FAO/SMIA - Cosechas y escaseces alimentarias No.4, Septiembre/Octubre 2000 - Page 7

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AFRICA ORIENTAL

BURUNDI* (11 de septiembre)

Est� a punto de comenzar la siembra de los cultivos de la temporada A de 2001, pero las operaciones de campo se han retrasado por la falta de precipitaciones en los meses pasados. Hace falta que llueva para evitar que disminuyan las plantaciones, que pueden haberse visto perjudicadas tambi�n por la escasez de semillas debida a las menguadas cosechas de las dos �ltimas campa�as. El Gobierno est� distribuyendo semillas en las zonas afectadas, con la ayuda de organismos internacionales y de ONG.

Una misi�n de evaluaci�n de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA calcul� la producci�n de alimentos de la temporada B de 2000 en 1,7 millones de toneladas, un 3 por ciento menos que el a�o pasado y que la media de los �ltimos cinco a�os. La producci�n de legumbres disminuy� un 20 por ciento y la de cereales un 6 por ciento, pero la de ra�ces y tub�rculos se mantuvo pr�cticamente inalterada respecto a 1999. Las zonas m�s afectadas por el tiempo seco fueron las provincias septentrionales de Kirundo y Muyinga, y la regi�n de Moso.

En esas zonas la situaci�n del suministro de alimentos es muy dif�cil. S�lo en la provincia de Kirundo se calcula que hay 350 000 personas que sufren escasez de alimentos. Tambi�n preocupa seriamente la situaci�n alimentaria de un gran n�mero de personas desplazadas que siguen en los campamentos, donde el acceso a las tierras est� restringido. El PMA prev� la asistencia, hasta el final del a�o, a aproximadamente 700 000 personas desplazadas, afectadas por la sequ�a y muy vulnerables. Pero la inseguridad contin�a impidiendo las distribuciones de alimentos.

ERITREA* (18 de septiembre)

Las perspectivas para las cosechas de cereales y legumbres de la temporada principal de 2000 que se recoger�n a partir de noviembre son poco prometedoras, debido principalmente al desplazamiento de cientos de miles de agricultores despu�s de la escalada de la guerra con el vecino pa�s de Etiop�a en mayo y junio de 2000. Para finales de julio, la superficie total sembrada era menos del 40 por ciento de lo normal debido al desplazamiento, la p�rdida de los aperos b�sicos y la destrucci�n de la infraestructura b�sica. Pese a unas lluvias mejoradas ca�das a partir de la segunda quincena de julio, las lluvias tard�as e inferiores a lo normal recibidas al comienzo de la campa�a tambi�n han retrasado la plantaci�n y el arraigo temprano de los cultivos. Las zonas administrativas (Zobas) de Gash Barka y Debub, las principales zonas productoras de cereales del pa�s que normalmente aportan m�s del 75 por ciento de la producci�n de cereales de Eritrea, han estado al centro de los recientes enfrentamientos y puede que cosechen poco o nada en 2000. El fracaso de dos estaciones de las lluvias consecutivas en las zonas administrativas de Anseba, Mar Rojo Norte y Mar Rojo Sur tambi�n ha perjudicado gravemente a cerca de 340 000 personas.

Dado que la pr�xima cosecha se prev� reci�n para noviembre y diciembre de 2001, estas regiones, conocidas como "la cesta de pan de Eritrea", junto con otras partes, depender�n de los alimentos de socorro de urgencia durante al menos los pr�ximos 18 meses. En agosto, el PMA distribuy� alrededor de 13 500 toneladas de alimentos a m�s de 586 000 personas afectadas por la guerra y a 67 800 afectadas por la sequ�a.

Se pide la ayuda de los donantes para una operaci�n de urgencia revisada aprobada por la FAO y el PMA en junio de este a�o por un total de 151 000 toneladas de asistencia alimentaria destinada a 750 000 personas desplazadas, y para un llamamiento entre organismos de las Naciones Unidas dirigido a prestar asistencia a unas 335 000 personas afectadas. A principios de septiembre, las promesas totales ascend�an a 90 800 toneladas, de las cuales se hab�an entregado 55 000 toneladas.

ETIOPIA* (18 de septiembre)

Pese a un comienzo tard�o de las lluvias, los cultivos de la temporada principal "Meher" de 2000 se est�n desarrollando satisfactoriamente en las importantes zonas productoras de cereales de la parte central, septentrional y occidental del pa�s. Pero hace falta que siga lloviendo en octubre para que logren madurar. En la parte oriental y meridional del pa�s la producci�n de cereales deber�a ser muy inferior a la menguada cosecha del a�o pasado.

