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El nuevo director general de la FAO

TODOS los amigos la FAO y, ciertamente, sus críticos también, pueden acoger con satisfacción la elección del Sr. B. R. Sen como Director General de la Organización. El habrá de traer a los asuntos de la FAO un aguzado espíritu y nuevas ideas, respaldadas por una amplia y varia experiencia administrativa.

Será el primer asiático que pase a ser director ejecutivo de un organismo de las Naciones Unidas. Las demás organizaciones se hallan dirigidas por tres norteamericanos, cuatro europeos y dos latinoamericanos.

Como Embajador que fué de la India en los Estados Unidos y, posteriormente, en Italia, el Sr. Sen ha estado íntimamente relacionado con las actividades de la FAO desde que ésta inició sus tareas en Wáshington y, más adelante, después de trasladar sus Oficinas Centrales a Roma. En fecha anterior, ocupó el cargo de Director General del Departamento de la Alimentación en la India, y fué uno de los Secretarios del Gobierno. Educado en las severas normas del Servicio Civil de la India, ha representado desde entonces a su país en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y ha presidido la Delegación de la India en el Consejo Económico y Social y en muchos períodos de sesiones de la Conferencia de la FAO. El haber también actuado como presidente de varias comisiones de la Conferencia de la FAO, ya desde 1948, le ha hecho adquirir un íntimo conocimiento de los programas y problemas técnicos de la Organización.

La elección del Sr. Sen para el cargo de Director General fué una dramática circunstancia del Tercer Período Extraordinario de Sesiones de la Conferencia de la FAO celebrado el pasado mes de Septiembre, después de haberse retirado el candidato de los Estados Unidos antes de la tercera votación, cuando parecía tener casi seguros los votos necesarios. Como dijo el Sr. Sen en su discurso tras de su elección, «Renunciar al privilegio de ser elegido cuando la victoria está a la vista, es un acto de valor y de abnegación...; estimamos, y oreemos, que los Estados Unidos de América han advertido el creciente deseo sentido por las regiones menos desarrolladas de llegar en esta coyuntura a hacerse cargo de la dirección de los asuntos de la FAO, aunque sólo sea por un cierto tiempo. Esto revela una gran comprensión en los Estados Unidos. Sólo una gran nación con un gran corazón puede tener semejante comprensión... Nos sentimos vivamente animados por la seguridad que los Estados Unidos nos han dado de que, aun cuando se haya retirado su candidato, continuarán prestando su máximo apoyo a la Organización».

El Sr. Sen continuó diciendo: «Como sabemos, la FAO después de diez años de existencia, se enfrenta ahora con muchos problemas. Algunos de éstos se han dramatizado, pero siempre he creído que entre todos los organismos especializados... no existe ninguno que realice tan excelente labor como la FAO. Es cierto que, a veces, nos tropezamos con dificultades, i pero a qué organización no le ocurre lo mismo ? Tenemos problemas internos, todas las organizaciones los tienen... Juzgo que con la colaboración de los Estados Miembros, con la cooperación del personal, estos problemas de los que ahora tenemos conocimiento podrán dominarse fácilmente.

«El cargo de Director General no es simplemente un puesto. Por lo menos, yo así lo considero, y estoy seguro de que todos ustedes así lo estiman. La Dirección General de la FAO es a la vez una llamada y una oportunidad. Una llamada a cuanto de mejor tiene el hombre en sí, y puede dar; una oportunidad de servir a la humanidad. Con este espíritu de incitación y oportunidad acometeré la tarea que acaban ustedes de imponerme».

Fotografía de la portada. El empleo de elefantes para realizar ciertas operaciones forestales es aún bastante frecuente en algunas regiones de Asia - especialmente en Birmania, Tailandia y partes de la India - donde no es práctico ni económico utilizar equipo mecánico. En esta fotografía, que fué tomada por un funcionario de la FAO en el norte de Tailandia durante el viaje de estudio que llevó n cabo la Subcomisión de la Teca, puede verse elefantes que apilan trozas de teca. (Fotografía de S. Bunnag)

FIGURA 1. Masa de bosque natural de Jubea spectabilis (palmera chilena). en Ocoa, provincia de Valparaíso, 32° 50' S.

FIGURA 2. Masa de bosque natural de Nothofagus dombryi y N. procera, muerto por efecto de los incendios, reserva forestal de Villarrica, provincia de Cautín, 39° 20' S. .4 la izquierda, repoblado de Chusquea.


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