INFORMES POR PAISES
AFRICA
AFRICA DEL NORTE
ARGELIA (20 de febrero)
La plantación de la cosecha de la campaña 2000/01 está casi terminada. Pese a unas preocupaciones al comienzo de la temporada por el retraso de las precipitaciones, en enero las condiciones mejoraron gracias a unas lluvias benéficas recibidas en las zonas productoras. Se necesitan, sin embargo, más lluvias durante los próximos dos a tres meses para que maduren los cultivos y se asegure una buena cosecha. La cosecha de cereales de 2000 se estima en alrededor de 1,1 millones de toneladas, 35 por ciento menos que la producción inferior a la media de 1999, como consecuencia de la insuficiencia de las precipitaciones recibidas durante el período vegetativo.
Se prevé que las importaciones de cereales para la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) alcanzarán los 7,3 millones de toneladas, incluidos 5,5 millones de toneladas de trigo.
EGIPTO (5 de febrero)
La superficie plantada con trigo y cebada en 2001 debería ser semejante al buen nivel del año anterior (alrededor de 1 millón de hectáreas) gracias a los incentivos ofrecidos por el Gobierno para aumentar la producción. Las perspectivas iniciales son en general favorables para la cosecha, principalmente de regadío, cuya recolección comienza normalmente en abril.
La producción de cereales de 2000 (en equivalente de elaborados) se cifra en alrededor de 18 millones de toneladas, 3 por ciento más que la cosecha superior a la media del año anterior. Esta cifra incluye alrededor de 6,6 millones de toneladas de trigo, 7,3 millones de toneladas de cereales secundarios y alrededor de 4,2 millones de toneladas de arroz (elaborado).
Las importaciones de trigo en 2000/01 (julio/junio) se pronostican en 6,8 millones de toneladas, y las de cereales secundarios, principalmente maíz, en 4,2 millones de toneladas.
MARRUECOS (5 de febrero)
Las condiciones de crecimiento han sido hasta ahora en general favorables para las cosechas de 2000/01, habiéndose recibido lluvias entre normales y superiores a lo normal en la mayoría de las zonas productoras, salvo en el sur y en algunas partes del centro. Sin embargo, la superficie plantada con cereales, indicada a principios del año en 3,4 millones de hectáreas, incluidas 270 000 hectáreas de terrenos de regadío, es hasta ahora inferior a la media quinquenal, como consecuencia principalmente de la insuficiencia de las precipitaciones recibidas en las zonas meridionales. Se necesitarán más lluvias en los meses venideros para la maduración de los cultivos. La producción de cereales en 2000 se estima en alrededor de 2 millones de toneladas, lo que representa un 53 por ciento de la cosecha inferior a la media del año pasado, como consecuencia de unas condiciones atmosféricas adversas imperantes durante la segunda mitad del período vegetativo. En consecuencia, se pronostica que las importaciones de trigo en 2000/01 (julio/junio) aumentarán a alrededor de 3,2 millones de toneladas, 14 por ciento más que el nivel del año pasado.
TUNEZ (5 de febrero)
Hasta ahora las condiciones son en general favorables para la cosecha de invierno de 2000/01 que se recogerán a partir de mayo. Al comienzo de la temporada las actividades agrícolas se retrasa-ron algo debido al nivel inferior a lo normal de las precipitaciones, pero en diciembre y enero las condiciones mejoraron gracias a unas lluvias generalizadas recibidas en la mayoría de las zonas productoras. Sin embargo, se necesitarán más lluvias durante los próximos meses para asegurar una buena cosecha. Se prevé que en la campaña 2000/01 se sembrarán cereales, principalmente trigo, en alrededor de 1,4 millones de hectáreas, casi el mismo nivel del año anterior.
La producción de cereales en 2000 se estima en alrededor de 1 millón de toneladas, aproximada-mente un 40 por ciento menos que el año anterior y un volumen muy inferior a la media. Las importaciones de cereales en 2000/01 (julio/junio), principalmente trigo y maíz, se pronostican en alrededor de 1,8 millones de toneladas.
AFRICA OCCIDENTAL
BENIN (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. En el sur han comenzado los preparativos de la tierra para la primera cosecha de maíz. Las plantaciones comenzarán con la llegada de las lluvias, que suele ser en marzo. Gracias a unas condiciones de crecimiento en general suficientes, la producción total de cereales de 2000 se estima en 905 000 toneladas, volumen ligeramente inferior al nivel récord del año pasado pero aún así muy superior a la media.
La situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria. Los mercados están bien abastecidos y en general los precios de los cereales se mantienen estables. Las importaciones de cereales, para uso doméstico y para reexportaciones, durante la campaña comercial 2001 se estiman en 150 000 toneladas, y las necesidades de ayuda alimentaria en 10 000 toneladas.
BURKINA FASO (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. Las cosechas fuera de estación se están desarrollando en general satisfactoriamente. El Gobierno ha publicado las cifras definitivas sobre la producción de 2000 que son significativamente inferiores a las estimaciones realizadas en octubre de 2000 por la misión conjunta FAO/CILSS de evaluación de cultivos que ya indicaban una cosecha inferior a la media.
Debido a esta cosecha menguada, la situación del suministro de alimentos será difícil en algunas zonas, principalmente en el norte, el centro y el este, donde la producción de cereales decreció significativamente. El regreso de los Burkinabé de Côte d'Ivoire a sus aldeas también está aumentando la presión sobre el suministro de alimentos. Sin embargo, los hogares disponen todavía de algunas existencias de la cosecha récord de 1999 que se pueden trasladar desde las zonas excedentarias a las deficitarias. Durante las recientes bolsas de cereales ("bourses de céréales"), la oferta fue muy superior a la demanda. En enero los precios de los cereales se mantuvieron en general estables e inferiores a la media de 1995-99. Una misión de evaluación de los suministros alimentarios identificará la mayor parte de las zonas vulnerables y las necesidades de asistencia. En el norte, el Gobierno ha emprendido recientemente un programa de socorro del ganado basado en la perforación de pozos suplementarios y poniendo a disposición forrajes suficientes para asegurar la supervivencia de los animales.
