Exámenes regionales

África

África del Norte

Perspectivas desfavorables para la cosecha de trigo de 2007, muy reducida en Marruecos

En la mayoría de los países de África del Norte la recolección de las cosechas de cereales de invierno de 2007 comenzará a partir de junio. Aunque las precipitaciones mejoraron en abril, las perspectivas para las cosechas totales de trigo y cebada de la subregión son malas debido a una humedad del suelo insuficiente durante la siembra y a la irregularidad de las lluvias recibidas posteriormente en algunas zonas productoras. En Marruecos, el país más afectado, se pronostica que la producción de trigo descenderá más del 50 por ciento, al nivel más bajo de los últimos cinco años. En Argelia y Túnez, las reducciones de la superficie plantada y de los rendimientos debidas a las lluvias insuficientes recibidas durante la campaña deberían traducirse en cosechas menores que las del año pasado. En Egipto, en cambio, las perspectivas son favorables, principalmente para la cosecha de trigo de regadío, aunque la producción se pronostica menor que la de la excelente cosecha del año pasado. En general, la FAO pronostica la producción total de trigo de la subregión en 14,5 millones de toneladas, 22 por ciento menos que la buena cosecha de 2006, y un volumen inferior a la media. La producción de cebada se cifra en 3,2 millones de toneladas, lo que representa una disminución de más del 28 por ciento.

 

África occidental

La situación del suministro de alimentos sigue siendo en general satisfactoria pero en algunos países persisten dificultades alimentarias localizadas

En África occidental, las lluvias comenzaron en marzo en las partes meridionales de los países costeros, lo que permitió la siembra de las primeras cosechas de maíz de 2007 que se recogerán a partir de julio. La siembra de los cereales secundarios irá avanzando hacia el norte de dichos países a medida que comiencen las lluvias. En cambio, en la zona saheliana, en la que el año pasado se obtuvieron cosechas excelentes, predominan condiciones secas estacionales. Tras la publicación de las cifras definitivas, la producción total de cereales de 2006 en los nueve países sahelianos se estimó en un volumen sin precedentes de 15,1 millones de toneladas, ligeramente mayor que el de la cosecha del año anterior y un 19 por ciento superior a la media de los últimos cinco años.

Gracias a dos excelentes cosechas consecutivas, los mercados están bien abastecidos y en la mayoría de los países los precios de los cereales siguen la tendencia normal. En algunas zonas, sin embargo, persisten problemas de seguridad alimentaria localizada, debidos principalmente a la falta de acceso o a los disturbios civiles. En el Chad, la inquietante situación de la seguridad está trastornando las actividades de mercadeo en la parte oriental del país, limitando la corriente de productos entre las regiones y provocando alzas bruscas de los precios en algunas zonas. El continuo desplazamiento de la población puede afectar también a los preparativos de la tierra para la campaña agrícola de 2007 que comenzará en mayo. En Mauritania, el Níger y Burkina Faso hay poblaciones localizadas ya afectadas por la producción menguada de los últimos años, que han vuelto a obtener malas cosechas debidas al mal tiempo, y su situación de seguridad alimentaria sigue siendo inestable. Cunde también la inseguridad alimentaria en algunas partes de Guinea-Bissau debido a trastornos del mercadeo. En el Senegal, donde las precipitaciones insuficientes y la falta de suministro de insumos se tradujeron en un descenso del 33 por ciento de la producción de cereales respecto del año anterior, en la mayor parte de las regiones escasea la oferta y suben los precios del mijo y sorgo. Sin embargo, en zonas con una población grande de consumidores como Dakar, Saint-Louis, Thiès y Kaolack, el aumento del poder adquisitivo y de la demanda efectiva denotan que los mercados están mejor abastecidos, gracias tanto a la producción interna como a las importaciones. Según los informes, en Saint-Louis el precio del mijo ha descendido un 10 por ciento en marzo. Dado que los precios están subiendo más rápidamente en las zonas rurales, es necesario que los grupos vulnerables de las zonas que han experimentado mermas abruptas de la producción o se han visto afectadas por otras perturbaciones sean vigiladas continuamente y asistidas en la medida de lo necesario. También en Côte d’Ivoire, Guinea, Liberia y Sierra Leona sigue siendo necesaria la ayuda alimentaria de emergencia para un gran número de PDI y refugiados como consecuencia de los conflictos civiles.

África central

Persiste la inseguridad alimentaria debida a los disturbios civiles

Las imágenes del satélite indican que la estación de las lluvias comenzó a tiempo en el sur y permitió los preparativos de la tierra y la siembra de la primera cosecha de maíz de 2007, que se recogerá a partir de julio. La siembra continuará hacia el norte a medida que vayan comenzando las lluvias. En la República Centroafricana, la persistencia de la inseguridad continúa impidiendo las actividades agrícolas, y, principalmente en el norte, se registran desplazamientos en gran escala de la población, tanto dentro del país como hacia los países vecinos. Según el PMA, cerca de 200 000 personas necesitan ayuda alimentaria de urgencia.

África oriental

Las perspectivas iniciales para las cosechas de cereales de 2007 son favorables a pesar de un comienzo lento de la campaña en algunas partes

