Página precedente Indice Página siguiente


Los bosques húmedos tropicales en la demanda, la oferta y el comercio mundiales

S.L. Pringle

S.L. PRINGLE esta encargado de economía en el Departamento de Montes de la FAO

En los últimos 25 años, la producción y consumo mundiales de madera industrial de latifoliadas tropicales ha aumentado rápidamente cuadruplicándose. Y, durante este periodo, las estructuras geográficas relativas de las fuentes de madera, los emplazamientos de las industrias de elaboración, los principales centros de consumo y las corrientes comerciales de esta madera se han desplazado mucho.

Debido a que se registran sistemáticamente por países y por grupos de productos las extracciones de madera, no hay acceso a una estimación separada sobre madera de los bosques tropicales húmedos. Sin embargo, un análisis de las extracciones de especies latifoliadas de países que son predominantemente tropicales se aproxima mucho a los valores de las cortas de madera de los bosques tropicales húmedos, por lo menos para maderas industriales. Por otra parte, se llega a sensibles aumentos de valor al considerar la leña de las sabanas tropicales, las trozas de los bosques secos caducifolios, y la madera para pasta de las plantaciones de especies latifoliadas exóticas.

En el Cuadro 1 se indican las extracciones de las especies latifoliadas tropicales para el periodo 1950-73, vistas en relación con todas las especies latifoliadas (inclusive especies templadas), las coníferas y las extracciones totales. Es muy evidente que las extracciones de latifoliadas son cada vez relativamente más importantes y, en este grupo, las maderas tropicales adquieren mayor importancia. Pero debe reconocerse que gran parte de estas extracciones están destinadas para leña; que, para la mayoría de los países, se hace sólo una estimación imprecisa; y que, para esta clase de utilización, las especies latifoliadas son mucho más importantes, especialmente las de las zonas tropicales.

Las extracciones de leña de latifoliadas para 1973, en países predominantemente tropicales, se estimaron en 757 millones de m3 representando el 30% de todas las extracciones de madera, y su proporción, estimada sobre todas las extracciones, ha ido aumentando rápidamente. Por el contrario, las extracciones de coníferas para combustible disminuyeron desde 192 millones de m3 en 1954 a 174 millones de m3 en 1975. Esto puede, en gran parte, ser el resultado del mejoramiento de las estimaciones estadísticas, pero las cifras ciertamente indican la importancia de esta categoría, en cuanto a las cantidades. La presión ejercida sobre las fuentes de energía en el mundo entero, así como el hecho de que en muchas localidades la leña escasea en forma grave, refuerzan la necesidad de establecer con mayor precisión el papel de la leña, tanto desde el punto de vista local como nacional.

A nivel mundial, se ha puesto más atención en el uso de la madera industrial y el papel que esta madera de las regiones tropicales juega en la oferta de dicha materia prima. El Cuadro 2, semejante al Cuadro 1, muestra los valores comparativos, por grupos de especies, de las extracciones de madera industrial.

Puede verse rápidamente el papel mas predominante de las especies de coníferas, pero es claro que las especies latifoliadas aumentan en importancia y que, en particular, para las latifoliadas tropicales, su importancia crece aún más rápidamente. Esto está sucediendo a pesar de que las especies latifoliadas tropicales no han jugado todavía un papel muy importante en la subclase de maderas industriales que crece más rápidamente: en la materia prima para pastas y en la fabricación de tableros aglomerados y de fibra. Ello está en cierto modo compensado en las regiones templadas por la reducción en el empleo de postes, ademes, etc.

El Cuadro 3 indica la evolución de las extracciones mundiales de toda la madera industrial, con excepción de los rollizos para aserrío y para chapas. Es obvio el papel relativamente reducido y la posición de cierto estancamiento de las extracciones de latifoliadas tropicales.

El componente de pasta de madera de este grupo de extracciones ha aumentado muy rápidamente, en el plano mundial, duplicándose con creces, desde 150 millones de m3 en 1954 a 312 millones de m3 en 1973, y subió a 340 millones de m3 en 1974. La parte residual, o sea postes cortos y largos, etc., ha aumentado lentamente. Pero esta evolución se ha limitado principalmente a las regiones templadas. De lo que se indica bajo latifoliadas tropicales, solamente 6 millones de m3 corresponden a madera para pasta, y la mitad de este valor proviene de madera plantada de especies no tropicales. Por lo tanto, la gran masa de las extracciones de latifoliadas tropicales incluidas en esta categoría se emplea para postes cortos y largos y maderas en rollo diversas, para otros usos.

CARGA DE TROZAS EN GABÓN se cambian las estructuras geográficas

El creciente papel de las especies latifoliadas tropicales es más visible en la categoría de trozas para aserrío, chapas y contrachapados, que figuran en el Cuadro 4, que el incremento de la madera industrial en su conjunto.

Es interesante comparar las extracciones de madera en 1973 por grupos de especies maderables con la correspondiente reserva en crecimiento estimada - el volumen de la madera en pie. Esto se ve en el Cuadro 5.

Las extracciones de madera industrial se comparan con las existencias en formación en bosques cerrados sólo porque las trozas para aserrío, para chapas y muchas de las maderas industriales diversas - con algunas excepciones notables, pero relativamente pequeñas - provienen de este tipo de bosques. Por otro lado, una gran cantidad de leña proviene de tierras forestales que no son bosques cerrados. Por lo tanto, las extracciones totales de madera, inclusive la leña, se indican en el cuadro relacionado con las existencias en formación en el bosque cerrado y en las tierras forestales. El cuadro indica claramente las relaciones siguientes:

1. La amplitud de grados de utilización en diversas regiones, y entre leña y madera industrial.

2. El predominio de madera industrial en las extracciones de los bosques de coníferas (Erfurth y Rusche, 1973).

3. El predominio de la leña en las extracciones de los bosques de latifoliadas de las regiones tropicales.

CUADRO 1. - EXTRACCIONES MUNDIALES DE MADERA



1950

1954

1960

1970

1973

Millones de m3

Total

1 377 (100%)

1 745 (100%)

2 057 (100%)

2 389 (100%)

2 501 (100%)

Coníferas

716 (52%)

858 (49%)

947 (46%)

1 082 (45%)

1 122 (45%)

Latifoliadas de las cuales:

661 (48%)

887 (51%)

1 110 (54%)

1 308 (55%)

1 379 (55%)

Latifoliadas tropicales

255 (19%)

472 (27%)

642 (31%)

829 (35%)

904 (36%)

CUADRO 2. - EXTRACCIONES MUNDIALES DE MADERA INDUSTRIAL



1950

1954

1960

1970

1973

Millones de m3

Total

727 (100%)

876 (100%)

1 036 (100%)

1 276 (100%)

1 345 (100%)

Coníferas

561 (77%)

666 (76%)

769 (74%)

909 (71%)

948 (70%)

Latifoliadas de las cuales:

166 (23%)

210 (24%)

267 (26%)

367 (29%)

397 (30%)

Latifoliadas tropicales

36 (5%)

57 (7%)

72 (7%)

121 (9%)

147 (11%)

4. El nivel relativamente alto de extracciones en bosques de latifoliadas de regiones templadas. (Se aplican las observaciones de apartado 2.)

