Previous Page Table of Contents Next Page

INTRODUCTION-PROCEDURE OF THE SESSION (continued)
INTRODUCTION ET QUESTIONS DE PROCEDURE (suite)
INTRODUCCION Y CUESTIONES DE PROCEDIMIENTO (continuación)

First Report of Credentials Committee
Premier rapport de la Commission de vérification des pouvoirs
Primer informe del Comité de Credenciales

J. S. CAMARA (Président de la Commission de vérification des pouvoirs):

Monsieur le Président, j'ai 1 'honneur de soumettre à 1 'Assemblée le premier rapport.

La Commission que j ' ai 1 'honneur de présider a tenu sa première séance le 10 novembre 1979 pour examiner les pouvoirs des délégations des Etats Membres à la vingtième session de la Conférence de la FAO,

La Commission a examiné les pouvoirs de quatre-vingt-dix-neuf délégations; elle a reconnu valides les pouvoirs des délégations de quatre-vingt-dix-neuf Etats Membres dont la liste sera incessament distribuée et ou, s'il y a quelque problème, le Secrétariat est tout prêt pour lire la liste des Etats Membres qui ont déjà présenté les pouvoirs. Quarante-six pays n'ont pas encore présenté de pouvoirs. La Commission examinera au cours de ses prochaines séances les pouvoirs qui pourraient lui parvenir, ainsi que ceux des représentants des Institutions spécialisées des Nations Unies et des observateurs d'autres organisations intergouvernementales et non gouvernementales. Je rendrai compte en temps utile du résultat de cet examen.

Finalement, Monsieur le Président, je voudrais dire qu'un Etat Membre, l'Islam, a informé le Secrétariat qu'il ne sera pas représenté à cette session.

EL PRESIDENTE.-Este informe será distribuido esta misma mañana a todas las delegaciones con el número de documento C 79/LIM/10.

¿Hay alguna observación en relación con el informe? Si no hay ningún comentario que hacer, declaro aprobado el primer informe del Comité de Credenciales.

Adopted

Adopté

Aprobado

PART IV-APPOINTMENTS AND ELECTIONS QUATRIEME
PARTIE-NOMINATIONS ET ELECTIONS
PARTE IV-NOMBRAMIENTOS Y ELECCIONES

26. Aplications for Membership in the Organization-Dominica, Samoa
26. Demande d'admission à la qualité de membre de l'Organisation-Dominique, Samoa
26. Solicitudes de ingreso en la Organización-Dominica, Samoa

EL PRESIDENTE.-La Conferencia debe ahora proceder a la votación sobre la admisión en calidad de Estados Miembros de la Organización de los siguientes dos países: el Commonwealth de Dominica y el Estado Independiente de Samoa Occidental.

Tengo aue recordar ahora que esta votación se rige por lo estipulado en el Artículo II, párrafo 2, de la Constitución de la FAO, que dice lo siguiente: Cito. "La Conferencia puede, por una mayoría de dos tercios de los votos emitidos y a reserva de que esté presente la mayoría de los Estados Miembros de la Organización, decidir la admisión en calidad de Miembro de la Organización de todo Estado que haya depositado una solicitud de admisión acompañada de un instrumento oficial en que se acepte las obligaciones derivadas de la Constitución vigente en el momento de la admisión. "

Ruego a la Secretaría que nos explique el procedimiento que debe seguirse para la votación.

LE SECRETAIRE GENERAL.-Aux fins du scrutin, les délégués recevront deux bulletins de vote, un pour chacune des demandes d'admission à la qualité de membre. Les bulletins portent trois cases, marquées: OUI, NON, ABSTENTION. Pour voter, les délégués feront une croix dans la case correspondant à leur choix. Aux termes de l'ArticleXII-4 (c) du RGO les bulletins blancs seront comptés comme abstention. Aux termes de l'alinéa 4 (b) de l'Article XII les bulletins de vote ne doivent porter aucune indication et aucun signe autres que ceux par lesquels s'exprime le suffrage.

