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IV. MUESTREO

Al llevar a termino sus deberes de muestreo, un observador debe actuar fundamentalmente de manera imparcial y no sesgada. Las muestras deben reflejar con precisión los parámetros de la captura tales como la composición de tallas, las proporciones de sexos y estados de madurez, y deben asimismo cubrir todas las especies capturadas. Si estas condiciones básicas no se cumplen, el trabajo realizado deviene inútil. Las condiciones en las que un observador deberá probablemente muestrear parecerán a menudo primitivas en comparación con los laboratorios en tierra. La humedad y el movimiento del buque agravarán las dificultades de su tarea. De todas formas, no se solicita que obtenga una gran cantidad de medidas detalladas sobre la fisiología de los peces. La tarea principal de un observador consiste en la obtención de una cantidad básica y razonable de pesos y determinaciones de sexos en el transcurso de una campaña. Análisis más detallados se realizarán posteriormente en los laboratorios en tierra, utilizando las muestras preservadas traídas por los observadores. En resumen, aunque un observador puede considerar a veces el muestreo como una tarea rutinaria, a menudo lo encontrará imposible.

4.1 Estrategia del muestreo biológico

El objetivo básico del muestreo de una captura consiste en la obtención de una estimación precisa de la cantidad de peces de cada edad que son capturados en una pesqueria determinada. Esta información forma la base para el analisis de la poblacion virtual (VPA) o análisis de cohortes, el cual es el instrumento más utilizado en la actualidad para la estimación y gestión de stocks. Cuando se combinan con estimaciones independientes de la abundancia del stock, tales como la captura por unidad de esfuerzo y exámenes y estudios realizados mediante buques de investigación oceanográfica, pueden ser determinados varios aspectos de la dinámica de las poblaciones y de los ciclos vitales de las especies involucradas. Ello permite a los biólogos estimar el tamaño de los stocks de peces y hacer recomendaciones sobre las maneras como puede extraerse el recurso sin poner en peligro los stocks.

El objetivo de la presente discusión consiste en esbozar la estrategia del muestreo de la captura.

4.2 ¿Por qué muestrear tallas?

Puesto que el objetivo del muestreo consiste en averiguar el número de peces de cada edad extraídos de la población en una pesqueria, es obvio que no se puede determinar la edad de cada pez capturado. Por lo tanto, deben muestrearse las diversas capturas para realizar estimaciones sobre la composición de la captura. Las muestras deben ser tomadas al azar para eliminar sesgos que pudieran dar una falsa imagen de la captura total. Una cantidad suficiente de la captura debe muestrearse para tener en cuenta la variación existente entre muestras.

Dentro del Programa de Observación, se ha determinado el uso de las frecuencias de tallas como base del programa de muestreo. La razón para

ello radica en que las muestras de tallas son relativamente fáciles de obtener, y otros parametros vitales tales como la edad y el peso estan bien correlacionados con la talla. Se ha demostrado que puede estimarse la composición en edades de las capturas de una pesqueria determinando una cantidad relativamente pequeña de edades y un número mucho mayor de medidas de tallas. Por lo tanto, el primer paso para obtener las capturas por edad de una especie dada consiste en determinar la composición de tallas de la captura de dicha especie.

4.3 Estimación de la captura

Para trabajar con corrección como observador, debe aprenderse rapidamente a realizar estimaciones precisas de cantidades considerables de pescado. La captura total estimada, por especie, y anotada por el observador, forma parte integral de la base de datos global del Programa de Observación. A menudo, la información proporcionada por el observador sobre la composición de las capturas suministra en determinadas pesquerías la única información fiable sobre las capturas. La capacidad para determinar las cantidades de capturas incidentales (o captura adicional) es indispensable, puesto que los metodos tradicionales de registro, tales como los cuadernos de pesca del buque han tendido generalmente a proporcionar datos incompletos o de escasa fiabilidad. La gestión de determinadas pesquerías, tales como la pesquería de merluza americana en el Canadá oriental, se basa en la minimización de los niveles de capturas adicionales. El programa de observación, al proporcionar una información precisa sobre las capturas, constituye un medio de asesoramiento de un régimen dado de administración de una pesqueria. Los datos sobre la composicion de la captura anotados en el estadillo 4 son utilizados por el observador para controlar el cumplimiento de las regulaciones en lo que concierne a un registro inadecuado en los cuadernos de pesca, especies prohibidas, limitaciones de captura adicional y descartada, así como para realizar su informe de la campaña y para transmitir sus informes de posición.

El primer problema con el que se enfrenta el observador, y a menudo el más difícil, consiste en la realización de una estimación fiable de la captura total cuando el pescado se encuentra en el copo o en la cubierta de pesca. Puede obtenerse una estimación conociendo la capacidad total del copo y determinando aproximadamente el porcentaje del mismo lleno de pescado, o quizás tomando una medida volumétrica. Ambos métodos son altamente subjetivos e incómodos y pesados. La mejor estima se obtiene normalmente considerando el área entre las bandas laterales de refuerzo del copo, determinando la cantidad de pescado contenido en una tal sección, y multiplicando por el número de bandas. El capitán y el patrón de pesca pueden proporcionar normalmente una aproximación útil sobre la cantidad de pescado contenido entre las bandas. Al usar este método, el observador debe tomar en consideración factores tales como las especies capturadas y si el copo tiende, con grandes capturas, a hincharse cerca del estrobillo o sereta. Los calamares, por ejemplo, aparecerán más densamente apretados en un copo que la mayoría de especies de peces. Naturalmente, un peso mayor de calamares estará contenido entre las bandas de refuerzo y la estimación debe por tanto aumentarse correspondientemente.

La segunda oportunidad para obtener una buena estimación de la captura total es cuando el pescado se halla en la cámara o compartimiento de contención en el parque de pesca, bajo cubierta. Para realizar la estimación, el volúmen del compartimiento contenedor se determina multiplicando la longitud por la anchura y por la altura, en metros (L × A × H). Ello proporciona un volúmen en metros cúbicos. La capacidad del contenedor para una especie dada se calcula usando la fórmula:

Peso de la captura = Volúmen del compartimiento × Peso medio de las muestras ÷ Volúmen de los canastos de muestreo

La estimación del peso de unos 200 peces, el tamaño de muestra usual, es sencilla. Si el canasto es rectangular, se utiliza la misma ecuación volumétrica que la utilizada para calcular el volúmen global del contenedor o parque de pesca. Si se usa un canasto circular o un cubo, el volúmen se calcula mediante la siguiente ecuación:

Volúmen (V) = π   r2h

donde π = 3.14

         r = radio (½ diámetro)

         h = altura del canasto

Por ejemplo: Si el parque tiene 5 metros de longitud, 10 metros de anchura y 2 metros de altura, su volúmen sería:

L(m) × A(m) × H(m) = V (m3)

ó      5 × 10 × 2 = 100 m3

La capacidad del parque, en toneladas, sería:

8750 kg = 100m3 × 35 kg (peso medio de la auestra) ÷ 0.4 (volúmen del canasto de auestreo)

La capacidad del parque sería, pues, de 8.75 toneladas.