5. El reflejo dé los menores niveles de utilización en los bosques menos accesibles y más extensos de la U.R.S.S. (para coníferas) y de América Latina (para latifoliadas).

6. La alta intensidad de empleo en el Japón y Europa.

7. La intensidad relativamente alta de empleo en la región Asia-Pacífico con respecto a otras áreas tropicales.

8. La posición intermedia de América del Norte para coníferas y de Africa para las especies latifoliadas.

El hecho que se pone más en evidencia en el Cuadro 5 es el muy bajo nivel de extracciones de madera industrial en los bosques de latifoliadas tropicales, especialmente en América Latina y Africa.

Se acepta corrientemente, sin embargo, que las extracciones de madera industrial en superficies de corta en los bosques húmedos tropicales se limitan, por lo general, a una porción de las existencias en formación, selecta y a menudo pequeña, mientras muchas especies, clases y tamaños quedan sin cortar. A veces, el rodal residual puede quedar como una reserva permanente en crecimiento para futuras cortas después de un periodo de crecimiento. Pero es mucho más común que resulte un bosque no comercial y no deseado que origina un uso no satisfactorio del suelo, o que se abandona para agricultura poco intensiva. En algunos casos, estas superficies taladas pueden transformarse en parte de una reserva para futura agricultura de carácter más intensivo.

En el bosque tropical higrofítico de Africa occidental, las existencias en formación pueden variar de 100 a 800 m3: ha. Para grandes superficies de bosques maduros, el promedio de las existencias en formación gira alrededor de 250 y 300 m3/ha. Pero el volumen de madera comercial que en realidad se extrae varia normalmente entre 5 y 30 m3/ha, si bien puede alcanzar a 60 m3/ha en algunos casos. (Erfurth y Rusche, 1973). El volumen de los arboles por arriba de los diámetros normales de corta (aproximadamente de 60 cm) es muy superior, del orden de 50 a 150 m3/ha. La discrepancia surge de especies comúnmente no empleadas o de poco uso.

Debe observarse que las significativas cortas que aparecen para la categoría de otros países, tanto en la clase de coníferas industriales como en la de leña, sea de coníferas que de latifoliadas, deriva en gran parte de la China. Tanto las estimaciones de las cortas como las de las existencias en formación han sido hechas por la FAO, por lo que es posible que sea equivocada la relativa alta proporción de cortas sobre las existencias en formación.

En partes del sudeste de Asia insular, la situación es muy diversa, con mayor proporción de especies comúnmente deseadas en las existencias en formación. Por ejemplo, en Sabah, partes de las Filipinas e Indonesia, los dipterocarpos representan casi el 80% del volumen del rodal. En estos casos, el volumen extraído por hectárea puede variar de 50 a 60 m3, con amplitudes que van de 20 a 100 m3. En otras partes de la región, el volumen medio cortado es inferior, por ejemplo, con un promedio de 40 m3/ha en Malasia occidental. Los volúmenes unitarios por superficie, en el sudeste de Asia globalmente, son por lo común del mismo orden que en Africa occidental, pero los volúmenes unitarios comerciales aceptados pueden ser superiores.

Otro contraste se halla con los bosques amazónicos, que son muy complejos y heterogéneos. Aun en superficies relativamente y de las que deriva gran parte de la madera industrial cortada, el volumen talado y extraído varia, en promedio, entre sólo 5 a 10 m3/ha (IBDF).

CUADRO 3. - EXTRACCIONES MUNDIALES DE MADERA PARA PASTA Y MADERAS INDUSTRIALES DIVERSAS



1950

1954

1960

1970

1973

Millones de m3

Total

280 (100%)

319 (100%)

389 (100%)

516 (100%)

516 (100%)

Coníferas

223 (80%)

251 (79%)

282 (72%)

360 (70%)

345 (69%)

Latifoliadas de las cuales:

57 (20%)

68 (21%)

107 (28%)

156 (30%)

182 (31%)

Latifoliadas tropicales

10 (4%)

16 (5%)

23 (6%)

34 (7%)

38 (7%)

CUADRO 4. - EXTRACCIONES MUNDIALES DE TROZAS PARA ASERRIO Y PARA CHAPAS



1950

1954

1960

1970

1973

Millones de m3

Total

447 (100%)

557 (100%)

647 (100%)

760 (100%)

832 (100%)

Coníferas

338 (76%)

415 (75%)

487 (75%)

549 (72%)

594 (71%)

Latifoliadas de las cuales:

109 (24%)

142 (25%)

160 (25%)

211 (28%)

238 (29%)

Latifoliadas tropicales

26 (6%)

41 (7%)

49 (8%)

87 (11%)

109 (13%)

CUADRO 5. - EXTRACCIONES DE MADERA EN 1973 EN RELACION A LA RESERVA EN CRECIMIENTO

Grupos de especies

Región

Existencias en formación en bosques cerrados

Extracción de madera industrial

Extracción de en las existencias en formación1

Extracción en formación en bosques y tierras forestales

Extracción total de madera

Extracción de existencias en formación



1 000 millones de m3

Millones de m3

Por ciento

1 000 millones

Millones de m3

Por ciento

Todos

Mundial

287

1 345

0,5

323

2 501

0,8

Coníferas






Mundial

107

948

1,0

113

1 122

1,1

Japón

1,1

25

2,5

1,1

25

2,5

Europa

9,5

200

2,3

9,5

212

2,5

América del N.

27

377

1,6

27

380

1,6

U.R.S.S.

61

264

0,5

67

319

0,5

Otros

8,4

82

1,1

8,4

186

2,5

Latifoliadas

Mundial

180

397

0,2

210

1 379

0,7

Templadas







35

250

0,7

38

475

1,3

Japón

0,9

117

1,9

0,9

18

2,0

Europa

5,4

71

1,3

5,4

107

2,0

América del N.

9,5

86

0,9

9,5

100

1,1

U.R.S.S.

