SITUACION POR REGIONES
En varios países del hemisferio norte se siguen recogiendo las cosechas de arroz de la tem-porada principal de 1999, y en algunos de ellos se esperan cosechas abundantes gracias a unas con-diciones de crecimiento en general favorables. En el hemisferio sur y en la zona ecuatorial la campaña arrocera está prácticamente terminada y, en algu-nos casos, ya han comenzado los preparativos para la campaña del 2000. Debido a una combinación de factores, tales como el aumento de la superficie plantada y de los rendimientos, se estima que en varios países la producción es superior al nivel bajo del año pasado y, en algunos, la producción arro-cera ha alcanzado los niveles más altos de todos los tiempos. En base a las estimaciones de las cose-chas del hemisferio sur y a las previsiones de cose-chas abundantes en varios países del hemisferio norte, la FAO pronostica actualmente que, si no se producen problemas imprevistos relacionados con el tiempo, la producción mundial de arroz alcanzará en 1999 los 590 millones de toneladas, cifra muy su-perior al nivel récord anterior de 578 millones de toneladas alcanzado en 1997.
La estimación más reciente de la FAO so-bre la producción de trigo de la región en 1999 se ha revisado ligeramente al alza a alrededor de 258 millones de toneladas, cerca de 3 millones de tone-ladas más que el año pasado, pero aun así un volu-men inferior a la excelente cosecha de 266 millones de toneladas de 1997. Las perspectivas generales para la cosecha de cereales secundarios de la región en 1999 siguen siendo satisfactorias. La producción total se calcula ahora en 220,6 millones de toneladas, alrededor de 5 millones de toneladas menos que la cifra pronosticada en agosto y 2,5 millones de toneladas menos que el año pasado. La revisión más reciente se debe principalmente a una disminución de las estimaciones correspondientes a China y la India. Pese a algunos casos aislados de inundaciones registrados en algunos países, hasta ahora las condiciones para las cosechas principales de arroz han sido en general favorables en la región. En muchos países se han empezado a recoger cosechas que ofrecen perspectivas halagüeñas y, según los pronósticos, la producción arrocera regional de 1999 aumentará en alrededor de 10 millones de toneladas respecto a la campaña anterior, situándose en 535 millones de toneladas.
En los países del Lejano Oriente de la región, la producción
de trigo en China se estima en 112 millones de toneladas, volumen ligeramente
superior al de 1998, pese a una grave sequía que en el invierno pasado
afectó a los cultivos en algunas partes. En la India, la producción
de 1999 alcanzó un nivel récord de 73,5 millones de toneladas,
7,6 millones de toneladas más que el año pasado y un volumen superior
en más de 4 millones de toneladas a la producción récord
anterior obtenida en 1997. En Bangladesh también se obtuvo una cosecha
excelente de trigo de 1,9 millones de toneladas, alrededor de un 5 por ciento
más que el año pasado. En el Pakistán, las informaciones
más recientes cifran la cosecha de trigo de 1999 en 18,2 millones de
toneladas, 200 000 toneladas más que la cifra pronosticada en el
informe anterior. En este nivel, la producción sería inferior
en alrededor de 500 000 toneladas a la del año pasado, pero todavía
muy superior a la media de los últimos cinco años. En muchos países
de la región, comenzará dentro de poco la siembra del trigo de
invierno que se recogerá a partir de abril del 2000. El objetivo
de producción del año próximo en la India se ha fijado
en 74 millones de toneladas, volumen semejante a la producción sin precedentes
de este año, mientras que el Pakistán prevé un incremento
del 10 por ciento de la producción, que se situaría en 20 millones
de toneladas.
Con respecto a los cereales secundarios, la producción total de China se calcula ahora en 145 millones de toneladas, 2 millones de toneladas menos que la cifra indicada en el informe anterior, pero aun así alrededor de 3 millones de toneladas más que el año pasado. En la India, la producción de cereales secundarios se estima ahora en alrededor de 29 millones de toneladas, unos 3,5 millones de toneladas menos que el pronóstico anterior y cerca de 2,5 millones de toneladas menos que el año pasado. Los cultivos se han visto afectados por la temporada monzónica variable que dio lugar a un exceso de precipitaciones en algunas partes y a sequías en otras.
En China (Continental), la producción total de arroz para la campaña 1999/2000 se pronostica en 195 millones de toneladas, 2 por ciento más que la cosecha reducida por efecto de las inundaciones del año pasado. Ha terminado la recolección de la cosecha doble del arroz temprano (de verano), la primera y más pequeña de las tres cosechas, y está a punto de terminar la del monocultivo de arroz (de otoño). Hay indicios de que la producción de la cosecha del arroz temprano es ligeramente mayor que la del año pasado, no obstante una pequeña disminución de la superficie plantada debida a la baja de los precios de compra estatales para los cereales de calidad inferior, que incluyen el arroz temprano.