En África oriental, los cultivos de cereales de la temporada principal de 2007 se encuentran en etapas diferentes, entre la siembra y la maduración, salvo en Etiopía, Eritrea y el Sudán, donde la siembra no comenzará hasta finales de mayo o junio. En Kenya, la estación de las lluvias largas de 2007 está muy avanzada en las principales zonas productoras. Las perspectivas para la siembra han mejorado gracias a un significativo aumento de las precipitaciones recibidas en las últimas semanas. El retraso de las lluvias largas, unido al hecho de que la cosecha de lluvias cortas se recogió tarde debido a la continuación de lluvias no estacionales hasta bien entrado febrero, redujo las siembras de marzo y abril. Las lluvias caídas últimamente beneficiaron también las zonas pastorales nordorientales, pero en algunas partes sudorientales se registran déficit de humedad del suelo. En Somalia, unas lluvias buenas recibidas en la segunda década de abril beneficiaron la siembra, ya comenzada, de las cosechas principales “gu” de 2007. Es probable, sin embargo, que los desplazamientos actuales de la población debidos a la reciente escalada del conflicto civil reduzcan la superficie plantada, particularmente en la periferia de Mogadishu. Tras las intensas precipitaciones caídas en el altiplano etíope, están subiendo los niveles de agua del río Shabelle, dando lugar a la emisión de una alarma de inundación moderada. En Uganda, las lluvias abundantes recibidas en la segunda década de abril mejoraron las perspectivas para la siembra de la primera temporada de 2007 en las zonas bimodales del sur, en las que se habían retrasado las operaciones sobre el terreno debido al tiempo seco imperante en marzo. También fueron buenas las precipitaciones en las principales zonas productoras del norte, en las que la siembra comienza a partir de abril. En la República Unida de Tanzanía, unas lluvias estacionales bien distribuidas aportaron condiciones de crecimiento favorables en una gran parte del país para la cosecha de maíz de 2007, que en la región de la cesta de cereales de las tierras altas meridionales se recogerá a partir de mediados de mayo, y en las zonas productoras bimodales del norte se encuentra en la fase reproductiva. También han mejorado considerablemente en todo el país la situación de los pastizales y los niveles de agua de las represas.

La recolección de las cosechas de la temporada secundaria de 2006/07 ha terminado en la mayoría de los países, salvo Etiopía, donde la cosecha “belg” se recogerá a partir de junio. Tras unas precipitaciones entre normales y superiores a lo normal recibidas durante la campaña en las zonas productoras del altiplano sudoccidental de Etiopía, las perspectivas son favorables. También ha mejorado la disponibilidad de pastizales y agua en las zonas pastorales meridionales y sudorientales. En el Sudán, terminó la recolección de la cosecha de trigo de 2006/07, con una producción estimada en un nivel superior a la media gracias a un fuerte aumento de la superficie plantada para responder a una demanda sostenida.

Las estimaciones más recientes de la FAO cifran la producción total de cereales de la subregión en 2006/07 en 34,7 millones de toneladas (incluido el arroz elaborado), alrededor de un 13 por ciento más que el buen nivel del año anterior y un nivel alto sin precedentes.

Cuadro 8. Producción de cereales de África ( millones de toneladas)

Los precios de los cereales están muy por debajo de sus niveles de hace un año en la mayoría de los países

Tras las buenas cosechas de cereales obtenidas en 2006 en la mayoría de los países de la subregión, los precios de los alimentos han bajado, excepto en Etiopía, donde están por encima de sus niveles medios, a pesar de un aumento considerable de la producción. Según la Red regional de información sobre el comercio agrícola (RATIN), en Kenya y Uganda los precios mayoristas del maíz están muy por debajo de sus niveles de hace un año, aunque en abril han recuperado ligeramente. En la República Unida de Tanzanía, donde las cosechas de cereales de la temporada principal de 2007 están a punto de recogerse, los precios comenzaron a bajar en marzo en previsión de una buena cosecha (Figuras 4 y 5).

 

 

Pese a un mejoramiento del suministro de alimentos, millones de personas se enfrentan con graves dificultades alimentarias

No obstante la mejora general registrada en el suministro de alimentos, millones de personas de la subregión se enfrentan con graves dificultades debidas a los efectos de sequías localizadas y de los conflictos pasados y en curso. En Somalia meridional crece la preocupación, ya que la situación de la seguridad continúa empeorando (véase el Recuadro). En el Cuadro 9 figuran las estimaciones actuales del número de personas de África oriental que deberían recibir asistencia alimentaria en 2007.

Cuadro 9: Número previsto de personas que recibirán ayuda alimentaria en África oriental (a finales de marzo de 2007)

SOMALIA - Con la escalada del conflicto empeora el suministro de alimentos

La escalada del conflicto desde enero, principalmente en Mogadishu, la capital de Somalia, ha incrementado espectacularmente el número de las personas desplazadas. Al final de abril, se desencadenaron hostilidades también en la ciudad portuaria de Kismayo, obligando a las personas desplazadas en los campamentos a buscar otros refugios. En un informe de la ACNUR, el número de las personas que huyeron de Mogadishu desde el comienzo de las hostilidades en febrero se estima en más de 320 000. Sin embargo, en informes recientes de la Dependencia de Evaluación de la Seguridad Alimentaria para Somalia (FSAU) se indica que una parte de la población desplazada ha comenzado a regresar ya que, al parecer, las intensas hostilidades han disminuido. La inseguridad que reina en Mogadishu y zonas circundantes, así como los bloqueos de carreteras, el cierre de los puertos y la piratería marina están creando dificultades para el acceso humanitario, la importación de productos alimenticios y no alimentarios, y las corrientes comerciales interregionales en Somalia meridional. Desde mediados de marzo hasta comienzos y mediados de abril se observaron fuertes aumentos de los precios en Mogadishu, el Valle de Shabelle y las regiones centrales. Los precios del arroz, la harina de trigo y el azúcar subieron entre 50 y 67 por ciento en Mogadishu, 38-43 por ciento en Baidoa, 25-50 por ciento en Kismayo, y 25-38 por ciento en Merka y Jowhar. La escalada actual del conflicto coincide también con el inicio de la campaña agrícola principal “gu” de 2007, que normalmente se siembra a partir de la segunda mitad de abril. Preocupa la reducción de la superficie plantada debida a las perturbaciones de las operaciones sobre el terreno, como consecuencia del continuo desplazamiento de la población. Se prevé también que las lluvias “gu” agraven las condiciones de muchas PDI que quedaron sin vivienda. La concentración mayor de PDI relacionadas con el conflicto se encuentra en Shabelle Bajo y Medio, con miles de PDI ubicadas cerca de las partes más bajas del río Shabelle. Tras las intensas lluvias caídas últimamente en el altiplano etíope, los niveles de agua del Shabelle han ido subiendo hasta el punto de que pueden producirse inundaciones.