EL PRESIDENTE.-De conformidad con las observaciones que acaba de hacer el Secretario de la Conferencia, y de conformidad con el Artículo II, párrafo 2 de la Constitución de la FAO, y con la disposición del Artículo XII del Reglamento, el quorum necesario para proceder a la elección, es de la mayoría de los Estados Miembros de la Organización. Esto significa que deben estar en la Sala más de 73 delegaciones. Me comunican que hay quórum, por tanto podemos proceder de modo inmediato a la votación.

Me permito recordarles que, en virtud del Reglamento, concretamente con el párrafo 14 del Artículo XII, una vez que haya comenzado la votación, ningún delegado o representante podrá interrumpir la votación, excepto para plantear una cuestión de orden relacionada con la propia votación. De conformidad con el párrafo 9 c), del Artículo XII del Reglamento General de la Organización, debo nombrar dos escrutadores de entre los delegados presentes. Ruego, por tanto, a los delegados de Austria y de Uganda que actúen como escrutadores en esta elección.

E. KANAAN (FAO Staff):Je vais procéder à l'appel des délégués qui sont priés de bien vouloir se diriger vers la zone où les isoloirs ont été installés, c'est-à dire à droite du podium.

Vote

Vote

Votación

EL PRESIDENTE:La votación ha finalizado ya y a partir de este momento, los escrutadores, con ayuda de los funcionarios encargados de la elección, procederán al recuento de las papeletas de votación, y esta tarde se anunciarán los resultados de las votaciones, al final de la disertación en memoria de MacDougall. Los nuevos Estados Miembros que hayan sido admitidos a la Organización, podrán entonces ocupar oficialmente sus asientos en esta sala.

Voy a proceder entonces ahora a indicarles cómo va a continuar, a lo largo de la mañana de hoy, la sesión, y ruego por favor que escuchen con atención las precisiones sobre el desarrollo de la sesión.

Esperamos ahora la llegada de su Santidad el Papa, y antes de cerrar la sesión quisiera pedirles que permanezcan en sus asientos, en espera de la llegada de Su Santidad. Repito crue mego a todos, para el buen orden de la sesión, que permanezcan en sus asientos hasta el momento de la llegada de Su Santidad el Papa. El procedimiento será el que sigue. El Director General y yo mismo encontraremos a su Santidad el Papa a su llegada a las 10. 30 frente al Edificio A, donde será presentado a algunos invitados en el vestíbulo de entrada del edificio. Su Santidad el Pana será acompañado nor nosotros hacia la sala Plenaria y a las 10. 45 horas, el Director General brevemente le presentará y dará la bienvenida a nuestros distinguidos invitados. Su Santidad, más tarde, se dirigirá a la sesión plenaria, aproximadamente entre las 10. 30 horas y las 11. 30 y para entonces, yo pronunciaré unas palabras de agradecimiento.

Ruego atentamente a todos ustedes que permanezcan en sus asientos, mientras que después de los actos que acabo de indicar, el Director General acompaña a Su Santidad el Papa desde esta sala Plenaria a la tribuna que se encuentra entre los edificios A y B.

A mediodía su Santidad se dirigirá al personalde la FAO reunido entre los dos edificios, y abandonará la FAO alrededor de las 12. 30 horas, acompañado por el Director General a través del edificio A. A las 13. 00 horas, a la una, su Excelencia Kenneth Kaundar, Presidente de Zambia y su señora esposa deberán llegar en frente del edificio A.


Antes de concluir, quisiera recordar a los señores delegados que durante las próximas ceremonias será necesario el cierre de la entrada y salida de este edificio que da al edificio B. En todo caso, la entrada principal permanecerá abierta pa,ra el uso de los señores delegados y les pido que, ante cualquier problema o dificultad, recurran al Secretariado. Otra vez. les mego a todos que disculpen la insistencia en favor del buen orden de la sesión. Les pido a todos que permanezcan en sus lugares. Tan pronto como Su Santidad aparezca en la sala, el protocolo pedirá a la concurrencia de guardar absoluto silencio. Muchas gracias a todos.

