Página precedente Indice Página siguiente


6. ALMACENAMIENTO

El costo y el esfuerzo que se requiere para juntar una amplia gama de proveniencias de especies ampliamente distribuidas hacen que sea esencial el almacenamiento seguro y eficiente de la semilla hasta que se la necesite para su distribución y siembra.

6.1 Longevidad

Las acacias por lo general, gracias al tegumento duro de la semilla que reduce al mínimo el intercambio de humedad y la pérdida a través de la respiración, de las reservas acumuladas, conservan bien su viabilidad durante muchos años y plantean limitados problemas para su almacenamiento. Las semillas de algunas especies pueden conservarse viables en un almacenamiento de laboratorio relativamente no controlado, durante por lo menos 57 años (Holmes y Buszewicz 1958) y 68 años (Ewart 1908), y, aún más notable, en el campo durante por lo menos 50 años (Moffet 1952; Farrell y Ashton 1978).

En el Cuadro 2 se indican datos sobre la longevidad de varias especies de acacia comprobadas por la División de Investigaciones Forestales, CSIRO, Canberra. Las semillas habían sido guardadas en envases cerrados a temperatura del ambiente (20–25°C). Si bien hubo con el tiempo un poco de pérdida de la capacidad germinativa, la mayoría de los lotes de semillas conservaron bien su viabilidad y aún los lotes más viejos (A. leptopetala y A. victoriae de 18 años) demostraron una excelente energía germinativa. Una experiencia similar ha sido citada para Israel, donde la semilla en envases sellados conserva elevada germinabilidad durante por lo menos 7 a 8 años en el depósito existente que está protegido contra temperaturas elevadas (FAO 1980).

Cuadro 2. Longevidad de los lotes de semilla de acacia en depósito

 Duración del almacenamiento (años)Viabilidad antes del almacenamiento %Viabilidad posterior al almacenamiento %
A. aneura135660
A. aneura  48484
A. aneura  68680
A. aneura  68080
A. doratoxylon129592
A. hemsleyi139696
A. holosericea149584
A. leptopetala187372
A. lysiphloia  97474
A. mollis159272
A. murrayana149088
A. oxycedrus168764
A. pendula  88044
A. plectocarpa138284
A. polybotrya  89086
A. pruinocarpa168868
A. pyrifolia  69696
A. spathulata  69092
A. tenuissima  69080
A. victoriae149686
A. victoriae188060

Mientras la recomendación general es conservar las semillas de acacia secas, en envases a prueba de humedad en un lugar fresco y seguro, algunas especies exigen tratamientos especiales. A. harpophylla (“brigalow”) sería un buen ejemplo de estas últimas. Siguiendo el tratamiento de rutina, el “brigalow” pierde toda su viabilidad dentro del año de su cosecha (Johnson 1964), mientras que las semillas conservadas a -20°C retienen la viabilidad y se conservan tiernas hasta cinco años (Coaldrake 1971). Si se cosechan las semillas antes de alcanzar su madurez, como se menciona en 4.2.3, la experiencia sugiere que es necesaria la conservación en frío (5°C) para detener el inicio del reposo del tegumento de la semilla (Isikawa 1960).

Parece que hay poca información sobre las relaciones entre la madurez, los caracteres de la semilla, condiciones de almacenamiento y la retención de la viabilidad en las semillas de acacia.

6.2 Tratamientos de la semilla antes del almacenamiento

Antes del almacenamiento la semilla de acacia tiene que ser fumigada o espolvoreada con polvos insecticidas para destruir las pestes por insectos. Esto resulta ser extremadamente importante en los lotes de semillas infestados por Bruchidae, cuya viabilidad puede perderse rápidamente por el continuo ataque debido a sucesivas generaciones de gorgojos.

Para este objeto se emplea frecuentemente el bisulfito de carbono como fumigante y debe aplicarse en un envase sellado previendo medidas para inspecciones de seguridad y para la liberación del gas como medida de protección del personal. Se emplea el producto químico a razón de 240gr por metro cúbico de espacio de aire. La duración del tratamiento necesario depende de la temperatura: 3,5 horas a 10°C hasta 0,7 hr a 30°C. Luego, la semilla debe ser bien desparramada y bien ventilada (por ejemplo, durante 3 horas) para eliminar el gas antes del almacenamiento. Las larvas que viven dentro del tegumento duro de las semillas de acacia pueden sobrevivir al tratamiento inicial, por lo que puede ser necesario observar con cuidado los lotes de semilla y repetir la fumigación.

El espolvoreo del tegumento de la semilla con polvo insecticida es también de uso frecuente para contener el daño por los insectos de la semilla. Para ello en Israel (FAO 1980) se emplea con buenos resultados un polvo comercial conocido como “Phostoxina”, mientras que en Australia se usan preparados comerciales de insecticidas basados sobre malathion, piretrinas y hexacloruro de benceno.

La División de Investigaciones Forestales, CSIRO, Canberra, está evaluando el “empaquetado adherente” (skin-packaging) de la semilla de árboles y su preservación por el método de “intercambio del dióxido de carbono” (CEM) que está demostrando interesantes resultados iniciales (J.W. Turnbull - inédito). Siguiendo esta técnica, se encierra la semilla herméticamente, con un adecuado volumen de gas CO2, en una bolsa hecha de una película laminada de plástico con reducida permeabilidad para el gas (Figura 26). El espacio libre viene reducido por la semilla que absorbe el CO2 lo que ofrece un empaquetado relativamente rígido, bien sellado. Luego, la semilla se coloca fuera del alcance de agentes nocivos. Esta práctica es económica, fácil de aplicar y se usa regularmente para la correcta preservación y transporte de granos y alimentos (Mitsuda et al 1973). Deben hacerse, sin embargo, más pruebas antes de adoptársela como práctica de rutina en el almacenamiento de semillas de acacia.

Figura 26

Figura 26. Empaquetado adherente y preservación de la semilla por intercambio de dióxido de carbono. División de Investigaciones Forestales, CSIRO, Canberra.

6.3 Envases para el almacenamiento

Para el almacenamiento a largo plazo la semilla de acacia debe ser conservada en envases sin aire. Sirven para el caso las botellas de vidrio o de plástico con tapas enroscables, así como envases de lata con tapas bien ajustables (Figura 27). Deberán ser rellenadas al máximo para reducir la cantidad incluída de aire. Puede colocarse también la semilla en bolsas plásticas selladas dentro de los envases. Puede ser una precaución útil cuando hay humedad, colocar en el envase un desecativo como, por ejemplo, gelatina silícea.

Figura 27

Figura 27. Envases metálicos a prueba de aire empleados para guardar semilla, División de Investigaciones Forestales, CSIRO, Canberra.

6.4 Registros de depósitos de semilla

Son esenciales los registros meticulosos completos para cada lote de semilla. En el Anexo 4 se describe el sistema de registro de depósito de semilla que ha sido usado con buenos resultados por CSIRO, División de Investigaciones Forestales, Canberra, durante muchos años antes de la reciente adopción de un sistema por computador (Wolf y Turnbull 1982).


Página precedente Inicěo de página Página siguiente