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Editorial

Nuevas dimensiones de la industria forestal

Nuestros presupuestos básicos sobre la industria forestal - qué es, qué hace, cuál es su futuro - se están transformando profundamente. Esa transformación influirá en la imagen, los objetivos, los productos, la naturaleza de las inversiones, e incluso la estructura de esa industria.

Ya no podrá hablarse con propiedad solo de «productos de la madera»; en su lugar, es preciso hablar de «productos forestales» o de «productos basados en los bosques». En muchos países en desarrollo, los llamados «productos distintos de la madera», debidamente contabilizados, podrían tener una importancia económica mayor que los productos tradicionales de la madera. Asimismo, es preciso considerar y planear sistemáticamente una serie de «industrias basadas en los bosques», muchas de las cuales no tienen nada que ver con la madera, en vez de hablar de «industrias basadas en la madera».

Esta transformación entraña el nuevo concepto de industrias forestales «apropiadas». Dicha transformación influirá también profundamente en la ordenación forestal. Esta ya no puede centrarse en la selección de especies y en la rotación de períodos, en productos que sólo pueden obtenerse de los bosques a intervalos bastante largos. Es preciso ahora hacer gran hincapié en la producción continua de bienes y servicios de los bosques: fauna silvestre, turismo, aceites, resinas, plantas medicinales, numerosos productos comestibles y otros muchos.

Del mismo modo que el personal forestal está adquiriendo una mentalidad que rebasa las tradicionales funciones productivas y protectoras de los bosques, las industrias forestales deben también tener más presente la mayor función socioeconómica que les corresponde.

En su octavo periodo de sesiones, celebrado recientemente en Roma del 21 al 25 de abril de 1986, el Comité de Montes (COFO), respondió positivamente a la evolución de las industrias forestales. Al ofrecer directrices para la futura labor de la FAO, el COFO reconoció la importante función de la industria y el comercio forestales en el desarrollo socioeconómico local y nacional. Apoyó la idea del criterio global en el establecimiento y funcionamiento de las industrias forestales. Consideró que un gran número de pequeñas empresas pueden constituir una fuerza importante en las industrias forestales de los países en desarrollo. Recomendó que la FAO estudiara y difundiera información sobre especies madereras menos usadas y sobre productos forestales distintos de la madera. Por último, subrayó la importancia del sector privado en todos los niveles de la industria forestal.

La FAO ha comenzado ya a tomar medidas. Después de la Consulta de expertos sobre industrias forestales apropiadas, celebrada en Yakarta en octubre de 1985, el Departamento de Montes de la FAO estableció un Grupo de Acción sobre Industrias Forestales Apropiadas. Ese Grupo está preparando directrices para asesorar a los países sobre la introducción de nuevas industrias forestales y la reestructuración de las existentes. Mientras tanto, el Departamento de Montes está esforzándose también por mejorar y modificar sus actividades actuales; por ejemplo, la colaboración con el GATT y la UNCTAD en cuestiones de comercio y mercadeo de productos forestales, y con la ONUDI en cuestiones de elaboración secundaria. La FAO está realizando actualmente estudios sobre barreras al comercio, compañías transnacionales en el sector forestal, y mercados dispersos atendidos en los países en desarrollo por pequeñas empresas basadas en los bosques. En cooperación con su Centro de Inversiones, la FAO está estudiando nuevos procedimientos para promover la financiación de proyectos considerados viables.

Este número de Unasylva ofrece una imagen de las nuevas dimensiones de la industria forestal. El Departamento de Montes de la FAO contribuye con un articulo general sobre las industrias basadas en los bosques y sus efectos en el desarrollo socioeconómico. En el articulo de L. Lintu, se subraya la necesidad de hacer más hincapié en la comercialización de los productos basados en los bosques. El aumento y la reestructuración del comercio de productos de la madera entre los países en desarrollo se ponen de relieve en un articulo de G. Buttoud y M. Hamadou. En el articulo de J.L. Whitmore y Bruce Burwell, se dan ejemplos de los vínculos entre la industria forestal y la agrosilvicultura.

En el futuro, Unasylva publicará sin duda otros muchos artículos sobre las industrias basadas en los bosques. Ese es un sector que seguramente ofrece campo para muchas novedades y encierra promesas para estimular una gran promoción general del desarrollo social y económico del Tercer Mundo.


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