| Trigo | Cereales secundarios | Arroz (cáscara) | Total | |||||
| 1998 | 1999 | 1998 | 1999 | 1998 | 1999 | 1998 | 1999 | |
| (. . . . . . millones de toneladas . . . . . . . ) | ||||||||
| Asia | 255,0 | 258,3 | 222,5 | 220,6 | 525,3 | 534,6 | 1 002,8 | 1 013,4 |
| Africa | 18,2 | 15,5 | 81,1 | 79,3 | 15,9 | 17,5 | 115,1 | 112,4 |
| América Central | 3,3 | 3,2 | 28,9 | 29,0 | 2,2 | 2,3 | 34,3 | 34,5 |
| América del Sur | 16,0 | 17,8 | 62,9 | 59,1 | 17,0 | 21,2 | 95,9 | 98,1 |
| América del Norte | 93,4 | 89,0 | 298,3 | 289,8 | 8,5 | 9,6 | 400,2 | 388,4 |
| Europa | 187,8 | 176,5 | 201,7 | 202,0 | 3,1 | 3,1 | 392,6 | 381,6 |
| Oceanía | 21,3 | 22,2 | 9,5 | 8,7 | 1,4 | 1,4 | 32,2 | 32,3 |
| TOTAL MUNDIAL | 595,0 | 582,4 | 904,8 | 888,6 | 573,3 | 589,8 | 2 073,1 | 2 060,7 |
| (383) 1/ | (395) 1/ | (1 883) 2/ | (1 866) 2/ | |||||
| Países en desarrollo | 276,8 | 276,9 | 384,0 | 376,9 | 548,3 | 563,2 | 1 209,2 | 1 217,0 |
| Países desarrollados | 318,2 | 305,4 | 520,8 | 511,7 | 25,0 | 26,5 | 864,0 | 843,7 |
Se prevé que comenzará dentro de poco la cosecha doble del arroz tardío (de invierno). En Viet Nam, prácticamente ha terminado la recolección de la cosecha de verano y otoño, la última de las tres cosechas de la campaña 1998/99, estimándose la producción en 8,1 millones de toneladas, lo que representa un aumento respecto a los 7,5 millones de toneladas del año anterior y lleva el total de la temporada a un nivel sin precedente de 30 millones de toneladas. Está en marcha la recolección de la cosecha del décimo mes, la primera de las tres de la campaña 1999/2000, mientras que la plantación de la cosecha de invierno y primavera comenzará en noviembre. Si las condiciones atmosféricas son buenas, la producción para 1999/2000 será igual, según pronósticos provisionales, al nivel récord de 1998/99. Está en marcha la recolección de la cosecha de la temporada principal en Filipinas y, en base a los informes actuales, se prevén buenos resultados. Suponiendo condiciones favorables en el resto de la campaña, las previsiones indican un incremento del 12 por ciento de la producción arrocera de 1999/2000 a alrededor de 11,5 millones de toneladas, debido tanto al aumento de la superficie como a las condiciones de crecimiento que han sido mejores que el año anterior. Además, la utilización mayor de variedades de alto rendimiento por parte de los agricultores y un sistema de riego mejorado deberían contribuir al aumento de la producción arrocera de este año.
En Tailandia, las intensas lluvias caídas durante julio y agosto han tenido repercusiones negativas mínimas en los cultivos de arroz. Está en marcha la recolección de la cosecha de la temporada principal de 1999/2000 y el Gobierno pronostica una producción de alrededor de 18,9 millones de toneladas de arroz, 3 por ciento más que el año anterior. En conjunto, la producción total del país en 1999/2000 podría alcanzar los 23 millones de toneladas, suponiendo una producción media de alrededor de 4 millones de toneladas de la segunda cosecha. En Myanmar, está en curso la recolección de la cosecha de la temporada principal, y la plantación de la cosecha secundaria comenzará el mes próximo. La producción arrocera de 1999 se pronostica en 17,5 millones de toneladas, nivel cercano al del año pasado. En el Japón, la campaña del arroz de 1999 está a punto de terminar y la producción se calcula en 11,3 millones de toneladas, volumen ligeramente superior al del año pasado. Aunque, no obstante la baja del precio de sostenimiento, la superficie plantada se mantuvo inalterada respecto al año pasado (alrededor de 1,8 millones de hectáreas), los cultivos se beneficiaron de unas condiciones de crecimiento superiores a la media. En Camboya, ha comenzado la recolección de la cosecha de la temporada húmeda de 1999/2000, y se prevé que la plantación de la de la temporada seca comenzará en noviembre. En conjunto, el Gobierno pronostica provisionalmente un aumento del 9 por ciento de la producción arrocera respecto al año pasado, a 3,8 millones de toneladas, debido a un incremento del 7 por ciento de la superficie y a una ligera mejora de los rendimientos. En la República Popular Democrática de Corea, la campaña del arroz no resultó tan afectada por las sequías y fuertes lluvias como se preveía. Además, aumentó la utilización de fertilizantes durante la campaña, gracias al incremento de la ayuda exterior. En consecuencia, la producción arrocera de 1999 debería ser ligeramente mejor que la del año pasado. Los informes provenientes de la República de Corea indican que los daños causados a los cultivos de arroz por los tifones que azotaron algunas partes del país a finales de julio y principios de agosto fueron menores que los del año anterior. La superficie plantada con arroz en 1999 fue semejante a la de la campaña anterior (alrededor de 1,1 millones de hectáreas) y, suponiendo unos rendimientos ligeramente mejores que en 1998, la producción arrocera se pronostica en cerca de 7,1 millones de toneladas.
En Bangladesh, en algunos distritos se han producido daños localizados a los cultivos de arroz relacionados con las inundaciones pero, en general, las repercusiones fueron mínimas. Ha terminado la recolección de la cosecha Aus para la campaña 1999/2000, calculándose la producción en 1,8 millones de toneladas, 13 por ciento más que el año pasado. Ha terminado la plantación de la cosecha Aman (temporada principal), y la recolección debería comenzar en noviembre. En la India, se ha comenzado a recolectar la cosecha de arroz Kharif de la temporada principal y, debido al efecto combinado del aumento de la superficie y de unas buenas condiciones de crecimiento, el Gobierno espera obtener una producción arrocera sin precedente de alrededor de 113 millones de toneladas. En conjunto, el pronóstico relativo a la producción de arroz del país en 1999/2000 se cifra provisionalmente en un nivel récord de 129 millones de toneladas. En el Pakistán, se sigue recogiendo la cosecha de arroz y todo parece indicar que se obtendrá otra vez una cosecha abundante, previéndose provisionalmente una expansión de la producción de alrededor del 3 por ciento respecto al año pasado, a un nivel récord de 7,3 millones de toneladas. En la República Islámica del Irán , se ha terminado de recoger la cosecha de arroz de 1999, pero la campaña estuvo plagada de problemas relacionados con el tiempo, incluida una sequía considerada como la peor en 30 años. En consecuencia, se estima que la producción arrocera ha descendido en un 18 por ciento respecto a la campaña anterior, situándose en 2,3 millones de toneladas.