12

34

0,3

12

64

0,5

Otros

7,5

42

0,6

10

186

1,9

Tropical





145

147

0,1

172

904

0,5

Asia, Lejano Oriente

25

87

0,3

27

406

0,5

Africa

42

31

0,1

60

269

0,4

América Latina

78

29

0,04

85

229

0,3

1Las existencias en formación de coníferas reducidas de un 10% para tener en cuenta la corteza, lo que no se hace con las latifoliadas, ya que la mayoría de las estimaciones excluyen la corteza.

El problema básico es el grado de utilización de las especies, tamaños y cualidades realmente utilizadas en mayor consonancia con lo que existe en el bosque, problema que no da oportunidad a una mejor ordenación de los bosques tropicales húmedos - sea que se destinen a explotación, agotamiento o conversión a otros usos, o que se mantengan para un bosque de producción continua.

Desarrollo de las estructuras de la producción, consumo y comercio

América Latina, que en 1950 proveía casi la mitad de las cortas de madera industrial de latifoliadas tropicales, alcanzó sólo el 18% en 1973. Las exportaciones de trozas de esta región nunca han tenido un papel importante, si bien las de maderas aserradas han crecido bastante rápidamente y, junto con las de chapas y contrachapados, las exportaciones pueden representar la décima parte de la producción de trozas. No sólo Brasil, sino también Paraguay, Colombia y Perú han contribuido sustancialmente al crecimiento de las exportaciones de productos transformados. Sin embargo, América Latina en el conjunto, es y ha sido predominantemente autoconsumidora regional de su producción de trozas, siendo la mayor parte de las exportaciones intrarreglonales. Paraguay, que antes exportaba rollizos en bruto a Argentina, ha mejorado sus exportaciones en los últimos años en forma de madera aserrada.

Después de la Segunda Guerra Mundial, las exportaciones de maderas tropicales de Africa occidental y central a Europa han evolucionado bastante rápidamente. Las exportaciones de rollos para aserrío y chapas aumentó muy rápidamente, alcanzando en 1960 un nivel máximo de mucho más de la mitad de la producción. Los principales participantes al crecimiento inicial de la producción y exportación fueron Gabón, Nigeria, Ghana y Zaire. Hacia principios del decenio de 1960-1969, las exportaciones de trozas de Ghana y Nigeria llegaron al máximo, comenzando a declinar mientras aumentaban la producción y exportación de madera aserrada y contrachapados. La producción de Zaire ha quedado relativamente estática. Gabón ha continuado a aumentar su producción y exportación de trozas, mientras sus exportaciones de chapa y contrachapados se expendieron rápidamente. A principios del decenio de 1960-69, fue superada por la exportación de trozas rápidamente en expansión de Costa de Marfil, que amplió también su producción y exportación de madera aserrada y chapas, llegando a ser el más importante exportador africano de productos tropicales de la madera, delante de Gabón y de Ghana. Nigeria ha mantenido un alto nivel de producción de trozas, pero ha guardado una parte progresivamente mayor de su producción para uso doméstico de madera aserrada y contrachapados. El Congo en los últimos 10 años mas o menos, ha mantenido una posición importante como exportador de trozas y de chapas. Más recientemente, los Camerún se unieron a los mayores exportadores de trozas y de chapas. Desde 1950 a 1974, la participación de Africa en las extracciones de maderas industriales de latifoliadas tropicales ha permanecido en la quinta parte de los totales mundiales.

Es en la región Asia-Pacífico donde tuvieron lugar los cambios más espectaculares en la industria maderera tropical y su comercio. La participación de la región en las extracciones industriales de latifoliadas ha aumentado, de casi una tercera parte en 1950, a tres quintos en los últimos años. Las exportaciones de trozas han aumentado desde un nivel muy bajo en 1946, a un 8% de las cortas de trozas en 1950. En 1973, la cuota exportada aumentó a más de la mitad, mientras que las exportaciones de madera aserrada, chapas y contrachapados representaron otra quinta parte.

Sabah, Indonesia y Filipinas surgieron como exportadores de trozas al final del decenio de 1940-49. Las exportaciones de Filipinas han dominado el comercio regional desde 1950 a 1966, cuando las extraordinarias rápidas expansiones de las exportaciones de Sabah, combinadas con las de Sarawak y Malasia occidental, hicieron de Malasia la exportadora más importante en el mundo de trozas tropicales de latifoliadas.

Otros países, incluyendo India, Tailandia y Birmania, hicieron importantes cortas de maderas industriales tropicales de latifoliadas, pero con modestas exportaciones, orientando relativamente mas la producción hacia la elaboración para los mercados locales y de exportación.

A partir de 1967, Indonesia ha crecido mucho como exportadora de trozas con niveles máximos en 1973. En el reciente decenio, las Salomón, Papua Nueva Guinea y otras pequeñas islas desarrollaron el comercio de exportación de trozas.

Corrientes iniciales de comercio

Antes de 1950, las iniciales corrientes de comercio importantes eran trozas de Africa occidental a Europa, especialmente al Reino Unido y a Francia, pero también desde Ghana y Filipinas a los Estados Unidos. El comercio de productos elaborados era limitado. A principios de la década de 1950-59, esta corriente de exportación de trozas creció con la República Federal de Alemania, transformándose en otro principal importador. Durante este periodo, las exportaciones de madera aserrada de Africa occidental y de Malasia al Reino Unido, y desde las Filipinas a los Estados Unidos, fueron importantes. Pero el hecho más sorprendente fue el rápido crecimiento de las importaciones de trozas del Japón, especialmente desde las Filipinas, como materia prima para aserrío y compensados, de la cual una parte del aserrado y gran parte del compensado se exportaban a Estados Unidos, al Reino Unido y a otros lugares. Al mismo tiempo, ha habido una importante exportación de madera aserrada desde Malasia, Filipinas y Tailandia. Estos hechos se han intensificado en las postrimerías de la década de 1950-59 hacia otros países europeos, que se transformaron en grandes importadores de trozas.

Hong Kong se ha convertido también en un importante importador de trozas para ser elaboradas para uso doméstico. Al mismo tiempo, otros países de Asia oriental, tales como la República de Corea, siguieron el ejemplo japonés y se transformaron en importadores de trozas de latifoliadas tropicales, convirtiéndolas en contrachapados, especialmente para exportación. Singapur, al principio como parte de Malasia y luego como país independiente, ha seguido también este ejemplo, especialmente para madera aserrada, pero también para contrachapados. Las exportaciones de Japón de madera aserrada han ido reduciéndose a partir de 1964, y los contrachapados a partir de 1968, a pesar de la rápida y continua expansión de la producción, debido al rápido crecimiento del consumo interno.

