Este documento contiene un panorama de determinadas cuestiones comerciales agrícolas que conciernen a Brasil y un análisis de los intereses del país en las negociaciones multilaterales. El objetivo principal del nuevo programa comercial será establecer una base firme para la plena realización del potencial del país en el sector de la agricultura. En los dos últimos decenios, las cuestiones macroeconómicas distrajeron la atención de las autoridades que no pudieron apreciar de manera apropiada el papel que el comercio de los productos agrícolas y de los productos basados en la agricultura podría desempeñar en el logro de un crecimiento económico sostenible, en la reducción de la pobreza a través de la creación de oportunidades de empleo en actividades agrícolas y actividades relacionadas con la agricultura, y en la contribución a la balanza de pagos.
En esta nueva ronda de negociaciones, el país se enfrenta a una situación totalmente diferente, con una inflación controlada, avances significativos en las políticas relativas al sector interno y también en las políticas comerciales. La reforma arancelaria de 1990 y la creación del MERCOSUR han tenido una serie de repercusiones en el sector agrícola. El nivel de protección es bajo. En 1999, el promedio del arancel aplicado a bienes agrícolas era del 13 por ciento, y el promedio del arancel consolidado era del 37 por ciento. Esto se compara con el arancel medio de los países de la OCDE que es del 62 por ciento (OCDE, 2001)[27]. Además, la desviación típica representa alrededor de una tercera parte del promedio, lo que indica una dispersión relativamente baja en la lista arancelaria. Aunque el sector ha tenido que verse con problemas de ajustes causados por el aumento de la competencia extranjera, los incrementos de la productividad han fortalecido su potencial para competir. El interés del Brasil en las negociaciones multilaterales consistirá en aprovechar su potencial agrícola concentrando la atención en las esferas tradicionales de las subvenciones a la exportación, la ayuda interna y el acceso a los mercados.
En la conclusión del documento, es importante destacar el hecho de que, ahora que el Brasil es un exportador de productos agrícolas acreditado, sus intereses en la nueva ronda de negociaciones residen principalmente en las cuestiones básicas de la eliminación de las subvenciones a la exportación, el aumento del acceso a los mercados (menos aranceles, incremento de los contingentes arancelarios, reducción de la progresividad arancelaria) y el cambio completo del sistema de ayuda interna. El sistema actual de compartimentos no está resultando tan útil al sistema comercial como se había previsto en la conclusión de las negociaciones de la Ronda Uruguay. La revisión deberá tener en cuenta el hecho de que las políticas incluidas en el compartimento ámbar, y algunas del compartimento verde, influyen directamente sobre las exportaciones y deprimen los precios mundiales, causando daño a otros exportadores de esos productos. A todos los tipos de ayuda interna deberían imponerse límites con el valor menos estricto.
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[27] La comparación ha
de tomarse con cautela, pues el promedio de la OCDE incluye productos diferentes
de los incluidos en el Cuadro 8. No obstante, la diferencia en los dos valores
es considerable y demuestra que en Brasil el nivel de protección es
relativamente bajo. |
