Costa Rica posee una extensión de 51.133 km2; está situada en la región tropical y posee una alta diversidad de climas y fisiografías, que han dado lugar a 12 distintas zonas de vida. En 1992, Costa Rica poseía 1.326.600 ha de bosques primarios (26 por ciento del territorio nacional), 893.325 ha (17,5 por ciento) de las cuales se encuentran en áreas protegidas y 423.370 ha (8,5 por ciento) en áreas de amortiguamiento y bosques productivos primarios. El 4,4 por ciento restante (229.579 ha) corresponde a bosques secundarios y plantaciones. En 1990, la tasa de deforestación anual era de 3,4 por ciento (entre 10.000 y 15.000 ha/año). Debido a la introducción de incentivos forestales, de conservación del bosque y pago de servicios ambientales, la deforestación ha disminuido; hasta 1995 se habían reforestado cerca de 140.000 ha. En cuanto a la conservación de ecosistemas, se ha producido un incremento en las áreas protegidas; cerca del 25,8 por ciento del territorio nacional está cubierto por el Sistema Nacional de Areas Protegidas, que tiene como objetivo la conservación de la biodiversidad y el fomento del desarrollo sostenible.
Los PFNM han tenido una participación significativa en la economía nacional y juegan un papel importante para la población rural de Costa Rica. Durante la colonia, algunos PFNM fueron explotados en forma comercial: la zarzaparrilla (Smilax spp.), la vainilla (Vanilla sp.), el hule (Castilla elástica), la chidra ó semko (Carludovica palmata), el añil (Indigofera sp.), y los bálsamos y resinas. Durante el siglo XX continuó la explotación de los PFNM, lo que aumentó la presión por su uso. La ipecacuana o raicilla (Cephaelis ipecacuanha) fue en un principio aprovechada a partir del extractivismo, pero se domesticó en forma empírica posteriormente. En la actualidad, esta especie es el PFNM más importante en términos económicos para el país.
El conocimiento tradicional que sobre el aprovechamiento de los PFNM poseen las comunidades indígenas y campesinas no ha sido valorado adecuadamente ni tampoco ha sido promovido debidamente por las instituciones pertinentes. Esto, aunado a otra serie de factores, tales como el deterioro cultural y la desaparición del bosque, se ha transformado en el mayor obstáculo para el aprovechamiento sostenible de estos recursos.
Como sucede en el resto de los países de la región centroamericana, en Costa Rica hay poca información sobre las estadísticas de producción y su impacto en la economía; y si existe, no está sistematizada o se encuentra fragmentada.
El conocimiento y uso de plantas medicinales en Costa Rica proviene de tres grupos humanos: el grupo indígena, el grupo caucásico y el afrocostarricense, que a través del tiempo han conformado una rica y variada medicina tradicional. En el país se usan aproximadamente 500 plantas medicinales provenientes de diferentes regiones. No obstante, pareciera que tal uso ha venido decreciendo a partir de los años cincuenta por razones de índole económica y social.
Como materia prima para elaborar fitofármacos se emplean cortezas, raíces, madera, hojas, flores y semillas. En Costa Rica se comercializan 133 plantas medicinales, el 82 por ciento de las cuales son producidas localmente (extracción o cultivo), con una producción de 170 t de materia prima. El 53 por ciento de las plantas comercializadas son especies nativas, algunas de ellas cultivadas, como juanilama (Lippia alba) y saragundí (Senna reticulata). También se han establecido cultivos exóticos, como la sábila (Aloe vera) para la industria internacional de cosméticos. A través de la historia, especies nativas como la zarzaparrilla (Smilax spp.) y la ipecacuana (Cephaelis ipecacuanha), o introducidas como la quina han tenido mucha importancia económica.
Cuadro 1. Principales plantas medicinales silvestres comercializadas o transformadas para el mercado nacional.