El contramaestre de frío o capataz del parque de pesca conocerá probablemente el volúmen aproximado del parque pero no siempre sabrá en qué cantidad este peso global podrá variar de especie a especie. Sería adecuado verificar la capacidad para una especie particular usando el método anterior.

En casos en los que existe un parque abierto, como en los buques nacionales, o en escasos buques extranjeros, en los que la captura es vaciada en un contenedor en cubierta previamente a su proceso, estos cálculos pueden realizarse para cada calada, si se toma la altura como el nivel del pescado en el contenedor. En la práctica, en la mayor parte de buques factoría extranjeros, la determinación de la captura total en cada calada mediante un cálculo volumétrico será, con toda seguridad, demasiado difícil. Muchos buques extranjeros poseen parques de pesca amplios, cerrados y de formas irregulares, cuyos volúmenes pueden ser sólo calculados mediante una serie compleja de cálculos. En tales ocasiones, el observador debería calcular una capacidad aproximada y estimar la captura determinando el porcentaje del parque que se halla lleno de pescado.

Algunos buques nacionales no congeladores poseen contenedores abiertos, de formas irregulares, que utilizan tablas o planchas para retener la captura. En los casos en que la captura es pequeña, las tablas se apartan, mientras que si la captura es grande, se añaden más tablas. Si el observador puede determinar el peso de pescado hasta el nivel que una plancha puede retener, una buena estimación de la captura podrá determinarse multiplicando por el número de tablas.

Una tercera oportunidad para calcular la captura total es cuando la captura está siendo empaquetada. Si se cuentan el número de cajas o bandejas de congelación de pescado procesado y se multiplica este valor por el peso de una caja o bandeja (normalmente constante) se obtendrá un peso no transformado de la captura o peso del producto final. El peso total se calcula utilizando un factor de conversión, un coeficiente que tome en cuenta las partes del pescado extraidas durante el procesado. Aunque este método es bastante preciso, es probablemente demasiado tedioso para usarse con regularidad, especialmente cuando las capturas son elevadas. De la misma manera como cuando se realiza la estimación del pescado en el parque de pesca, este método deviene menos fiable en aquellos casos en que se ha mezclado el pescado o bandejas procedentes de diferentes caladas.

En buques nacionales, la captura total procesada pueda estimarse en los contenedores de hielo. Si el observador conoce la capacidad de un contenedor típico, y, para una calada particular, qué porción de él se ha llenado, puede entonces obtenerse una estima razonable de la captura. Los marineros encargados constituyen para el observador una buena fuente de información, ya que ellos son a menudo las personas que poseen un mayor conocimiento sobre la cantidad de pescado que se encuentra realmente a bordo del buque.

La determinación de la captura adicional con precisión es una de las aptitudes más difíciles que un observador precisa adquirir. Mientras que la estimación de la captura total es pocas veces una tarea fácil, determinar la composición por especies de la captura es casi imposible de realizar desde la cubierta de pesca. La única oportunidad para obtener una aproximación de las especies presentes consiste en observar la captura a medida que ésta es vertida al parque de pesca. A menudo, se izará directamente el copo sobre la abertura del parque de pesca, vaciándose el pescado tumultuosamente. Si éste es el caso, puede ser inútil intentar estimar visualmente lá captura adicional. La mejor estrategia consiste en estos casos en solicitar al capitán que vierta, si es posible, la captura más lentamente hacia una de las esquinas del parque levantando el copo por un ángulo. De esta manera, la tripulación puede apartar más efectivamente especies prohibidas tales como bogavantes o restos tales como rocas, mientras que se proporciona al observador una mejor oportunidad para tomar nota de la captura adicional. Este método supera también la tendencia de algunas especies a estratificarse en el copo debido a su tamaño o a algún aspecto peculiar de su fisiología. A medida que la captura es vertida lentamente al parque de pesca, aquellos peces que habían quedado en la zona superior del copo o habían quedado atrapados en las mallas no pasarán inadvertidos.

Esta tendencia de diversas especies de peces de quedar en la superficie o en el fondo del montón vertido de pescado causará problemas en aquellos casos en que el pescado se encuentra en un contenedor cerrado. Es mejor esperar a que se permita que la captura fluya de los contenedores antes de realizar un segundo intento de estimación de la captura.

Los miembros de la tripulación desean casi siempre comparar sus propias dotes para realizar estimaciones con las del observador, y debido a su mejor conocimiento de los artes del buque y de su funcionamiento, merece la pena escucharles. No siempre intentan engañar al observador. Aunque sus estimaciones puedan parecer insesgadas, hay no obstante una trampa en la que el observador incauto puede facilmente caer. Muchos marineros mirarán un copo de pescado teniendo en mente la cantidad de pescado procesado y de dinero que les proporcionará. El observador, naturalmente, precisa una estimación del peso de la captura antes de que tenga lugar cualquier tipo de proceso o eviscerado del pescado. Debe siempre conocer bajo qué forma del producto está estimando la captura un marinero, antes de permitir influenciarse por una tal estima. Si la tripulación está estimando un copo lleno de pescado en función de su valor, el observador deberá considerar el uso de un factor de conversión adecuado para poder comparar su propia estima con la de la tripulación.

En algunos buques, debe ejercerse una cierta cautela al usar información procedente de los cuadernos de pesca. En el pasado, capitanes y oficiales han demostrado ocasionalmente una tendencia a adaptar las estimaciones de captura de manera que se adecuaran a las restricciones impuestas por la licencia del buque. Por ejemplo, muchos capitanes se han mostrado reacios a admitir la presencia de una cantidad de pescado que colocara al buque en violación de las regulaciones de captura adicional. Violación o no, la falta de tales entradas en un cuaderno de pesca no conduce ciertamente a proporcionar una buena información de tipo biológico, y, en una situación tal, el observador debería obviamente confiar en sus propias estimaciones por encima de las de un capitán que muestre tendencias a sesgar los datos de captura. Naturalmente, no todos los capitanes intentan mentir o engañar en sus cuadernos de pesca, no obstante, es de gran importancia para el observador tener entera confianza en su capacidad para realizar estimaciones de la captura. Cuando las estimaciones del observador varían abruptamente de las de la tripulación o del cuaderno de pesca, no hay motivo por ello para alarmarse.

Se solicita al observador que esté presente en un 80 % de las caladas de un buque de manera que proporcione un registro insesgado del rendimiento de pesca del buque. Si, por ejemplo, un buque realiza un promedio de diez lances al día y el observador está presente en nueve de ellos, está realizando un cubrimiento excelente. Sólo se pide que el observador no caiga en el hábito de perder una calada aproximadamente a la misma hora cada día. La rutina debe variarse de manera que los lances de última hora de la noche y primera hora de la mañana reciban igual atención que los de la tarde y anochecer. Es de una importancia extrema que los observadores estén en situación de observar cualquier tipo de cambios en las capturas o en su composición que puedan atribuirse a cambios de ritmo diario en el comportamiento de una especie particular.