CABO VERDE (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. Una misión conjunta FAO/CILSS de evaluación de cultivos estimó la producción de maíz de 2000 en 18 500 toneladas, volumen significativamente inferior al de la cosecha récord de 1999 pero muy superior a la media.
Gracias a dos buenas cosechas consecutivas, la situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria. Sin embargo, la producción local cubre sólo alrededor de una cuarta parte de las necesidades de consumo y el país depende de las importaciones y de la ayuda alimentaria para satisfacer sus necesidades. Teniendo en cuenta las existencias disponibles y las importaciones comerciales y la ayuda previstas en los meses venideros, los mercados deberían estar bien abastecidos y con precios estables. La necesidad de importación de cereales para la campaña comercial 2000/01 (noviembre/octubre), se estima en 88 000 toneladas, y la necesidad de ayuda alimentaria en 53 000 toneladas.
CÔTE D'IVOIRE (5 de febrero)
En el sur han comenzado los preparativos de la tierra para la primera cosecha de maíz. Las plantaciones comenzarán con la llegada de las lluvias, que suele ocurrir en marzo.
Gracias a una cosecha de cereales superior a la media obtenida en 2000, la situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria. Sin embargo, es posible que los recientes disturbios civiles hayan afectado a las actividades comerciales, exacerbando una situación económica ya deteriorada. La deuda externa ha alcanzado los 1,5 mil millones de dólares EE.UU., aproximadamente, mientras que el PIB disminuyó alrededor del 2 por ciento en 2000. El descenso de los precios del cacao, del cual Côte d'Ivoire es el principal productor mundial, ha sido un factor importante. En 2000 se han recibido cantidades considerables de arroz, superiores a las importaciones medias anuales. Quedan todavía en el oeste alrededor de 86 000 refugiados liberianos y 1 500 sierraleoneses.
CHAD (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. Ha comenzado la recolección del berbéré (sorgo de aluvión). Los rendimientos son menores que el año pasado debido a la falta de agua y a las invasiones de pájaros que se alimentan de cereales. Una misión conjunta FAO/CILSS de evaluación de cultivos estimó la producción de cereales de 2000 en 890 000 toneladas, 28 por ciento menos que el nivel récord de 1999 y 16 por ciento menos que la media de los últimos cinco años.
Debido a esta cosecha menguada, la situación del suministro de alimentos será difícil en las zonas estructuralmente deficitarias de la zona saheliana, principalmente en los departamentos de Guéra y Lac. Se señalaron excepcionales movimientos de población desde los cantones de Baderi, N'Gouri y Yalita en el departamento de Lac hacia los centros urbanos importantes, situados en el sur del Chad o en la zona del Lago de Chad. En la zona sudanesa, la situación alimentaria está también empeorando en las zonas productoras de arroz, principalmente en el departamento de Mayo-Kebbi. También se prevé que la cosecha de algodón en el sur será escasa, pero la producción de maní es buena. Los precios del mijo se mantienen cercanos a los de enero del año pasado en los cinco principales mercados del país, excepto en Abéché, donde registraron un incremento de 24 por ciento. Por el contrario, los precios del arroz aumentaron de forma pronunciada en las principales zonas productoras. La migración del ganado de las zonas sahelianas podría dar lugar a un sobrepastoreo y a la escasez de pastizales en la zona sudanesa. Una evaluación de la situación del suministro de alimentos llevado a cabo a principios de enero en las zonas en situación de riesgo estimó en 800 000 las personas expuestas para las cuales se necesitan alrededor de 40 000 toneladas de cereales. También se consideran moderadamente vulnerables alrededor de 700 000 personas. Se recomienda la venta de 20 000 toneladas de cereales a precios subvencionados.
GAMBIA (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. Una misión conjunta FAO/CILSS de evaluación de cultivos estimó la producción de cereales de 2000 en un nivel récord de 174 000 toneladas, lo que representa un incremento de alrededor del 12 por ciento con respecto a 1999 y del 49 por ciento respecto a la media de los últimos cinco años.
Gracias a dos excelentes cosechas consecutivas obtenidas en 1999 y 2000, la situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria. Sin embargo, pese al incremento de la producción de alimentos, se han identificado dos zonas en situación de riesgo: el departamento de Río Bajo (Jarra Este y Jarra Central) y el departamento septentrional de Río Central (los cinco distritos) que obtendrán malas cosechas debidas a las infestaciones de cantáridas y striga. La germinación deficiente de las semillas de maní debida a las grandes infestaciones de plagas en la fase de almacenamiento provocó también una merma de la producción.
GHANA (5 de febrero)
En el sur han comenzado los preparativos de la tierra para la primera cosecha de maíz. Las plantaciones comenzarán con la llegada de las lluvias, que suele ser en marzo.
Debido a unas condiciones de crecimiento deficientes en 2000, la situación del suministro de alimentos es difícil en algunas zonas. Quedan todavía en el país alrededor de 10 000 refugiados liberianos y hasta 2 500 sierraleoneses.