Nombre común |
Nombre científico |
Familia |
Uso |
Volumen total (kg) |
Valor dólar EE.UU. |
Hojas de sen |
Caesalpinia pulcherrima |
Caesalpiniaceae |
Purgante, estreñimiento |
16. 457 |
119.743 |
Zarzaparrilla |
Smilax spp. |
Smilacaceae |
Anticonceptivo, depurativo, fortificante, antirreumático, bebidas gaseosas |
7.336 |
21.898 |
Cuculmeca |
Smilax spp. |
Smilacaceae |
Anemia, purifica la sangre, antirreumático, afecciones digestivas, antisifilítica |
7.282 |
20.378 |
Ciprés |
Cupressus lusitanica |
Cupressidae |
Pelo |
4.782 |
6.245 |
Cola de caballo |
Equisetum bogotense |
Equisetaceae |
Riñones |
3.159 |
8.251 |
Chiquizá |
Leomurus sibiricus |
Lamiaceae |
2.426 |
4.978 | |
Hombre grande |
Quassia amara |
Simaroubaceae |
Presión, azúcar en la sangre |
2.298 |
16.291 |
Quina |
Ocotea veraguensis |
Lauraceae |
Gastritis, caída del pelo |
2.050 |
1.713 |
Saragundí |
Senna reticulata |
Leguminosae |
Artritis, reumatismo |
1.853 |
6.914 |
Roble |
Quercus sp. |
Fagaceae |
Circulación, caída del pelo |
1.694 |
4.424 |
Jinocuabe |
Bursera simaruba |
Burseraceae |
Ulcera, gastritis |
1.288 |
3.123 |
Calzoncillo |
Passiflora biflora |
Passifloraceae |
Riñones |
1.239 |
3.698 |
Diente de león |
Taraxacum officinalis |
Asteraceae |
Diabetes |
1.200 |
2.820 |
Total |
53.064 |
220.476 |
Fuente: Ammour, T.; Ocampo, R.; Robles, G. 1994
Según un estudio que pretendía caracterizar los sectores asociados a la producción, comercialización y transformación de plantas medicinales en Costa Rica (Ammour et al 1994), en los sectores consultados se transforman y/o comercializan 167.371 kg de plantas medicinales. De éstas, el 35 por ciento (57.907 kg) provienen de la recolección de especies silvestres en hábitats naturales. Esas se comercializan como material fresco, material deshidratado (entero o picado) y en menor escala, como productos de mayor elaboración, tales como pomadas, extractos hidroalcohólicos, cápsulas y otros.
Tradicionalmente, las plantas medicinales se expenden en los mercados municipales, donde han aumentado los puestos en número y variedad. En las ferias de agricultores también se puede conseguir plantas vivas y material fresco. Las personas de menores ingresos compran en ventas ambulantes, en sitios aledaños a edificios públicos, en donde se consiguen rollos de material fresco a precios que oscilan entre 0,10 y 0,30 $EE.UU. por rollo. También existen las llamadas tiendas botánicas o de biosalud, donde se venden materia prima y productos transformados.
La industria de tisanas utiliza los mayores volúmenes de materia prima (134.000 kg), provenientes de plantas silvestres o cultivadas. Esta industria produce para el consumo local y para la exportación.
Costa Rica exporta ipecacuana (Cephaelis ipecacuanha), quina (Ocotea veraguensis), zarzaparrilla (Smilax spp.) y sábila (Aloe vera); los tres primeros como materia prima y el último como extracto. En 1992, el mercado mundial de ipecacuana no sobrepasaba las 100 t de raíz deshidratada, de las cuales Costa Rica cubría el 40 por ciento. En ese mismo año, se exportaron 13,6 t de productos para perfumería, cosméticos, aguas destiladas aromáticas y soluciones acuosas de aceites esenciales y medicinales y 18,2 t de mezclas de plantas medicinales para perfumería.
Cuadro 2. Volúmenes de exportación de ipecacuana.