El desarrollo más espectacular de la región ha sido el aumento en Indonesia de las talas de trozas de latifoliadas para aserrío y chapas, que pasaron de 5 a 25 millones de m3 desde 1967 a 1973, con un aumento paralelo de las exportaciones de 0,5 a 20 millones de m3. Pero las exportaciones de madera aserrada latifoliada crecieron de una cifra insignificante, a sólo 138 000 m3, y las exportaciones de chapas y de contrachapados son todavía insignificantes. La gran mayoría de las trozas fueron al Japón y otros países de Asia oriental templada.

Un pequeño, pero significativo, desarrollo creciente es el aumento de las exportaciones de madera para pasta (hasta casi I millón de m3), especialmente en forma de astillas, desde Malasia oriental y occidental al este de Asia.

Los Cuadros 6 a 9 resumen, por principales regiones, el desarrollo de la producción, comercio y consumo para el periodo 1950 a 1974. La situación de 1973 se destaca en los cuadros, por ser el nivel máximo reciente de la producción y el comercio.

El Cuadro 6, resume por principales productos, la producción y exportación para las tres regiones productoras tropicales. Se excluyen del cuadro los exportadores de los países importadores-transformadores, como Singapur y la República de Corea.

El Cuadro 7 resume las evoluciones en el consumo de madera industrial latifoliada, que viene de países predominantemente tropicales.

Mientras la producción de madera industrial latifoliada tropical se ha cuadruplicado en los últimos 25 años, el consumo final de las regiones productoras ha crecido menos rápidamente (a dos veces y media). En la mayoría de las regiones importadoras, el consumo ha aumentado 13 veces desde los niveles de 1950.

Las regiones importadoras han aumentado su consumo de maderas duras tropicales en la categoría de trozas para aserrío y producción de chapas. En 1950, éstas representaban aproximadamente la quinta parte del consumo de la producción total. En 1973, consumieron más de la mitad de las trozas producidas. En contraste, el consumo de otras clases de madera industrial - compuesta en su mayoría por postes cortos, largos y algo de madera para pasta - tiene lugar casi completamente en las regiones productoras.

El Cuadro 8 indica, para las principales regiones importadoras, el con sumo total de madera industrial de todo tipo y la cantidad proporcionada por especies latifoliadas tropicales. Se ve que en las tres regiones, desde 1950 a 1970, el consumo total de madera industrial aumentó consistentemente, si bien el índice de crecimiento fue mas notable para el Japón (más del 300%) y mas modesto para los Estados Unidos (aumento del 35%). Europa, en una posición intermedia (aumento de más del 100%), sobrepasó el consumo de los Estados Unidos. Las tres regiones muestran aumentos muy rápidos de las importaciones de maderas tropicales. Estado Unidos y Europa aumentaron las importaciones en 1973 a 9 veces los niveles de 1950, pero, para el Japón, el nivel de 1973 fue 19 veces mayor que las importaciones de este país en 1950.

Importante aumento del volumen para satisfacer los niveles de consumo

Como consecuencia de estos acontecimientos, las tres regiones dependen mucho de las importaciones de maderas duras tropicales para satisfacer sus niveles de consumo. En 1973, más del 25 % del consumo del Japón dependía de las maderas tropicales. En Europa, la proporción fue del 4,5 %, pero en los Estados Unidos estaba todavía por debajo del 2 %. En las tres regiones, las maderas duras tropicales representan una participación creciente de un consumo progresivamente mayor, pero la dependencia relativa de las tres regiones es muy diferente.

El Cuadro 9 indica para las principales regiones y para el año tope de 1973, expresado en equivalente en trozas: (a) la producción, el comercio neto y el consumo de trozas; (b) la utilización de trozas para aserrío chapas y contrachapados, y el comercio neto y consumo de estos productos. Se observa el detalle sobre los origenes de los recursos y su utilización, correspondiente a los 109 millones de m3 del rubro «trozas para aserrío para chapas y sus productos» indicado en el Cuadro 7 para el consumo de 1973. La agrupación por países en los dos cuadros no es idéntica, porque la región referida por «países en desarrollo importadores y transformadores para la exportación» es en parte tropical y en parte templada.

Algunos aspectos interesantes surgen del cuadro de la producción y uso:

1. Sólo el 55 % del volumen en trozas fue transformado en los países productores tropicales primarios, mientras el resto se exportaba.

2. Otro 12 % se exportaba a otros países en desarrollo para ser transformado, resultando que más de la mitad del volumen elaborado se exportaba a su vez.

3. Japón ha importado en trozas la mayor parte de su consumo de maderas tropicales; Europa, poco más de la mitad en trozas, mientras que América del Norte importó esencialmente sólo madera elaborada.

4. América Latina ha elaborado casi toda su producción en trozas y consumido la mayor parte de los productos en la región.

5. Africa tropical consumió sólo la tercera parte de su producción, con un gran volumen exportado en estado bruto.

6. La región Asia-Pacífico consumió la tercera parte de su producción, exportó una parte considerable como madera elaborada, pero exportó más de la mitad en trozas.

7. El consumo de las regiones tropicales fue predominantemente en madera aserrada, mientras que las regiones templadas usaron más de la mitad en chapas y contrachapados.

En varios estudios básicos se ha analizado el consumo futuro de productos forestales, y algunos han tenido en cuenta el posible papel de la madera tropical.

En un análisis (Ministerio de Agricultura y Montes del Japón, 1973) aprobado por el Consejo del Gabinete en 1973, se anticipó el consumo del Japón, la mayor región consumidora de madera industrial, aumentando el nivel de 100 millones de m3 para 1969-71, a 153 millones de m3 en 2021, pero se estima que el abastecimiento local de madera llegará a ser más del doble en el mismo periodo, llegando a 94 millones de m3. Ello significa que las importaciones continuarán a ascender hasta cerca de 1986, para ir decayendo posteriormente. Los requisitos de importación indicados son de 85 millones de m3 para 1981, 89 millones en 1991, pero sólo 59 millones de m3 en 2021. No hay una indicación clara sobre el tipo de productos o surtido de especies que se prevé serán importados, pero puede suponerse que las grandes trozas, o sus productos, serán los más buscados. Las estimaciones de la demanda son mucho más modestas que las que aparecen en un estudio de mercado hecho por la FAO en 1971.

El trabajo en curso sobre un Estudio de las tendencias y perspectivas madereras, para 1950-2000, de la Comisión Económica para Europa (CEPE), indica que, para Europa, habrá dificultades para satisfacer la demanda proyectada al año 2000 con el aumento de la producción local, incluyendo el uso de residuos y reciclajes, combinados con importaciones. Las estimaciones preliminares sobre posibles importaciones de los bosques tropicales existentes se fijaron para el año 2000 en 25 a 35 millones de m3, equivalente de madera en rollo, que se compara con los 17 millones de m3 importados en 1973.