GUINEA (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. Gracias a una buena cosecha obtenida en 2000 y a la cosecha sin precedentes de 1999, la situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria y los mercados están bien abastecidos, salvo en el sudeste donde las incursiones de los rebeldes provenientes de Sierra Leona han afectado gravemente a las actividades agrícolas y comerciales. Los enfrentamientos recientes obligaron a los organismos humanitarios a suspender temporalmente sus operaciones en Gueckédou y zonas circundantes, concentrando su personal en Kissidougou, sólo una semana después de haber vuelto a la zona. Por consiguiente, más de 200 000 refugiados han quedado nuevamente fuera del alcance, se han cerrado todas las instituciones públicas, tales como dispensarios, hospitales, escuelas y comisarías.
Quedan todavía en el país más de 400 000 refugiados de Liberia y Sierra Leona, ubicados principalmente en las zonas de Gueckédou, Forécariah y N'Zérékore. El acceso es muy difí-cil a Parrot's Beak, una franja del territorio guineo que penetra en Sierra Leona cerca de la frontera liberiana, donde hay alrededor de 250 000 personas (alrededor de 180 000 refugia-dos que viven en muchísimos campamentos y unas 70 000 personas desplazadas en el in-terior). La OACNUR está disponiendo campamentos en Borea y Kuntaya, a 60 km y 82 km respectivamente al norte de Kissidougou, para reinstalar a los refugiados procedentes de Gueckédou y Parrot's Beak. Se prevén también otros en la prefectura de Dabola. Se ha establecido un campamento transitorio en Conakry para repatriar a los refugiados de Sierra Leona en embarcaciones.
GUINEA-BISSAU (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. A mediados de octubre una misión conjunta FAO/CILSS de evaluación de cultivos estimó la producción de cereales de 2000 en 168 000 toneladas, 22 por ciento más que el nivel del año anterior y un volumen cercano a los niveles anteriores a la crisis de 1997.
La situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria. Los mercados están bien abastecidos y los precios se mantienen estables. Sin embargo, algunos grupos de la población con escaso poder adquisitivo están haciendo frente a dificultades alimentarias, principalmente en las zonas urbanas.
LIBERIA* (5 de febrero)
Una misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA visitó Liberia al final de noviembre y principios de diciembre y estimó la producción arrocera de 2000 en 144 000 toneladas (arroz cáscara), frente a la cifra de 259 000 toneladas anterior a la guerra (1988). La superficie plantada con arroz en el año 2000 se estima en 135 000 hectá-reas, lo que sugiere un rendimiento medio de 1,1 tonelada por hectárea. Al parecer, la causa principal de la escasa producción por familia son las parcelas pequeñas y los escasos ren-dimientos. La falta de oportunidades de empleo durante la guerra y después de ella ha obli-gado a muchas familias a producir algo de arroz por primera vez para sobrevivir. También ha llevado a que se cultivaran tierras que nunca antes se habían tenido en cuenta para la producción de arroz, tales como los manglares costeros. Como consecuencia, hay muchas más familias en la producción arrocera que en los tiempos anteriores a la guerra, aunque con parcelas más pequeñas. Entre los problemas principales con que tropiezan los agri-cultores figuran la escasez de mano de obra, la escasez de semillas de arroz, la falta de al-gún tipo de organización comercial, la gran cuantía de las pérdidas poscosecha y el estado deficiente de los caminos. Se ha interrumpido la distribución en gran escala de semillas y aperos, y las actividades de divulgación agraria de las ONG se están orientando hacia la multiplicación de las semillas de arroz, la reducción de las pérdidas poscosecha y la rehabilitación del café y el cacao.
Los hábitos alimentarios han cambiado espectacularmente después de la guerra en favor de la yuca, cuya superficie y producción han crecido considerablemente. La misión estimó que habida cuenta de las posibles pérdidas, se dispondrá de alrededor de 480 000 toneladas de yuca para el consumo en 2001, comparadas con las 308 000 toneladas en 1988. También se dice que los plátanos han cobrado mayor importancia que antes.
La misión estimó la necesidad de importación de cereales de 2001 en 200 000 toneladas. Las importaciones comerciales se calculan en 160 000 toneladas, quedando un déficit descubierto de 40 000 toneladas que se colmará con ayuda alimentaria. El PMA está buscando un total de 21 000 toneladas de cereales y legumbres y 3 800 toneladas de otros productos básicos para satisfacer durante el año 2001 las necesidades de ayuda alimentaria de alrededor de 145 000 refugiados y otras personas afectadas por la guerra, así como de 140 000 niños de las escuelas primarias.
En el distrito de Lofa, una de las principales zonas productoras de arroz, las incursiones pe-riódicas que los rebeldes vienen haciendo desde agosto de 1999 se intensificaron en octu-bre, trastornando la agricultura y desplazando a miles de personas, principalmente en las ciudades de Gorlu, Ganglota y Selayae. La seguridad sigue siendo inestable. Miles de gui-neos que escapan a las hostilidades en su país han buscado refugio en las ciudades fronte-rizas de Liberia. Más de 15 000 han llegado al distrito de Bong y al distrito septentrional de Lofa. El PMA está distribuyendo ayuda alimentaria a alrededor de 420 000 repatriados libe-rianos. La OACNUR presta también asistencia a refugiados sierraleoneses en los cam-pamentos situados en las zonas de Montserrado y Sinje del distrito de Grand Cape Mount.
MALI (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. Ahora se están cultivando cultivos fuera de estación. Una misión conjunta FAO/CILSS de evaluación de cultivos estimó la producción de cereales de 2000 en 2 386 300 toneladas, volumen inferior en 17,5 por ciento al nivel récord del año pasado (2 893 600 toneladas) pero muy cercano a la media de los últimos cinco años. En diciembre se registró la presencia de langostas del desierto en la región septentrional de Adrar des Iforas, cerca de Tadjilit, en Amsir y en In-Tillit. Es probable que haya todavía un número reducido de adultos en algunos wadis de Adrar des Iforas y quizás en la zona de Timetrine. Algunos podrían desplazarse hacia el norte durante los períodos de los vientos cálidos meridionales.