4.4 Elección de un lugar adecuado para muestrear

La principal característica que debe poseer un lugar adecuado para realizar el muestreo biológico debe ser la accesibilidad al pescado. Un lugar cercano al contenedor principal o a la cinta transportadora sería el ideal. Como más lejos del pescado se coloque el observador, más inconvenientes se encontrará puesto que tendrá que transportar las muestras, a menudo muy pesadas. Aunque puede existir la posibilidad de que el observador interfiera ligeramente con la tripulación, muchos capataces del parque de pesca aceptarán como inevitable la presencia del observador y harán un esfuerzo extra para facilitar su trabajo. Si, no obstante, se presenta una resistencia inusual a las peticiones del observador y no se le ofrece un sitio idóneo para muestrear, el observador debe insistir en primer lugar al capitán en que el muestreo es una parte necesaria del trabajo que debe llevar a cabo. Si de todas maneras no llegan a satisfacerse las peticiones, deberá contactarse con las autoridades del programa e informarles sobre el problema para que tomen las decisiones pertinentes. La figura 7 presenta algunas de las opciones disponibles para el observador.

Fig. 7

Fig. 7   Planta de proceso de un gran arrastrero congelador

En este tipo común de buque extranjero, el observador puede elegir entre varios excelentes lugares para muestrear. La posición sobre la mesa de cortado del pescado es ideal. Puede practicamente obtener el pescado directamente de la cinta transportadora o del contenedor principal. En algunos buques, no obstante, este espacio puede estar ocupado por estaciones de cortado adicionales. Si este es el caso, el observador puede transladarse al centro de la mesa, o incluso a una de las mesas de fileteado a los lados del buque. Ligeramente menos adecuadas que la primera posición, estas mesas laterales poseen la ventaja adicional de que tienen los portillos más cerca. En una planta amplia y espaciosa de este tipo, el observador no debería tener problema alguno.

La experiencia ha demostrado que mientras que algunos tipos de buque pueden presentar una disposición dificil, hay muy pocos buques extranjeros que posean disposiciones que impidan totalmente el muestreo biológico. En el caso excepcional en que un observador se enfrente a un tal tipo de buque, la única acción posible consistiría en intentar encontrar un lugar seguro en la cubierta de arrastre y recoger el pescado para el muestreo antes de que la captura sea vertida al parque de pesca. Naturalmente, pueden hacerse ciertas concesiones en el programa de muestreo en función de factores tales como el tiempo u operaciones de pesca.

La elección de un lugar adecuado para muestrear en la mayor parte de buques nacionales es bastante limitada, pero el pequeño tamaño de la planta de proceso puede ser un factor que sea de utilidad para el observador. En la mayoría de casos, en los que no hay en absoluto espacio cerca del contenedor de pescado, una cubierta de escotilla o una cinta transportadora que no esté en uso pueden ser utilizadas en el extremo opuesto de la planta. El siguiente diagrama presenta la planta de un buque nacional.

Fig. 8

Fig. 8 Esquema de la planta de proceso de un arrastrero no congelador

El principal obstáculo que se le presenta a un observador en un buque de este tipo serán las máquinas de eviscerado y los contenedores que ocupan gran parte del limitado espacio existente frente al parque de pesca. Un observador que tenga una talla alta puede ser capaz de realizar los muestreos sobre las máquinas de eviscerado, pero ésta es una solución claramente lejana de la ideal. Desgraciadamente, en un buque de este tipo, un observador tendrá siempre que sortear y pasar por encima de gran cantidad de aparatos y paneles, sea cual sea el lugar escogido para muestrear, y el acceso al pescado será más difícil que en los buques factoría extranjeros. Con este inconveniente en mente, el observador debería elegir el uso de la escotilla de escape, relativamente lisa, o construir una superfície adecuada en la bodega, a pesar de su distancia al pescado. El área donde se almacenan los artes debería también ser considerada. Si las capturas son pequeñas o la tripulación no pone ningún inconveniente, se puede tener la suerte de hallar un lugar libre en una plataforma de eviscerado o en el área abierta existente entre los contenedores y el parque de pesca. No obstante, estas áreas estarán ocupadas en su mayor parte por marineros que estarán procesando el pescado. Ocasionalmente, el parque de pesca puede ser dividido, permitiendo al observador muestrear directamente entre el pescado. Naturalmente, debe irse con cuidado al andar entre un montón de pescado. Los perros (“Wolffish”), frecuentemente capturados en las aguas del Canadá oriental, pueden infligir una dolorosa mordedura, mientras que los tiburones pueden ocasionar daños mucho más serios.

En general, encontrar un lugar adecuado para muestrear a bordo de un buque nacional puede ser difícil, por lo que el observador debería probar varios lugares previamente a la elección del lugar más adecuado. De la misma manera que con todos los restantes aspectos de su trabajo, la cooperación con la tripulación es crucial, y no existe nada peor para arruinar una buena relación de trabajo que el hecho de que un observador no limpie y ordene, después de realizar su muestreo, todo lo que haya ensuciado y utilizado. El observador que se halle a bordo de un buque nacional debería caer en la rutina de cortar y eviscerar el pescado que ha medido o al menos ofrecerse a participar en el procesado de una cantidad de pescado similar a la cantidad muestreada. El status de un observador no conlleva el considerarse superior en rango a cualquier marinero. Por el contrario, el observador debería tratar a toda la tripulación con el debido respeto y cortesía.

4.5 Arrastreros por el costado

Tanto las compañías arrastreras canadienses como algunos países extranjeros aún trabajan con arrastreros por el costado por lo que los observadores pueden ser enviados periodicamente a ellos. Estos buques plantean un conjunto único de problemas al llevar a cabo un programa de muestreo. Tales barcos poseen pocas veces el espacio suficiente para permitir el muestreo bajo cubierta en el parque de pesca o en una cabina apartada de la cubierta de arrastre. Invariablemente, el trabajo debe ser llevado a cabo al aire libre en cubierta. Hay algunas consideraciones básicas útiles a seguir. No importa donde se coloque, el observador no se hallará nunca lejos de los cables de arrastre, por lo que es una buena idea el restringir el muestreo a los períodos en los que la red esté en el mar, entre la largada y la virada, para evitar interferencias con la tripulación, así como por motivos de seguridad. A menudo, el observador se verá obligado a realizar el muestreo en la proa del buque, donde hay un considerable movimiento. La extracción de otolitos y el muestreo de pesos deberán limitarse a períodos de buen tiempo, no sólo para facilitar el trabajo sino también para garantizar la precisión de la información.

Un esquema típico de la cubierta de un arrastrero por el costado se presenta en el siguiente diagrama. Observe como la mejor y probablemente única área adecuada de muestreo en el buque se localiza en el área denominada “lomo de la ballena”, en la proa del buque frente a la estructura de arrastre anterior. Ocasionalmente se utiliza esta zona para almacenar redes, cabos e hilos que no se utilizan y pueden servir de superficie segura para el ictiómetro.