The outlook for timber in the United States, publicado en 1973, por el Servicio Forestal de los Estados Unidos, prevé que el consumo de 1970 de 360 millones de m3 aumente para el año 2000 a niveles de 546 a 645 millones de m3, de acuerdo con las previsiones hechas sobre los precios. De ello, alrededor del 30% sería madera dura con trozas para aserrío y chapas, o sus productos, que alcanzarían 50-70 millones de m3. Sin embargo, a pesar de las recientes tendencias ascendentes, se estima que las importaciones de latifoliadas aumentarán sólo en forma modesta, hasta un nivel de 11- 17 millones de m3 para el año 2000, siguiendo las hipótesis sobre los precios.

Recientes estudios hechos por el Banco Mundial sobre el comercio de maderas latifoliadas tropicales también hacen las proyecciones de la demanda de esta categoría de madera. Un estudio para la región Asia-Pacífico (Takeuchi, 1974) hace las proyecciones de la demanda a partir de los niveles de 1968, hasta los años 1975, 198O y 1985. Las proyecciones para 1975 fueron superadas por los topes máximos de 1973, pero sobrestiman considerablemente los niveles reducidos de 1975. Las necesidades mundiales, por categoría de trozas, se proyectaron a 123 y a 144 millones de m3, para 1980 y 1985 respectivamente, con 53 y 61 millones de m3 para la demanda proyectada para las mismas áreas productoras tropicales. Un estudio más reciente, aún en curso, reconoce el consumo de 1973 y proyecta niveles algo más altos, con excepción del caso de los Estados Unidos.

CUADRO 6. - PRODUCCION Y EXPORTACION DE TROZAS DE MADERA DURA TROPICAL Y SUS PRODUCTOS POR PRODUCTORES PRlMARIOS1



1950

1960

1970

1973

1974

Millones de m3 en unidades de producto

PRODUCCION






TROZAS

26

49

87

109

108

Asia-Pacífico

10

26

54

72

71

América Latina

12

14

18

20

19

Africa

4

9

15

18

18

MADERA ASERRADA1

8

15

22

25

24

Asia-Pacífico

4,2

7,9

11,4

14,1

13,1

América Latina

3,3

5,9

7,6

7,9

7,9

Africa

0,7

1,6

2,6

2,9

3,0

CHAPAS1

s.d.

0,2

0,6

1,1

1,1

Asia-Pacífico

s.d.

0,1

0,2

0,5

0,5

América Latina

s.d.

-

0,2

0,2

0,2

Africa

s d.

0,1

0,1

0,4

0,4

CONTRACHAPADO1

0,3

0,7

1,9

3,0

2,9

Asia-Pacífico1

0,1

0,3

0.9

1,6

1,4

América Latina

0,2

0,3

0,7

1,1

1,1

Africa

-

0,1

0,2

0,3

0,3

EXPORTACION






TROZAS

2,6

12

35

49

43

Asia-Pacífico

0,8

6,7

28,1

40,3

36,2

América Latina

0,5

0,3

0,4

0,5

0,2

Africa

1,3

4,8

6,6

8,4

6,7

MADERA ASERRADA1

1,2

1,8

3,1

4,6

4,4

Asia-Pacífico

0,7

1,1

1,8

2,8

2,6

América Latina

0,3

0,2

0,5

0,9

0,9

Africa

0,2

0,5

0,8

0,8

0,9

CHAPAS1

-

0,1

0,4

0,6

0,5

Asia-Pacífico1

-

0,1

0,2

0,2

0,2

América Latina

-

-

-

0,1

0,1

Africa

-

-

0,2

0,3

0,2

CONTRACHAPADO1

-

0,2

0,8

1,0

0,6

Asia-Pacífico1

-

0,1

0,6

0,8

0,4

América Latina

-

-

0,1

0,1

0,1

Africa

-

0,1

0,1

0,1

0,1

1No incluye la producción y las exportaciones de países que importan trozas, elaborándolas y reexportándolas, como Singapur y la República de Corea.

CUADRO 7. - CONSUMO POR REGION DE MADERA INDUSTRIAL QUE NO ES DE CONIFERAS, ORIGINADA EN PAÍSES TROPICALES

Grupo de producto y región

1950

1960

1970

1973


Equivalente en trozas en millones de m3

TROZAS PARA aserrío PARA CHAPAS Y SUS PRODUCTOS, TOTALES

26

49

87

109

A. Principales regiones importadoras (Japón. América del Norte, Europa)

4

13

36

53

Otras regiones importadoras

1

2

4

5

Regiones tropicales

21

34

47

51

B. Otra madera industrial

110

23

34

38

Principales regiones importadoras

-

-

1

1

Regiones tropicales

110

23

33

37

C. Total de madera industrial y productos

36

72

121

147

Principales regiones importadoras

4

13

37

54

Otras regiones importadoras

1

2

4

5

Regiones tropicales

31

57

80

88

1Se acepta ahora que son valores muy subestimados.

CUADRO 8. - UTILIZACION DE MADERAS TROPICALES POR PRINCIPALES REGIONES IMPORTADORAS


1950

1960

1970

1973


Equivalente en trozas en millones de m3

CONSUMO APARENTE DE TODA LA MADERA INDUSTRIAL





Japón

26,0

51,8

102,7

110,0

Estados Unidos

281

287

345

379

Europa

1177,7

2241,6

3339,6

385,1

Total 3 regiones

485

580

787

874

IMPORTACION DE MADERA TROPICAL EN EQUIVALENTE DE MADERA INDUSTRIAL





Japón

1,5

4,6

20,1

28,9

Estados Unidos

8.8

2,2

5,2

7,2

Europa

11,9

26,2

310,5

17,2

Total 3 regiones

4,2

13,0

35,8

53,3

IMPORTACION EN PORCENTAJE





Japón

5,8

8,9

19,6

26

Estados Unidos

0,3

0,8

1,5

1,9

Europa

1,1

2,6

3,1

4,5

Total 3 regiones

0,9

2,2

4,5

6,2

1Promedios 1949-51.
2Promedios 1959-61.
3Promedios 1969-71.

CUADRO 9. - PRODUCCION APROXIMADA Y ESQUEMA DE UTILIZACION DE TROZAS DE MADERA DURA TROPICAL Y SUS PRODUCTOS, 1973

Un documento (Pringle, 1973) sometido a la reunión de la Fundación Alemana para el Desarrollo Internacional, en colaboración con la FAO, sobre «Propiedades, usos y mercadeo de las maderas tropicales», hace proyecciones del comercio de maderas latifoliadas tropicales de clases de trozas a 1980 y 1990. Se insinúa que el comercio desde las regiones productoras de maderas tropicales a otras regiones del mundo aumentara hasta 75 y 100 millones de m3 en esos años.