En Indonesia, ha comenzado la recolección de la cosecha de la segunda temporada de 1999, y dentro de poco comenzará la plantación de la de la temporada principal. La producción arrocera de la campaña de 1999 se pronostica en torno a los 49,5 millones de toneladas, 300 000 toneladas más que en 1998. El incremento se atribuye a un alza del 2 por ciento de los rendimientos, que compensaría con creces una ligera disminución de la superficie. En Sri Lanka, se está recogiendo la cosecha Yala (secundaria) y el Gobierno pronostica una producción de alrededor de 980 000 toneladas. En general, se pronostica que la producción total de arroz de 1999 aumentará marginalmente respecto al año anterior a 2,7 millones de toneladas, cifra inferior al objetivo oficial de más de 3 millones de toneladas.
En los países asiáticos del Cercano Oriente, la producción de trigo disminuyó de forma pronunciada en el Afganistán, debido a las escasas precipitaciones y a un brote de plagas. Análogamente, una sequía fuerte ha reducido marcadamente la producción en el Iraq, Siria, Jordania y Turquía. En Arabia Saudita, la producción de trigo de 1999 se calcula en 1,5 millones de toneladas, alrededor de un 17 por ciento menos que el año pasado.
En los ocho países asiáticos de la CEI, la producción de cereales y legumbres se recuperará, según los pronósticos, a 20 millones de toneladas, respecto a los 17 millones de toneladas del año pasado. Se pronostica un aumento de 2 millones de toneladas de la producción de trigo de 1999, debido principalmente a unos rendimientos mejores obtenidos en Kazajstán, pero también en Turkmenistán, Uzbekistán y Georgia. La producción de cereales secundarios se pronostica en 3,4 millones de toneladas, frente a los 3 millones de toneladas de 1998. En Kazajstán, la superficie sembrada con cereales diminuyó a 11,3 millones de hectáreas, pero un tiempo seco y relativamente caluroso ha prolongado hasta octubre la recolección, y en definitiva la superficie cultivada podría no ser muy inferior a la del año pasado. Las condiciones de crecimiento han sido en general satisfactorias, y los rendimientos casi el doble del nivel bajo del año pasado. Todo parece indicar que la producción de cereales y legumbres de 1999 podría superar los 9,7 millones de toneladas, incluidos 7,5 millones de toneladas de trigo (1998: 5,5 millones de toneladas). Turkmenistán logró una cosecha récord de cereales y legumbres de 1,5 millones de toneladas (principalmente trigo) gracias a unos incentivos mejores y a una utilización mayor de semillas de calidad superior y de fertilizantes importados en una superficie más pequeña (570 000 hectáreas). En Uzbekistán, según informes oficiales, la producción de cereales y legumbres de invierno de 1999 es de 3,9 millones de toneladas, incluidos 3,7 millones de toneladas de trigo (1998: 3,6 millones de toneladas). Además, el país produce maíz y arroz en el verano y la producción total de cereales y legumbres podría alcanzar los 4 450 000 toneladas, en comparación con los 4,3 millones de toneladas del año pasado. En cambio, en la mayoría de los otros países de la CEI de esa región, las perspectivas indican una disminución de las cosechas de cereales y legumbres. En Kirguistán, ha continuado la tendencia a cultivar otros productos distintos de los cereales y legumbres, y los huracanes y las granizadas han causado daños a los cultivos. La producción de trigo debería estar en torno a 1,2 millones de toneladas, volumen algo inferior al del año pasado. En Tayikistán, los informes más recientes indican que la disminución de la superficie sembrada no fue tan pronunciada como se temía, pero los rendimientos son muy escasos. Es probable que la producción de cereales y legumbres de 1999 alcance un nivel bajo de 430 000 toneladas, 70 000 toneladas menos que el año pasado. En el Cáucaso, los precios bajos de los cereales y legumbres en presencia de las exportaciones baratas de la Federación de Rusia después de la devaluación del rublo en 1998 determinaron una reducción de la superficie sembrada con cereales y legumbres de invierno (principalmente trigo), y las perspectivas indican una disminución de las cosechas de 1999 en Armenia y Azerbaiyán. En cambio, en Georgia, unas condiciones de crecimiento buenas han contrarrestado la disminución de la superficie, y la producción total de cereales y legumbres podría aumentar del 10 por ciento a 880 000 toneladas, incluidas 280 000 (1998: 200 000) toneladas de trigo.
AFRICA SEPTENTRIONAL: La producción de trigo en la subregión se estima en alrededor de 11,5 millones de toneladas, 17 por ciento menos que en 1998. La disminución mayor tuvo lugar en Marruecos, donde la producción descendió a 2,1 millones de toneladas, alrededor de la mitad del volumen de 1998, como consecuencia de la insuficiencia de las precipitaciones y de la disminución de la superficie plantada. En Argelia, la producción también disminuyó de forma pronunciada, en un 25 por ciento, a alrededor de 1,5 millones de toneladas. En cambio, en Túnez, aumentó un 3 por ciento a 1,4 millones de toneladas. También aumentó la cosecha de trigo de regadío en Egipto, estimada en 6,3 millones de toneladas, alrededor de un 4 por ciento más que el año pasado.
La producción de cereales secundarios en la subregión, que también se vio afectada por un tiempo desfavorable, se estima en 9,1 millones de toneladas, alrededor de un 15 por ciento menos que el año pasado. Ello se debe a la disminución de la producción de Argelia, Egipto y Marruecos, mientras que en Túnez la producción debería aumentar alrededor del 30 por ciento.
En Egipto, ha comenzado la recolección de la cosecha de arroz de 1999. Las estimaciones oficiales indican una expansión de la superficie de más del 30 por ciento respecto al año anterior, a 675 000 hectáreas, mientras que los rendimientos deberían arrojar un nuevo nivel récord de más de 8,8 toneladas por hectárea, gracias a unas condiciones de crecimiento favorables y a una disponibilidad suficiente y oportuna de insumos. Como consecuencia, se prevé un incremento del 31 por ciento de la producción arrocera a casi 6 millones de toneladas.