La cosecha secundaria "Belg" de 2000, que normalmente se recoge a partir de junio, ha resultado mala debido a la sequ�a. Aunque su producci�n representa s�lo el 8-10 por ciento de la producci�n total de cereales, en algunas zonas es importante ya que proporciona la mayor parte de los suministros alimentarios anuales. Por lo tanto, la escasez de alimentos ha aumentado en cuanto al n�mero de las personas y las zonas afectadas. Es particularmente grave en las zonas pastorales del este y el sur de Etiop�a donde ha perecido un gran n�mero de cabezas de ganado y se han producido algunas muertes por inanici�n.

Debido a la mala cosecha Belg, el n�mero de las personas que necesitan asistencia ha aumentado a m�s de 10 millones, incluidas 450 000 personas desplazadas a causa de la guerra fronteriza con Eritrea. Por consiguiente, la necesidad total de ayuda alimentaria en 2000, calculada anteriormente en 886 000 toneladas, se ha revisado al alza a 1,2 millones de toneladas. A principios de septiembre las promesas totales ascend�an a 1 110 000 toneladas, de las cuales se hab�an entregado 638 000 toneladas.

KENYA (18 de septiembre)

Las perspectivas para la cosecha principal de cereales de "lluvias largas" de 2000 que se est� recogiendo ahora son desfavorables. La campa�a agr�cola de las lluvias largas (marzo-mayo), que normalmente representa el 80 por ciento de la producci�n total anual de alimentos ha sido deficiente debido a una grave sequ�a. Excepci�n hecha de algunas partes de la provincia occidental y de la provincia de Nyanza, en el resto del pa�s, incluida la provincia del valle del Rift considerada como la "cesta de pan", ha llovido poco o nada, lo cual ha dado lugar a una cosecha deficiente en muchas partes as� como cuantiosas p�rdidas de cabezas de ganado en las zonas pastorales del norte, nordeste y noroeste. Los pron�sticos oficiales actuales cifran la cosecha de ma�z de lluvias largas de 2000 en s�lo 1,4 millones de toneladas, un 36 por ciento menos que la media (2 210 000 toneladas) y un 22 por ciento menos que la cosecha de lluvias largas de 1999 menguada a causa de la sequ�a (1,8 millones de toneladas). La cosecha de frijoles estimada en alrededor de 300 000 toneladas, es un 20 por ciento inferior a la media.

La situaci�n del suministro de alimentos en el pa�s sigue constituyendo un motivo de grave preocupaci�n ya que ahora se calcula que son cerca de 3,5 millones las personas que necesitan urgentemente asistencia alimentaria. Los precios de los principales productos alimenticios siguen siendo un 50 por ciento m�s altos que la media quinquenal. Los pastores preocupan en forma particular ya que se enfrentan con una cuarta mala cosecha consecutiva de la temporada lluviosa. La disponibilidad de los recursos de pastizales y de agua ha disminuido gravemente determinando un fuerte aumento de la mortalidad del ganado. Como no se prev�n m�s lluvias hasta el comienzo de la temporada de las lluvias cortas en octubre, la situaci�n no puede menos que empeorar. Adem�s, las lluvias cortas son de poca importancia en los distritos pastorales y es improbable que produzcan alguna recuperaci�n significativa.

La FAO y el PMA aprobaron conjuntamente en junio de 2000 una operaci�n de urgencia por 88,5 millones de d�lares EE.UU. para prestar asistencia a unos 3,3 millones de personas durante un per�odo de seis meses. En mayo, el Gobierno hab�a lanzado un llamamiento en favor de una asistencia alimentaria internacional de 134,2 millones de d�lares EE.UU., debido al gran n�mero de personas que atravesaban una grave situaci�n de escasez de alimentos.

RWANDA* (11 de septiembre)

Est� a punto de comenzar la plantaci�n de la campa�a agr�cola A de 2001, pero las precipitaciones inferiores a la media recibidas en agosto y en la primera d�cada de septiembre est�n retrasando las operaciones de campo. Se necesitan urgentemente m�s lluvias para evitar que disminuya la superficie plantada.