África meridional

Cosechas menores de maíz en la mayoría de los países, pero una cosecha excelente en Malawi

En el África meridional han comenzado las cosechas de la temporada principal de 2007. Aunque las lluvias acumulativas de la temporada 2006/07 estuvieron cercanas a lo normal en la mayoría de los países, la campaña se caracterizó por un comienzo tardío, precipitaciones excesivas y rachas secas de hasta tres semanas o más, que causaron importantes pérdidas de cosecha. En general, las zonas septentrionales de la región recibieron lluvias relativamente buenas, pero las meridionales sufrieron condiciones extremadamente secas, acompañadas de temperaturas elevadas. En espera de los resultados de las misiones FAO/PMA de evaluación de los cultivos y del suministro de alimentos, actualmente en curso en Zimbabwe, Lesotho y Swazilandia, y de las estimaciones de la producción de otros países, la FAO pronostica la producción total de maíz de 2007 en la subregión en alrededor de 14,6 millones de toneladas, volumen ligeramente menor que el de 2006 y en torno a un 7 por ciento por debajo de la media quinquenal (Cuadro 10). En Sudáfrica, el mayor productor de la subregión, la cosecha de maíz debería aumentar en un 3 por ciento con respecto al nivel bajo del año pasado, pero seguiría estando por debajo de la media de 2002-06 en alrededor de un 26 por ciento. A pesar de una recuperación de la superficie plantada para aprovechar los precios favorables del maíz, los rendimientos disminuyeron de forma pronunciada a causa de la sequía que asoló las principales zonas productoras del país. Sin embargo, los efectos negativos del tiempo seco han sido más marcados en el sector de la agricultura de subsistencia, en el que la producción debería disminuir en una tercera parte con respecto a 2006. A diferencia del año pasado, se pronostica que la producción total de maíz de la subregión, con excepción de Sudáfrica, disminuirá un 5 por ciento respecto del nivel bueno de 2006, pero se mantendrá por encima del nivel medio. Se prevén cosechas de cereales menores que las del año pasado en la mayoría de los países de la subregión, con excepción de Malawi y Angola. En Zimbabwe, el Gobierno ha declarado el año 2006/07 como un “año de sequía”, debido a la irregularidad e insuficiencia de las precipitaciones. Mientras la disponibilidad de semillas de maíz mejoró en la presente campaña, la persistencia de la crisis económica se tradujo en una escasez de fertilizantes, energía mecánica, y mano de obra. Los pronósticos iniciales provenientes de diferentes fuentes apuntan a un importante descenso de la producción de maíz con respecto a la cosecha buena del año pasado. El tiempo muy seco imperante durante la campaña agrícola 2006/07 también ha perjudicado las cosechas de cereales de 2007 en Lesotho y Swazilandia. En Madagascar, el tiempo seco y las temperaturas elevadas de las partes meridionales, en las que se cultiva el maíz, redujeron de forma pronunciada la producción de este año, pero la cosecha principal de arroz debería ser de nivel medio. En Namibia, unas grandes inundaciones registradas en las zonas de tierras bajas de la importante región productora de Caprivi causaron graves pérdidas de cosecha, mientras que en el “triángulo del maíz”, situado en torno a Grootfontein, el tiempo seco redujo los rendimientos. Los pronósticos oficiales apuntan a una cosecha de maíz inferior en una tercera parte al nivel satisfactorio de 2006, pero todavía de nivel medio. En Zambia, el tiempo seco registrado en las partes meridionales afectó negativamente a la producción de maíz, pero en la mitad septentrional del país llovió abundantemente de manera que se prevén rendimientos buenos a pesar de algunas pérdidas localizadas sufridas a causa de las inundaciones. En general, se prevé una producción de maíz para 2007 muy inferior a la cosecha abundante del año pasado, pero situada todavía entre niveles normales y superiores a lo normal. Análogamente, en Mozambique, las inundaciones de las partes centrales y una grave sequía en las provincias meridionales redujeron la producción de maíz en esas zonas, pero en las zonas de tierras altas del Valle de Zambezi se están obteniendo cosechas buenas. Según las previsiones, al retirarse las aguas también será buena la campaña agrícola secundaria, pronosticándose que, en conjunto, la cosecha de maíz de este año será de nivel medio, aunque menor que en 2006. En Bostwana, las lluvias insuficientes e irregulares recibidas durante el período vegetativo de 2006/07 determinaron también una fuerte disminución de la producción de cereales con respecto al año pasado, pero todavía de nivel medio. En Malawi, se prevé que las lluvias abundantes y bien distribuidas, unidas a una disponibilidad mejorada de insumos agrícolas gracias a un programa gubernamental de subvenciones a los fertilizantes, den lugar este año a otra excelente cosecha de maíz. Las estimaciones oficiales provisionales indican una cosecha de maíz de 3,1 millones de toneladas, muy superior al nivel bueno de 2006 y de un nivel sin precedentes. Como consecuencia, el país dispondrá de cuantiosos excedentes exportables de maíz en la campaña comercial 2007/08 (abril/marzo). Análogamente, en Angola, se prevé una buena cosecha de maíz debida a un continuo aumento de la superficie plantada, como consecuencia del reasentamiento de los repatriados, a unas lluvias favorables recibidas durante la presente campaña, y a un acceso mejorado a semillas y fertilizantes. Sin embargo, las lluvias excesivas caídas en las zonas centrales y el tiempo seco imperante en las partes meridionales se tradujeron en pérdidas de cosecha localizadas.

Las perspectivas para la siembra de la cosecha de trigo y de otros cultivos de 2007 que comenzará a partir de mayo son favorables en las zonas septentrionales debido a unas lluvias intensas que mejoraron la humedad del suelo. En Sudáfrica, que representa alrededor del 90 por ciento de la producción de trigo de la subregión, las intenciones de siembra indican un ligero aumento de la superficie, aunque manteniéndose por debajo de la media quinquenal. El aumento de las plantaciones se debe al alza de los precios internos e internacionales desde el comienzo del año, así como a unas condiciones de crecimiento mejores.