Gracias a dos abundantes cosechas consecutivas obtenidas durante 1998 y 1999, los agricultores han repuesto las existencias, que al final de octubre de 2000 el Servicio Nacional de Estadísticas estimó en 520 000 toneladas. La reserva de seguridad nacional se encuentra también en su nivel recomendado de 135 000 toneladas (y otras 25 000 toneladas en forma de reserva de seguridad "financiera"). Con las existencias de los comerciantes y otras organizaciones, había una reserva para más de tres meses de consumo antes de la cosecha de 2000. Por lo tanto, la situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria. Sin embargo, es posible que algunas zonas corran el riesgo de que escaseen los alimentos debido a las malas cosechas obtenidas, principalmente en las regiones de Mopti, Gao, Kidal, Tombouctou y en la región septentrional de Ségou. Es probable que los precios de los cereales aumenten en esas zonas debido a la merma de la producción y al fortalecimiento de la demanda de los vecinos países de Burkina Faso y el Níger que han obtenido cosechas menguadas comparadas con la de 1999. El ganado emigró antes de lo habitual al delta del Río Níger.
MAURITANIA (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. La producción de los cultivos de secano (dieri) fue muy superior a la media. Las superficies de regadío decrecieron en Trarza y Brakna, y se prevé que los rendimientos disminuirán debido a las plantaciones tardías y a la falta de créditos para la producción. También son menos favorables que el año anterior las perspectivas para los cultivos de aluvión (walo), ya que disminuyeron las superficies plantadas debido a un descenso de los niveles de agua del Río Senegal. Se señalan invasiones de orugas negras en algunas zonas. Una misión conjunta FAO/CILSS de evaluación de cultivos estimó la producción de cereales de 2000 en 170 000 toneladas, 12 por ciento menos que el nivel del año anterior y 3 por ciento menos que la media de los últimos cinco años.
La situación alimentaria mejoró en las zonas rurales gracias a unas buenas cosechas de secano. Los mercados están bien abastecidos y los precios se mantienen en general estables. Sin embargo, algunas poblaciones siguen siendo vulnerables, principalmente en diversas zonas de las dos Hodh, Aftout y Affolé.
NIGER (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. Una misión conjunta FAO/CILSS de evaluación de cultivos estimó la producción de cereales de 2000 en 2 319 000 toneladas, 19 por ciento menos que el nivel de 1999 y alrededor de un 3 por ciento menos que la media de los últimos cinco años. Es posible que haya algunas langostas del desierto en algunas partes del Aïr, pero no se prevén desarrollos importantes.
Debido a la actual cosecha cercana a la media, la situación del suministro de alimentos será difícil en las zonas tradicionalmente deficitarias en alimentos. Los mercados se encuentran en general bien abastecidos pero los precios del mijo aumentaron significativamente en enero, excepto en el oeste donde unas importaciones considerables de mijo procedentes de Malí limitaron los aumentos de los precios. Los agricultores todavía disponen de existencias gracias a las buenas cosechas de 1998 y 1999, pero es posible que escaseen los alimentos durante el período de carestía. Las zonas en situación de riesgo se encuentran principalmente en los departamentos de Diffa, Tahoua, Tillabery y Agadez. En las zonas que experimentaron déficit de producción el Gobierno y los donantes están vendiendo mijo y sorgo a precios subvencionados (alrededor de 15-35 por ciento más bajos que los de mercado). El 20 de enero, la reserva de seguridad nacional tenía aproximadamente 12 500 toneladas de mijo.
NIGERIA (5 de febrero)
En el sur han comenzado los preparativos de la tierra para la primera cosecha de maíz. Las plantaciones comenzarán con la llegada de las lluvias, que suele ser en marzo. Gracias a unas condiciones de crecimiento en general favorables durante la estación de las lluvias de 2000, se prevé una cosecha de nivel entre medio y superior a la media.
La situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria. Pero algunos grupos de la población siguen siendo vulnerables después de las inundaciones que tuvieron lugar en Sokoto, en el noroeste.
SENEGAL (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. En octubre, una misión conjunta FAO/CILSS de evaluación de cultivos estimó la producción de cereales de 2000 en 1 041 000 toneladas, alrededor de 10 por ciento más que la media.
Gracias a dos buenas cosechas consecutivas, la situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria. Los mercados están bien abastecidos. El precio del mijo y sorgo decreció después de la cosecha mientras que el del arroz se mantiene estable.
SIERRA LEONA* (5 de febrero)
En 2000 se ha obtenido una cosecha menguada de arroz ya que las superficies plantadas fueron significativamente menores que el año anterior debido a la reanudación de los disturbios civiles a principios de mayo, que es el período crítico de la siembra. Debido a la inseguridad, se suspendieron o trastornaron gravemente la distribución de insumos y las operaciones de socorro, principalmente en el norte. Los organismos pudieron proporcionar insumos agrícolas a solamente el 46 por ciento de los beneficiarios previstos. A fines de 2000 se intensificaron las hostilidades en la frontera con Guinea y Liberia, lo que provocó nuevas oleadas de desplazamientos de la población.
Debido a la cosecha menguada y a los problemas de transporte, la situación del suministro de alimentos seguirá siendo difícil en 2001. Además de las personas desplazadas en el interior del país (PDI) ya registradas, se ha señalado la presencia de nuevas PDI en el sur y el oeste tras la reanudación de las hostilidades en mayo y octubre. Se han desplazado alrededor de 500 000 personas que se encuentran alojadas en las comunidades locales de las zonas controladas por el Gobierno, mientras que se estima que 1 millón de personas se han visto involucradas en la guerra en las zonas controladas por los rebeldes. Quedan todavía más de 400 000 refugiados sierraleoneses en los vecinos países de Africa occidental, principalmente Guinea y Liberia.