AFRICA OCCIDENTAL: En el Africa occidental, están a punto de recogerse los cereales secundarios. En el Sahel, las perspectivas generales para las cosechas son favorables, gracias a unas lluvias abundantes y generalizadas caídas desde julio. En la mayoría de los países se prevén cosechas entre normales y superiores a lo normal. Sin embargo, los altos niveles del agua en los ríos Senegal y Níger causaron inundaciones, principalmente en Mauritania. Las perspectivas para los cultivos de regadío aluviales y fuera de estación son buenas. Una serie de misiones conjuntas FAO/CILSS de evaluación de cultivos visitará todos los países sahelianos al final de octubre para estimar la producción de cereales de 1999. En los países costeros del Golfo de Guinea, las condiciones de crecimiento han sido en general favorables y la producción de la cosecha principal que se está recogiendo debería ser entre normal y superior a lo normal. Unas lluvias torrenciales caídas al final de septiembre y en octubre causaron inundaciones localizadas en algunos países y podrían haber afectado la recolección de las cosechas principales, especialmente en Nigeria. Las perspectivas para la cosecha son favorables en Liberia, salvo en el distrito de Lofa donde la inseguridad imperante en agosto y septiembre trastornó las actividades agrícolas. No se prevé una recuperación de la producción en Sierra Leona, que seguirá dependiendo mucho de la asistencia humanitaria para satisfacer sus necesidades de consumo en el 2000.
La recolección de la cosecha de arroz de 1999 ha comenzado en algunos países de la subregión, pese a algunos problemas aislados relacionados con el tiempo, además de los disturbios civiles que continúan trastornando las actividades agrícolas en algunos países. En general, la producción arrocera de la subregión debería aumentar ligeramente respecto al año pasado a alrededor de 7,2 millones de toneladas. En Nigeria, el mayor productor de la subregión, el Gobierno volvió a aplicar una subvención del 25 por ciento para fertilizantes, con la esperanza de aumentar su utilización.
AFRICA CENTRAL: En el Africa central, unas lluvias copiosas beneficiaron a los cereales secundarios en el Camerún y la República Centroafricana. Los disturbios civiles han impedido la realización de las actividades agrícolas y comerciales normales en la República del Congo y en la República Democrática del Congo (RDC). En parte oriental de la RDC, están a punto de comenzar las plantaciones para la temporada A.
AFRICA ORIENTAL: Las perspectivas para la cosecha de trigo de 1999 son inciertas en Etiopía debido al retraso y mala distribución de las lluvias en algunas de las principales zonas productoras. En Kenya, donde se ha comenzado a recoger la cosecha, se prevé una producción muy superior a la media debido a la sequía. En el Sudán, la producción de trigo de 1999 se calcula en alrededor de 165 000 toneladas, volumen inferior en un 70 por ciento a la media de los últimos cinco años, debido a una disminución de la superficie plantada, a la siembra tardía y a las temperaturas elevadas.
Está a punto de comenzar la recolección de las cosechas de cereales secundarios de 1999 en las zonas septentrionales de la subregión, mientras que en las partes meridionales ya ha terminado. Según pronósticos provisionales, la producción disminuirá en general debido principalmente a la sequía, las plagas y el conflicto civil. En Somalia, a pesar de una cierta recuperación de la cosecha muy menguada del año pasado, la producción "Gu" de 1999 se estima en 136 000 toneladas, alrededor de un 32 por ciento menos que el nivel medio posterior a la guerra, debido a la sequía y a los disturbios civiles. En Tanzanía, el pronóstico más reciente cifra la producción de cereales secundarios en 3,2 millones de toneladas, cerca de un 4 por ciento menos que la media de los últimos cinco años debido a la irregularidad de las lluvias. En Uganda, las cosechas de cereales secundarios de la primera temporada, recogidas recientemente, se vieron afectadas por una sequía prolongada en algunas zonas y se estima que la producción total es inferior a la del año pasado. En Kenya, se pronostica que la producción de la cosecha de maíz, que se está recogiendo, será inferior a la media debido a la sequía y a una infestación de plagas en las principales zonas productoras. En Etiopía, las cosechas "belg" de la temporada secundaria de 1998/99 que se recogieron hace unos meses se perdieron debido a la sequía, y las perspectivas para las cosechas "meher" de la temporada principal de 1999/2000, que se recogerán a partir de diciembre y enero, son inciertas debido al comienzo tardío de las lluvias que retrasó los preparativos de la tierra y la plantación de los cultivos de ciclo largo. En Eritrea, unas lluvias entre medias y superiores a la media caídas durante la campaña beneficiaron a los cultivos en desarrollo de la mayoría de las zonas productoras del país, y las perspectivas para la cosecha son favorables. En el Sudán, pese a algunas inundaciones, las perspectivas generales para los cereales secundarios de este año son favorables como consecuencia de las copiosas lluvias recibidas durante la temporada.
Se prevé que la producción de arroz en el Africa oriental disminuirá con respecto al año pasado debido principalmente a la insuficiencia de las precipitaciones. La recolección del arroz ha terminado en Tanzanía, el mayor productor de arroz de la subregión, y la producción de 1999 se estima provisionalmente en alrededor de 800 000 toneladas, 20 por ciento menos que el año anterior. Además de la irregularidad de las lluvias, también la escasa utilización de fertilizantes contribuyó a la disminución de los rendimientos.