Proyecciones recientes hechas por la FAO, parcialmente publicadas por el momento, cubren todas las regiones y todos los productos hasta 1981 y 1991.

Sobre la base de las proyecciones vistas anteriormente, se presenta en el Cuadro 10, una estimación provisional sobre la posible «demanda» en décadas, hasta el fin de siglo. No se pretende distinguir el consumo por tipo de producto o analizar las importaciones por grado de transformación. Se hace, sin embargo, la suposición de que una parte progresiva y rápidamente mayor de trozas serán transformadas en su origen. Este tema será tratado más adelante.

La producción, y especialmente las exportaciones, de madera latifoliada tropical y de sus productos se han concentrado mayormente en muy pocos países. Seis países, cada uno con extracciones de trozas para aserrío y para chapas de más de 5 millones de m3, representaron en 1973 más del 70% de la producción total, mientras que otros 8 países, con una producción superior a 1 millón de m3, llevaron el total al 90 % Solamente 6 países fueron responsables de las exportaciones de casi el 90 % de las trozas, 5 de tres cuartas partes de la exportación de madera aserrada, y 4, de los cuales 3 son importadores de trozas, del 90 % de las exportaciones de contrachapado.

Catorce países productores tropicales fueron responsables de la mayor parte de la producción: Indonesia, Malasia, Filipinas, Brasil, India, Costa de Marfil, Colombia, Tailandia, Gabón, Ghana, Nigeria, Birmania, Madagascar y Costa Rica. Estos países, con otros 12 aproximadamente, cubren la mayor parte de la superficie y del volumen de los bosques húmedos tropicales del mundo. Algunos del segundo grupo, incluyendo Zaire, Perú, Bolivia, Papua Nueva Guinea y Camerún, poseen una superficie considerable de bosques, que, especialmente debido a problemas de accesibilidad, no han contribuido en la forma correspondiente a la producción y exportación mundial.

Revisando los informes nacionales, se observa que en pocos casos se ha evaluado cuantitativamente con respecto a las situaciones existentes y futuras del mercado, el potencial de producción a largo plazo de los bosques tropicales naturales. Los inventarios forestales nacionales, indicando por subzonas los volúmenes de madera en pie por especies, grados y tamaño, junto con una indicación de su accesibilidad para las cortas, son requisitos básicos para cualquier evaluación correcta de los potenciales a largo plazo destinados a proveer productos forestales de los bosques tropicales. Esta información debe ser confrontada con los volúmenes que son, o que pueden ser, cortados en las condiciones actuales o posibles del mercado y administrativas. Es necesario que esto se complemente con una evaluación de las superficies forestales y volúmenes que se pierden por la expansión planificada o sin control para la agricultura y otros usos de la tierra. Aun así, esta información es adecuada solamente para establecer de una vez las posibilidades de la explotación. Cualquier tentativo de evaluar las posibilidades del bosque para producción continua debe tener en cuenta las posibilidades de crecimiento de las especies, grado y tamaño y la relación de este tipo de datos con los sistemas actuales y probables de extracción. Sólo para muy pocos países se dispone, ano en la forma mas simple, de esta información para los bosques tropicales en su conjunto, mientras que se cree que no existe en ningún país tropical en especial una base para el análisis oportuno. El sencillo resumen que se indica a continuación, sin embargo, puede ser de ayuda para plantear la situación de la producción potencial futura con amplia perspectiva.

I. India, Nigeria, Ghana, Tailandia y Filipinas son países en los que existe una larga historia de explotación forestal tropical. Son proveedores tradicionales para la exportación, con facilidades considerables para la elaboración, tanto en los mercados locales como para la exportación. Sus recursos para la expansión son ahora limitados y actualmente se presta atención a la elaboración para las necesidades nacionales y a mayores valores para la exportación.

II. Sabah (Malasia), Gabón, Costa de Marfil han tenido una explotación extensiva en la última década, o las dos últimas, de trozas para exportación. Han explotado en exceso los bosques de forma sistemática y las superficies restantes son menos accesibles. El periodo para la futura explotación, sobre la base actual de las extracciones, es bastante limitado, es decir, uno o dos decenios.

III. Colombia, República del Congo, Zaire, Venezuela, Perú, Ecuador, Madagascar, Brasil, Indonesia, Sarawak (Malasia), Malasia Peninsular, Birmania y Camboya han experimentado una fuerte explotación en superficies accesibles, pero quedan aún considerables superficies no accesibles, no explotadas o poco cortadas.

IV. Papua Nueva Guinea, Bolivia, República Centroafricana, y Camerún han sido todavía poco explotadas, pero están caracterizadas por dificultad de acceso.

A menos que haya un cambio fundamental en las especies mismas y en las cualidades que llegan al mercado, parece evidente que a los países en (a) el primer grupo no proveerá trozas adicionales y que su participación a la exportación de productos forestales tropicales probablemente declinará en volumen, pero no necesariamente en valor; (b) el segundo grupo tendrá un período continuo corto, conservando (o aumentando) las exportaciones; (c) todo aumento importante en el abastecimiento, e incluso el mantener los niveles actuales, dependerá del tercero y del cuarto grupos.

Debido a sus superficies restantes, Indonesia, Zaire, Papua Nueva Guinea y la cuenca del Amazonas son de especial interés para que se pueda determinar su potencial productivo a largo plazo.

Algunas evaluaciones recientes, si bien de un carácter provisional y parcial, han tratado de considerar el potencial forestal y sus posibilidades de satisfacer la demanda a medio y a largo plazo.

Forest resources in Asia and Far East Region (FAO, 1976) presenta estimaciones por subregiones, para 1970, 1980 y 1990, del incremento anual neto y de los rendimientos sostenidos estimados para los bosques explotables. Esta información para las cuatro correspondientes subregiones tropicales, sur de Asia, Asia sudoriental continental, Asia sudoriental insular y Oceanía en desarrollo, está tomada de los bosques naturales explotables del Cuadro 10.