Fig. 9

Fig. 9 Esquema de la cubierta de un arrastero por el costado

4.6 Obtención de pescado para una muestra

La principal preocupación de un observador cuando obtenga una muestra consiste en conseguir una muestra tan al azar como sea possible. El menor sesgo existente en el método utilizado para obtener la muestra puede distorsionar el rango de tallas global de la especie elegida. Un punto a recordar es que todo pez de la especie que deba ser muestreada debe tener la misma probabilidad de ser elegido. Debe resistirse la humana y subconsciente tendencia a elegir sólo los individuos mayores.

El trabajo del observador se complica frente a las grandes capturas que a menudo se encuentran en las pesquerías extranjeras. Aunque sólo se solicita que elija 200 peces para obtener una muestra representativa, puede en ocasiones tener que elegir al azar 200 peces de una captura de 30.000 kilos! ¿Cómo se realiza ésto?

Considere la manera en que los peces pueden acumularse en un copo. A medida que el arte empieza a pescar, probablemente está permitiendo el paso a través de las mallas del copo a los individuos más pequeños, mientras que retiene a los mayores. No obstante, a medida que el copo se va llenando, estos peces mayores bloquean las mallas del copo, permitiendo una mayor retención de los peces más pequeños. Debido a este efecto, diferentes rangos de talla de una determinada especie se acumularán en partes distintas del copo. La mejor manera de superar este obstáculo consiste en obtener la muestra por partes. Cuando el pescado empieza a salir del parque al principio de una sesión de proceso, el observador debería obtener la primera submuestra, quizás medio canasto o un canasto entero, dependiendo de su tamaño y de la especie muestreada. El observador debería entonces finalizar el muestreo de dicha submuestra antes de obtener otra. Mientras tanto, la tripulación habrá procesado el pescado que salió en primer lugar del copo permitiendo que la captura de otras zonas del copo sea accessible ahora al observador. La segunda submuestra puede obtenerse en este momento, finalizarla y obtener una tercera, etc. Si las capturas son muy grandes, el tiempo puede transcurrir en favor del observador. Muchos buques dejarán de pescar para conseguir sacar adelante un atasco en la producción, permitiendo entonces al observador espaciar su muestra para trabajar pescado de una amplia variedad de áreas del copo y encontrar aún tiempo para hacer una pausa para tomar café.

Casi siempre, el observador deberá obtener la muestra de una cinta transportadora o de un contenedor. La manera más fácil de asegurar una selección al azar consiste en visualizar una sección de la cinta transportadora, quizás un metro, o medio metro cúbico de contenedor, y obtener peces de aquella sección solamente (La cinta transportadora debe obviamente estar parada). Muchas veces será más fácil coger todo lo que se halle en aquella sección y extraer las especies no deseadas, antes que retrasar el proceso a medida que la muestra va siendo extraída. A menudo la tripulación ayudará al observador en la obtención de la muestra. Ya que pocas veces los marineros están versados en las técnicas de muestreo al azar, el observador debería asegurarse de que no están ejerciendo cualquier tipo de tendencia personal para seleccionar peces grandes o pequeños. En muchos buques los marineros llevarán al observador a menudo ejemplares raros y aunque tales peces pueden no ser de inmediata necesidad para los fines del muestreo, tal actitud de interés por parte de la tripulación debería ser siempre estimulada.

Otros métodos de obtención de una muestra pueden ser de particular utilidad para muestrear la captura adicional. En muchos buques extranjeros e incluso en algunos buques nacionales, las especies adicionales comercialmente atractivas son separadas de la captura principal y apartadas a los lados en canastos. Si el observador está convencido de que ningún pez de la especie deseada ha sido rechazado o dejado deliberadamente en la línea de producción principal, entonces ha obtenido ya una muestra al azar. En algunos buques, especies tales como el bacalao o el eglefino son colocadas en mesas especiales para su fileteado. El observador no debe hacer otra cosa más que transladar su ictiómetro.

La reducción de pescado a harina puede ser ocasionalmente motivo de controversia, pero siempre es deseable conocer exactamente qué rangos de pescado están siendo redirigidos a la obtención de harina. Lo mejor que puede hacer un observador para obtener una muestra del pescado que va a ser reducido consiste en esperar a los lados de la cinta transportadora que conduce a la planta de proceso de harina de pescado y coger los peces a medida que van pasando. Un segundo método, más sucio y desordenado, consiste en seleccionar los peces directamente del recipiente donde se lanzan asimismo los desechos. Debe ejercerse asimismo un cuidado extremo. El observador debe estar siempre seguro de que no hayan hélices giratorias u hojas cortantes que puedan seccionar dedos, manos o incluso brazos.

Un conjunto especial de problemas puede surgir cuando se esté muestreando grandes peces tales como bacalaos o carboneros. Debido a los grandes tamaños que tales especies a menudo alcanzan, el muestreo deseado de 200 individuos puede ser una tarea difícil. La posesión de una buena condición física y tiempo son las mejores soluciones al problema. En ocasiones, no obstante, la rápida velocidad con que estas especies son procesadas puede provocar que la cantidad de peces disponibles para ser muestreados disminuya rápidamente. Si éste es el caso, el observador debería pedir en primer lugar que le separaran un número de peces suficiente para poder realizar una muestra y voluntariamente procesarlos él mismo al terminar el muestreo. Si no puede llegarse a un acuerdo, la única alternativa consiste en muestrear una cantidad de peces inferior a los 200 individuos.

4.7 Después de obtener la muestra

La tarea de muestrear una cesta o canasto de pescado es bastante sencilla. Las siguientes indicaciones se ofrecen para facilitar aún más el trabajo.

En primer lugar, un observador debe mantener limpia y seca la mano con la que debe escribir y cortar el pescado. Si, por alguna razon, un observador precisa las dos manos para manejar el pescado, debería utilizar un guante poco ajustado para la mano con la que tenga que escribir. Los guantes fuertes de plástico se quitan y ponen con facilidad; pueden dejarse sobre el ictiómetro cuando no se usen y, cuando es preciso, pueden ponerse sin la ayuda de la otra mano.

El observador debería adquirir la costumbre de pesar los peces antes de tomar el resto de datos, de cara a minimizar la pérdida de peso corporal que puede ocasionar al cortarlos. No es una mala idea la determinación del sexo de toda la muestra antes de medir los peces, y pesar entonces cada sexo por separado en contenedores distintos. De esta manera, el observador elimina la necesidad de quitarse el guante, coger el cuchillo, dejarlo, coger un lápiz, dejarlo, volverse a poner el guante, etc., para cada pez que muestree. Si la especie muestreada es generalmente de pequeño tamaño, como por ejemplo la merluza americana, el observador puede incluso hacer una muestra completa de frecuencia de tallas sin coger su cuchillo. Como siempre, la elección final para hallar la secuencia de muestreo más adecuada recae en el propio observador.