ARRIVAL OF HIS HOLINESS POPE JOHN PAUL II AND WELCOME BY THE DIRECTOR-GENERAL
ARRIVEE TE SA SAINTETE LE PAPE JEAN-PAUL II ET ALLOCUTION DE BIENVENUE DU DIRECTEUR GENERAL
LLEGADA DE SU SANTIDAD EL PAPA JUAN PABLO II Y SALUDO DE BIENVENIDA DEL DIRECTOR GENERAL

LE DIRECTEUR GENERAL: Très Saint Père,

Ce n'est pas seulement un honneur extraordinaire, que Votre Saintetéfait à notre Organisationen venant prendre la parole, devant les responsables de l'alimentation et de l'agriculture, qui représentent ici les nations du monde à notre Conférence plénière.

La visite de Votre Sainteté constitue aussi et surtout, une inspiration pour nous tous, au moment où s'ouvrent nos travauxJe dis bien nos travaux et non nos débats, car le but de cette Conférence est d'élaborer et d'adopter des mesures, toujours plus concrètes et plus efficaces, pour vaincre ces ennemis cruels de la vie humaine, de la paix et de la liberté, que sont la faim et la misère.

En cette matière, l'Eglise, n'a jamais négligé de promouvoir l'élévation humaine. L'Eglise, s'est toujours préoccupée des pauvres, mais sa parole s'est faite plus directe et plus insistante encoreà notre époque où, dans une prise de conscience renouvelée, par cet immense événement qu'à été le deuxième Concile du Vatican, elle s'est résolument mise à l'écoute des hommes, comme à, leur service.

Comment ne pas évoquer ici la grande Encyclique Populorum Progressio de votre vénéré prédécesseur Paul VI?Par les principes qu'il affirme-en particulier celui du "développement solidaire de l'humanité"-, par son analyse lucide de la situation du monde, par les propositions précises qu'il énonce ce texte correspond de très près à nos buts, à nos préoccupations, à nos activités. Nécessité des réformes, lutte contre la faim, programmation, financement international du développement, organisation plus équitable des échanges, ce sont les sujets mêmes de notre Conférence va étudier. Tous ici, quelles que soient nos croyances, nous souscrivons pleinement à l'idée que "le développement est le nouveau nom de la paix" et que tous les peuples doivent pouvoir "devenir eux-mêmes les artisans de leur destin".

C'est dans cette lumière que se situe le discours inspiré que Votre Sainteté a prononcé le 2 octobre devant l'Assemblée générale des Nations Unies. Avec cette énergie qui caractérise votre pensée et votre action, vous avez insisté sur le thème fondamental des droits de la personne humaine. De la Déclaration universelle, que vous avez définie comme la "pierre angulaire des Nations Unies", vous avez ra,ppelé qu'elle représentait l'aboutissement et comme le fruit d'innombrables souffrances. Dans toute atteinte à ces droits, vous dénoncez une forme de guerre contre l'humanité. L'accumulation des armes, l'injustice dans la répartition des biens matériels, l'inéquité dans les relations économiques vous frappent comme un monstrueux scandale. Vous affirmez que seule la coopération coordonnée de tous les pays permettra de résorber l'effrayant écart qui sépare les zones de l'opulence et les zones de la misère et de la faim. Sous votre impulsion dynamique, nous voyons se renforcer l'action concrète d'innombrables organismes de l'Eglise catholique au service du développement. Cette action va dans le même sens que la nôtre. Cette vision humaniste que vous avez proclamée à la face du monde est aussi la nôtre. Ce retentissement de toute détresse dans votre coeur, nous l'éprouvons aussi. Ce style direct et chaleureux par lequel vous renouvelez le visage que l'Eglise présente au monde, c'est aussi celui qu'à notre modeste échelle nous essayons d'imprimer à notre action en nous efforçant de briser la gangue bureaucratique et en nous attachant aux réalisations pratiques. Ce que vous affirmez avec tout le poids de votre haute autorité spirituelle, nous luttons pour le faire passer dans les faits.

