FAO/SMIA - Cosechas y escaseces alimentarias  - 11/02 - MAURITANIA (10 de noviembre)

MAURITANIA (10 de noviembre)

Las rachas secas y la mala distribución de las precipitaciones en el período vegetativo de 2001 dieron como resultado una grave disminución de la producción de cereales. Las estimaciones finales de los servicios nacionales de estadísticas cifran la producción en alrededor de 122 177 toneladas, un 32 por ciento menos que el año anterior y un 27 por ciento menos que la media de los últimos cinco años. Además, los chaparrones que cayeron entre el 9 y el 11 de enero causaron la muerte de 120 000 vacunos, ovejas y cabras; la destrucción del 25 por ciento de las cosechas ya recogidas; y la pérdida de vidas y propiedades. En la mayor parte de los mercados los precios de los cereales han subido considerablemente, mientras que los de los animales bajaron muchísimo. La crisis alimentaria se agudizó debido a las escasas precipitaciones recibidas durante el período vegetativo de 2002, que determinaron el fracaso de la mayor parte de la cosecha ‘dieri’ (de secano), creando el riesgo de una crisis alimentaria grave. El 1 de septiembre el gobierno declaró la situación como desastre nacional y formuló un llamamiento pidiendo ayuda alimentaria de urgencia.

Una misión conjunta FAO/CILSS de evaluación de cosechas que visitó el país del 20 al 26 de octubre estimó la producción total de cereales de 2002 en unas 100 000 toneladas, alrededor de un 40 por ciento menos que la media de los cinco años anteriores y un 18 por ciento menos que la mala cosecha del año pasado. La cosecha ‘dieri’, que en un año normal absorbe más del 80 por ciento de las superficies sembradas, o sea alrededor del 60 por ciento de la producción total de cereales, decreció en un 80 por ciento a alrededor de 8 000 toneladas.

La misión estimó las necesidades de importación de cereales para la campaña comercial 2002/03 (noviembre/octubre) en 322 534 toneladas, de las cuales casi 200 000 toneladas son de trigo. Teniendo en cuenta una importación comercial de 228 000 toneladas de cereales y 11 000 toneladas de ayuda alimentaria prometida, queda para el año un déficit total de cereales de alrededor de 95 000 toneladas. Aproximadamente 400 000 personas de toda Mauritania necesitarán asistencia alimentaria. Se recomienda con carácter de urgencia el suministro de insumos agrícolas, como semillas, para que las familias agrícolas afectadas por los desastres puedan reanudar la producción agrícola durante la próxima temporada principal de siembra que comienza en junio de 2003.

Cunden los signos de malnutrición en la forma de agotamiento y pérdida de peso, ceguera nocturna, escorbuto, deshidratación y diarrea, y muertes relacionadas con el hambre.

En marzo de 2002, el PMA acometió una operación de urgencia por un valor de 7,5 millones de dólares EE.UU. (16 230 toneladas de alimentos) destinada a prestar asistencia a 250 000 personas que corren mayor peligro en una situación de grave escasez de alimentos. Hasta finales de septiembre, se había cubierto sólo el 46 por ciento de las necesidades de alimentos de urgencia del PMA debido a que la respuesta de los donantes había sido limitada. En octubre, sin embargo, se han recibido nuevas promesas. Además de la asistencia de urgencia del PMA, se recibieron contribuciones bilaterales de Francia (600 toneladas de trigo por conducto de la Cruz Roja francesa), e Italia (aproximadamente 920 toneladas de arroz). En octubre llegará una reserva de seguridad alimentaria financiada por la UE consistente en 6 000 toneladas de trigo. Además, el gobierno de Mauritania distribuyó 10 000 toneladas de trigo de sus propios recursos.