Las actividades militares entre el Frente Unido Revolucionario (FUR) y el ejército guineo han desplazado hasta 15 000 personas de las zonas fronterizas. A pesar de las hostilidades, el PMA y las ONG continúan distribuyendo alimentos. Se ha emprendido un plan de reasentamiento en los distritos de Freetown, Port Loko, Kenema y Pejehun, que han sido declarados seguros para el regreso de la población. Las PDI procedentes de las localidades arriba indicadas recibirán asistencia del PMA durante los próximos cuatro meses. Se estima que aproximadamente el 50 por ciento de las 57 000 PDI que se encuentran en los campamentos situados en las zonas occidentales proceden de distritos que ahora se han declarado seguros.
TOGO (5 de febrero)
En el sur han comenzado los preparativos para la primera cosecha de maíz. Las plantaciones comenzarán con la llegada de las lluvias, que suele ser en marzo.
La situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria. Sin embargo, las personas afectadas por las inundaciones registradas en diversas zonas siguen siendo vulnerables.
AFRICA CENTRAL
CAMERUN (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. La situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria. Las importaciones de cereales para el uso interno y para reexportaciones durante la campaña comercial de 2001 se estiman en 300 000 toneladas, principalmente trigo y arroz.
CONGO, REPUBLICA DE* (5 de febrero)
En enero las precipitaciones fueron inferiores a la media. Tras el cese de hostilidades acordado en diciembre de 1999 entre el gobierno y los partidos de oposición, en 2000 mejoró la situación de seguridad y del suministro de alimentos. Ahora los organismos humanitarios pueden llegar a todas las zonas. La mayor parte de las personas desplazadas por la guerra civil, estimadas en 810 000, ha regresado a sus hogares.
Hay alrededor de 100 000 refugiados de Equateur, provincia de la República Democrática del Congo, en las zonas septentrionales, principalmente en Betou, cerca de la frontera con la República Centroafricana. Además de 5 000 refugiados rwandeses y 8 000 angoleños. Ultimamente, el PMA emprendió una nueva operación de urgencia destinada a prestar asistencia a 50 000 refugiados de la República Democrática del Congo durante un período de seis meses. También está proporcionando alimentos a alrededor de 120 000 personas en Brazzaville, Pointe Noire y otras ciudades principales.
CONGO, REPUBLICA DEMOCRATICA DEL* (8 de febrero)
La situación del suministro de alimentos continúa empeorando debido a la persistencia de la inseguridad. La intensificación de las hostilidades, particularmente en las partes orientales, ha trastornado ulteriormente todas las actividades económicas y agrícolas, provocando nuevas oleadas de desplazamientos de la población. El número de las PDI se estima actualmente en 2 millones, cuya situación alimentaria y nutricional es crítica. En encuestas realizadas últimamente por organizaciones no gubernamentales se indica que hasta un 21 por ciento de la población padece malnutrición grave en la provincia oriental de Kivu Norte. La situación podría empeorar si fracasa, como se prevé, la cosecha de yuca en las partes orientales debido a las plagas y enfermedades. También es difícil la situación alimentaria en las principales ciudades del país, principalmente Kinshasa, que cuenta con una población de 6-7 millones de habitantes. En octubre pasado, una misión de la FAO estimó el déficit de alimentos de Kinshasa en 2000 en 1 millón de toneladas. En general, entre los factores que limitan el suministro de alimentos a Kinshasa y otras ciudades figuran el pésimo estado de la infraestructura vial, el asedio de la policía y de los militares a los transportistas, comerciantes y agricultores, la interrupción del suministro de alimentos procedentes de las provincias Equateur y Oriental, y la escasez de combustible debida a la falta de divisas.
La distribución de la asistencia humanitaria sigue viéndose limitada por la persistencia de la inseguridad y el estado muy deficiente de los caminos. El PMA prevé aumentar sus distribuciones de ayuda alimentaria hasta abarcar a 1,2 millones de personas, incluidos unos 70 000 refugiados angoleños, y últimamente ha hecho un llamamiento pidiendo 112 millones de dólares EE.UU. para las operaciones de socorro.
GABON (5 de febrero)
Las lluvias decrecieron en diciembre y principios de enero. Aumentaron a partir de mediados de enero, principalmente en el sur, pero fueron inferiores a la media. Los cultivos alimentarios principales son la yuca y el plátano, pero también se produce algo de maíz (alrededor de 25 000 toneladas). El país importa comercialmente la mayor parte de sus necesidades de cereales, estimadas en torno a las 85 000 toneladas en 2001.
GUINEA ECUATORIAL (5 de febrero)
En diciembre y enero se registraron lluvias limitadas. Los cultivos básicos son la batata, la yuca y el plátano. La necesidad de importación de cereales para la campaña comercial de 2001 se estima en 10 000 toneladas de arroz y de trigo.
REPUBLICA CENTROAFRICANA (5 de febrero)
Predominan condiciones secas estacionales. Gracias a varias cosechas buenas consecutivas, la situación del suministro de alimentos siguen siendo satisfactoria. La necesidad de importación de cereales para la campaña comercial de 2001 se estima en 30 000 toneladas, principalmente trigo.
AFRICA ORIENTAL
BURUNDI* (12 de febrero)
Tras una serie de cosechas menguadas, se estima satisfactoria la producción de las cosechas de la temporada A de 2001 recogidas últimamente. Una reciente misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO, el PMA y la UNICEF organizada en el lugar estimó la producción de alimentos en 85 000 toneladas de cereales, 68 000 toneladas de legumbres, 483 000 toneladas de raíces y tubérculos y 465 000 toneladas de bananos y plátanos, lo que representa un volumen superior en 15, 10, 4 y 1 por ciento, respectivamente, al de la temporada A de 2000. Con todo, las producciones son inferiores a los niveles medios anteriores a la crisis (1988-1993), debido a la inseguridad y al trastorno de la producción agrícola desde 1994.