"Constructeurs d'un monde nouveau"-puisque c'est ainsi que les définissait Populorum Progressio-, les délégués à notre Conférence attendent avec une attention passionnée le message que va leur adresser Votre Sainteté. Mes collaborateurs et moi-même y trouverons un puissant encouragement dans le travail que nous poursuivons jour après jour.

Très Saint Père, qu'il me soit permis d'exprimer à Votre Sainteté, en notre nom à tous, notre profonde gratitude.

Applause
Applaudissements
Aplausos


EL PRESIDENTE:Humildemente y con todo respeto ruego a Vuestra Santidad tenga a bien dirigirnos la palabra a la Asamblea.

ADDRESS BY HIS HOLINESS POPE JOHN PAUL II TO THE 20TH FAO CONFERENCE
ALLOCUTION DE SA SAINTETE LE PAPE JEAN-PAUL II A LA VINGTIEME SESSION DE LA CONFERENCE TE LA FAO
DISCURSO DE SU SANTIDAD EL PAPA JUAN PABLO II A LA 20a CONFERENCIA DE LA FAO

SA SAINTETE LE PAPE JEAN-PAUL II:Monsieur le Président, Monsieur le Directeur général, Mesdames, Messieurs, ma visite chez vous prolonge en quelque sorte celle que j'ai effectuée au siège des Nations Unies à New York, comme ce fut déjà le cas pour mon prédécesseur Paul VI.

Je me réjouis de ce que l'Organisation pour l'alimentation et l'agriculture, née à Québec le 16 octobre 1945, donc peu avant l'Organisation des Nations Unies, s'inspire des mêmes critères de fond que celle-ci, comme aussi de la Déclaration universelle des droits de l'homme, tout en conservant dans son action l'autonomie propre à toute Organisation intergouvernementale.

Votre Organisation a une vocation universelle puisqu'elle est ouverte à l'adhésion de tous les peuples de la terre à son Acte constitutif. C'est ainsi qu'elle a vu le nombre des Etats Membres passer de quarante-deux, à l'origine, à cent quarante-six représentés à la présente Conférence générale. Elle peut donc se livrer à une action commune qui est le fruit d'une réelle convergence entre les pays du monde, quels que soient leurs systèmes économiques et leurs structures politiques.

La FAO peut se vanter d'exercer une activité spécialisée irremplaçabledans le cadre de la famille des Nations Unies. Elle est affrontée en effet au secteur que l'on peut considérer comme le plus important de l'économie mondiale, l'agriculture, qui fournit les aliments indispensables au monde et occupe cinquante pour cent de la population mondiale. C'est aussi un secteur trop longtemps maintenu à l'écart du progrès des niveaux de vie, un secteur que la rapide et profonde mutation socio-culturelle de notre temps atteint d'une manière particulièrement douloureuse, mettant à nu les injustices héritées du passé, déstabilisant hommes, familles et sociétés, accumulant les frustrations et contraignant à des migrations souvent massives et chaotiques.

Selon le préambule de votre Acte constitutif, l'objectif, qui est de libérer la famille humaine de la faim, comporte l'engagement des Etats Membres à élever le niveau de nutrition et à améliorer la situation des populations rurales en augmentant le rendement de la production et en garantissant l'efficacité de la redistribution.

Mais je voudrais relever aussi que, selon le même préambule, la FAO tend ainsi à "contribuer, par son action spécifique et collective, à l'expansion de l'économie mondiale et au bien-être général".

Elle est donc en pleine harmonie avec les Nations Unies dans le plan d'ensemble et dans les lignes fondamentales de la politique de développement et de coopération internationale selon lesquels se réalise le service de l'homme,sur la base des grands principes que j'ailonguement rappelés le 2 octobre dernier devant l'Organisation des Nations Unies.

Ici aussi, nous nous rencontrons "au nom de l'homme pris dans son intégralité, dans la plénitude et la richesse multiforme de son existence spirituelle et matérielle" (Discours aux Nations Unies, n. 5).