Cuadro 10. África austral: producción de maíz (miles de toneladas)

 

Las importaciones de cereales aumentarán en 2007/08

Debido a la disminución de las cosechas de maíz de 2007 prevista en la mayoría de los países, la necesidad total de importaciones de maíz de la subregión, excluido Sudáfrica, en la campaña comercial 2007/08 (abril/marzo en la mayoría de los casos) se pronostica cercana a 1,6 millones de toneladas, frente a 1,1 millones de toneladas del año anterior (Figura 6). Según proyecciones provisionales, las necesidades de asistencia alimentaria para un gran número de personas afectadas por inundaciones o sequías localizadas aumentarán a alrededor de 380 000 toneladas, sólo maíz, lo que se compara con la estimación de 107 000 toneladas recibidas durante 2006/07. Se trata, sin embargo, de un volumen inferior al nivel medio de ayuda alimentaria en maíz recibida durante los cinco años anteriores.

 

Los precios de exportación del maíz son más altos que hace un año en Sudáfrica

En Sudáfrica, los precios de exportación del maíz blanco (en dólares EE.UU.), que habían estado subiendo desde el período de siembra de noviembre pasado, bajaron en abril al comenzar la cosecha, pero se mantuvieron muy por encima de sus niveles de hace un año debido a una segunda mala cosecha consecutiva de maíz. Además, los precios futuros de SAFEX muestran una tendencia positiva entre mayo y diciembre de 2007. Los precios altos de Sudáfrica, el principal país exportador de la región, han afectado a Swazilandia, Lesotho y otros mercados de la región que dependen de las importaciones estructurales. En cambio, en Malawi los precios del maíz disminuyeron en febrero y marzo en previsión de una cosecha sin precedentes y de la posibilidad de cuantiosos excedentes exportables. También en algunos otros países de la subregión, los precios corrientes del maíz, el alimento básico más importante, están por debajo de los niveles correspondientes de hace un año. En Madagascar, unas lluvias sostenidas e intensas recibidas en los últimos meses han trastornado los suministros de arroz provocando un brusco aumento de sus precios (Figura 7).

En general, se prevé que el suministro regional de alimentos será más difícil en la campaña comercial 2007/08 (mayo/abril). En Sudáfrica, las informaciones oficiales apuntan a un excedente exportable de maíz blanco (destinado al consumo humano) de 587 000 toneladas, muy por debajo del nivel de 2006/07. Sin embargo, tras dos excelentes cosechas consecutivas, Malawi ha surgido como un potencial exportador con abundantes excedentes de maíz. Según se ha señalado, Malawi está negociando la venta de 400 000 toneladas de maíz a Zimbabwe.

Asia

Lejano Oriente

Perspectivas favorables para los cereales de invierno

Las perspectivas para las cosechas de cereales de invierno (principalmente trigo), que se encuentran en sus últimas fases de desarrollo o cerca de su recolección en los principales países productores, siguen siendo generalmente favorables. En China, las últimas precipitaciones y temperaturas cálidas han sido propicias para el desarrollo reproductivo del trigo de invierno y para la siembra del maíz y el arroz en la principal zona productora. Los pronósticos actuales apuntan a una producción de trigo de alrededor de 99 millones de toneladas en 2007, cercana a la media quinquenal, pero casi 5 por ciento menor que el año pasado. La zona sembrada con trigo se redujo como consecuencia del tiempo seco imperante durante el período de la siembra y del crecimiento inicial. En la India, gracias a un tiempo constantemente favorable, el pronóstico relativo a la producción de trigo de 2007 se ha revisado al alza a 73,5 millones de toneladas. Ello representa un aumento del 6 por ciento respecto al año pasado debido a una ampliación de la superficie plantada y a un tiempo favorable durante la mayor parte del período vegetativo. Como consecuencia, se pronostica que en 2007/08 las importaciones de trigo serán mucho menores, situándose en 2 millones de toneladas, frente a los 6,5 millones de toneladas en la campaña comercial anterior. Análogamente, el pronóstico relativo a la producción de trigo del Pakistán durante el presente año se ha revisado al alza, en 1 millón de toneladas, a un volumen sin precedentes de 23 millones de toneladas, 15 por ciento más que la media quinquenal. Los resultados satisfactorios se atribuyen al aumento de las subvenciones a los fertilizantes, que permitió a los productores aumentar las dosis de aplicación, y al tiempo favorable. Dado el incremento previsto de los suministros internos de trigo, el país debería exportar aproximadamente 1,5 millones de toneladas de trigo en 2007/08. En cambio, en Bangladesh las perspectivas apuntan a una cosecha menor de trigo debido a unas temperaturas elevadas no estacionales durante el importante período de desarrollo invernal. Como consecuencia, se prevé que las importaciones de trigo del país en 2007/08 aumenten a alrededor de 2,8 millones de toneladas.

 

Las perspectivas generales para el arroz son variadas

En Indonesia, se pronostica que la producción de la cosecha de arroz de la temporada principal de 2007, que ya está muy avanzada, descenderá en alrededor de un 2 por ciento, debido a una reducción del 3 por ciento de la superficie plantada a causa de la llegada tardía de las precipitaciones monzónicas nordorientales, que normalmente llegan en septiembre–octubre, pero que llegaron al país recién en diciembre. En Sri Lanka, ha terminado la recolección de la cosecha de arroz de la temporada principal Maha y la producción se estima en un nivel superior a la media. En Tailandia, la República Popular Democrática Lao, Camboya, y Viet Nam las perspectivas para el arroz de la estación seca son generalmente satisfactorias.

Persisten en algunos países las dificultades con el suministro de alimentos

Pese a una situación del suministro de alimentos en general satisfactoria en la subregión, las poblaciones vulnerables de algunos países siguen viéndose afectadas por graves dificultades al respecto. Las preocupaciones principales en materia de seguridad alimentaria se centran en la República Popular Democrática de Corea, el Nepal, Sri Lanka y Timor-Leste.

