146. El Representante de la OMS introdujo el documento de debate, que trataba de afrontar dos temas importantes: los riesgos para la salud de los consumidores que pueden derivarse de subproductos del cloro a causa de los niveles elevados de cloro en el agua utilizada para lavar el pescado y los productos pesqueros; y la falta de conocimientos sobre las prácticas actuales a nivel industrial en los diferentes países. El Representante indicó que las prácticas de manipulación del pescado variaban de un país a otro y de una región a otra. En el sector de la elaboración de pescado se utilizaba ampliamente agua clorada con hasta 10mg/l, en contacto directo con el pescado para evitar la contaminación microbiológica y asegurar una desinfección adecuada. El Representante concluyó que, aunque se recomendaba seguir trabajando en este sector, los datos científicos actuales no justificaban la modificación del nivel recomendado del Codex de 10mg/l para el agua en contacto directo con los productos pesqueros.
147. El Observador de la CE y algunas delegaciones expresaron la opinión de que debía llevarse a cabo una nueva evaluación de los riesgos a fin de determinar los beneficios de la utilización de altos niveles de cloro en la industria pesquera. Se destacó que el uso de agua potable, la aplicación de buenas prácticas de fabricación y el sistema HACCP aseguraban plenamente la producción higiénica de los productos pesqueros.
148. La delegación de Brasil, apoyada por otras delegaciones, señaló que el uso de cloro como desinfectante era muy común en el mundo para reducir la contaminación, especialmente en los países de desarrollo, y que no había datos científicos de que su utilización en los niveles actuales presentara riesgos para la salud. Esta postura fue apoyada por varias delegaciones, que coincidieron con la conclusión presentada en el documento.
149. El Comité acordó aceptar la conclusión del documento y decidió que no eran necesarias otras actividades en este ámbito.
