En Africa septentrional, ha terminado la recolección de los cereales de invierno de 1999; la producción de trigo de 1999 se calcula en alrededor de 13 millones de toneladas, un 9 por ciento menos que la de 1998, pero un 4 por ciento más que la media. La de cereales secundarios se estima en 11 millones de toneladas, volumen semejante al del año pasado. Sin embargo, la situación ha sido variada en la subregión. En Marruecos, se calcula una producción inferior en un 41 por ciento a la de 1998 debido a la insuficiencia de las precipitaciones y a la disminución de la superficie plantada. En cambio, las condiciones favorables imperantes en Argelia, Egipto y Túnez beneficiaron a los cultivos, y se calcula una producción de cereales superior a la media y ligeramente superior a la del año pasado.
En Africa occidental, las perspectivas para la cosecha son en general favorables en el Sahel, y los cultivos se están desarrollando satisfactoriamente en los países costeros. Unas lluvias excepcionalmente fuertes causaron grandes inundaciones en el Chad, Gambia, Malí, Mauritania, el Níger y el Senegal. Aunque esto benefició el desarrollo de los cultivos y pastizales, particularmente en Mauritania, el norte del Senegal y Malí, el exceso de agua podría reducir el potencial de rendimiento en las zonas bajas. En Liberia, las hostilidades siguen impidiendo las actividades de rehabilitación, pero la situación de los suministros de alimentos continúa mejorando. En Sierra Leona, la situación sigue siendo inestable y se prevé que la producción agrícola será semejante a la del año pasado. Sin embargo, gracias al acuerdo de paz, la situación general está mejorando.
En Africa central, las condiciones agroclimáticas son favorables hasta ahora en el Camerún y en la República Centroafricana. En la República del Congo la situación va mejorando, como también debería suceder en las partes orientales de la República Democrática del Congo tras el cese de las hostilidades acordado al final de agosto.
En Africa oriental, unas lluvias favorables caídas en julio y agosto mejoraron las perspectivas para los cultivos alimentarios que se cosecharán más avanzado el año. En Eritrea, los cultivos se están desarrollando satisfactoriamente, pese al estrés causado por las condiciones secas que habían imperado anteriormente. En el Sudán, unas lluvias intensas caídas a principios de septiembre provocaron inundaciones, pero los daños causados a los cultivos fueron exiguos. En Etiopía, las condiciones secas de hace unos meses malograron la cosecha "belg" y retrasaron la plantación de los cultivos de la temporada principal, lo cual podría afectar a los rendimientos. En Somalia, a pesar de una cierta mejora con respecto a la mala cosecha del año pasado, la producción "Gu" de este año fue también muy escasa debido a la sequía. En Kenia, se prevé que la cosecha principal de maíz de 1999 será mala debido a la sequía e infestación de plagas registradas en las principales zonas productoras. En Tanzanía y Uganda, donde ha terminado la recolección, se pronostican cosechas de cereales inferiores a la media debidas a la sequía.
En Africa austral, las últimas estimaciones cifran la producción total de cereales secundarios de 1999 en un nivel ligeramente superior a la cosecha inferior a la media del año pasado. Unas lluvias favorables caídas al comienzo de la campaña dieron pábulo al aumento de la superficie plantada, pero los rendimientos se han visto perjudicados por las lluvias excesivas caídas en algunas zonas y por una prolongada racha seca en otras. En Sudáfrica, el mayor productor de la subregión, la producción de maíz disminuyó con respecto al nivel bajo de 1998. También decreció la producción de maíz en Angola, debido a los trastornos causados en el sector agrícola por la intensificación de los disturbios civiles. En Botswana, Lesotho, Namibia, Zambia y Zimbabwe, la producción de cereales secundarios aumentó con respecto al año pasado pero siguió siendo inferior a la media. En cambio, en Malawi y Mozambique se obtuvieron cosechas abundantes de maíz, que dieron lugar a excedentes exportables en la campaña comercial 1999/2000 (abril/mayo). En Madagascar, se estima que la cosecha principal de arroz de 1999 fue superior a la producción media del año pasado.