Es una buena idea utilizar sólo una mano al muestrear calamar. No hay nada peor que hallarse cubierto de tinta de calamar y borrar con ella accidentalmente algunos datos ya previamente anotados. Los animales son lo suficientemente pequeños como para que puedan cogerse con la mano izquierda mientras se usa la derecha para contarlos. Generalmente se puede cortar el manto con poca resistencia con la ayuda de tijeras. También se puede colocar el animal sobre el ictiómetro u otra superfície dura y hacer un corte con el cuchillo hacia el ápice del animal por los lados del manto. Al proceder de esta manera, las vísceras y gónadas quedan intactas, mientras que el manto puede volver a colocarse en su posición anterior para permitir tomar todas las medidas necesarias.

Un cuidado especial debe tomarse al muestrear gallinetas u otros peces que posean agudos dientes o espinas (perros, rapes, escuálidos, rayas de espinas, y obviamente, todos los tiburones). Deben utilizarse fuertes guantes de goma para manejar estas especies. El observador debe aprender a manejar las gallinetas cogiéndolas con dos dedos entre los ojos, en vez de arriesgarse a una picadura dolorosa como resultado de poner la mano en las espinas dorsales. Las otras especies deben ser manejadas colocando una mano justo detrás, y fuera del alcance, de la boca, mientras que la otra mano puede ser usada para coger el pez por la cola. Si un pez tal como un perro empieza a coletear violentamente mientras se le coge, suéltelo y apártese!

La obtención de pesos con precisión es más fácil de decir que de realizar. Un fuerte oleaje puede provocar que el indicador de la escala se mueva de manera alocada de un lado a otro. La sencilla respuesta a este problema es la misma que para todas las otras medidas tomadas en el transcurso del muestreo; si no se puede determinar un valor con precisión, deje el espacio correspondiente en blanco. Si el punto medio de la escala no es perfectamente identificable, no invente un valor adecuado. Una suposición incorrecta proporciona una muestra incorrecta. La calidad de una muestra será tan buena como la finura en el trabajo del observador que la tomó.

4.8 Medición de la talla

La colocación de un pez sobre un ictiómetro y la lectura de su longitud global parece precisar pocas explicaciones. De todas maneras, algunas directrices deben seguirse, y el observador debe ser consciente de las particulares trampas que le esperan.

El ictiómetro estándard está diseñado para una fácil lectura que permita una medición rápida de los peces. El observador, al colocar un pez sobre el ictiómentro, debe no obstante asegurarse de que el morro del pez toque suavemente la cabecera de la tabla. Si hay un espacio entre el morro y la cabecera o si la cabeza está comprimida, demasido apretada, la medida, obviamente, no es buena. Al otro extremo del pez, la medida que debe ser anotada es la talla en la que cae la horquilla caudal (o extremo de la aleta caudal).

Debería usarse siempre una tabla offset para cualquier especie, excepto para Illex, caballa, arenque o atunes (los cuales, de cualquier manera, son demasiado grandes!).

Todas las especies de platija (no halibuts), brótola blanca y roja, brosimo y algunas otras especies se miden hasta el extremo de la aleta caudal. El bacalao, eglefino, carbonero, merluza americana, gallineta y los halibuts, se miden hasta la base de la horquilla caudal.

Los calamares se miden al medio centimentro más proximo en un tabla no-offset, colocados sobre su cara ventral. Coloque el extremo de la cola contra la cabecera de la tabla, y mida hasta la protuberancia anterodorsal.

Fig. 10

Fig. 10 Medida de la talla de un calamar

En gambas, sólo se mide el cefalotórax. Se usan calibres o pies de rey adecuados para medir hasta el medio milímetro más próximo. Cualquier medida se redondea; por ejemplo, 20.49 es anotado como 20, 21.76 como 21.5, 22.13 = 22.0, etc.

Los arenques y caballas requieren una técnica distinta. Para arenques, utilice una tabla no-offset. Se aprietan los lóbulos de la cola, leyéndose la longitud hasta el final del lóbulo inferior de la aleta caudal al medio centimetro más próximo, redondeando los valores (p.e.: 35.8 = 35.5; 34.4 = 34.0, etc.). Las caballas también precisan una tabla no-offset. La talla es la longitud hasta la horquilla caudal leída al medio centímetro más próximo, redondeada. Cóserre la ilustración siguiente:

Fig. 11

Fig. 11 Medida de la talla de una caballa

Observe que la horquilla caudal del primer pez no alcanza la graduación 3.5 y que la medida se redondea a 3.0. La horquilla caudal del segundo pez se extiende más allá de la marca 3.5, por lo que se anota 3.5. Para otras especies, la aproximación específica a su medida debe, donde sea posible, seguir los procedimientos internacionalmente establecidos.

4.9 Determinación del sexo de los peces

La separación por sexos de los peces de una muestra es una de las principales tareas de un observador. Puesto que los dos sexos de algunas especies presentan tasas de crecimiento distintas, los biólogos pesqueros están especialmente interesados en poseer frecuencias de tallas separadas por sexo, de manera que puedan controlar mejor tales parámetros de crecimiento. Otras especies, como el bacalao y el carbonero, presentan tasas similares de crecimiento entre los sexos, y, por lo tanto, no se pide a los observadores que realicen un esfuerzo adicional determinando el sexo de dichas especies.

La determinación del sexo de la mayor parte de gádidos (la família del bacalao) y de gallinetas es relativamente sencilla. En primer lugar, debe abrirse el abdomen del pez; un corte de dos o tres pulgadas paralelo a la espina dorsal, ligeramente anterior al orificio anal, debería ser suficiente. A continuación, se aparta el estómago y los intestinos a los lados. Las gónadas deberían ser entonces visibles contra el peritoneo (la membrana que delimita la cavidad abdominal).

La gónada femenina, el ovario, es un órgano par que recuerda vagamente un par de cigarros de color naranja dispuestos uno al lado del otro. Casi siempre presenta una coloración anaranjado–rosada y, cuando el pez es sexualemente maduro, esta lleno de óvulos. En peces inmaduros, los ovarios presentan un color similar, pero son opacos o en cierta manera granulares en su apariencia.

Fig. 12

Fig. 12 Ovario

La gónada masculina es a veces menos conspicua que el ovario, pero no es muy difícil detectarla. Puede presentar una apariencia variable desde un cordón ondulado que se extiende desde el área de la abertura anal, en peces inmaduros, hasta una serie de lóbulos blanquecinos foliosos que excretan un líquido lechoso, en peces maduros. En todos los peces, excepto en los inmaduros, el color blanquecino y los capilares, altamente visibles, ayudaran a distinguir las gónadas masculinas.

Fig. 13

Fig. 13 Gónadas masculinas

Algunos grupos de peces tropicales son hermafroditas protogínicos, es decir, el pez es (en este caso), en primer lugar, hembra, convirtiéndose en macho cuando alcanza tallas mayores. La situación opuesta (hermafroditismo proterándrico) se encuentra, por ejemplo, en las gambas de la família Pandalidae y en algunos moluscos: en todos los casos, sera necesario el consejo de un experto para decidir la mejor estrategia de muestreo.

4.10 Especies problemáticas

Peces planos

Las gónadas de las especies de platija y halibut son generalmente similares en apariencia a las de los gádidos, pero, debido a la anatomía altamente inusual de estas especies, pueden ser bastante difíciles de localizar.