La superficie plantada aumentó significativamente en esta campaña, gracias a una situación de seguridad relativamente mejor en las partes occidentales, en particular en las provincias de Bubanza y Cibitoke, y al levantamiento de los campamentos de reagrupación en la provincia rural de Bujumbura, lo que permitió a los agricultores volver a sus campos. El otro factor que contribuyó a aumentar la superficie plantada en la presente campaña fueron las distribuciones oportunas de semillas realizadas por el Gobierno y los organismos internacionales, principalmente en las provincias de Kirundo y Muyinga, las más afectadas por la sequía durante la temporada A de 2000.
Pese al comienzo tardío de la estación de las lluvias, las precipitaciones recibidas de octubre a noviembre fueron copiosas y bien distribuidas y beneficiaron el desarrollo de los cultivos. Sin embargo, las lluvias excesivas caídas en algunas partes provocaron inundaciones y pérdidas de cosecha y, en general, redujeron los rendimientos, particularmente de los frijoles. Los rendimientos de los bananos y plátanos deberían aumentar recién a partir de marzo y abril, ya que las plantes se han visto gravemente afectadas por el prolongado tiempo seco anterior.
En las zonas pantanosas, la temporada C de 2000, campaña corta que va de mediados de junio hasta septiembre, fue mala debido al tiempo seco imperante en los meses anteriores. Se estima su producción de alimentos en un nivel inferior en un 4 por ciento a la de la temporada C de 1999.
La difícil situación alimentaria se alivió con la llegada de la nueva cosecha. No obstante, a raíz de varias cosechas inferiores a la media consecutivas, la continua inseguridad y los desplazamientos de la población, así como de una reciente epidemia de paludismo, la situación alimentaria y nutricional sigue siendo inestable. La situación es particularmente difícil para 324 000 personas desplazadas en el interior del país y para las personas afectadas por la sequía en las provincias de Karuzi, Gitega, Kayanza y Muyinga. En una encuesta realizada últimamente en 7 provincias del país se indicaba una tasa de malnutrición general grave de 10 por ciento. Análogamente, en un reciente informe de MSF se indicaba que en enero de 2001 se había duplicado el número de los niños malnutridos atendidos en sus centros de alimentación terapéutica instalados en la provincia de Karuzi. Sigue haciendo falta ayuda alimentaria de urgencia para los sectores vulnerables de la población.
ERITREA* (14 de febrero)
Unas lluvias inferiores a lo normal caídas en diciembre en las zonas costeras que reciben lluvias en el invierno han atenuado las perspectivas para las cosechas de sorgo y maíz que están a punto de recogerse. Además, pese a unas lluvias favorables recibidas en septiembre y octubre en algunas regiones del país, se pronostica una cosecha de cereales de la temporada principal de 2000 muy inferior a la media, de resultas del desplazamiento de un número grande agricultores a causa de la guerra con el vecino país de Etiopía. Las zonas administrativas (Zobas) de Gash Barka y Debub, gravemente afectadas por los desplazamientos, son importantes zonas productoras de cereales que aportan más del 75 por ciento de la producción de cereales del país.
Por lo que se refiere a las langostas del desierto, la situación se mantiene calma, pero es probable que después de las lluvias caídas últimamente en las zonas del litoral se den condiciones favorables para su reproducción en algunas partes de las llanuras costeras del Mar Rojo.
Los precios de los cereales, que normalmente bajan durante la recolección, en general estaban aumentando o se mantuvieron inalterados en la mayoría de las plazas financieras entre noviembre y diciembre en previsión de una mala cosecha. La situación alimentaria sigue siendo difícil para cerca de 1,8 millones de personas afectadas por la guerra con Etiopía y por la sequía registrada el año pasado en las zonas del litoral.
ETIOPIA* (14 de febrero)
Está a punto de comenzar la plantación de las cosechas de la temporada secundaria "belg" de 2001. La cosecha "belg" representa el 8-10 por ciento de la producción anual de cereales y legumbres, pero en algunas zonas es la cosecha principal.
La recolección de las cosechas de la temporada principal "meher" de 2000 terminó al final del año pasado. Una misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA observó en noviembre y diciembre que la cosecha meher se había recuperado fuertemente respecto a las previsiones anteriores debido a las copiosas precipitaciones recibidas en octubre que beneficiaron a los cultivos tardíos. La misión pronosticó una cosecha meher de 11 610 000 toneladas de cereales, superior en alrededor de 7,3 por ciento a la estimación poscosecha de 1999, debido principalmente a un aumento de la superficie plantada.
El ganado, particularmente en las zonas pastorales, quedó devastado el año pasado por una sequía prolongada que causó una grave escasez de agua y de forrajes, exacerbada posteriormente por enfermedades infecciosas y parásitos. Las zonas pastorales meridionales de Somali, Borena, Bale y Omo Sur fueron las más afectadas, en las que las pérdidas de ganado llegaron hasta 50 por ciento. Por consiguiente, la producción pecuaria de los pastores y los productores agropecuarios ha disminuido gravemente y su recuperación llevará varios años. Las lluvias tardías meher de 2000 han contribuido considerablemente a la regeneración de los pastizales y al restablecimiento de los puntos de aguada. También sufrieron los animales en las zonas dependientes de la producción belg y en las woredas de las zonas agrícolas colonizadas, donde se señala que el número de los animales de tiro es inferior al necesario, lo que repercute en la extensión de la superficie plantada y en la calidad de los preparativos de la tierra.