Año |
Volumen (kg) |
Valor FOB (dólar EE.UU.) |
1992 |
89.972 |
4.229.875 |
1993 |
113.245 |
4.901.826 |
1994 |
42.248 |
1.956.298 |
1995 |
61.511 |
2.936.094 |
1996 |
188.515 |
9.717.150 |
Fuente: Instituto Nacional de Estadísticas y Censos de Costa Rica
En esta categoría, se consumen productos como frutas, verduras, nueces, bebidas y carnes (u otros subproductos de origen animal). Los principales consumidores son los grupos étnicos nativos, que constituyen el 1 por ciento de la población nacional (aproximadamente 25.000 personas). Los campesinos mestizos también aprovechan productos como el palmito de algunas palmas, tanto para consumo como para la venta. Esta actividad se realiza principalmente durante la Semana Santa y representa un ingreso adicional para las familias. El pejibaye (Bactris gasipaes) es un recurso no maderable domesticado para cosechar el palmito y los frutos, por lo que constituye una importante alternativa para la agricultura del país.
De la palma de coyol (Acrocomia vinifera) se obtiene un vino bastante apetecido, para cuya elaboración se debe cortar el tallo y hacer un hoyo en el tocón, donde se acumula el líquido. Este sistema de explotación ha hecho que las poblaciones de esta palma estén siendo seriamente diezmadas en la región del Pacífico.
Durante la primera mitad del presente siglo se aprovecharon las semillas del corozo (Elaeis oleifera) para la producción de aceite. No obstante, el corozo ha sido sustituido por la palma africana (Elaeis guinensis), que se cultiva en plantaciones en el Pacífico sur.
Los grupos indígenas complementan sus dieta con diferentes partes de plantas silvestres que consumen en el mismo sitio, o bien cocinadas o asadas en sus viviendas. Los cabécares consumen inflorescencias de see (Carludovica palmata), kooboo (Chamaedorea tepejilote) y buuchok (Cyclanthus bipartitus); también el meristemo de uka (Gynerium sagittatum), po (Heliconia mariae), kiskut (Iriartea gigantea) y baba (Phytolacca sp.); la planta entera de shotoro (Pleurotus sp.), frutos de maa (Renealmia aromatica) y de snkoo (Rheedia sp.).
En la región nor-occidental del país, conocida como “chorotega”, los bosques secos tropicales ofrecen al menos 19 especies de plantas alimentarias, algunas de ellas de importancia comercial,como los frutos de anono (Annona reticulata), nance (Byrsonima crassifolia), pitaya (Hylocereus costaricensis), guapinol (Hymenaea courbaril), guabo (Inga sp.), capulín (Muntingia calabura) y jocote (Spondias purpurea); además, semillas de ojoche (Brosimum alicastrum) y de jícaro (Crescentia alata).
Costa Rica no cuenta con gran variedad de especias nativas, pero se han explotado algunas en sistemas agrícolas, como la vainilla en bosques secundarios. La jamaica (Pimienta guatemalensis), si bien es una especia nativa de importancia económica presente en regiones boscosas de la Cordillera de Guanacaste, no ha sido explotada por lo reducido de las poblaciones. En su lugar se ha plantado material introducido.
El orégano (Lippia sp.) se cosecha silvestre, en bajos volúmenes, en regiones perturbadas del Pacífico Seco y se cultiva en otras regiones del país. El culantro coyote (Eryngium foetidum), inicialmente cosechado de plantas silvestres, se cultiva en áreas pequeñas para el mercado nacional, donde compite con el culantro (Coriandrum sativum).
Las artesanías representan en la actualidad no sólo un elemento importante en la actividad cotidiana, sino también en la economía. Los productos de especies vegetales empleados en artesanía son principalmente fibras duras y suaves extraídas de los bosques. Dependiendo del órgano utilizado como fuente de fibra, así es la presión a la que se somete el recurso. Actualmente, la mayor parte de la materia prima que se emplea con el nombre genérico de mimbre corresponde a especies de la familia Araceae, provenientes de las reservas indígenas o áreas protegidas; entre ellas, el bejuco del hombre (Heteropsis oblongifolia) y el de la mujer (Philodendron rigidifolium).