El mejor método consiste en localizar la zona blanda del pez que se encuentra directamente detrás del opérculo (abertura branquial). Esta región, que posee pocas estructuras óseas, es la cavidad abdominal. La abertura anal puede ser localizada precisamente delante del origen de la aleta anal. Debería hacerse un corte circular en la cara ventral del pez (no en la cara del ojo) que permita al observador levantar un pedazo de piel que deje al descubierto tanto la cavidad abdominal como el tejido más consistente que se encuentra adyacente detrás. Si el pez es maduro, la apariencia lechosa del testículo o los óvulos de color naranja serán de inmediato aparentes. Si no, el observador deberá realizar algún tipo de exploración. En todos los peces planos, los ovarios se extienden muy atrás hacia la cavidad del cuerpo a ambos lados del pez mientras que las gónadas masculinas se encuentran confinadas al área general de la cavidad estomacal. Otra distinción consiste en que los ovarios presentan un borde redondeado mientras que los testiculos presentan un borde claramente afilado. Esta distinción es especialmente aplicable a los peces inmaduros.

La técnica de mirar al trasluz puede ser especialmente útil para determinar el sexo de las platijas. La mayor parte de platijas presentes en las aguas del Canadá oriental son suficientemente delgadas y opacas para que puedan visualizarse los órganos internos del pez si éste es levantado y colocado contra una potente fuente luminosa. Al utilizar este método, la extensión posterior de los ovarios puede ser claramente visible. No obstante, el pez debería de todas formas abrirse, para asegurar una determinación más exacta del sexo. Observe que si, después de emplear cualquiera de las técnicas anteriores, no es posible aún una determinación garantizada del sexo, el pez debe ser anotado como “no sexado”.

Pez plata

Esta especie es probablemente la especie en la que es más difícil determinar el sexo de todos los peces que un observador puede encontrar en las aguas del Canadá oriental. A diferencia de los gádidos y platijas, las gónadas de pez plata no poseen los colores familiares y pueden a menudo estar oscurecidas por capas de tejido adiposo. Debe ejercerse siempre mucha atención cuando se intente determinar el sexo de esta especie.

Tanto los ovarios como los testiculos son en esta especie órganos pares que se presentan, en los peces inmaduros, como estrechos tubos blancos contra un peritoneo negro-gris. Cuando son ligeramente más maduros, una lechaza granular o unos óvulos incoloros y opacos pueden ser visibles. En hembras muy maduras, la cavidad abdominal puede estar llena de huevos sueltos, sin que parezca existir evidencia de la pared ovárica. Obviamente, los peces inmaduros son los que ocasionan la mayor parte de los problems. Determinar correctamente su sexo requiere mucho cuidado y precisa mucho tiempo. Una lupa puede ser de gran ayuda.

La mejor manera consiste en abrir toda la cavidad abdominal, desde el área branquial hasta detrás del orificio anal. Levante entonces los órganos internos y localice los dos tubos contra el peritoneo negro.

Fig. 14

Fig. 14 Cavidad abdominal de un pez plata

Observe que las gónadas (tanto masculinas como femeninas) consisten en dos grupos o racimos a cada lado y que están unidos por un tubo, que corre tangencialmente a ellos (no a través de ellos).

De cara a determinar el sexo del pez, coja uno de los racimos y déle la vuelta. Si el reverso presenta circunvoluciones, es decir, si parece dividido en secciones longitudinales, entonces es una hembra. La sección transversal del ovario debería tener forma de cuña.

Fig. 15

Fig. 15 Ovario de pez plata

Los testiculos del macho son más aplanados y de un aspecto algo más granular. Como en otras especies de peces, es más difícil de detectar que el ovario. El mejor procedimiento a seguir consistiria en buscar rutinariamente en cada gónada óvulos, circunvoluciones y una forma en cuña y, en ausencia de ello, buscar las características de la gónada masculina.

Fig. 16

Fig. 16 Testiculos de pez plata

Atunes

La mayor dificultad para estimar el sexo de los atunes radica en el gran tamaño de estos animales. Es mejor esperar a que la tripulación haya abierto un atún antes de intentar determinar su sexo. Las gónadas son generalmente reconocibles. Los ovarios tienen forma de salchicha y son a menudo de un color anaranjado-amarillo. Los testiculos son más aplanados y de un color más apagado. En muchos peces se encuentra una capa de grasa pegada a las gónadas, fácilmente distinguible del tejido gonádico.

Las principales distinciones entre los sexos son la forma de la sección transversal de la gónada y el tamaño del lúmen (cavidad central de la gónada). En las hembras, las sección transversal de la gónada debería tener una forma redondeada y el lúmen debería ser amplio y con circunvoluciones. La gónada masculina debería ser más aplanada y poseer un lumen pequeño y liso. En cualquier caso, apriete ligeramente la gónada antes de buscar el lúmen. Ello debería permitir su observación.

Fig. 17

Fig. 17 Sección transversal de las gónadas de atún

Calamar

La determinación del sexo de un calamar maduro (illex illecebrosus) es relativamente simple, pero los individuos jovenes y pequeños causarán problemas.

Para determinar el sexo de un calamar, el observador puede cortar por la linea media ventral del manto, o pinzar un lado del manto y cortar una tira que le permita levantar el tejido restante para revalar los órganos internos. En ambos métodos, debe irse con cuidado para evitar la destrucción de las gónadas o de los órganos digestivos. Una vez se ha hecho un corte adecuado, el observador debería visualizar una configuración parecida al siguiente diagrama.

Fig. 18

Fig. 18 Muestreo de un calamar

La principal distinción entre machos y hembras consiste en la presencia de las glándulas nidamentales, en forma de tubo, en las hembras, y del saco espermatofórico, de forma espiral y apariencia estriada, presente en los machos. Las glándulas nidamentales son tubos delgados y opacos paralelos entre si, situados por encima del estómago y del ciego. El saco espermatofórico se encuentra a la derecha del ciego (visto desde arriba) y puede ser opaco, en los individuos inmaduros, o bien tener la apariencia de un remolino blanco cremoso en los individuos maduros.

El problema principal que presentan los calamares inmaduros consiste en que los dos órganos citados son muy transparentes y son dificilmente visibles cuando se visionan contra otros órganos. Una solución consiste en liberar un poco de tinta desde su bolsa y utilizarla para contrastar las áreas en las que probablemente se hallan las gónadas. Un método mejor consiste en buscar las glándulas del oviducto, dos protuberancias carnosas y puntiagudas que se hallan a ambos lados del estómago. Pueden ser fácilmente localizadas frotando suavemente el cuchillo contra las paredes del estómago. Si se localiza una tal protuberancia en ambos lados, entonces el individuo es hembra. Si sólo se localiza una en el lado derecho (el lado del ciego), entonces el animal será muy probablemente macho (esta protuberancia única se conoce con el nombre de glándula espermatofórica). El observador debería entonces confirmar esta identificación localizando el saco espermatofórico, redondeado, en la misma área general del animal.