En la República Popular Democrática de Corea, se estima que durante la actual campaña comercial 2006/07 (noviembre/octubre) habrá un importante déficit de cereales, a pesar de la producción superior a la media de los cereales principales obtenida en 2006, y de las perspectivas generalmente favorables para la actual campaña agrícola secundaria. Aunque la República de Corea ha convenido últimamente en proporcionar 400 000 toneladas de arroz a su vecino, todavía queda en 2006/07 un déficit de aproximadamente 510 000 toneladas, que ha de colmarse con ayuda alimentaria adicional e importaciones comerciales (véase el recuadro). En Timor-Leste, la producción de cereales de 2007, incluidos la yuca y otros tubérculos, se ha visto gravemente afectada por condiciones atmosféricas adversas, especialmente en las provincias septentrionales, en las que las lluvias han sido irregulares. Además, en algunas partes occidentales los cultivos resultaron afectados por un brote de langostas. Una misión reciente FAO/PMA de evaluación de cultivos y suministros de alimentos ha estimado que la producción de maíz, el cultivo más importante del país, estaba alrededor de un 30 por ciento por debajo de la media de los últimos años. Aunque se señala que en abril se ha aliviado algo la difícil situación del suministro de alimentos debida al trastorno, en febrero y marzo, de las normales actividades de importación y mercadeo, se estima que alrededor del 40 por ciento de la población necesita ayuda alimentaria de emergencia. Además, se necesita asistencia de emergencia en semillas de arroz y maíz para la segunda campaña agrícola, que comienza en mayo. En breve estará disponible un análisis pormenorizado de la misión sobre la situación de la oferta y la demanda de alimentos.

Cuadro 11. Producción de cereales en Asia ( millones de toneladas)

En el Nepal se está recogiendo la cosecha de trigo de 2007, que normalmente representa aproximadamente el 22 por ciento de la producción total de cereales. Gracias a las excelentes condiciones de crecimiento experimentadas en la presente campaña, una reciente misión FAO/PMA de evaluación de cultivos y suministros de alimentos ha estimado la producción en un volumen sin precedentes de 1 460 000 toneladas, alrededor de un 7 por ciento por encima de la media de los últimos cinco años. Sin embargo, la inseguridad alimentaria sigue siendo una gran preocupación para los hogares gravemente afectados por las sequías del año pasado, especialmente en los distritos más damnificados de la región oriental, en las que las pérdidas de cosecha ascendieron a un 25 por ciento, por término medio, llegando en algunos distritos como Siraha y Saptari a más del 40 por ciento. Debido a una productividad baja y a un deficiente acceso a los mercados, muchos hogares de las regiones del lejano oeste y del oeste central son extremadamente pobres y sufren de escasez crónica de alimentos. Muchos hogares de Terai (o llanura) también son vulnerables a la inseguridad alimentaria como consecuencia de los disturbios civiles y de una pobreza crónica. El PMA ha comenzado una operación de emergencia para distribuir asistencia alimentaria en las regiones del lejano oeste y del oeste central a partir de enero de 2007.

La oferta y la demanda de alimentos en la República Popular Democrática de Corea

Va mejorando la situación de la oferta y la demanda de alimentos pero sigue habiendo un déficit importante La producción total de cereales de 2006 se estimó en aproximadamente 4 millones de toneladas (incluido el arroz elaborado), alrededor de un 2,6 por ciento por debajo de la cosecha buena de 2005, por todavía un 14 por ciento por encima de la media de los últimos cinco años (véase la figura). Gracias a una recuperación constante de la producción agrícola durante los últimos años, la necesidad de importación de cereales se ha reducido a la mitad desde el comienzo del decenio. Dado el nivel relativamente alto de la producción de 2006, se estima que el déficit de cereales para la campaña comercial 2006/07 (noviembre/octubre) sea de poco menos de 1 millón de toneladas, el segundo más bajo de los últimos siete años. Si se importara efectivamente el volumen de cereales estimado, el consumo per cápita seguiría siendo en el país de unos 160 kg, cercano al status quo. Durante el período comprendido entre noviembre de 2006 y abril de 2007, el Gobierno Central importó comercialmente 40 000 toneladas de cereales y recibió otras 900 toneladas como ayuda alimentaria. La República de Corea ha prometido también 400 000 toneladas de arroz en el marco del acuerdo alcanzado en la 13ª. Reunión del Comité Norte-Sur para la Promoción de la Cooperación Económica, que se celebró del 18 al 22 de abril. Pero aun cuando se cumplieran dichos compromisos, en la campaña comercial actual quedaría todavía un déficit de 510 000 toneladas, que ha de colmarse mediante importaciones comerciales adicionales y/o ayuda alimentaria. Favorables las perspectivas para las cosechas secundarias de 2006/07 Las perspectivas para las cosechas actuales de cereales de la temporada secundaria de 2006/07, principalmente trigo y cebada, que se recogerán a partir de junio, son favorables. Esta cosecha representa el 5 por ciento de la producción anual de cereales. En esta temporada, sin embargo, también se producen papas, cuya importancia como alimento ha aumentado en los últimos años debido a los problemas crónicos de suministro de alimentos y piensos. Según las estimaciones, la superficie total plantada para las cosechas actuales es semejante a la del año pasado, y las condiciones atmosféricas han sido favorables durante la campaña, con algunas precipitaciones bien distribuidas y temperaturas cercanas a lo normal. A esta altura, se prevé que la producción de cereales de la cosecha secundaria sea semejante a la de 220 000 toneladas del año pasado, siempre y cuando continúen hasta la cosecha las condiciones atmosféricas clementes. La producción de papas se cifra en 230 000 toneladas. La siembra de las cosechas principales de maíz y arroz de 2007 comenzará a mediados de mayo o principios de junio, inmediatamente después de la recolección de las cosechas secundarias. Como siempre, la producción dependerá decisivamente de las condiciones atmosféricas imperantes durante la principal estación de las lluvias y de la disponibilidad de fertilizantes y otros insumos esenciales, que han escaseado en las últimas campañas. Igual que en los últimos años, la República de Corea ha donado 300 000 toneladas de fertilizantes para la próxima campaña principal.

En Sri Lanka, pese a una cosecha sin precedentes obtenida el año pasado, la situación alimentaria sigue viéndose afectada considerablemente en el nordeste del país por el empeoramiento de la situación de seguridad. En Filipinas, a pesar de una situación del suministro de alimentos en general satisfactoria, el conflicto desencadenado últimamente entre la agrupación rebelde del Frente Moro de Liberación Nacional (FMLN) y el Gobierno ha desplazado, según se señala, a más de 45 000 personas, suscitando preocupaciones por su seguridad alimentaria. En China, la provincia de Sichuan ha experimentado vendavales y tormentas de granizo a mediados de abril, que tuvieron efectos devastadores en la agricultura. Se informa que alrededor de 38 000 hectáreas sufrieron daños en diverso grado. Hay preocupación por la seguridad alimentaria de la población damnificada.