C'est avec une particulière satisfaction que je viens établir ce contact direct avec la FAO. J'ai accepté l'invitation à parler devant la vingtième Conférence générale, en cette année qui marque le trentième anniversaire de la décision prise le 28 novembre 1949 de transférer la FAO de son siège provisoire de Washington à ce siège définitif de Rome, décision quia pris effet en 1951.

Ainsi se réalisait ce qui a été considéré comme un "retour aux origines romaines" de votre Organisation. Celle-ci a été en effet en quelque sorte précédée par l'Institut international de l'agriculture, fondé déjà en 1905 sous l'inspiration de David Lubin, et absorbé ensuite par la FAO. Depuis cette époque, Rome est devenue un des centres de l'agriculture mondiale, et elle trouve aujourd'hui une nouvelle importance en ce domaine, particulièrement après les décisions de la Conférence mondiale des Nations Unies sur l'alimentation du mois de novembre 1974.

Il y a ensuite une tradition de rapports particuliers entre le Saint-Siège et la FAO. Celle-ci est la première Organisation intergouvernementale avec laquelle le Saint-Siège a établi des rapports diplomatiques réguliers, inaugurés grâce à l'action prévoyante de celui qui était alors Monseigneur Montini, Substitut de la Secretairerie d'Etat. En effet, le vote unanime de la quatrième session de la Conférence de la FAO accordait au Saint-Siège, le 23 novembre 1948, ce "statut d'Observateur permanent,


unique en son genre, qui lui garantit le droit, non seulement de participer aux Conférences de l'Organisation, mais aussi aux autres domaines de son activité et d'y prendre la parole sur demande, tout en n'ayant pas le droit de vote". Une telle situation correspond parfaitement à la nature de la mission religieuse et morale de l'Eglise.

Ainsi a commencé la collaboration du Saint-Siège avec votre Organisation dont Mgr Montini se plaisait alors à relever avec satisfaction les principes moraux et humanitaires élevés qui l'inspiraient (cf. lettre du 16 septembre 1968 à M. Norris E. DODD, Directeur général de la FAO).

Tous les travaux et tous les programmes de la FAO montrent en effet avec évidence que chaque activité technique et économique, comme chaque choix politique, implique, en dernière analyse, un problème de morale et de justice.

La visite rendue à votre siège par le Pape Paul VI le 16 novembre 1970, à l'occasion du vingt-cinquième anniversaire de l'intitution de la FAO, a été un témoignage éclatant rendu au progrès croissant de ces rapports de confiance.

A ces considérations s'ajoute un autre motif:c'est avec plaisir que je vois dans la FAO un effort pour parvenir à réaliser concrètement, dans le domaine de l'alimentation et de l'agriculture, un aspect du programme de développement mondial économique et social. Un tel programme contribue certainement à la promotion de la paix en aidant à surmonter des tensions profondes et en donnant effectivement satisfaction aux revendications premières des peuples, revendications liées aux droits inaliénables de l'homme.

De ce point de vue, votre Organisation spécialisée se réfère plus directement aux droits économiques et sociaux reconnus dans la Déclaration universelle des droits de l'homme et qui ont été formulés ensuite de manière plus précise et contraignante dans le Pacte international sur les droits économiques, sociaux et culturels.

Mais le perfectionnement de la personne suppose, comme Pie XII le disait déjà dans son radio-message de Noël de l'année 1942, la réalisation concrète des conditions sociales qui constituent le bien commun de chaque communauté politique nationale comme de l'ensemble de la communauté internationale. Un tel développement collectif, organique et continu, est le présupposé indispensable pour assurer l'exercice concret des droits de l'homme, aussi bien de ceux qui ont un contenu économique que de ceux qui concernent directement les valeurs spirituelles. Un tel développement requiert cependant, pour être l'expression d'une véritable unité humaine, d'être obtenu en faisant appel à la participation libre et à la responsabilité de tous, dans le domaine public comme dans le domaine privé, au niveau intérieur comme au niveau international.