Seg�n los pron�sticos, la producci�n de la peque�a campa�a C de julio a agosto de 2000, principalmente de hortalizas, disminuir� debido a la falta de humedad del suelo tras la prolongada racha seca registrada a partir de abril. La falta de lluvias est� afectando tambi�n a los cultivos perennes.

Una misi�n conjunta del Gobierno/FAO/PMA/USAID/UE calcul� la producci�n de la temporada B de 2000 en un nivel satisfactorio de 3 millones de toneladas, muy superior al de la cosecha del a�o pasado. Sin embargo, en las regiones del sur y este y en las zonas vecinas al lago de Kivu el cese temprano de las lluvias determin� una disminuci�n de los rendimientos de las legumbres y los cereales. En cambio, la producci�n de alimentos aument� considerablemente en las provincias nordoccidentales de Gisenyi y Ruhengeri y en Kibuye, donde la normalizaci�n de la situaci�n de seguridad permiti� el regreso de las poblaciones y las condiciones atmosf�ricas favorecieron el desarrollo de los cultivos. Gracias al aumento de la superficie plantada, se han obtenido tambi�n buenas producciones en las provincias de Byumba, Kibungo y Gitarama.

En conjunto, la situaci�n del suministro de alimentos ha mejorado despu�s de la cosecha B de 2000, particularmente en las provincias nordoccidentales que hab�an quedado afectadas por la escasez de alimentos. Sin embargo, en las zonas donde la producci�n merm� a causa del tiempo seco, se se�ala que la situaci�n alimentaria y nutricional va empeorando, siendo particularmente grave en la regi�n de Bugesera, afectada por tres malas cosechas consecutivas. Se estima que 150 000 personas necesitan asistencia alimentaria en esta regi�n. Con la asistencia de la FAO, se est�n distribuyendo tambi�n insumos agr�colas para la pr�xima campa�a.

SOMALIA* (18 de septiembre)

La cosecha de cereales de la campa�a actual "Gu", que se est� recogiendo ahora en el sur de Somalia, se pronostica en 214 000 toneladas, alrededor de un 22 por ciento m�s que la media posterior a la guerra (1993-1999), pero inferior a la media anterior a la guerra (alrededor de 347 000 toneladas). Unas lluvias generalizadas ca�das en abril y mayo y unas buenas lluvias "Hagay" a principios de julio contribuyeron al desarrollo de los cultivos en Lower Shabelle, Middle Shabelle, Hiran Bay, Bakool y algunas partes de Lower Juba. El mejoramiento de la situaci�n de seguridad tambi�n ha alentado a algunas familias a regresar a sus fincas y a las actividades agr�colas. Sin embargo, en algunas bolsas de las regiones de Gedo, Lower Juba y Middle Juba se prev�n malas cosechas debidas a unas lluvias irregulares e insuficientes. En la regi�n de Gedo, adem�s, la cosecha de ma�z de regad�o se ha visto afectada por los niveles de agua muy bajos de los r�os Juba y Dawa.

Pese a una cierta mejora lograda en la situaci�n general del suministro de alimentos en algunas partes del sur de Somalia, se informa que las tasas de malnutrici�n acusan una situaci�n cada vez m�s grave debido a una disminuci�n cr�tica de los medios de subsistencia a causa de las �ltimas sequ�as y de los efectos que se arrastran de a�os de disturbios civiles y de la falta de inversiones en la econom�a.

En otras partes, en el noroeste de Somalia (Somaliland) unas lluvias tard�as e irregulares perjudicaron el arraigo de los cultivos Gu en algunos distritos. La situaci�n alimentaria va empeorando en algunas zonas agropastorales de Tohdheer, Awdal y Sanag en las que varias lluvias inferiores a lo normal consecutivas han afectado gravemente a la producci�n agropecuaria. Debido a la falta de apoyo comunitario la poblaci�n est� emigrando con su ganado a Etiop�a y otras regiones. Tambi�n se se�ala que la respuesta al llamamiento interinstitucional de las Naciones Unidas, lanzado en julio de 2000 por un valor de 15,6 millones de d�lares EE.UU. en favor de la asistencia a unas 750 000 personas vulnerables, ha sido decepcionante.

La reciente prohibici�n de las importaciones de ganado de algunos pa�ses de Africa oriental, incluida Somalia, decretada por Arabia Saudita y otros pa�ses del Golfo debido al p�nico provocado por el temor de la fiebre afotsa en el valle de Rift, afectar� previsiblemente en forma grave a los ingresos de un gran n�mero de pastores, as� como a la capacidad de importaci�n del pa�s.