Cercano Oriente

Perspectivas generalmente favorables para las cosechas de 2007 que están a punto de recogerse

En el Cercano Oriente, se están a punto de recoger las cosechas principales de cereales de invierno de 2007, principalmente trigo. Para varios países se han señalado condiciones atmosféricas favorables. Al final de marzo, la situación general de los cultivos de invierno se consideraba cercana a la del año anterior, en que se obtuvo una cosecha de nivel medio.

Los informes recientes sobre la situación de las langostas del desierto indican que, como consecuencia de las lluvias excepcionalmente buenas recibidas en abril, los enjambres han desovado en el interior de Arabia Saudita, a ambos lados del Mar Rojo y en el interior del Yemen. Se insta a que continúen en los países afectados las encuestas y las operaciones de lucha.

En el Iraq, el empeoramiento de la situación humanitaria continúa afectando a toda la población, siendo los civiles los que sobrellevan el mayor peso de la violencia y la inseguridad que trastornan las vidas y los medios de subsistencia en muchas partes del país. Según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), cada mes abandonan el Iraq aproximadamente 50 000 personas en busca de refugio. En total, cerca de 1,8 millones de personas están desplazadas dentro del país y 2 millones han huido a los países vecinos.

En el Afganistán, unas riadas provocadas por las lluvias torrenciales y el rápido deshielo, debido al alza repentina de las temperaturas, han causado daños ingentes a las vidas y los medios de subsistencia en la mayoría de las regiones del país. Sin embargo, a pesar de los daños localizados, las perspectivas generales son favorables para la producción de cereales de este año, y la producción total de cereales (el arroz en forma elaborada) se pronostica ahora en alrededor de 4,9 millones de toneladas, que se considera un volumen superior a la media.

La CEI asiática

Para este año se pronostica otra cosecha buena de cereales

En la región de la CEI asiática las perspectivas para la producción de cereales de 2007 siguen siendo favorables gracias a un invierno templado, a una humedad del suelo suficiente y a una cubierta de nieve ligeramente superior a la media en las zonas montañosas de la región, lo que garantiza agua suficiente para riego durante la primavera y el verano. Las lluvias torrenciales e inundaciones han causado algunos daños localizados en algunas partes de la región, que no afectan a la producción de cereales pronosticada, estimada en poco menos de 30 millones de toneladas, aproximadamente medio millón de toneladas más que la cosecha buena del año pasado. Kazajstán es el mayor productor de cereales de la región, que representa el 55 por ciento de la producción total, y cerca del 95 por ciento de su producción se planta en primavera en condiciones de secano extensivas. Kazajstán se ha transformado en un importante actor en el mercado internacional de cereales y está buscando nuevos mercados en el Cercano Oriente, África del Norte y África oriental. La producción de cereales prevista en la región comprende aproximadamente 24,8 millones de toneladas de trigo y alrededor de 4,6 millones de toneladas de cereales secundarios, principalmente cebada y maíz.

América Latina y el Caribe

América Central y el Caribe

Buen comienzo de la principal estación de lluvias de 2007

En México, está muy avanzada la recolección de la cosecha de trigo de regadío de la temporada principal de 2007, que representa aproximadamente el 90 por ciento de la producción anual. Como consecuencia de unos abastecimientos de agua suficientes en los estados productores nordoccidentales de Sonora y Baja California, se prevé una cosecha buena por segundo año consecutivo. México es el único productor de la subregión, y los pronósticos oficiales más recientes indican una producción de alrededor de 3 millones de toneladas, cercano al volumen del mismo período del año pasado.

Ha comenzado o está a punto de comenzar en la región la siembra de las cosechas de cereales secundarios y arroz de la temporada principal de 2007. Las lluvias entre normales y superiores a lo normal caídas en abril en la mayoría de los países proporcionaron suficiente humedad del suelo para la siembra, y las perspectivas iniciales son favorables. En Haití y la República Dominicana, sobre todo, las precipitaciones buenas recibidas desde marzo favorecieron el comienzo temprano de la cosecha de maíz de la temporada principal y beneficiaron a otros cultivos alimentarios ya sembrados.

La producción total de cereales de 2006 de la subregión se estima en 37 millones de toneladas, volumen superior al del año anterior y al nivel medio. Se obtuvieron cosechas buenas en la mayoría de los países, salvo en Nicaragua afectada por el tiempo seco, y en Costa Rica debido a una menor superficie plantada. Según los informes, en Haití la situación global de la seguridad alimentaria ha mejorado con las cosechas buenas de la primera y segunda temporada de 2006 y la mejora general de la situación económica. Para finales de marzo, los precios de los alimentos básicos se mantenían estables o estaban bajando. En cambio, en Honduras, Guatemala y Nicaragua, los precios del maíz, alimento básico principal, han venido subiendo desde diciembre debido al alza de las cotizaciones en los mercados internacionales.

 

América del Sur

Producción récord de los cereales secundarios de 2007

En los principales países productores de la subregión está muy avanzada la recolección de las cosechas de cereales secundarios de la temporada principal de 2007. En la mayoría de los países se están obteniendo cosechas sin precedentes o superiores a la media. El pronóstico de la FAO cifra la producción total de cereales secundarios de la subregión, principalmente maíz, en un volumen cercano a los 90,5 millones de toneladas, 22 por ciento más que el nivel medio de 2006 y el mayor del que se tenga memoria. Ello se debe a un aumento del 6 por ciento de la superficie plantada para responder a la fuerte demanda de la producción de etanol, y a unos rendimientos sin precedentes. En la Argentina, a pesar de las lluvias excesivas e inundaciones de finales de marzo y abril, los pronósticos oficiales apuntan a una producción récord de maíz de 22 millones de toneladas, 52 por ciento más que el año pasado, debido a un incremento del 11 por ciento de la superficie plantada y a unos rendimientos máximos. En Brasil, la producción de la cosecha de maíz de la temporada principal se prevé en 36 millones de toneladas, 16 por ciento más que en la misma campaña de 2006. Las perspectivas iniciales para las cosechas de maíz de la temporada secundaria, que se están sembrando actualmente, son prometedoras y se prevén plantaciones sin precedentes en respuesta al aumento de los precios internacionales. Según las proyecciones, la producción aumentará en una cuarta parte a 14 millones de toneladas. También en Chile se está obteniendo una cosecha récord de maíz. En Uruguay, puede que este año no se verifiquen las perspectivas para una cosecha abundante debido a las grandes inundaciones registradas a principios de mayo, señaladas como las peores en cincuenta años, que han desplazado a miles de personas y causado daños graves a los cultivos y al ganado.