De ce point de vue, la FAO apparaît comme une expression concrète de la volonté de passer du plan des déclarations de principe à celui de l'action et des réalisations effectives, en faisant appel à la participation libre et active de tous les Etats Membres. Il faut souhaiter que la volonté politique de chacun des Etats assure à la FAO, au bénéfice de l'action commune, un concours qui ne consiste pas seulement à soutenir des projets et des opérations de développement intérieur entrepris à la demande de chaque gouvernement, et qui ne se contente pas non plus d'harmoniser des intérêts nationalistes fermés sur eux-mêmes. L'action commune qui se réalise au sein de la FAO demande une disponibilité toujours plus prompte pour assumer des engagements véritablement continus grâce auxquels chacun participe à l'action décidée d'un commun accord.

Au cours de son histoire, la FAO a acquis une structure toujours plus vaste et plus adaptée, comme le montrent ses divers programmes actuels et les documents soumis présentement à votre Conférence. Vous allez en effet devoir non seulement fairele bilan des actions accomplies ces deux dernières années, mais aussi fixer les objectifs à atteindre dans les années qui viennent et faire les choix politiques qui sont nécessaires pour cela. L'an deux mille est en effet à l'horizon de vos perspectives, avec les problèmes spécifiques qui se posent à l'agriculture pour qu'elle puisse faire face aux besoins à prévoir:augmentation accélérée de la production, nécessité de la réglementation des échanges et assistance extérieure aux pays qui en ont besoin pour assurer leur départ économique. Il s'agit donc de prendre les moyens d'assurer à tous cet avenir meilleur dans lequel les droits fondamentaux de chacun se trouveront respectés. En ce sens, votre Conférence générale actuelle peut apporter une contribution importante, pour ce qui est du domaine de votre Organisation, à la définition des objectifs urgents et des critères renouvelés qui devraient permettre de mettre en oeuvre la nouvelle stratégie internationale pour le développement au cours de la troisième décennie des Nations Unies qui s'ouvre avec les années quatre-vingt.

Mais le monde ne saurait se contenter de spéculations théoriques. La lutte contre la faim présente chaque jour davantage un visage bien précis et exige des réalisations concrètes de la part des Etats membres et de l'Organisation dans son ensemble. Cette lutte ne saurait pas davantage, d'ailleurs se satisfaire d'appels aux sentiments, de bouffées sporadiques et inefficaces d'indignation:c'est


l'honneur et la volonté louable de votre Organisation de chercher avec persévérance à définir les moyens les meilleurs et les méthodes adaptées aux conditions concrètes de chaque pays et d'en prévoir avec prudence les applications.

Il est fini, en effet, le temps des illusions où l'on croyait résoudre automatiquement les problèmes du sous-développement et des différences de croissance entre les divers pays en exportant les modèles industriels et les idéologies des pays développés.

Il est fini le temps où l'on cherchait à garantir le droit de tous à l'alimentation par des programmes d'aide réalisés grâce au don d'excédents ou à des programmes de secours d'urgence dans des cas exceptionnels.

Votre Organisation s'oriente vers une politique dans laquelle l'effort de chaque pays pour son propre développement prend la première place. Ceci comporte, certes, une exigence:pour que chacun de ceux qui en ont besoin reçoive, sans atteinte à sa dignité, l'aide internationale et les investissements convenables tout en gardant le contrôle des éléments nécessaires pour donner à l'agriculture son dynamisme propre dans le développement du pays, il faut toujours davantage dépasser les rapports purement bilatéraux pour un système multilatéral.

Un autre réajustement des critères et des modèles de développement-que les circonstances de la crise économique actuelle rendent encore plus nécessaire pour les pays pauvres, comme d'ailleurs pour les pays les plus développés-est celui qui vise à satisfaire les besoins humains réels, ceux qui sont vraiment fondamentaux. Ce sont ces besoins qui doivent dynamiser et orienter l'économie, et non les besoins artificiels, en partie provoqués et toujours augmentés par la publicité, par le jeu du marché et par les positions de force acquises dans les domaines économiques, financier, politique. Il importe de prévoir et de combattre les dangereuses conséquences sur l'homme de certainessolutions techniques et économiques, de favoriser activement sa participation libreet responsable aux choix et aux réalisations entreprises pour la croissance organique et programmée des conditions générales de sa propre communauté.