Al haber mejorado la disponibilidad de cereales, los precios descendieron en la mayoría de los mercados. Sin embargo, pese al resultado satisfactorio de la cosecha, unos 6,5 millones de personas necesitarán asistencia alimentaria. Partiendo de la estimación de la producción meher de 2000 y del pronóstico de la cosecha belg de 2001, situado en 170 000 toneladas de cereales y legumbres, la misión estimó la necesidad total de importación de cereales en 2001 en 970 000 toneladas, una gran parte de las cuales se cubrirá con ayuda alimentaria. Se insta, además, a los donantes a respaldar las compras locales para dar algo de fuerza al mercado. En febrero, las promesas totales ascendían a 450 000 toneladas, de las cuales se han entregado 45 000 toneladas.
El equipo de las Naciones Unidas en el país ha lanzado últimamente un llamamiento por 203 millones de dólares EE.UU. para prestar asistencia a 6,5 millones de personas afectadas por la sequía y la guerra.
KENYA (14 de febrero)
Las perspectivas para la cosecha secundaria de cereales de "lluvias cortas", que representa alrededor de un 20 por ciento de la producción anual, han mejorado gracias a unas lluvias no estacionales que continuaron hasta bien entrado enero. Sin embargo, constituyen un motivo de preocupación los informes recientes sobre infestaciones de orugas negras en algunas partes de la provincia costera. Esta cosecha constituye la fuente principal de alimentos en algunas partes de las provincias centrales y orientales.
La cosecha principal de cereales de "lluvias largas", que se recoge hasta octubre, quedó notablemente menguada a causa de una grave sequía. Las estimaciones oficiales indican una producción de maíz de alrededor de 1,7 millones de toneladas, frente a la media de 2,4 millones de toneladas de los cinco años anteriores.
La grave sequía de 1999/2000 minó gravemente la seguridad alimentaria de cerca de 4,4 millones de personas, dando lugar a una operación de socorro en gran escala. Pese a alguna mejora, la situación del suministro de alimentos sigue siendo frágil, particularmente en los distritos pastorales septentrionales, orientales y nordorientales. La grave escasez de agua y de pastizales ha provocado la pérdida de un número grande de cabezas de ganado, y el proceso de recuperación es más bien lento.
En enero de 2001 la FAO y el PMA aprobaron conjuntamente una operación de urgencia revisada destinada a prestar asistencia alimentaria a 4,4 millones de personas afectadas por la sequía, por un valor de 148,9 millones de dólares EE.UU. durante un período de seis meses.
RWANDA* (9 de febrero)
Según informes provisionales, la producción de alimentos de la cosecha de la temporada A de 2001 recién recogida está en torno al buen nivel del año pasado o es ligeramente inferior. Pese al retraso de la estación de las lluvias, las precipitaciones caídas desde mediados de octubre hasta diciembre fueron copiosas y bien distribuidas. Aunque unas lluvias excesivas caídas en noviembre provocaron inundaciones y pérdidas de cosecha en algunas partes, principalmente en las prefecturas de Gisenyi y Butare, en general beneficiaron a las plantaciones y a los rendimientos, particularmente de los cereales y legumbres. La producción de raíces y tubérculos y de bananos y plátanos fue menos satisfactoria debido a la escasez de material de plantación y a un tiempo seco prolongado. También se obtuvo una mala cosecha en la región de Bugasera (Provincia de Kigali Rural), a pesar de un cuadro en general positivo, debido a la escasez de semillas después de varias cosechas menguadas consecutivas. Una misión del Gobierno, la FAO, el PMA, y la UE, organizada a nivel local, ha evaluado la producción de alimentos de la presente campaña, pero todavía no se conocen sus conclusiones.
Con la nueva cosecha se ha aliviado la difícil situación del suministro de alimentos. Los precios del maíz, los frijoles y las papas irlandesas han bajado respecto a sus niveles de hace un año. Sin embargo, pese a una mejora general de la situación alimentaria, se prevé que hará falta asistencia alimentaria de urgencia hasta la próxima cosecha para los habitantes de la región de Bugasera, particularmente en los distritos de Kanzenze y Gashora. El PMA prevé la distribución de 13 000 toneladas de ayuda alimentaria de urgencia durante tres meses a 267 000 personas afectadas por la sequía en el sudeste de Rwanda.
SOMALIA* (14 de febrero)
Ha comenzado la recolección de la cosecha secundaria de cereales "Deyr", que normalmente representa alrededor de 25-30 por ciento de la producción anual de cereales. Las estimaciones preliminares de la superficie plantada indica un incremento de alrededor de 51 por ciento con respecto a la cosecha de sorgo de la campaña Deyr anterior, a alrededor de 207 000 hectáreas, y una disminución del 21 por ciento de la superficie plantada con maíz a cerca de 71 000 hectáreas. La producción total de cereales para la campaña Deyr de 2000/01 se pronostica en alrededor de 110 000 toneladas, volumen cercano al de la buena cosecha Deyr del año pasado.
La temporada principal "Gu" de 2000, recogida hasta septiembre pasado, se estimó en 212 000 toneladas de cereales, alrededor de 22 por ciento más que la media posterior a la guerra (1993-1999) debido a unas lluvias generalizadas y a una seguridad mejorada en algunas partes.
En algunas partes del sur de Somalia la situación del suministro de alimentos ha mejorado en general en los últimos seis meses gracias a que se han obtenido mejores cosechas Gu y Deyr. Sin embargo, unas encuestas nutricionales recientes indican la persistencia de altas tasas de malnutrición, debidas al hecho de que las familias se están recuperando lentamente de una serie de sequías y de los efectos a largo plazo de años de inseguridad. Además, la nueva inyección de fondos en el mercado, con la consiguiente depreciación del chelín somalí, ha provocado un fuerte aumento de los precios de los artículos alimentarios y de los bienes esenciales.