Entre las artesanías más comunes están: las bolsas de mecate, hechas con hilos de pita (Aechmea magdalenae) y de burío (Heliocarpus sp.) para el transporte de alimentos y animales menores; las cobijas de corteza de mastate (Brosimum utile) y de burío, para amortiguar la superficie áspera de las camas; las chácaras (bolsos) de penca (Agave sp.) y de guarumo (Cecropia sp.), hamacas y chácaras de majagua (Hampea appendiculata) o de burío; javas (canastos) de gran tamaño para el transporte de productos agrícolas. En la confección de estos productos se utilizan lianas de gran diámetro de la familia Bignonaceae; los bejucos de canasta son extraídos de regiones bajas tropicales o templadas del Valle Central. Las comunidades indígenas utilizan otras plantas en la elaboración de productos artesanales, como la estococa (Carludovica drudrei), recurso de importancia para los artesanos de la comunidad indígena de Quitirrisí, en la provincia de San José, con la cual elaboran canastos, sombreros y otros objetos.
A nivel local, el aprovechamiento y fabricación de productos artesanales no siempre tiene un sentido comercial, pues en general se trata de enseres de uso doméstico. No obstante, la producción que se comercializa representa un aporte significativo para la economía familiar.
En 1994 se realizó un diagnóstico de la artesanía en cuatro comunidades indígenas de la región de Baja Talamanca, con el objetivo de conocer el estado de la actividad artesanal, y los recursos y procedimientos empleados.
En la provincia de Guanacaste es muy importante la producción de artesanías para la venta local, así como en los comercios de artesanías en San José y otros sitios del país. Entre las especies vegetales más usadas para la fabricación de bisuterías están las semillas de cornizuelo (Acacia collinsii), carao (Cassia grandis), guanacaste (Enterolobium cyclocarpum), cenízaro (Samanea saman) y tempisque (Syderoxylon capiri), y el fruto de jícaro (Crescentia alata) con el que se confeccionan labrados.
Los artesanos indígenas emplean colorantes vegetales para dar acabados muy llamativos y vistosos a sus objetos. Los indígenas Bribri de Talamanca utilizan hojas de azul de mata (Justicia tinctorea), ojo de buey (Mucuna andreana), dkolki (Arrabidea chica), corteza de canfín (Tetragastris panamensis), semillas de suita (Geonoma congesta) y frutos de achiote (Bixa orellana). Estos últimos también los usan para pintar sus cuerpos en ceremonias religiosas. Para la fijación de los tintes utilizan mordientes, como la cáscara del árbol de mayo (Vochysia hondurensis), el alumbre y el caraño (Trattinickia aspera). La tradición de teñir y pintar se ha ido debilitando, entre otras causas, por el uso de productos sintéticos; esto ha provocado también la pérdida de algunas especies y de técnicas de tinción. En los bosques secos tropicales se ha extraído en forma descontrolada el nance (Byrsonima crassifolia) y la mora (Maclura tinctoria), hasta el punto que el Ministerio del Ambiente y Energía de Costa Rica (MINAE) ha intervenido para controlar su explotación, debido al riesgo de extinción de estos recursos.
Cuadro 3. Principales recursos silvestres utilizados para la fabricación de artesanías por los grupos indígenas de Baja Talamanca.