L'expérience contemporaine nous porte à reconnaître que la croissance ordonnée et continue de chaque pays, comme la garantie effective de l'exercice des droits humains fondamentaux des individus et des peuples, présupposent nécessairement le développementglobal et organique mondial. Et je relève avec intérêt comment, dans ce domaine, les divers programmes de coopération technique ou d'assistance lancés par votre Organisation, la promotion d'un accord international pour assurer les réserves céréalières indispensables, contribuent peu à peu à une transformation de l'économie mondiale.

Cependant, parmi tous les problèmes qui retiennent votre attention et celle du monde, le plus grave et le plus urgent est celui de la faim. Des millions de personnes sont menacées dans leur existence même; beaucoup, chaque jour, meurent parce qu'elles n'ont pas le minimum de nourriture nécessaire. Et force est bien de reconnaître, hélas, comme l'expérience actuelle le montre encore cruellement, que la faim dans le monde ne provient pas toujours uniquement de circonstances géographiques, climatiques ou agricoles défavorables, celles auxquelles vous vous efforcez de pallier peu à peu; elle provient aussi de l'homme lui-même, des déficiences de l'Organisation sociale, qui empêche l'initiative personnelle, voire de la terreur et de l'oppression de systèmes idéologiques inhumains.

La recherche du développement mondial organique que tous souhaitent demande alors que la connaissance objective des situations humaines de détresse prenne sa place dans la formation des individus et des groupes au sens de la liberta authentique et à celui de la responsabilité personnelle et collective.

Les perspectives de la formation humaine totale dépassent certes celles qui sont propres à votre Organisation. Je sais cependant que vous n'y êtes pas indifférents. Vous les favorisez pour votre part en vous efforçant de diversifier vos modèles techniques d'assistance et de développement, et de les modeler en fonction des conditions particulières non seulement physiques mais socio-culturelles de chaque pays, tenant compte ainsi des valeurs proprement humaines, et donc aussi spirituelles, des peuples.

Parmi celles-ci, les conceptions religieuses ont leur place. Elles expriment une vision de l'homme, de ser véritables besoins, du sens ultime de ses . activités:"l'homme ne vit pas seulement de pain", nous enseigne l'Evangile. Nous reconnaissons par là que le développement technique, aussi nécessaire qu'il soit, n'est pas le tout de l'homme, et qu'il doit trouver sa place dans une synthèse plus vaste, pleinement humaine. C'est par là que les réalités proprement spirituelles s'imposent à votre attention. C'est dans ce domaine aussi que l'Eglise, qui a toujours encouragé vos efforts et qui participe efficacement pour sa part au développement harmonieux de l'homme, veut rencontrer vos efforts et collaborer avec vous pour le bien de l'humanité.

Le travail à accomplir est immense, et nul ne doit se décourager lorsque le but à atteindre semble parfois s'éloigner à la mesure même des efforts entrepris pour l'atteindre. En ce moment de l'histoire mondiale, je me réjouis de voir la FAO orienter toute son activité, dans son domaine qui est essentiel, à promouvoir la coopération internationale pour le développement. Et nous espérons tous que ce développement s'étendra, du niveau technique et économique, au progrès personnel et social de l'homme.


Ce qui ne peut se faire que si l'homme, sa dignité et ses droits sont, dès le départ, le critère actif qui inspire et oriente tous les efforts. Pour vaincre les inerties et les découragements pour créer les conditions susceptibles de renouveler la pensée et de soutenir l'action, ne perdez jamais de vue qu'il y va de l'homme, de l'homme concret, de l'homme qui souffre, de l'homme qui recèle en lui des possibilités immenses qu'il faut libérer.