AFRICA AUSTRAL: La estimación más reciente de la FAO sobre la producción de cereales secundarios de la subregión en 1999 es de 15,3 millones de toneladas, un 3 por ciento más que el año pasado, aproximadamente, pero 7 por ciento menos que la media de los últimos cinco años. Unas lluvias favorables caídas al comienzo del período vegetativo indujeron a aumentar la superficie plantada, pero los rendimientos se vieron afectados por las lluvias excesivas recibidas en algunas zonas y por una sequía prolongada registrada en otras. En Sudáfrica, el mayor productor de la subregión, la producción de maíz disminuyó un 8 por ciento respecto del nivel ya inferior a la media del año pasado, situándose en 7 millones de toneladas. En Angola, a pesar de unas condiciones de crecimiento favorables la producción de maíz descendió un 15 por ciento, debido a los trastornos causados por el conflicto civil actualmente en curso. En Swazilandia, la producción de maíz disminuyó del 18 por ciento respecto del año pasado pero se mantuvo en torno a la media. Aunque en los otros países de la subregión la producción de cereales secundarios aumentó respecto de 1998, fue muy inferior a los niveles medios obtenidos en Zimbabwe, Zambia, Lesotho, Botswana y Namibia. En Malawi y Mozambique se obtuvieron cosechas muy buenas, que dejaron excedentes exportables en ambos países.
Ha comenzado en la subregión la recolección de la cosecha de trigo de 1999. Las perspectivas iniciales son malas debido a otra cosecha menguada obtenida en Sudáfrica, que representa alrededor del 80 por ciento de la producción de la subregión. Según los pronósticos más recientes, la producción será de 1,5 millones de toneladas, cifra casi idéntica a la del año pasado. En cambio, en Zimbabwe se pronostica un aumento de la producción debido al incremento de la superficie plantada y de los rendimientos.
La campaña del arroz de 1999 ha terminado en la subregión y la producción de Madagascar, que representa más del 90 por ciento de la producción arrocera de la subregión, se calcula en torno a los 2,6 millones de toneladas, 8 por ciento más que el año anterior. Aunque las lluvias comenzaron tarde al comienzo de la campaña, la pluviosidad fue abundante durante la temporada y, a diferencia del año pasado, las pérdidas debidas a las langostas migratorias malgaches fueron limitadas gracias las medidas de control aplicadas durante la última parte de 1998 y principios de 1999. En Mozambique, como consecuencia de unas condiciones de crecimiento favorables y de una ligera expansión de la superficie plantada, la producción arrocera de la campaña de 1999 se calcula nuevamente en un nivel récord de 214 000 toneladas, frente a la cifra récord anterior de 192 000 toneladas alcanzada el año pasado.
Se han declarado estados de alerta o de emergencia en varios países centroamericanos como consecuencia de las tempestades y fuertes inundaciones registradas desde mediados de septiembre. La situación es particularmente grave en algunas partes localizadas, que resultaron seriamente afectadas el año pasado por los efectos del huracán "Mitch". Pese a la evacuación masiva de las poblaciones de las zonas en peligro, se señala un número cada vez mayor de víctimas así como daños considerables a las viviendas y a la infraestructura. Además, aunque es demasiado pronto para evaluar el alcance total de los daños, las incesantes lluvias e inundaciones ya han afectado las plantaciones de importantes cultivos de exportación, tales como las bananas y la caña de azúcar, y podrían tener algunas repercusiones en la cosecha de cereales secundarios de la segunda temporada de 1999. En el Caribe, algunas de las Islas Leeward sufrieron daños, especialmente a las viviendas y a la infraestructura, causados por las lluvias y vientos huracanados de mediados de octubre.
Las principales zonas productoras de trigo del noroeste de México no resultaron afectadas por las recientes lluvias huracanadas, y ha comenzado la plantación de la cosecha de trigo de regadío de 1999/2000. La superficie que se cultivará sigue siendo una incógnita porque, pese a unas lluvias ligeras recibidas después de los recientes huracanes, los niveles de agua de los embalses están por debajo de lo normal debido a una racha seca prolongada que se había registrado anteriormente.
La plantación de los cultivos de cereales secundarios y frijoles de la segunda temporada de 1999/2000 se ha retrasado en la subregión como consecuencia directa de las lluvias intensas. En algunos países se ha realizado una evaluación provisional de los daños causados a las plantaciones de la segunda temporada y a los cultivos de la primera temporada recolectados recientemente. A pesar de las pérdidas sufridas, la producción total de maíz (de ambas cosechas) se pronostica provisionalmente en torno a la media en Costa Rica, El Salvador, Guatemala, y Nicaragua, mientras que en Honduras se prevé una producción inferior a la media. En México, donde recién había comenzado la recolección de la importante cosecha de maíz de primavera y verano cuando sobrevino el mal tiempo registrado últimamente, se señalan algunos casos localizados de daños a los cultivos, principalmente en los estados de Puebla, Veracruz, Hidalgo y Tabasco, así como en Chiapas, importante estado productor de maíz. Pero ello no debería influir sobre la producción total de 1999 porque las perspectivas para las otras principales zonas productoras del país siguen siendo favorables. Según las previsiones, en el Caribe, la República Dominicana y Haití las cosechas de cereales y otros alimentos básicos alcanzarán un nivel medio, debido principalmente a las condiciones favorables de tiempo y a los programas de recuperación ejecutados por el Gobierno tras los efectos negativos causados por el huracán "Georges" el año pasado. En Cuba, unas lluvias superiores a lo normal caídas en los dos últimos meses han colmado en parte los déficit de humedad del suelo causados en algunas partes del país por una sequía prolongada; siguen señalándose, sin embargo, déficit en las partes orientales, en las que es probable que se agrave la situación al comenzar la estación seca. Ha comenzado la recolección de las cosechas de la primera temporada de 1999/2000, y los pronósticos iniciales apuntan a una producción media.