En Asia, el comportamiento irregular del monzón de este año dio lugar a sequías localizadas en algunas partes y a inundaciones en otras. Tras las condiciones secas que habían imperado anteriormente en algunas partes del norte de China, unas precipitaciones aisladas caídas al final de agosto y principios de septiembre aumentaron la humedad del suelo para la plantación de trigo que comenzará dentro de poco. En las partes meridionales, unos chaparrones entre moderados e intensos recibidos en la primera década de septiembre mantuvieron los suministros de humedad para el arroz tardío (doble cultivo) pero retrasaron la recolección del arroz de monocultivo. En la India, la persistencia de las condiciones calurosas y secas en las partes occidentales y meridionales afectó ulteriormente a los cultivos. En el Pakistán, las precipitaciones fueron en general suficientes para la cosecha de arroz en las principales zonas productoras, y podrían traducirse en una cierta mejora de la producción total. Unas precipitaciones intensas provocaron nuevas inundaciones en la mayor parte del sur de la República de Corea, mientras que en toda la República Popular Democrática de Corea el tiempo seco continuó afectando a los cultivos en fase de granazón. En Viet Nam, unos chaparrones entre moderados e intensos aumentaron los suministros de humedad para el arroz, y se prevé una producción abundante. En Indonesia, unos chaparrones caídos en las principales zonas productoras de Java complementaron los abastecimientos de agua para riego para la segunda cosecha de arroz de regadío. En algunos países del Cercano Oriente, una sequía - la peor en decenios - redujo la producción de alimentos, especialmente en el Iraq, Jordania, Siria y la República Islámica del Irán. En el Afganistán, una cosecha de cereales muy menguada determinará la necesidad de importarlos en un nivel sin precedentes para 1999/2000. En los países asiáticos de la CEI, la producción de cereales de 1999 podría recuperarse en el Kazajstán a alrededor de 9 millones de toneladas, si las condiciones siguen siendo favorables hasta la cosecha. En Turkmenistán, la producción de cereales de 1999 alcanzó un nivel récord de 1,5 millones de toneladas, debido a incentivos y semillas mejores y al empleo de fertilizantes. En cambio, en la República de Kirguistán, continúa la tendencia a diversificar el cultivo de cereales, y la producción de trigo podría descender en 1999. En Tayikistán, es probable que la producción sea escasa debido al nivel bajo de los rendimientos. En el Cáucaso, las perspectivas indican también una producción menguada en Armenia, Azerbaiyán y Georgia.
En América central y el Caribe, unas lluvias normales favorecieron el desarrollo de los cultivos de cereales y frijoles de la primera temporada. En la mayoría de los países se prevé una recuperación respecto a la producción afectada por el huracán "Mitch" del año pasado, salvo en Honduras donde los precios bajos refrenaron a los agricultores de plantar. En México, unas lluvias normales caídas en la meseta meridional y la península de Yucatán beneficiaron el desarrollo de los importantes cultivos de primavera y verano que se recogerán a partir de finales de septiembre. En el Caribe, se pronostica una producción de maíz y arroz de nivel medio en Haití y la República Dominicana, mientras que en Cuba los déficit de humedad han afectado a los cultivos alimentarios secundarios.
En América del Sur, ha terminado la plantación de la cosecha de trigo de 1999/2000 en los países meridionales. En la Argentina, el Uruguay y Chile se prevé una recuperación de la producción con respecto a las cosechas afectadas por las condiciones atmosféricas imperantes en 1998/99; ya ha empezado la recolección y se pronostica provisionalmente una producción media. También han comenzado los preparativos de la tierra para la plantación de las cosechas de cereales secundarios de 1999/2000. En los países andinos, han comenzado los preparativos para la plantación de las cosechas de cereales secundarios en Bolivia, mientras que en el Ecuador y el Perú, la producción de la cosecha de maíz recogida recientemente se calcula provisionalmente en un volumen entre medio y superior a la media. En Colombia, la recolección del maíz de 1999 está muy avanzada y se prevé una producción de nivel medio. En Venezuela, país afectado por las intensas lluvias e inundaciones registradas últimamente, ha comenzado la recolección de las cosechas de maíz y arroz de 1999.
