objetivo deseado, se emplea una combinación de materiales vivos de construcción y estaquillas de ramas de fácil enraizamiento, así como plantas leñosas con raíces y siembra de herbáceas y arbustos.

Materiales

    Se necesitan estructuras de tela metálica corrugadas y reforzadas, hojas de poliester, o alfombras de tela metálica, estaquillas o ramas de fácil enraizamiento, plantas leñosas con raíces y semillas de arbustos y herbáceas.

Eficacia técnica y ecológica

    Los elementos metálicos de la construcción de enrejados sostienen inmediatamente el suelo. Mediante el desarrollo de las plantas se asegura un desagüe eficaz y una sujección permanente del suelo, con todos los efectos ecológicos consiguientes. Los enrejados se utilizan sobre todo para estabilizar laderas propensas a los derrumbes; son especialmente eficaces en aquellos casos en que no pueden reforzarse los taludes con métodos tales como los emparrillados de laderas que requieren la construcción desde el pie de la misma hacia arriba.

3.7 Construcción de empalizadas cubiertas de vegetación y postes

Procedimiento

    Se clavan en el terreno, juntos entre sí, postes vivos afilados, escuadrados en su parte superior, y de tamaño y longitud uniformes. Dos terceras partes de la longitud total del poste deben quedar sobre el terreno. A continuación se atan los postes, con ramas de sauce o con alambre de acero, a una viga transversal de material vivo o muerto, que está empotrada sólidamente en los laterales del barranco. El empleo de una viga transversal de material vivo da la oportunidad de que ésta eche raíces, (Fig. 21), por lo que resulta muy aconsejable.

Fig. 21 Construcción de empalizadas vivas.

Materiales

    Se necesitan estacas o postes de plantas vivas con un diámetro mínimo de 5 cm, y del orden de 5 a 20 unidades por metro de recorrido.

Epoca

    La construcción se debe llevar a cabo durante la estación de reposo.

3.8 Lechos de ramas vivas en las cárcavas

Procedimiento

    Se colocan en las cárcavas ramas de varios metros de longitud con el extremo superior hacia abajo. De esta forma, las ramas sobresalen hacia arriba. El extremo superior debe introducirse en terreno compacto aproximadamente 25 cm para obtener una capa lo más'gruesa posible y garantizar una formación óptima de raíces. Sin embargo, no se deben colocar las ramas demasiado juntas, porque hay que poner tierra entre ellas. Las ramas deben colocarse en forma de espina de pescado con sus puntas hacia la parte exterior de la cárcava. Cada lecho de ramas debe cubrirse. El grueso total del conjunto no debe ser superior a 50 cm (Fig. 22). Este conjunto se sujeta a las vigas transversales que deben colocarse profundamente en el terreno y a distancias de unos 2 m. Deben ser de material vivo, no empleándose en este método madera pesada.

Fig. 22 Construcción de lechos de ramas vivas en cárcavas.

Materiales

    Deben utilizarse ramas vivas de especies vegetales que enraícen con facilidad, seleccionando las ramas disponibles más fuertes y largas. Para cárcavas hasta de 150 cm de profundidad pueden emplearse ramas muy espesas; para cárcavas más profundas pueden emplearse ramas espesas en combinación con otras más largas. Se necesita también una viga transversal por cada 2 m de longitud de cárcava; la longitud y el grueso de las vigas transversales dependerán de la anchura de la cárcava. Para cárcavas menores son más apropiados los postes vivos.

Epoca

    La construcción se debe realizar durante la estación de reposo.