Cuadro 12. Producción de cereales en América Latina y el Caribe ( millones de toneladas)

En los países andinos, las inundaciones y sequías redujeron las cosechas de cereales y papas de 2007 en Bolivia (véase el recuadro). En el Perú, pese a unas perspectivas en general favorables para la producción de cereales de este año, las heladas y el granizo caídos en las zonas montañosas, en las que se están recogiendo las cosechas, perjudicaron la producción de cereales y papas de los pequeños agricultores.

Bolivia – Resultados provisionales de la misión FAO/PMA de evaluación de cultivos y suministros de alimentos

Desde noviembre de 2006, diversos fenómenos climáticos han afectado negativamente los nueve departamentos de Bolivia. Las inundaciones y derrumbes que tuvieron lugar en las tierras centrales y bajas (departamentos de Santa Cruz, Cochabamba, Beni, Chuquisaca, Tarija y Pando), así como las sequías, granizo y heladas en el altiplano (departamentos de Oruro, Chuquisaca, Potosí y La Paz), han causado pérdidas de vidas humanas y daños a la infraestructura, las viviendas y la agricultura. Después de haber declarado un estado de emergencia en enero, el Gobierno de Bolivia pidió que una misión FAO/PMA de evaluación de cultivos y suministros de alimentos evaluara la producción de cultivos básicos del país (fundamentalmente cereales y tubérculos) para la campaña agrícola 2006/07 y estimara las necesidades de importaciones para la campaña comercial 2007/08 (julio/junio). Del 9 al 28 de abril de 2007 la Misión visitó el país, recabando de las instituciones oficiales nacionales y departamentales la información existente sobre las superficies plantadas, las pérdidas de cosechas y los rendimientos, cotejándolas mediante verificaciones cruzadas con la información recopilada durante 12 días de visitas de campo, que incluyeron entrevistas con los agricultores, los comerciantes y ONG. En las 70 municipalidades visitadas, se realizaron alrededor de 250 entrevistas a informantes clave, acompañadas de inspecciones de los cultivos. En un total de 9 500 km recorridos por la Misión se realizaron visitas a los mercados, observaciones de la situación del ganado, y continuos transectos. Además, se llevaron a cabo vuelos de reconocimiento aéreo sobre algunas zonas del departamento de Beni que todavía estaban inundadas y eran inaccesibles por carretera. Los principales resultados provisionales de la Misión son los siguientes: *  A nivel nacional, se prevé que las producciones totales de cereales y tubérculos disminuirán aproximadamente un 11 por ciento con respecto a los niveles medios del año pasado, situándose en alrededor de 1,8 millones de toneladas y 1,1 millones de toneladas, respectivamente. La mayor parte de las reducciones se prevén en los cultivos del arroz, la cebada y la papa. La soja disminuiría un 13 por ciento respecto a 2006. *  En los departamentos de tierras bajas orientales y septentrionales de Santa Cruz, Beni y Pando, las inundaciones han causado pérdidas totales de las cosechas de soja, arroz y maíz en algunas zonas y redujeron el potencial de rendimiento de los cultivos sobrevivientes. Además, se vio gravemente afectado también el importante sector pecuario, en el que murieron miles de animales, se perdieron tierras de pastizales y crecen los problemas sanitarios. *  En el altiplano, la sequía, unida al granizo y las heladas, ha damnificado la producción de tubérculos y quinoa en algunas zonas. A partir de agosto y septiembre próximos se prevé una falta de pastizales para los camélidos, principalmente llamas y alpacas, como consecuencia de las precipitaciones limitadas recibidas a principios del año. *  En todo el país, los precios de los cereales y tubérculos acusan una tendencia alcista, situándose muy por encima de sus niveles de hace un año. Ello se debe a la previsión de suministros reducidos, así como a la especulación en curso de comerciantes y agiotistas que adquieren grandes cantidades de productos (principalmente cereales y semillas oleaginosas) para venderlos en función de las condiciones del mercado. *  Según los pronósticos, en la campaña comercial 2007/08 (julio/junio) el país, normalmente autosuficiente en arroz, importará alrededor de 50 000 toneladas. El déficit de papas se estima en 160 000 toneladas, o sea un 21 por ciento de la producción del año pasado, y debería colmarse en parte con importaciones transfronterizas provenientes de Perú y Argentina, y en parte con la sustitución de trigo. En 2007/08 se prevé también un aumento de las importaciones de trigo, que en años normales cubren la mayor parte de las necesidades de consumo. *  La población más perjudicada por las malas condiciones atmosféricas de la presente campaña son los pequeños agricultores de subsistencia de los departamentos del altiplano, La Paz y Oruro, así como los pequeños pastores del departamento de Beni. Un gran número de personas de estas poblaciones necesitará en los meses venideros ayuda alimentaria de emergencia y para la rehabilitación agrícola.

América del Norte, Europa y Oceanía

América del Norte

El mal tiempo causa daños al trigo y retrasa la siembra del maíz

En los Estados Unidos, las perspectivas para la cosecha de trigo de 2007empeoraron a principios de abril tras un período de temperaturas gélidas y de tormentas, que sobrevinieron inmediatamente después de condiciones más calurosas que habían adelantado el crecimiento de las plantas respecto a lo normal para ese período del año. Aunque todavía es prematuro evaluar el alcance de los daños sufridos, los primeros indicios apuntan a daños de diverso grado causados hasta a un 70 por ciento de la cosecha en las zonas centrales y meridionales, que constituyen el cinturón del trigo. Los efectos del mal tiempo se recogen en las clasificaciones que el USDA atribuye a la situación del trigo de invierno, que disminuyeron de forma pronunciada, ya que el 54 por ciento se clasifica entre bueno y excelente, frente al 64 por ciento en la semana anterior al mal tiempo. Sin embargo, a finales de abril la clasificación sigue siendo relativamente buena en comparación con otros años, y muy buena en algunos estados. Ahora, la FAO pronostica la cosecha de trigo de los Estados Unidos en un volumen situado en torno a la media de 55 millones de toneladas, tras un ajuste provisional basado en la información disponible hasta la fecha sobre los daños recientes.

