• Afianzamiento e intensificación de las políticas y procedimientos de aseguramiento ambiental.
• Inducción a un mayor poder de negociación del pequeño y mediano silvicultor.
• Mejoramiento general de los instrumentos de política económica que promuevan la asociatividad de los pequeños y medianos productores.
• Promoción de acciones tendientes a perfeccionar los mercados evitando la competencia desleal y atenuando la estructura monopsónica.
• Mejorar las diversas de cadena de valor de la producción de bienes y servicios del sector forestal, de tal manera que se desarrollen productos finales con valor añadido.
• Establecer una política de largo plazo que impulse la innovación sobre una adecuada base científica y tecnología.
• Generación de un marco político legal que asegure la confianza entre el Estado y el inversionista.
• Desarrollo de estrategias de mercadotecnia que permitan al sector forestal penetrar en los canales del retail con bienes finales y servicios con alta tecnología.
• Fomentar la apertura nacional a la obtención de información y servicios del mejor nivel mundial.