4.11 Determinación de la edad en peces - Extracción de otolitos

Uno de los parámetros más importantes de interés para un biologo pesquero en el estudio de una muestra o captura de peces es la edad de los peces capturados. Son las muestras obtenidas por el observador las que proporcionan esta información mediante la extracción de los otolitos. Éstos son estructuras óseas que se localizan generalmente debajo del cerebro en los sáculos y actuan como un mecanismo de equilibrio. Cuando son cortados (o enteros) y visualizados con una lupa binocular, los anillos de crecimiento revelan una pauta diferencial que permite al científico contar la edad del pez, de una manera parecida a como una sección transversal del tronco de un árbol puede revelar la edad del árbol.

El observador debe obtener otolitos de una amplia variedad de especies. El grado de dificultad en su extracción puede variar desde especies tales como la merluza americana, en la que son de facil localización y extracción, hasta un grado ciertamente dificil, en algunas especies de peces planos. Cuando se extraen otolitos de los bacalaos y carboneros de mayor tamaño, pueden requerirse fuerzas y aptitudes más apropiadas de un herrero que de un biólogo. como norma, si el observador tiene siempre el cuchillo afilado y pueden agarrar bien el pez, deberia ser siempre capaz de localizar los otolitos.

Un concepto importante usado en la obtención de otolitos es el muestreo estratificado. Para obtener una mejor idea del crecimiento del pez y de las relaciones talla — edad, los biólogos pesqueros necesitan obtener una representación de las edades presentes en todas las clases de talla que puedan encontrarse en una poblacíon. Ello se consigue mediante la estratificación de la muestra. En vez de probablemente de otolitos de peces de tallas similares, y probablement de una misma edad, uno o dos pares de otolitos para estimar la edad. Los resultados consisten en que el observador se evita repeticiones innecesarias en la obtención de muestras y el lector de la edad obtiene resultados más coherentes.

La extracción de otolitos puede efectuarse mientras se realizan las frecuencias de tallas. El observador puede elegir entre colocar inmediatamente los otolitos en sobres etiquetados a medida que son extraidos o usar como ayuda una tabla de otolitos. La ventaja del primer método consiste en que el observador tiene menos trabajo al terminar la muestra. De cualquier manera, las desventajas del metodo son grandes también. Los sobres de papel se encuentran en un peligro constante de mojarse debido al goteo de la maquinaria de la sala de proceso o parque de pesca y el observador debe ser extremadamente diestro paracolocar los otolitos en estos sobres con los gusntes o con las manos mojadas. El segundo método consiste en utilizar una tabla de otolitos. colcocada esta tabla cerca del ictiómetro, el observador utiliza unas pinazas para colcocar cada par de otolitos en un agujero libre. El observador solo debe anotar la talla y el sexo del pez del que ha extraido los otolitos. Un método consiste en usar tiras de cinta adhesiva al lado de cada agujero de la tabla. Los resultados se presentan de una manera similar a la siguiente:

Fig. 19

Fig. 19 Tabla de otolitos

Al utilizar el metodo anterior, se aconseja que el observador use la hoja de frecuencias de tallas para mantener un control de las clases de tallas que se van llenando. Para logarar el objetivo de conseguir un par de otolitos por cada clase de talla de 1 cm de cada sexo, puede poner una marca en cada clase de talla y sexo a madida que se va llenando.

Un segundo método consiste en dibujar un esquema de la tabla de otolitos en una hoja en blanco. Puede mantenerse unido al estadillo 5 en la tabla ssobre la que se escribe a medida que se va trabajando la muestra. El observador debe fijarse en marcar adecuadamente el agujero por el que empieza, de manera que no dé la vuelta accidentalmente a la tabla al extraer los otolitos.

Un tercer método consiste en marcar un “principio” en la tabla y numerar cada agujero de la misma en un orden ascendente hasta el final. A medida que se van extrayendo otolitos, el obsrvador puede indicar en la hoja de frecuencia de tallas el número del agujero que contiene los otolitos para una talla y sexo determinados. En el siguiente ejemplo, el número del agujero ha sido indicado con lápiz en la columna vacia “0.5” al lado de la clase de talla y sexo del pez del que se han extraido los otolitos. Una vez hansido extraidos, colocados en sobres y etiquetados, los números deberian ser borrados.

Fig. 20

Fig. 20 Anotación de los números de los otolitos

El observador deberia también estar al corriente del número de otolitos extraídos de una determinada talla y sexo de una especie deteminada. El mejor método consiste en utilizar las hojas de estratificación que son suministradas en las oficinas centrales del programa. A continuación se presenta un ejemplo de una hoja de estratificación correctamente rellenada:

Fig. 21

Fig. 21 Hoja de estratificación de otolitos

“Estación” en el ejemplo anterior se refiere a la estación del año. Observe que el observador pudo obtener otolitos de todas las clases de talla excepto de la de 29 cm. Pudo muestrear la mayor parte de las clases de tallas dos veces y, sin darse cuenta, tomó un tercer par de otolitos de los peces de 24 y 25 cm. (No hay ninguna necesidad de rechazar los otolitos tomados en exceso de los requerimientos normales).

Si se rompe un otolito, debería de todas maneras incluirse en el sobre, o si un otolito de un par no ha podido localizarse, el otro puede también guardarse, colocarse en un sobre y ser etiquetado normalmente.

El sobre de los otolitos debería siempre ser etiquetado de la siguiente manera;

Fig. 22

Fig. 22 Sobre de otolitos

Nótese como este observador tomó también el peso de cada pez del que obtuvo otolitos.

4.12 Extracción de otolitos de especies particulares

Fig. 23

Fig. 23 Extracción de otolitos de merluza americana

Las merluzas americanas tienen cráneos relativamente blandos que se seccionañ fácilmente con un corte en diagonal. Un corte tal minimiza la probabilidad de romper los otolitos. Al hacer el corte, puede sujetarse el pez por los ojos o por las branquias.

Fig. 24

Fig. 24 Extracción de otolitos de eglefino

Ordinariamente se precisa un ángulo mayor para cortar el cráneo de los eglefinos, puesto que es más duro que el de la merluza. Al extraer los otolitos de este pez debería sujetarse siempre por las órbitas.

Fig. 25

Fig. 25 Extracción de otolitos de carbonero y bacalao

Estas dos especies pueden ocasionar problemas. Su gran tamaño y sus cráneos extremadamente duros, necesitarán a menudo un corte casi vertical con un golpe seco sólo para penetrar en el cráneo. Una vez se ha logrado hacer un pequeño agujero, puede cortase con el cuchillo de lado a lado para mantener la cabeza abierta. Debería sujetarse con fuerza el pez por las órbitas y colocarlo sobre una superficie firme. Aseqúrese que la dirección corte no apunta hacia el muestreador. Si este método no funciona, los otolitos pueden ser localizados extrayendo las bránquias y buscando la zona inferior de los sáculos, la cual se presenta en forma de dos bultos contra la base del cráneo.

