INDIA (5 de mayo)
Está en marcha la recolección del trigo de 2004, plantado en octubre y noviembre de 2003, y han empezado los preparativos de la tierra para la siembra de las cosechas de cereales secundarios y del arroz Kharif, así como de las semillas oleaginosas y el maní, que se recogerán a partir de septiembre. La cosecha de trigo de 2004 se ha revisado a la baja, de 75 millones de toneladas a 73 millones de toneladas, debido a las temperaturas excepcionalmente altas y a las precipitaciones insuficientes recibidas durante la fase de maduración. Sin embargo, la producción de trigo de este año es todavía superior en un 12 por ciento a la del año pasado y en un 3 por ciento a la media de los últimos cinco años, debido a un aumento de la superficie cultivada.
Debido a una directiva del gobierno, la Corporación de Alimentos de la India ha discontinuado las subvenciones a las exportaciones desde agosto de 2003 y permitido al sector privado comprar el trigo de exportación directamente a los agricultores. Los comerciantes de cereales pueden abastecerse en el mercado libre. Durante la campaña comercial 2003/04 (abril/marzo) las exportaciones de trigo alcanzaron alrededor de 5,1 millones de toneladas, pero se prevé que en 2004/05 disminuyan a 2 millones de toneladas, debido a una escasez de existencias y a la disminución prevista de las compras del gobierno.
Debido a unas buenas lluvias monzónicas, la producción de las cosechas de arroz rabi y kharif de 2003 se estiman oficialmente en 136 millones de toneladas, aproximadamente un 23 por ciento más que la producción menguada por la sequía de 2002. Las exportaciones en 2003/04 se estiman en 2,5 millones de toneladas, volumen significativamente menor que el año anterior (4,4 millones de toneladas), como consecuencia de la disminución de las existencias. Sobre la base del aumento de la superficie y de unas buenas precipitaciones previstas, se espera otra buena cosecha para 2004.
La India alcanzó una producción de maíz sin precedentes en 2003, de 14,7 millones de toneladas, 32,3 por ciento más que la producción reducida por la sequía de 2002 y 25,3 por ciento más que la media de los cinco años anteriores. Ello se debió a una combinación de aumento de la superficie y precipitaciones favorables. La producción de 2004 se pronostica provisionalmente en 15 millones de toneladas.