Enfoques del desarrollo forestal

El enfoque tradicional del desarrollo forestal formulado en los años sesenta no escapa a los principios de la economía liberal. En este enfoque, el interés de los proyectos se establece en función de un criterio de rentabilidad a partir del análisis de los costos-beneficios. Por consiguiente, la justificación de la opción estratégica y de las actividades propuestas se inscribe en un marco macroeconómico dominado por el concepto de rentabilidad.

Las estrategias sectoriales que inspiran la concepción de los programas de desarrollo se definen en función de objetivos de carácter colectivo y de una visión de conjunto de la economía. Este es el planteamiento que las organizaciones económicas o crediticias han propugnado hasta ahora en los países desarrollados y en los países en desarrollo. A esta forma de planificación que podría denominarse "heterorregulada" (pues la regulación de los sistemas económicos depende de una influencia exterior, el mercado) pueden oponerse planteamientos basados en la autorregulación, que preconizan un proceso de planificación "desde abajo" (o ascendente), en el cual un plan es un conjunto de proyectos considerados y justificados individualmente en los que las opciones locales son fundamentales. En este esquema, la estrategia nacional debería ser, pues, la síntesis de las estrategias locales. No es difícil comprender las dificultades que entraña ese planteamiento de descentralización y autogestión y los motivos que impulsan a los poderes públicos a rechazarlo.

Se ha estudiado una tercera vía en que se recurre a una dialéctica compleja, intermedia entre el enfoque ascendente y el descendente. Este enfoque, vinculado a los conceptos de ecodesarrollo, sostenibilidad y participación fue ganando cuerpo poco a poco en los años ochenta. El sector forestal, afectado por los fracasos del enfoque productivista, encontró en él una alternativa cuya aplicación se ha limitado a los países en desarrollo (desde la CNUMAD parecen interesarse en él algunos países desarrollados) y a los aspectos del desarrollo no vinculados a la economía mundial.