Debe observarse que estas estimaciones de rendimientos potenciales superan considerablemente, para las trozas, las estimaciones de la demanda indicadas en el Cuadro 11 para la región Asia-Pacífico, aun con el Japón, y añadiendo la categoría «resto del mundo». Ello hace pensar a un excedente en el balance para la porción tropical de la región. Un estudio de la FAO, que está por terminarse, sobre Tendencias y perspectivas forestales en Asia y el Lejano Oriente, indica, por subregión, las estimaciones de rendimiento para consumos proyectados para 1990, y resume los resultados de la siguiente manera:

CUADRO 10. - SITUACION PRESENTE Y PERSPECTIVAS DE LA OFERTA DE MADERA EN EL SUDESTE DE ASIA



1970

1980

1990

Millones de ha

SUPERFICIE DE BOSQUES NATURALES EXPLOTABLES

228

180

146

Crecimiento neto anual




(Industrial y leña)




Especies comerciales

215

299

372

Todas las especies

318

403

454

RENDIMIENTO SOSTENIDO ESTIMADO1




Especies comerciales

142

147

148

Todas las especies

215

200

185

Madera para pasta y leña (todas las especies)

150

156

170

Total de trozas, madera para pasta, leña (todas las especies)

365

356

355

1Incluye madera de plantaciones que totalizan 4, 19 y 43 millones de m3 en 1970, 1980 y 990 respectivamente.

SUR DE ASIA - deficiente en trozas para aserrío y leña.

SUDESTE DE ASIA CONTINENTAL - excedentes de trozas industriales y leña.

SUDESTE DE ASIA INSULAR - excedente de madera industrial; la leña puede limitar el abastecimiento de madera en rollo para 1990.

El estudio llega también a la conclusión que Asia oriental en desarrollo tendrá escasez de madera industrial en rollo, especialmente para la industria de la reexportación. Estas tres subregiones tropicales muestran un excedente considerable combinado (225 millones de m3) para madera industrial, pero un déficit combinado (20 millones de m3) para la leña.

Una «Evaluación de los recursos forestales de la región Latinoamericana», realizada como documento de base para el estudio de las «Tendencias y perspectivas forestales en América Latina: Informe Provisional», sometido al 12° período de sesiones de la Comisión Forestal Latinoamericana de la FAO, 1975, no trató de llegar a ninguna estimación del crecimiento en el bosque natural o de su productividad sostenida, por falta de datos. Este informe provisional concluye: «Es claro que para hacer una apreciación más completa del sector forestal en América Latina hay que obtener información acerca de la rapidez con que se están agotando los recursos y averiguar cuál es el equilibrio conveniente y posible entre el sector forestal y agrícola y entre la producción de la madera y otros usos del bosque. Sólo así será posible determinar la mejor manera de emplear el potencial restante para la producción de madera y de bienes y servicios no madereros, a fin de satisfacer las necesidades y contribuir al alcance de los objetivos de desarrollo de los países de la región».

Los trabajos de Persson que realiza el Swedish Royal College of Forestry, basados en la información reunida a través de la FAO, tratan de evaluar la futura producción potencial de los bosques de Africa, con respecto a la demanda actual y posible que se les aplica. Las evaluaciones provisionales, limitadas por falta de información y por la necesidad de establecer una cantidad de suposiciones imprecisas, lleva a la conclusión de que los bosques de Africa, posiblemente con excepción de los del Zaire, se verán en dificultad de satisfacer incluso la demanda local, al final de siglo, y que se necesitarán plantaciones para mantener los abastecimientos necesarios. Se hace hincapié sobre la conveniencia de establecer industrias de elaboración.

CUADRO 11. - PROYECCION DE LA DEMANDA PARA PRODUCTOS DE TROLAS DE MADERAS DURAS TROPICALES (en volumen equivalente de trozas)

Región

1973

1980

1990

2000


Millones de m3 ®

REGIONES PRODUCTORAS TROPICALES

46,5

66

117

185

Asia-Pacífico

24

30

48

70

América Latina

17

28

53

90

Africa

5,5

8

16

25

REGIONES IMPORTADORAS

62,5

79

98

118

Japón

28,9

35

38

40

Europa

17,2

21

27

35

Estados Unidos

7,2

10

15

20

Resto del mundo

9,0

13

18

23

Total

109

145

215

303

CUADRO 12. - ESTIMACION DEL ABASTECIMIENTO DE TROZAS TROPICALES DE MADERAS DURAS Y SUS PRODUCTOS (en volumen equivalente de trozas)

Región

1973

1980

1990

2000

Asia-Pacífico

72,5 (48,5)

93 (65)

130 (82)

150 (80)

América Latina

20 (3)

32 (4)

60 (7)

18 (28)

Africa

16,5(11)

20 (12)

25 (9)

35 (10)

Total de las regiones productoras tropicales

109 (62,5)

149 (79)

215 (98)

303 (118)

Las cifras sin paréntesis indican la producción de trozas; las cifras entre paréntesis indican las exportaciones de trozas y de sus productos.

En las tres principales regiones tropicales hay una gran cantidad de maderas tropicales mixtas que pueden utilizarse para pasta. En general, la cantidad no es un factor limitante para ampliar significativamente la utilización. El problema básico que subsiste parece ser económico: el de asegurar una corriente de una mezcla relativamente uniforme de diferentes especies para fábricas de pasta. Otros documentos técnicos tratan de los diversos aspectos del empleo para pasta. Cualquier evaluación global de la situación de la demanda y de la oferta debe esperar hasta hallar una solución ulterior de la situación.

Tres puntos principales surgen de esta evaluación imprecisa del potencial futuro de los bosques tropicales húmedos del mundo:

1. Hay muchas superficies donde la contribución forestal al abastecimiento mundial de trozas para aserrío y chapas debe nivelarse o reducirse.

2. Es urgente ampliar la gama de especies, clases y tamaños empleados.

3. Es muy limitado el conocimiento de las restantes superficies de producción potencial, lo que elimina el considerar un potencial a largo plazo, a menos que sea muy esquemático.

CAOBA DE LA COSTA DE MARFIL una fuente importante de divisas

El Cuadro 12 proporciona una idea muy provisional de cómo el abastecimiento de trozas y la exportación de las mismas, o de sus productos, pueden ser atendidos para responder a las exigencias de la demanda estimada en el Cuadro 11. Gran parte de los aumentos de la exportación, hasta 1980 y 1990, se prevé que vendrán de la región Asia-Pacífico, con Indonesia y Papua Nueva Guinea que absorben la mayor parte de los incrementos. Se supone que Africa mantendrá los mismos niveles de exportaciones, con aumentos de producción destinados principalmente a satisfacer la demanda regional. Se presume que así también será la situación para América Latina hasta 1990, después de lo cual se estima que el aumento de la demanda mundial y los precios mas altos permitirán a las especies más variadas del Amazonas de participar de manera más amplia a la oferta mundial. A fin de que este esquema de la oferta se concrete, es necesario que se emplee una gama mucho más amplia de especies, clases y tamaños de maderas tropicales.