En la Argentina, las condiciones atmosfé-ricas registradas últimamente han continuado favore-ciendo la cosecha de trigo de 1999/2000 en fase de desarrollo. La recolección comenzará a partir de me-diados de octubre, pronosticándose provisionalmente una producción ligeramente superior a la media. En el Brasil, el tiempo en general seco imperante en los principales estados productores del sur ha bene-ficiado las operaciones de la cosecha, y la producción debería estar en torno a la media. En el Paraguay y el Uruguay, donde las cosechas recién han comenzado, las perspectivas son buenas y se prevén produc-ciones entre medias y superiores a la media, respecti-vamente. En Chile, ha comenzado la plantación de las cosechas del 2000, previéndose un aumento de la superficie plantada con respecto a la superficie afectada por la sequía del año pasado. En cuanto a los países andinos, en Bolivia ha comenzado la recolección de la cosecha de trigo de invierno de la segunda temporada de 1999 (plantada en abril y mayo, principalmente en el departamento oriental de Santa Cruz). Se prevé una producción inferior a la media a causa de los rendimientos inferiores a lo normal obtenidos hasta ahora, debidos principal-mente a una racha seca imperante durante la siem-bra. En el Perú, se ha terminado la mayor parte de la cosecha de trigo de 1999 con un tiempo en general seco, y la producción para el año se calcula provisio-nalmente en un nivel ligeramente inferior a la media, mientras que en el Ecuador se ha obtenido una producción de nivel medio.
La plantación de los cultivos de cereales secundarios de 1999/2000 ha comenzado en la Argentina en condiciones en general secas. Se señala, sin embargo, que la humedad del suelo es suficiente, previéndose que la superficie plantada con maíz aumentará con respecto a la media del año pasado, gracias a que los precios son atractivos. También en el Brasil continúa la plantación de la cosecha de maíz con un tiempo en general seco, pero con condiciones de humedad del suelo favorables. Se pronostica que la superficie plantada aumentará con respecto a 1998/99, en previsión principalmente de que se producirá alguna mejora en los precios locales del maíz. En Chile, la siembra de la cosecha de maíz de 1999/2000 ha comenzado en condiciones en general secas. Si las lluvias se normalizan, la superficie plantada debería aumentar considerablemente respecto del año pasado cuando los cultivos resultaron gravemente afectados por la sequía. En los países andinos, en Bolivia recién ha comenzado en algunas partes del país, en condiciones en general secas, la plantación de la cosecha de maíz de la primera temporada de 1999/2000. En el Perú, está muy avanzada la plantación de las cosechas de maíz blanco y amarillo, mientras que prácticamente está terminada la recolección de las cosechas de 1999. Se estima provisionalmente que la producción será ligeramente superior a la media. En Colombia, unas lluvias entre normales y abundantes caídas desde septiembre han beneficiado el desarrollo de las cosechas de cereales de la primera temporada de 1999/2000. Ha comenzado la recolección y, aunque se prevé una disminución de la producción de maíz respecto al año pasado, estaría todavía en torno a la media. En Venezuela, unos temporales e inundaciones registrados en diversos estados han afectado a los cultivos. Ha terminado la recolección de las cosechas de maíz y sorgo de 1999 y, no obstante los daños sufridos, las producciones se calculan en torno a la media.
Ha terminado en la subregión la recolección de la cosecha de arroz de 1999, previéndose una producción arrocera de 21 millones de toneladas, 25 por ciento más que la cosecha del año pasado que se vio afectada por problemas meteorológicos relacionados con El Niño. Ha comenzado en algunos países la plantación de la cosecha de arroz del 2000, pero todavía no se tienen informaciones sobre las intenciones de siembra de los agricultores.
En los Estados Unidos, el informe del USDA de octubre sobre las cosechas cifra la producción total de trigo de 1999 (de invierno y primavera) en 63,1 millones de toneladas, 9 por ciento menos que en 1998 y un volumen ligeramente inferior a la media de los últimos cinco años. La plantación del trigo de invierno que se recogerá el año próximo está muy avanzada, y algo adelantada respecto a lo normal, gracias al tiempo seco favorable que imperó en la mayor parte de las Grandes Praderas al final de septiembre y principios de octubre. Se señala, sin embargo, que algunas zonas necesitan más humedad para la germinación de los terrenos plantados recientemente. Al 12 de octubre se había plantado alrededor del 70 por ciento de la superficie total de trigo prevista, frente al 56 por ciento del año anterior y a la media quinquenal de 64 por ciento. Para la misma fecha, había despuntado el 39 por ciento de la cosecha de trigo de invierno, frente al 23 por ciento del mismo período del año pasado y al 38 por ciento de la media quinquenal. Con respecto a la superficie definitiva que se sembrará con trigo en este otoño, hay una gran incertidumbre. Siendo los precios actuales de la nueva cosecha (precios de futuros) más bajos que los del mismo período del año pasado, los agricultores tienen pocos incentivos para aumentar la superficie plantada y podrían continuar optando por otros cultivos en busca de ingresos mejores. En el Canadá, la recolección del trigo estaba muy avanzada a principios de octubre, aunque ligeramente retrasada con respecto al ritmo medio. La siembra tardía, el lento desarrollo de los cultivos debido a un período vegetativo frío y húmedo, y los retrasos de la cosecha a causa del mal tiempo, han sido factores que han contribuido a una marcha más lenta de lo normal de la recolección en este otoño. Se señala que la calidad de los cultivos tempranos es buena, pero se supone que la de los cultivos tardíos se verá afectada por los daños causados por las heladas. El pronóstico oficial más reciente de principios de octubre cifra la producción de trigo de 1999 en unos 25,2 millones de toneladas, volumen ligeramente superior a los pronósticos precosecha debido a que los rendimientos han sido mejores de lo previsto. A nivel de pronóstico, la producción superaría en alrededor del 7 por ciento a la del año pasado, pero sería inferior en cerca del 5 por ciento a la media de los últimos diez años.