Hasta finales de abril, la siembra del maíz todavía estaba en sus primeras fases en los Estados Unidos, y avanzando más lentamente que el año pasado y que la media a causa del mal tiempo imperante en la primera quincena del mes. Sin embargo, queda todavía bastante tiempo para sembrar si las condiciones atmosféricas mejoran dentro de poco, y se prevé que la superficie plantada con maíz aumente de forma pronunciada para responder a la creciente demanda de los productores de etanol y para exportación. Según el informe del 30 de marzo de “Prospective Plantings” del USDA, se estima que la superficie destinada al maíz aumentará en aproximadamente un 15 por ciento a 36,6 millones de hectáreas, la mayor desde 1944.

En Canadá, ha comenzado la siembra de las cosechas principales de cereales de 2007. Las nevadas caídas al final del invierno han mejorado las condiciones de humedad en algunas zonas en las que predominaban condiciones secas desde el año pasado, pero algunas partes, especialmente Saskatchewan meridional, necesitarían aún más humedad. Según el informe “Statistics Canada Planting Intentions”, del 24 de abril, los agricultores canadienses tienen la intención de reducir de forma pronunciada la superficie plantada con trigo de primavera (el cereal principal), en favor del trigo duro, la cebada, la avena u otros cultivos como la colza o el guisante forrajero, que este año deberían rendir más.

Europa

Mayores cosechas de cereales en perspectiva pero se necesitan más lluvias para que desplieguen todo su potencial

En la Unión Europea, las perspectivas más recientes siguen apuntando a un aumento de la producción de cereales en 2007. Según los pronósticos, la superficie total sembrada con cereales en los 27 países aumentará en un 2 por ciento con respecto al año anterior, lo cual, combinado con un aumento previsto en los rendimientos medios a causa de unas condiciones de crecimiento generalmente mejores, podría redundar en un crecimiento del 4 por ciento de la producción total. Sin embargo, dado que en abril predominaron condiciones calurosas y secas en una gran extensión de Europa septentrional y central, será necesario que en esas zonas llueva dentro de poco para que los pronósticos actuales sigan vigentes. Entre los países interesados figura Francia, el principal productor de cereales de la UE. Según los pronósticos actuales, Francia debería representar una gran parte del crecimiento previsto en la producción de cereales del grupo en 2007, debido principalmente al aumento de su superficie de trigo y a una probable recuperación de los rendimientos con respecto a los niveles reducidos por la sequía del año pasado. A diferencia de las partes centrales y septentrionales predominantemente secas, en las últimas semanas el sudoeste recibió algunas lluvias benéficas. Aunque impidieron los trabajos de campo de primavera, en general las precipitaciones fueron fructuosas, ya que mejoraron los niveles de la humedad del suelo y de los embalses en la Península Ibérica donde el agua había escaseado, especialmente en los dos últimos años. También en los países orientales de la UE las lluvias recientes han mejorado las perspectivas para los cultivos de cereales en desarrollo. En Hungría y Bulgaria la falta de humedad del suelo tras un invierno particularmente seco constituía un motivo de preocupación, pero los informes más recientes indican que las últimas lluvias deberían garantizar rendimientos medios, por lo menos.

 

En la CEI europea, unas condiciones atmosféricas generalmente favorables, una humedad del suelo suficiente y la falta de heladas en marzo y abril han favorecido el desarrollo de los cereales de invierno y permitido a los agricultores terminar la siembra de los cereales de primavera casi con un mes de anticipación. Al contrario de las condiciones estacionales normales en marzo y abril, caracterizadas por algunas olas de frío y heladas, que a menudo pueden comprometer grandes extensiones de cereales de invierno y retrasar la siembra de primavera. La superficie total plantada con los cereales que se recogerán en 2007 se estima en alrededor de 60,8 millones de hectáreas, 1,4 millones de hectáreas más que el año pasado. Los cereales de primavera representan más de dos terceras partes de la superficie total plantada con cereales. En base a las estimaciones de la superficie y a unas condiciones de crecimiento generalmente favorables, la producción total de cereales de 2007 en la subregión se pronostica ahora en torno a los 123,6 millones de toneladas, cerca de 5 millones de toneladas más que el año pasado. La producción total de este año en la subregión comprende cerca de 66 millones de toneladas de trigo y poco más de 57 millones de toneladas de cereales secundarios, principalmente cebada y maíz.

En otras partes de Europa, el principal país productor de cereales que no pertenece a ninguno de los grupos anteriores es Serbia. Las informaciones más recientes indican perspectivas favorables para la producción de este año, previéndose incrementos de la superficie plantada tanto con trigo como con maíz. Dadas las condiciones atmosféricas buenas para el trigo imperantes durante la mayor parte del invierno, se espera un fuerte aumento de la producción. Todo parece indicar también que la producción de maíz será ligeramente mayor.

Oceanía

Los agricultores australianos esperan ansiosamente que llueva para plantar los cereales de invierno de 2007

En Australia, la plantación de los cereales de invierno comienza en mayo. Dado que la humedad del subsuelo se encuentra a niveles muy bajos, las perspectivas dependen totalmente de la llegada oportuna de lluvias buenas en coincidencia con la ventanilla de siembra en las principales zonas productoras. Si entre mediados y finales de mayo llegaran precipitaciones estacionales normales, las intenciones de siembra de los agricultores continúan apuntando a la probabilidad de una superficie superior a la media. Sobre esta base, la FAO sigue pronosticando una fuerte recuperación de la producción de trigo del país, tras la producción reducida por la sequía del año pasado.

Cuadro 13. Producción de cereales en América del Norte, Europa y Oceanía ( millones de toneladas)