Nombre común |
Nombre científico |
Habitat |
Parte utilizada |
Artesanía confeccionada |
Kékoldi |
Uátsi |
Yorkín |
Bribri |
Bejuco del hombre |
Heteropsis oblongifolia |
Bosque |
Liana |
Cestería, sombreros, otros |
X |
X |
X |
X |
Bejuco real “Acla” |
Thoratocarpus bissectus |
Bosque |
Liana |
Cestería, jabas |
X |
X |
X |
X |
Bejuco ajo, ajillo, cebolla |
Pachytera standleyi |
Bosque, tacotal |
Liana |
Canastas grandes, jabas |
X |
X |
X |
|
Bejuco de la mujer |
Philodendron rigidifolium |
Bosque |
Liana |
Amarrar hojas de techos |
X |
|||
Bejuco cucharilla |
Cydista diversifolia |
Bosque, tacotal |
Liana |
Jabas |
X |
X |
X | |
Majagua |
Hampea apendiculata |
Tacotal |
Corteza |
Chácaras, hamacas |
X |
X |
X |
X |
Pita |
Aechmea magdalenae |
Bosque, jardín |
Hojas |
Chácaras |
X |
X |
X |
X |
Penca |
Agave americana |
Huerto casero |
Hojas |
Hamacas |
X |
X | ||
Mastate |
Brosimum utile |
Bosque, tacotal |
Corteza |
Cobijas, agarraderas |
X |
X |
X |
X |
Pejibaye |
Bactris gasipaes |
Siembra |
Tallo |
Arcos y flechas |
X |
X |
X |
|
Caña brava |
Gynerium sagittatum |
Orilla del río |
Berolis |
Flechas |
X |
X |
X |
|
Jira |
Socratea durissima |
Bosque |
Corteza |
Flechas |
X |
|||
Jícaros |
Crescentia cujete |
Siembra |
Frutos |
Guacales tallados |
X |
X |
||
Abacá |
Musa textiles |
Siembra tacotal |
Tallos |
Chácaras |
X |
X |
X |
|
Semko |
Carludovica palmata |
Fincas, orillas de río |
Hojas, tallos |
Canastas, sombreros |
X |
X | ||
Guarumo |
Cecropia sp. |
Tacotal |
Corteza |
Chácaras |
X |
X |
X |
X |
Balso |
Ochroma piramidale |
Tacotal |
Madera |
Tambores |
X |
X |
X |
|
Cedro |
Cedrela odorata |
Tacotal |
Madera |
Tambores |
X |
|||
Demara |
Bactris sp. |
Bosque |
Tallos |
Arcos y flechas |
X |
|||
Boa |
Boa constrictor |
Bosque |
Piel |
Tambores |
X |
|||
Iguana |
Iguana iguana |
Bosque, zoocriadero |
Pieles |
Tambores |
X |
X |
||
Martilla |
Potos flavus |
Bosque |
Piel |
Tambores |
X |
|||
Nutria |
Lutra longicausis |
Bosque |
Piel |
Tambores |
X |
Fuente: Ling y Flores 1994.
Cuadro 4. Principales plantas silvestres utilizadas para la obtención de colorantes naturales por los grupos indígenas de Baja Talamanca.
Fuente: Ling y Flores 1994.
Los materiales de construcción utilizados por las comunidades (principalmente las indígenas) se extraen generalmente de los bosques, y son de mucha importancia para la fabricación de techos, paredes y pisos de viviendas tradicionales. De los bosques sale más del 90 por ciento de los productos utilizados en la construcción de viviendas indígenas; un 86 por ciento de ellos corresponden a productos no madereros.
Asimismo, para la construcción de complejos turísticos en las regiones bajas tropicales se emplean recursos del bosque, por la frescura y atractivo de este tipo de arquitectura. Esto ha provocado una mayor presión sobre recursos, como las hojas de palmas para la construcción de techos; por ende, el valor comercial del producto ha aumentado. Por ejemplo, en 1990, las hojas de uko (Geonoma congesta), la especie de mayor preferencia para hacer techos, por su durabilidad (tres a cuatro años), se cotizaban en 7 $EE.UU. el bulto de 30 kg, mientras que actualmente se venden por unidad. También se utilizan en la construcción de techos dos especies de suita: el sékmako (Geonoma cueata) y el doko (Asterogyne martiana). Las hojas de palma se tejen sobre un soporte de uka (Gynerium saggittatum) y se amarran con el bejuco kocha (Heteropsis oblongifolia). Las hojas de ju (Astrocaryum alatum) son de menor calidad, pero los cabécares las usan regularmente por su mayor disponibilidad.
En la construcción de pisos y paredes se utiliza chonta ó kuk (Iriartea gigantea) y estípites de jira ó alí (Socratea durissima), de color negro y gran dureza; estas características han hecho que la especie sea considerada para la producción de parquet.