J'ajoute que la somme des efforts que vous projetez, entreprenez ou encouragez pour que la terre soit ''cultivée'' au mieux, pour que ses richesses productives, terrestres ou marines, soient conservées et jamais gaspillées, et mieux encore pour qu'elles fructifient, en multipliant leurs potentialités sans détruire imprudemment l'équilibre naturel qui a servi de berceau à la vie de l'homme, en un mot, pour que la nature, à la fois respectée et ennoblie, atteigne son meilleur rendement au service de l'homme, tout cela rejoint, en un sens, le dessein de Dieu sur la création, que le texte inspiré de la Genèse nous décrit d'une façon archaïque mais suggestive : ''Dieu fit l'homme à son immage, homme et femme il les créa, emplissez la terre et soumettez-là …Yahvé Dieu établit l'homme dans le jardin d'Eden pour cultiver et le garder" (Gn 1 , 27-28; 2, 16). Oui, la terre appartient aux hommes, à tous les hommes, sans oublier les générations qui nous succéderont demain et qui doivent la recueillir de nos mains, habitable et fructueuse. Car elle appartient d'abord à Dieu, le Créateur, le Maître Souverain, la source de la vie, qui en a fait le don aux hommes et la leur a confiée comme à de bon intendants. C'est en harmonie avec le dessein de Dieu que vous êtes appelés à travailler.

Tel est le voeu que je forme pour vous en tant que Pasteur de l'Eglise universelle. Et c'est dans cet esprit que je prie le Seigneur Tout-Puissant de bénir les efforts que vous faites pour servir la famille humaine de bénir vos personnes et tous ceux qui vous sont chers.

Applause

Αρρlaudissements

Aplausos

EL PRESIDENTE. Santidad, permítame tener el privilegio de saludar a Vuestra Santidad en nombre de todas las delegaciones asistentes a este 202 período de sesiones de la Conferencia de la FAO. Tengo que recordar que ya en otra ocasión, con motivo de la celebración del 25 aniversario de la fundación de la FAO, un Ilustrísimo y Beatísimo predecesor vuestro, el Papa Pablo VI, visitó esta Organización pronunciando unas palabras que sirvieron de inspiración y aliento para renovar la confianza de los países y de los pueblos en los fines perseguidos por la FAO.

La Iglesia desde sus comienzosha dedicado sus mayores y mejores esfuerzos a resolver los problemas, no tan sólo espirituales, sino también materiales de los pueblos en desarrollo. Su preocupación por los que sufren ha sido, y es, constante. Siempre ha buscado el amor entre los hombres y el logro de una fraternidad universal para conseguír una sociedad y un mundo más justos y más equitativos en la distribución de las riquezas materiales.

La FAO,nuestra Organización, siempre ha luchado incansablemente por estos ideales. En el preámbulo de su Constitución se establece que los Estados que la acepten tratarán por todos los medios de elevar los niveles de nutrición y de vida de los pueblos; mejorar el rendimiento y la eficacia de la distribución de todos los alimentos y productos alimenticios agrícolas; mejorar las condiciones de la población rural y contribuir así a la expansión de la economía mundial y a liberar del hambre a la humanidad.

Las palabras que Vuestra Santidad acaba de pronunciar, y estoy seguro que expreso el sentimiento unánime de todos los delegados aquí presentes, han de servir para darnos fuerza y esperanza en el examen minucioso y en la solución de los problemas que esta Conferencia debe resolver.

Los pueblos representados en esta Conferencia en toda su diversidad, se unen en sus aspiraciones para conseguir un mundo mejor y más justo, respetando los derechos inviolables de la persona humana en todos sus aspectos.

Santidad, en nombre de todas las delegaciones del mundo entero, en nombre de todos los seres humanos que aquí representamos, que aspiran a que la alimentación sea un derecho de los pueblos, gracias por vuestra luz y por vuestras orientaciones.

Applause
Applaudissements
Aplausos

The meeting rose at 11. 15 hours
La séance est levée à 11,h 15
Se levanta la sesión a las 11. 15 horas

Previous Page Top of Page Next Page