Fig. 26

Fig. 26 Extracción de otolitos de brótola roja y blanca y de gallineta

La única dificultad con las brótloas roja y blanca consiste en que son especies difíciles de sujetar. Por otro lado, pueden ser tratadas prácticamente como el eglefino. Se solicitará pocas veces que los observadores extraigan otolitos de estas especies.

Las gallinetas tienen cráneo más quebradizos que otros peces por lo que una acción de aserrado puede ser de ayuda cuando se hace el corte.

Fig. 27

Fig. 27 Extracción de otolitos de peces planos

Los peces planos son las especies que presentan mayores dificultades para la extracción de sus otolitos. La mejor manera consiste en localizar la arista ósea que se encuentra entre los ojos y el opérculo y hacer un corte diagonal por detrás de los ojos. Los sáculos se encuentran el uno sobre el otro y los otolitos son generalmente de formas redondeadas y bastante pequeños. Se requerirá mucha prática antes de poder extraer con una cietra facilidad los otolitos de tales especies. Es una buena idea, para mantener la prática, seguir extrayendo otolitos de estas especies,

4.13 Notas sobre la extracción de estómagos

1. Para extraer el estómago, exprima en primer lugar hacia abajo cualquier contenido que pueda estar en el esófago y corte con las tijeras el ciego pilórico (parte anterior del intestino). Coloque la etiqueta de sujeción alrededor del esófago, ciérrela tan fuertemente como sea posible y corte el esófago tan lejos como se pueda por encima de la etiqueta.

En los casos en los que el estómago ha sido cortado, o en los que es tan pequeño que parece que la etiqueta pudiera caer, coloque los contenidos del estómago y la etiqueta con una pequeña cantidad de formol en una bolsa de plástico cerrada y aseqúrela correctamente.

2. Se recomienda colocar todas las muestras a un lado hasta que toda la extracción de estómagos de la calada haya finalizado, para preservarlas conjuntamente como una unidad. Una vez se han extraído todos los estómagos, inyecte cada uno de ellos con una pequeña cantidad de formol, de manera que empiecen a hincharse ligeramente. Colóquelos en una bolsa de plástico. Ello sirve para reducir la probabilidad de vertido del formol y de la posible contaminación de las áreas de proceso y muestreo.

3. Coloque las muestras de cada especie con la etiqueta adecuada en una bolsa separada para cada calada. Vierta un poco de formol en la bolsa y átela. Coloque la etiqueta de una manera tal que sea legible desde el exterior de la bolsa.

Cuando se asigne a un observador la obtención de estómagos, se le suministrará un equipo conteniendo:

2cubos con tape
2litros de formol al 10 %
1botella de plástico blando provista de una punta acortada para poder acoplar una aguja hipodérmica.
1frasco conteniendo dos agujas hipodérmicas y un cable limpiador
65–75etiquetas de sujeción tipo cincha para los estómagos
15–20bolsas de plástico con cierre hermético
7–10bolsas grandes de plástico
10–25etiquate de especie

4.14 Estadios de madurez en peces

Formando parte de un muestreo detallado de peces, el observador puede tener que determinar el estado de madurez de un pez; es decir, si un pez es inmaduro, si está en puesta o ha efectuado ya la puesta. Ello se lleva generalmente a cabo mediante un atento examen de las gónadas. El observador será formado previamente en el laboratorio o a bordo de un buque de investigación antes de que se le pida que determine los estadios de madurez sexual en peces durante una campaña de observación. La siguiente sección está dirigida a actuar como guía para la determinación de los eestadios de madurez del eglefino, merluza americana, bacalao y carbonero. Los peces planos, pez plata y gallineta no se examinan en la actualidad parra la determinación de su estado de madurez. Requerirían además distintas

caracterizaciones. Tales “estadios de madurez” en cada caso deberán ser definidos para cada grupo de peces por expertos en especie en cuestión.

CÓDIGOHEMBRAMACHO
Estadio I      Inmaduro1Ovarios pequeños y firmes;Los testiculos aparecen como
rosa pálido o amarillounos hilos claros, rizados
rojizo; membrana fina yy delgados,
transparente, óvulos
invisibles a simple vista,
Estadio II En maduración 12Ovarios ligeramente másLos testículos aumentan
anchos que en I, pero aúngradualmente de tamaño; de
pequeños y firmes; contenidoscolor rosado o de carne;
microscópicos; amarillo oaparecen capilares
amarillo rojizo; óvulossanguíneos,
opacos; aparecen capilares sanguíneos.
Estadio III En maduración3Los Ovarios ocupanLos testículos ocupan
aproximadamente la mitad deaproximadamente la mitad
la cavidad abdominal,de la cavidad abdominal;
rojizos con numerosos vasosempiezan a volverse
sanguíneos los óvulosblancos, con vasos
opacos son ahora visibles asanguíneos finos bastante
simple vista y dan a losconspícuos; no sale
ovarios un aspecto granular.lechaza cuando se ejerce presión.
Estadio IV Maduro4Posee unso pocos óvulosLos testículos son
claros en el primer estadodistintamente sinuosos,
progresando hasta tenerblancos y bastante
principalmente óvulos clarosdistendidos; grandes
pero los óvulos no se muevenlóbulos; una pequefia
libremente al presionarcantidad de lechaza
ligeramente, La puesta nopuede salir presionando,
ha empezado.
Estadio V Puesta5como el estadio IV, pero losTestículos muy blancos y
óvulos corren libremente concompletamente distendidos;
una ligera presión.la lechaza corre libremen-
te a la más ligera presión,
Estadio VI Post-puesta6Ovarios blandos, flácidos yTestículos hundidos y rojizos;
sanguinolentos; practicamentevaso deferente prominente
no quedan óvulos; colorcontra la superficie regular
púrpura.de los Testículos; queda un
poco de sangre.
Estadio VII Recuperación7Membrana de un color púrpuraLos Testículos vuelven al
y Ovarios ampliamente concolor rosa pálido, restos de
repliegues, sin óvulossangre en el órgano; vaso
visibles,deferente en forma de
cuerda,
Estadio VIII Reposo8Se parece mucho al estadioTestículos mayores que en I;
I, pero se encuentra en lossuperfície regular, a veces
peces grandes; ovariosde color grisáceo.
mayores que en I; también
membrana más gruesa ya no tan
transparente como en I.

4.15 Identificación de especies - General

El arte de identificar correctamente las especies de peces no es difícil de adquirir. El observador aprenderá a identificar muchas de las especies comunes durante su período de formación. Durante una campaña, no obstante, puede encontrarse con un pez que no le sea familiar. Lo mejor que puede hacer en este caso consiste en consultar una clave talcomo las ofrecidas en las Fichas de la FAO para la identificación de especies con propósitos pesqueros (p.e. bianchi y scott 1981); u otras claves ofrecidas por la FAO para distintas áreas de los océanos mudiales.Si ello no conlleva una identificación positiva, el observador debería intentar etiquetar y congerlar el pez para enviarlo a los laboratorios centrales. Si el pez es demasiado grande, una fotografía sera suficiente. Un tal pez debería anotarse como no-identificado con un peso apropiado en el estadillo de composición de la captura.


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