Los postes vivos son un producto bastante comercializado a nivel del productor para la construcción de cercas. En la zona del bosque seco tropical, las especies más importantes, por su calidad son el pochote (Bombacopsis quinata), el jiñote (Bursera simaruba), el jobo (Spondias mombin) y el madero negro (Gliricidia sepium). Esta última es la de mayor disponibilidad, por lo que su precio es el más bajo.
En Costa Rica se ha desarrollado exitosamente el cultivo de plantas ornamentales para la exportación, aunque se continúan explotando plantas que provienen de los bosques naturales, como bromelias, orquídeas y cicadas. Varias especies, como las del género Tillandsia spp., palmas nativas y otras, están siendo manejadas en viveros, con el fin de determinar los métodos de reproducción más eficaces. La pacaya (Chamaedorea exhorriza y Ch. tepejilote) es la principal palma nativa que está siendo manejada bajo cobertura boscosa, principalmente en áreas de reforestación.
Varias especies de árboles y arbustos nativos de los bosques secos tropicales tienen una gran aceptación en el mercado de plantas ornamentales, como el almendro de montaña (Andira inermis), el madroño (Calycophyllum candidissimum), el cerito (Casearia corymbosa), el coralillo (Hamelia patens), la siempreviva (Jacquinia nervosa), la acerola (Malpighia glabra), el canelo (Ocotea veraguensis), el aceituno (Simaruba glauca), el cortés amarillo (Tabebuia ochracea) y el roble sabana (Tabebuia rosea).
Los helechos, así como musgos y líquenes, son un recurso de mucha importancia para algunos viveros que los cultivan con fines de exportación; sin embargo, es muy difícil determinar qué cantidad del total exportado proviene en realidad del bosque.
Cuadro 5. Volúmenes de exportación de plantas ornamentales.
Planta |
Año |
Volumen (kg) |
Valor FOB ($EE.UU.) |
Musgos y líquenes |
1994 |
10.492 |
44.950 |
1995 |
12.721 |
67.421 | |
Helechos |
1995 |
13.676 |
37.172 |
1996 |
2.015.343 |
6.991.878 | |
1996* |
3.145.531 |
8.157.816 |
Fuente: Instituto Nacional de Estadísticas y Censos de Costa Rica
* Asparagus plamosus, A. spengeri, Polystichum adiantiforme
Los grupos étnicos nativos aprovechan una mayor diversidad de animales, incluyendo aves, aunque por sus tradiciones tienden a favorecer la protección. En general, no existen datos sobre volúmenes e ingresos por aprovechamiento, aunque puede considerarse que son poco significativos para la economía; su mayor valor es el nutritivo. Entre los animales cazados están el venado cola blanca (Odocoileus virginianus), el tepezcuintle (Agouti paca) y el saíno (Tayassu pecari).
La crianza de mariposas bajo condiciones controladas se explota a nivel comercial. La actividad está dirigida al mercado internacional, aunque localmente se aprovecha en artesanía. El ecoturismo ha favorecido la instalación de criaderos para observación en condiciones naturales.
En la región nor-occidental del país (Guanacaste), algunas especies de animales constituyen una fuente importante de alimento, principalmente las iguanas (Iguana iguana); los armadillos (Dasypus novemcinctus), cuyo precio puede variar entre 3 y 3,85 $EE.UU/kg; los tepezcuintles (Agouti paca), con un precio en pie de alrededor de 190 $EE.UU. y venados (Odocoileus virginianus), cuya carne puede costar alrededor de 38 $EE.UU./kg. Además, se cazan palomas grandes (Columbina sp.) y dantas (Tapirus bairdii). No es mucha la información que se tiene de estas actividades, ya que son ilícitas y penadas por la ley, lo mismo que el tráfico ilegal de fauna para mascotas.
Los criaderos de iguana (Iguana iguana) se manejan con varios propósitos: para enriquecer hábitats naturales, como alimento y para la venta de mascotas. Un grupo indígena en Talamanca tiene un proyecto de cría de iguanas que les genera ingresos con actividades de ecoturismo.