SUDAN* (18 de septiembre)

Las perspectivas para la cosecha de 2000, que se recoger�n a partir de octubre, son variadas. Las copiosas lluvias ca�das en agosto en la mayor parte del sur del Sud�n compensan la escasez e irregularidad de las recibidas al principio de la campa�a, pero llegaron demasiado tarde para recuperar el sorgo, que madura en poco tiempo, que se hab�a visto afectado por el cese de las lluvias en junio y julio. Se prev� que las regiones de Equatoria occidental, Lakes y Jonglei obtendr�n buenas cosechas mientras que en la regi�n del Nilo Alto la inseguridad y la falta de insumos suficientes deber�a influir negativamente en la producci�n. En el norte del Sud�n, a pesar de las buenas lluvias recibidas en la segunda quincena de agosto, hay d�ficit de humedad en las principales regiones productoras tales como Gedaref y Sennar. El �xito de la campa�a depender� de que siga lloviendo en septiembre.

Seg�n los informes, escasean los alimentos en algunas localidades del sur del pa�s. La reciente escalada del conflicto civil, particularmente en las regiones del Alto Nilo y Bahr-El-Ghazal, trastorn� la producci�n agr�cola y determin� las p�rdidas de activos y del acceso a los mercados, dejando a miles de personas en urgente necesidad de asistencia. No obstante, la paz relativa que reina en la mayor�a de las otras localidades ha contribuido a mejorar la situaci�n nutricional y, por consiguiente, a reducir el n�mero de las personas que asisten a los centros de alimentaci�n. Durante el mes de agosto, el PMA distribuy� 2 400 toneladas de alimentos, alrededor de un 32 por ciento de los niveles previstos para las regiones del Nilo Alto y Jonglei, debido a la inseguridad.

Una misi�n conjunta de evaluaci�n de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA visitar� el sur de Sud�n en octubre y el norte del Sud�n en noviembre y diciembre para evaluar la producci�n de la cosecha de este a�o y las perspectivas alimentarias para la campa�a comercial de 2000/01.

TANZANIA (18 de septiembre)

Ha terminado la recolecci�n de las cosechas de cereales de la temporada principal de 2000. Las estimaciones provisionales cifran la producci�n total de cereales (ma�z, arroz, trigo, sorgo y mijo) en alrededor de 3 460 000 toneladas, cerca de un 20 por ciento menos que la media quinquenal. La disminuci�n se atribuye principalmente a la sequ�a que ha habido en varias partes del pa�s.

Pero la situaci�n del suministro de alimentos ha mejorado en general debido a la gran cantidad de importaciones de ma�z que ha redundado en una notable baja de los precios de los alimentos. A pesar de la merma de los pastizales, la situaci�n del ganado es buena. En julio, los precios del ganado hab�an aumentado un 5 y 3 por ciento comparados con junio de este a�o y julio del a�o pasado, respectivamente.

Se necesitar� asistencia alimentaria para cerca de 1,3 millones de personas aquejadas de inseguridad alimentaria, principalmente en las regiones de Dodoma, Mara, Shinyanga, Singida, Tabora, Tanga y sur de Mwanza, que han sufrido su tercera mala cosecha consecutiva.

UGANDA (18 de septiembre)

Las perspectivas para la cosecha de cereales de la temporada principal de 2000 son favorables. Sin embargo, en algunos distritos como Kumi, Lira y Soroti, unas lluvias tard�as e irregulares han afectado a los rendimientos. Se informa que la situaci�n de los pastizales y del ganado de las zonas pastorales del nordeste es satisfactoria. Las �ltimas lluvias han se�alado el comienzo de la temporada secundaria, y permitido a los agricultores empezar la siembra temprana.

La situaci�n del suministro de alimentos es en general suficiente. No obstante, algunas partes del pa�s, incluidos los distritos de Masindi, Arua y Moyo, resultaron gravemente afectados por la �ltima sequ�a. La situaci�n del suministro de alimentos sigue siendo tambi�n inestable en los distritos de Kotido y Moroto, en los que hay cerca de 215 000 personas que necesitan con urgencia asistencia alimentaria, debido a la mala cosecha obtenida en la �ltima campa�a y a las p�rdidas de ganado debidas al cuatrerismo. Por lo dem�s, se sigue necesitando asistencia alimentaria para cerca de 112 000 personas del distrito de Bundibugyo desplazadas a causa de los disturbios civiles.


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