En Europa, la producción total de cereales de 1999 en la CE se pronostica en 200 millones de toneladas, alrededor de un 5 por ciento menos que el año pasado debido al aumento de la detracción de tierras obligatoria y a las malas condiciones del tiempo imperantes en algunas partes. También se prevé una disminución de la producción de cereales de 1999 en algunos países de Europa oriental debido a una reducción de la superficie plantada y/o al mal tiempo. En la República Federal de Yugoslavia (Serbia y Montenegro), la producción de cereales de 1999 es significativamente inferior a la del año pasado, debido al mal tiempo, a la escasez de fondos e insumos agrícolas, y a los conflictos. En los países de la CEI que están al oeste de los Montes Urales, las perspectivas para las cosechas de cereales de 1999 son contradictorias debido a las condiciones desfavorables y a los problemas económicos. En Belarús, es probable que la producción de cereales de 1999 sea inferior a la del año pasado (4,8 millones de toneladas). En Moldova, es probable también que la producción total de cereales sea inferior a la del año pasado (2,5 millones de toneladas). En la Federación de Rusia se prevén rendimientos medios, mejores que el año pasado, pero la escasez de combustible está retrasando la recolección en algunas partes. Las proyecciones indican un aumento de la producción, posiblemente a alrededor de 80 millones de toneladas, pese a un descenso del 8 por ciento de la superficie plantada y al tiempo desfavorable registrado en algunas partes. En Ucrania, los rendimientos se vieron afectados por el tiempo caluroso y seco registrado en junio y julio; la producción de cereales de 1999 se pronostica en alrededor de 27 millones de toneladas. En los países bálticos, la superficie total sembrada disminuyó algo en Letonia y Lituania, y las perspectivas para la producción de trigo de 1999 indican un volumen cercano al del año pasado y un aumento marginal de los cereales secundarios. En Croacia, la producción de trigo de 1999 descendió de un 50 por ciento, mientras que también descendió de forma pronunciada la superficie plantada con cereales secundarios debido a los problemas económicos y al exceso de lluvias. Según las perspectivas actuales, en Bosnia y Herzegovina la producción tanto de trigo como de cereales secundarios se mantendrá estable en alrededor de 200 000 y 900 000 toneladas, respectivamente.
En América del Norte, debido a una disminución de la superficie plantada se pronostica la producción total de trigo de los Estados Unidos en 62,8 millones de toneladas, un 9 por ciento menos que el año pasado. Las perspectivas para el maíz de 1999 han empeorado debido a las condiciones calurosas y secas registradas en las principales zonas productoras a finales de julio y en agosto. En base a la situación de los cultivos a principios de septiembre, la producción de maíz se pronostica en 238 millones de toneladas, alrededor de un 4 por ciento menos que la producción superior a la media de 1998. La situación de los cultivos de arroz de 1999 es buena, y se pronostica una cosecha récord de 9,7 millones de toneladas. En el Canadá, la recolección del trigo de 1999 está muy avanzada y en condiciones en general satisfactorias, y se espera una producción de 25 millones de toneladas, ligeramente superior a la de 1998. Pero la de cereales secundarios será inferior, ya que los agricultores han sembrado otros cultivos no cerealeros.
En Oceanía, las perspectivas para el trigo y los cereales secundarios de invierno de 1999 en Australia son hasta ahora satisfactorias. Si el tiempo sigue siendo favorable hasta la cosecha, se prevé otra buena cosecha de trigo de cerca de 22 millones de toneladas. La producción de cereales secundarios, sin embargo, podría disminuir debido a una reducción de la superficie plantada. La cosecha de arroz de 1999 está casi terminada, y se pronostica una producción cercana a un nivel máximo de 1 350 000 toneladas.