COSTA RICA
Producto |
Recurso |
Valor económico |
||||||||
PFNM |
Impor-tancia |
Nombre comercial |
Especies clave |
Parte usada |
Sistema de producción |
Fuente |
Utilización |
Cantidad, valor (expresado en $EE.UU.) |
Observaciones |
Fuente |
Plantas y productos de origen vegetal | ||||||||||
Medicinal |
! |
Hojas de sen |
Caesalpinia pulcherrima |
Hojas |
BN, O |
B |
N |
16.457 kg/año; $119.743 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 |
Medicinal |
! |
Zarzaparrilla |
Smilax spp. |
Raíz |
BN, O |
B |
N |
7.336 kg/año; $21.898 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 |
Medicinal |
! |
Cuculmeca |
Smilax spp. |
Raíz |
BN, O |
B |
N |
7.282 kg/año; $20.378 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 |
Medicinal |
! |
Ciprés |
Cupressus lusitanica |
Hojas |
BN, O |
B |
N |
4.782 kg/año; $6.245 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 |
Medicinal |
! |
Cola de caballo |
Equisetum bogotense |
Tallo, hojas |
BN, O |
B |
N |
3.159 kg/año; $8.251 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 |
Medicinal |
! |
Chiquizá |
Leomurus sibiricus |
BN, O |
B |
N |
2.426 kg/año; $4.978 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 | |
Medicinal |
! |
Hombre grande |
Quassia amara |
Tallo |
BN, O |
B |
N |
2.298 kg/año; $16.291 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 |
Medicinal |
! |
Quina |
Ocotea veraguensis |
BN, O |
B |
N |
2.050 kg/año; $1.713 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 | |
Medicinal |
! |
Saragundí |
Senna reticulata |
BN, O |
B |
N |
1.853 kg/año; $6.914 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 | |
Medicinal |
! |
Roble |
Quercus sp. |
BN, O |
B |
N |
1.694 kg/año; $4.424 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 | |
Medicinal |
! |
Jinocuabe |
Bursera simaruba |
Corteza, hojas |
BN, O |
B |
N |
1.288 kg/año; $3.123 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 |
Medicinal |
! |
Calzoncillo |
Passiflora biflora |
BN, O |
B |
N |
1.239 kg/año; $3.698 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 | |
Medicinal |
! |
Diente de león |
Taraxacum officinalis |
Raíz, hojas |
BN, O |
B |
N |
1.200 kg/año; $2.820 |
1994 |
Ammour, et al. 1994 |
Medicinal |
! |
Ipecacuana |
Cephaelis ipecacuanha |
Raíz |
BN, O |
B |
N, I |
61.511 kg/año, $2.936.094 (1995); 188.515 kg/año, $9.717.150 (1996) |
Instituto Nacional de Censos y Estadísticas | |
Ornamental |
+ |
Musgos y líquenes |
N.D. |
Planta entera |
BN |
B |
N, I |
10.492 kg/año, $44.950 (1994); 12.721 kg/año $67.421 (1995) |
Instituto Nacional de Censos y Estadísticas | |
Ornamental |
+ |
Helechos |
N.D. |
Planta entera |
BN, O |
B |
N, I |
13.676 kg/año, $37.172 (1995); 2.015.343 kg/año, $6.991.878 (1996) |
Instituto Nacional de Censos y Estadísticas | |
Ornamental |
+ |
Helechos |
Asparagus plamosus, A. Spengeri, Polystichum adiantiforme |
Planta entera |
BN, O |
B |
N, I |
3.145.531 kg/año, $8.157.816 |
Instituto Nacional de Censos y Estadísticas |
Importancia: - utilización no documentada; + utilización documentada; ! planta/especie muy importante a escala nacional
Sistema de producción: BN - bosque natural u otra área forestal; P - plantaciones; O - Otro (árboles fuera del bosque, SAF, huertos caseros,…)
Fuente: B - bosque; C - cultivado
Utilización: N - nacional; I - internacional