Cualquier evaluación de la situación de la demanda y de la oferta para los próximos 25 años esta sujeta a una multitud de posibles suposiciones erróneas y a una interpretación de las tendencias que puede ser enormemente transformada por cambios tecnológicos y por decisiones políticas. El papel importante y creciente de los bosques tropicales para suministrar madera para la demanda mundial justifica claramente indicadores continuos y frecuentes reevaluaciones de las perspectivas y problemas futuros.

La exportación de productos forestales ha sido un importante ingreso para el productor y los beneficiarios de divisas en los países tropicales ricos en maderas. Los países en desarrollo, en total, aumentaron los valores de las exportaciones de productos forestales desde un promedio de 277 millones de dólares EE.UU. en 1953-55, a 3 571 millones de dólares en 1974. De los valores de exportación de 1974, el 84% resultó de productos en trozas de maderas duras; trozas de que no eran de coníferas (57%), madera aserrada que no era de coníferas (14%) Y chapas y contrachapados (13%). La mayor parte de este valor de exportación - superior al 90%, - se derivó directamente de las exportaciones de madera de países predominantemente tropicales, si bien una parte importante (alrededor de 400 millones de dólares) resultó de transformar y exportar, por parte de países en desarrollo de Asia oriental templada, contrachapados y madera aserrada hechos con trozas, que no eran de coníferas, importadas. Una parte importante del aumento del valor de exportación provino, sin embargo, de la inflación de precios del período 1973-74. El valor unitario medio de exportación de trozas que no eran de coníferas provenientes de países en desarrollo, aumentó de 38 a 87 dólares desde 1972 a 19,4; la madera aserrada de latifoliadas de 62 a 107 dólares, y el contrachapado de 134 a 207 dólares.

Renta y empleo

En ocho países tropicales, las exportaciones de productos forestales superaron en 1974 los 200 millones de dólares y otros tres sobrepasaron los 100 millones. Malasia (incluyendo Sabah y Sarawak) figuran en primer lugar, con 723 millones de dólares, seguidos por Indonesia con 679 millones. En Sabah y Gabón, con su reducida población de menos de 1 millón, las exportaciones de productos forestales contribuyeron respectivamente con 482 y 279 dólares en los ingresos per cápita. En la Costa de Marfil, la cifra correspondiente es de 69 dólares; en Ghana, de 9 dólares, en Indonesia, de 5 dólares, y en Brasil, de 2 dólares.

Durante el período 1950-74, la proporción de trozas de madera dura tropical producidas, y que fueron transformadas en el país de origen, disminuyó si bien, cuando se toma en cuenta la exportación de países con vertidores-exportadores dentro de la misma región en desarrollas, ha cambiado poco la proporción relativa de trozas y de madera aserrada elaborada, chapas y contrachapados importados por la región desarrollada. América Latina, que sólo contribuye poco en el total de las exportaciones, es una excepción en este esquema general, con creciente cantidad de trozas que se transforman en los países de origen.

Elaboración local

Generalmente se critica la política de la exportación de las trozas al perderse el valor agregado por la transformación en perjuicio de la economía del país productor. El nivel corriente de valor agregado es del orden de 30 a 50 dólares por m3 de trozas para aserrío y chapas, y de 40 a 80 dólares por m3 de trozas para contrachapados. Podría argumentarse que los 49 millones de m3 exportados en bruto en 1973 de los países proveedores podrían haber generado otros 2 000 millones de dólares, o más, a estos países en valor de productos, proporcionando varios cientos de miles de hombresaño de empleo, así como una infraestructura y capital para la fábrica. Son también conocidos los argumentos que apoyan la lógica del actual sistema de mercado. Frecuentemente, poblaciones pequeñas limitan el disponer de personas capacitadas, la posibilidad de establecer infraestructuras y un mercado local para clases normalizadas de productos. Este puede bien ser el caso de Gabón o de Sabah, por ejemplo.

Un principal elemento que favorece la exportación de trozas ha sido, por supuesto, la protección tarifaria, a menudo establecida por los transformadores, en los países importadores. Gran parte del efecto de estas barreras ha sido, sin embargo, superado por el Sistema Generalizado de Preferencias, que favorece a los países en desarrollo. Trozas y madera aserrada de especies tropicales han estado generalmente libres de tarifas. Las tarifas sobre las chapas han sido suprimidas en muchos casos, si bien pueden aún ser apreciables, y de hasta el 37,5 % Los contrachapados, también, pueden estar libres de tarifas, si bien existen todavía tasas elevadas de hasta el 50%, y ha habido menos generosidad en ofrecer concesiones a este producto. Debe observarse, sin embargo, que los Estados Unidos, que han tenido tarifas bastante altas sobre las chapas y contrachapados, han importado casi exclusivamente productos de maderas tropicales y prácticamente nada de trozas tropicales.

La continua existencia de fábricas en los países importadores, que dependen del exterior para la materia prima, ha perpetuado por supuesto el flujo de trozas. En los últimos años, sin embargo, ha habido una reducción en la tendencia de establecer este tipo de establecimientos, con excepción de algunos países de Asia sudoriental y oriental, que disponían de mano de obra especializada y salarios relativamente bajos.

De todos modos, es cada vez más claro que la expansión continua de la magnitud de la exportación de trozas en proporciones iguales o mayores que las exportaciones totales, no continuará por mucho tiempo. Fracciones mayores de la creciente exportación serán en forma procesada, y aun los actuales niveles de exportación de trozas serán reducidos. Es importante observar que el gran volumen del aumento de la exportación de trozas desde 1970 a 1973 puede corresponder a Indonesia.

Restricción de importaciones

Una cantidad de recientes acontecimientos puede estimular la transformación en su origen. Son importantes, entre ellos, las restricciones a las exportaciones de trozas. Si bien enfoques de esta naturaleza se han empleado en el pasado, han fallado, por lo general, debido a la gran disponibilidad de fuentes sustitutivas de abastecimiento, a la competencia internacional y a la correspondiente falta de solidaridad política. Entre las recientes actividades restrictivas, ha habido algunas prohibiciones completas (Nigeria, Filipinas) o para algunas especies (Ghana), prohibiendo la salida de trozas y la exigencia de un cierto nivel de transformación por parte del concesionario (Liberia, Filipinas, Costa de Marfil y Camerún).

Recientemente se han formado sub-agrupaciones regionales en el sudeste de Asia y Africa occidental, para estimular la cooperación y coordinar las políticas en el comercio de los productos forestales tropicales. No hay duda de que sus esfuerzos se orientarán hacia una mayor proporción de productos elaborados y una mayor contribución a las economías nacionales y regionales.


Página precedente Inicìo de página Página siguiente