Las perspectivas para la cosecha de los cereales secundarios de 1999 de los Estados Unidos siguen siendo en general satisfactorias. El pronóstico de octubre del USDA cifra la producción total de los cereales secundarios en 264 millones de toneladas, alrededor de 8 millones de toneladas menos que la del año pasado. Se supone que al maíz corresponderá la mayor parte de la mengua, ya que se prevé una disminución de su producción de alrededor de 8 millones de toneladas, a unos 240 millones de toneladas, a la vez que se pronostican también alguna merma de las cosechas de cebada, avena y centeno. En cambio, se prevé una producción mayor de sorgo. Al 12 de octubre, prácticamente toda la cosecha de maíz estaba madura, y el ritmo general de la recolección esta muy adelantado con respecto a la media de los últimos cinco años. En el Canadá, se prevé que la producción total de cereales secundarios disminuirá en 1999 a 25,6 millones de toneladas, 3 por ciento menos que el año pasado pero 6 por ciento más que la media de los últimos diez años.
En los Estados Unidos, la recolección de la cosecha de arroz de 1999 está muy avanzada ya que para principios de octubre se había recogido alrededor del 80 por ciento de la cosecha. El pronóstico relativo a la producción arrocera total en 1999 se ha ajustado a la baja en alrededor de 100 000 toneladas respecto del informe anterior, situándose en 9,5 millones de toneladas, en base a las informaciones más recientes que indican una disminución de los rendimientos y de la superficie cultivada con respecto a lo previsto. Aun así, la producción sería todavía de un nivel récord.
Las estimaciones más recientes de la FAO cifran la producción total de cereales de la región en 1999 en cerca de 382 millones de toneladas, 3 por ciento menos que el año pasado. La producción de trigo se calcula en alrededor de 176 millones de toneladas, cerca de un 6 por ciento menos que en 1998, mientras que la de cereales secundarios se mantiene prácticamente inalterada en 202 millones de toneladas. La pequeña producción de arroz de la región se estima en 3,1 millones de toneladas.
El pronóstico más reciente de la FAO cifra la producción total de cereales de 1999 en la CE en casi 202 millones de toneladas, alrededor de un 2 por ciento menos que el año pasado pero un volumen superior a la media de los últimos cinco años. La disminución de la producción se atribuye principalmente a una reducción de la superficie sembrada debida a un incremento del 5 por ciento de los requisitos de detracción obligatoria y a las condiciones desfavorables del tiempo. La producción de trigo se calcula ahora en 97,6 millones de toneladas, 5 por ciento menos que en 1998. La mayor parte de la mengua se produjo en Francia donde, según estimaciones, la producción descendió de alrededor de 3 millones de toneladas respecto a 1998, situándose en 37 millones de toneladas. Otras reducciones importantes entre los principales productores de la CE se señalan en Dinamarca, España y Alemania. La producción total de cereales secundarios se pronostica ahora en 101,6 millones de toneladas, 4 por ciento menos que el año pasado. En la CE, está en marcha la recolección de la cosecha de arroz de 1999, y según las previsiones, la producción estará cercana a la estimación oficial del año pasado, de alrededor de 2,6 millones de toneladas.
En Albania, se estima que la producción de cereales de 1999 ha descendido a alrededor de 0,5 millones de toneladas (incluidos 0,3 millones de toneladas de trigo). El mal tiempo afectó la plantación del trigo de otoño, y la preferencia de los agricultores por sustituir los cereales tradicionales con cultivos comerciales más rentables continúa limitando la superficie sembrada con cereales. Según las perspectivas actuales, en Bosnia y Herzegovina la producción tanto de trigo como de cereales secundarios se mantendrá estable en alrededor de 200 000 toneladas y 900 000 toneladas , respectivamente. En Bulgaria, la producción de trigo ha descendido muy por debajo de la media en 1999 a un volumen estimado en 2,6 millones de toneladas, debido a una disminución de la superficie plantada y de las aplicaciones de fertilizantes. Se supone, además, que este año debido a las infestaciones de enfermedades y plagas una gran parte de la cosecha no podrá utilizarse para el consumo humano. También se estima que ha disminuido algo en 1999 la producción de maíz, a alrededor de 1,5 millones de toneladas, debido a una reducción de la superficie plantada y al tiempo caluroso y seco imperante en el verano de este año que afectó a los rendimientos. En Croacia, la producción de trigo de 1999 se redujo más o menos a la mitad, y también descendieron tanto la superficie como los rendimientos de los cereales secundarios, como reflejo principalmente de los problemas económicos y del exceso de lluvias. En la República Checa, la producción total de cereales de 1999 se estima en 6,9 millones de toneladas, volumen ligeramente superior a la del año pasado, gracias a que los rendimientos han sido mejores y han contrarrestado la reducción de la superficie. Según las estimaciones, el trigo representa poco más de 4 millones de toneladas del total.
En la República Federal de Yugoslavia (Serbia y Montenegro), la producción de trigo de 1999 fue de sólo 2,2 millones de toneladas, alrededor de un 27 por ciento menos que la de 1998. Pese a los trastornos causados este año por la guerra y a la es-casez de combustible y piezas de repuesto, los infor-mes oficiales indican que aumentó la superficie sem-brada con cereales de primavera, pronosticándose la producción de cereales secundarios en 6,5 millones de toneladas. En Hungría, las estimaciones más recientes cifran la producción de trigo de este año en un nivel bajo de 2,6 millones de toneladas, casi la mitad de la de 1998 debido a una fuerte disminución de la superficie plantada y a las intensas lluvias e inundaciones. En cambio, se estima que la producción de cereales secundarios ha aumentado ligeramente como reflejo de un incremento de la producción de maíz que compensó con creces la disminución de la de los otros cereales secundarios. En Polonia, la producción de cereales de 1999 se calcula en alrededor de 26,5 millones de toneladas, algo inferior al nivel excelente del año pasado pero superior a la media de los últimos cinco años. En Rumania, la producción de cereales de 1999 se calcula en alrededor de 16,5 millones de toneladas. La de trigo se pronostica en sólo 4,6 millones de toneladas, frente a los 5,2 millones de toneladas del año anterior, debido a una reducción de la superficie plantada y también a los daños causados a los cultivos por efecto de las inundaciones y las lluvias torrenciales registradas en el verano de este año. En cambio, se prevé que la cosecha del maíz de verano se recuperará a alrededor de 10,5 millones de toneladas respecto al nivel bajo del año pasado.
En la República Eslovaca, la producción de cereales en 1999 se estima en unos 3,3 millones de toneladas, poco menos que el año pasado y un volumen ligeramente inferior al de los últimos cinco años. Una disminución pronunciada de la producción de trigo a alrededor de 1,2 millones de toneladas se ha visto compensada sólo en parte por el aumento de la producción de cereales secundarios (principalmente cebada y maíz). En Eslovenia, la producción de cereales de 1999 se estima en alrededor de 500 000 toneladas (incluidas 155 000 toneladas de trigo), 15 por ciento menos que la buena cosecha del año pasado y un volumen inferior a la media de los últimos cinco años. La superficie sembrada con trigo de invierno descendió y, según se informa, el mal tiempo imperante durante el verano ha afectado a los rendimientos. En la ex República Yugoslava de Macedonia, se estima que la produc-ción de cereales en 1999 es ligeramente superior a la del año pasado, situándose en alrededor de 770 000 toneladas (incluidas 380 000 toneladas de trigo).
En los países bálticos, los bajos precios de los cereales han deprimido las superficies sembradas con cereales y la utilización de insumos. Según los pronósticos, la producción total de cereales pasará de los 4,5 millones de toneladas en 1998 a 3,7 millones de toneladas. La superficie total sembrada con trigo descendió del 16 por ciento, y la producción de 1999 se pronostica en 1,2 millones de toneladas de trigo (1998: 1,6 millones de toneladas). En los tres países la producción es menor, pero la disminución es más marcada en Lituania, donde la producción de cereales de 1999 se cifra oficialmente en 2,1 millones de toneladas, frente a los 2,7 millones de toneladas del año pasado.
En los países de la CEI situados al oeste de los Montes Urales, las informaciones más recientes indican que la producción de cereales y legumbres de 1999 puede ser sólo marginalmente superior a la del año pasado, menguada por causa de la sequía. Al aproximarse la terminación de la cosecha de todos los cereales, salvo el maíz, la FAO pronostica la producción de cereales y legumbres de Belarús, Moldova, la Federación de Rusia y Ucrania en 92,5 millones de toneladas, sólo 2,5 millones de toneladas más que la de 1998. La producción total de trigo en estos cuatro países se pronostica en 48,4 millones de toneladas, cifra prácticamente inalterada respecto a la de 48,8 millones de toneladas del año pasado, producción menguada por efecto de la sequía. Como todavía no ha terminado la recolección del maíz, la producción total de cereales secundarios se pronostica provisionalmente en 41,5 millones de toneladas, alrededor de 2,7 millones de toneladas más que en 1998. En Belarús, los problemas económicos, las heladas caídas en primavera y la sequía del verano redujeron la producción de cereales y legumbres de 1999 a 3,7 millones de toneladas, el nivel más bajo de todos los tiempos (1998: 4,9 millones de toneladas). En Moldova, se indica que la producción total de cereales y legumbres de 1999 podría descender a 2,1 millones de toneladas (1998: 2,5 millones de toneladas); la de trigo se cifra oficialmente en sólo 800 000 toneladas (1998: 1,0 millones de toneladas); mientras que la de cereales secundarios podría alcanzar sólo los 1,2 millones de toneladas (1998: 1,4 millones de toneladas). En la Federación de Rusia, donde la recolección se retrasó en Siberia debido al mal tiempo y a la escasez de maquinaria, la FAO pronostica provisionalmente la producción total de cereales y legumbres en 59 millones de toneladas, alrededor de 5 millones de toneladas más que el año pasado (54 millones de toneladas). Unos rendimientos mejores que la media han compensado la disminución del 12 por ciento de la superficie sembrada con trigo y la producción se pronostica en 31 millones de toneladas, 1 millón de toneladas más que la del año pasado. Según pronósticos provisionales, la producción de cereales secundarios aumentará en 4 millones de toneladas a 26 millones de toneladas. En Ucrania, es probable que la producción de cereales y legumbres de 1999 se mantenga bastante cercana a la del año pasado, estimada por la FAO en 29 millones de toneladas. Los rendimientos de los cultivos se vieron perjudicados por una utilización insuficiente de fertilizantes y plaguicidas, así como por las condiciones secas imperantes durante el otoño, los daños causados por las heladas en mayo y el tiempo caluroso y seco registrado en algunas zonas en junio y julio. La FAO pronostica un descenso de la producción de trigo en 1 millón de toneladas a 16 millones de toneladas, mientras que la de cereales secundarios podría aumentar marginalmente, pero el resultado dependerá de la cosecha de maíz.
Las informaciones más recientes confirman que en Australia se prevé otra cosecha excelente de trigo. Unas precipitaciones oportunas recibidas al principio de octubre en la mayoría de las zonas tri-gueras de los estados orientales aumentaron el po-tencial de rendimiento de los cultivos cuya situación ya era buena. El pronóstico oficial más reciente cifra la producción de trigo en 21,9 millones de toneladas, alrededor de un 4 por ciento más que el año pasado y muy superior a la media de los últimos cinco años. Las lluvias caídas recientemente beneficiaron tam-bién a los cultivos de cereales secundarios de in-vierno (principalmente cebada y avena). Sin embar-go, debido a la disminución de la superficie sembrada con cebada y avena, y pese a los buenos resultados de las cosechas de sorgo y maíz recogidas hace unos meses, se prevé que la producción de cereales secundarios de 1999 disminuirá algo a alrededor de 8,1 millones de toneladas, frente a los 8,9 millones de toneladas en 1998. En Australia, han comenzado los preparativos para la campaña del arroz del 2000, y la producción se pronostica en 1,3 millones de tonela-das en una superficie de alrededor de 150 000 hectá-reas. Sin embargo, el resultado definitivo dependerá en gran medida de la disponibilidad de agua para rie-go en Nueva Gales del Sur, donde se produce la mayor parte del arroz.