En otras partes, como en Somalia nordoccidental (Somaliland) y nororiental (Puntland), unas precipitaciones favorables caídas en los últimos meses han mejorado la situación de los pastizales y del ganado. Sin embargo, la prohibición de las importaciones de ganado de Africa oriental impuesta por los países situados a lo largo de la Península arábiga a causa de la fiebre del Valle del Rift ha causado considerables pérdidas de ingresos y puesto en peligro el sustento de un número grande de familias pastorales, particularmente en la región de Haud (Togdeer).
La ayuda alimentaria distribuida por el PMA durante el mes de diciembre tanto en el sur como en el norte de Somalia estuvo en torno a las 1 100 toneladas, lo que lleva el total distribuido entre enero y diciembre de 2000 a 16 845 toneladas.
SUDAN* (14 de febrero)
Una misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA, que visitó el sur del Sudán del 4 al 27 de octubre de 2000 y el norte del Sudán del 19 de noviembre al 6 de diciembre, observó que en diversas partes del país estaban empezando a escasear gravemente los alimentos debido a la llegada tardía de las lluvias y a unas rachas secas prolongadas, a la vez que habían mermado las reservas alimentarias. La misión pronosticó la producción total de cereales de 2000/01 en el Sudán en alrededor de 3,6 millones de toneladas, que comprenden 2,7 millones de toneladas de sorgo, 496 000 toneladas de mijo y 334 000 toneladas de trigo (que se recogerá a mediados de 2001), y 95 000 toneladas de otros cereales. En este nivel, la producción de cereales supera en alrededor del 14 por ciento a la cosecha inferior a la media del año pasado, pero es inferior en alrededor del 18 por ciento a la media de los últimos cinco años.
Como consecuencia, la necesidad de importación de cereales en la campaña comercial 2000/01 (noviembre/octubre) se estima en 1,2 millones de toneladas, alrededor de 16 por ciento más que las importaciones efectivas del año pasado. Las importaciones comerciales en 1999/2000 se estiman en cerca de 1 millón de toneladas, alrededor de 13 por ciento más que el año anterior. La ayuda alimentaria de urgencia, en cartera o ya movilizada, se cifra en 34 000 toneladas, lo que deja un déficit no cubierto de alrededor de 140 000 toneladas.
La merma de las cosechas, unida a unas existencias prácticamente agotadas, ha dado lugar a un fuerte aumento de los precios de los cereales. Los precios al por menor del sorgo, por ejemplo, subieron desde un promedio de 15 000 SP por saco de 90 kg entre enero y abril de 2000 a un promedio de 35 000 SP en mayo y junio. En noviembre y diciembre de 2000 los precios del sorgo alcanzaron un promedio de 40 000 SP comparado con los 20 000 SP del mismo período en 1999. Tal incremento hará que para los segmentos más pobres de la población el acceso a los alimentos será más restringido.
La irregularidad de las precipitaciones también tuvo un efecto devastador en los pastizales, así como en la disponibilidad de los piensos de cereales y de los residuos de cosecha, especialmente en las zonas de secano. Se prevé que el drástico descenso de los forrajes provocará una desnutrición generalizada en el ganado. La oferta de ganado ha aumentado considerablemente en el mercado, lo que ha hecho bajar los precios y, por consiguiente, los ingresos familiares. La relación de intercambio ganado/cereales ha empeorado de forma pronunciada para los pastores. La de ovejas/sorgo (cantidad de sorgo comprado con la venta local de una oveja) disminuyó alrededor de 400 por ciento en diciembre de 2000 respecto a diciembre de 1999.
La población más afectada por la mala campaña actual se estima en 900 000 personas, principalmente en Darfur, Kordofán, Bahr el Ghazal Norte, Bahr el Jebel, Equatoria Este, Jonglei, Juba y la provincia de Butana en el estado de Gezira. Alrededor de 600 000 de estas personas necesitarán ayuda alimentaria dentro de cuatro o cinco meses. Además, alrededor de 2,4 millones de personas afectadas por los disturbios civiles en curso en el sur seguirán necesitando asistencia. Debido a que son pocos los recursos que han quedado y reducidas al mínimo las posibilidades de supervivencia en el lugar, los agricultores y otros grupos vulnerables han comenzado a emigrar en busca de trabajo y alimentos. El consumo de los cereales para semillas reducirá su capacidad productiva y su posibilidad de proveer a su sustento en la próxima campaña agrícola. Es indispensable una intervención oportuna y selectiva para impedir ulteriores sufrimientos humanos.
En enero de 2001 la FAO y el PMA aprobaron conjuntamente una operación de urgencia revisada destinada a la asistencia alimentaria de 2,4 millones de personas afectadas por la guerra, la sequía y las inundaciones, por un valor adicional de 50,2 millones de dólares EE.UU. durante un período de cuatro meses.
TANZANIA (14 de febrero)
La recolección de las cosechas de la temporada corta "Vuli" de 2000/01 está muy avanzada en las zonas bimodales de secano de la región costera septentrional y nordoriental, donde la cosecha representa alrededor del 30-40 por ciento de los suministros alimentarios anuales. Pese a unas buenas lluvias recibidas en algunas partes, las perspectivas son inciertas debido particularmente a las recientes infestaciones de orugas negras en Dodoma, Arusha, Mbeya, Iringa, Singida y en algunas partes de Mwanza.
La cosecha nacional de cereales de 2000, principalmente maíz, se estima en torno a los 3,3 millones de toneladas, alrededor de un 20 por ciento menos que la media de los últimos cinco años. La merma se atribuye a la sequía registrada en diversas partes del país. Sin embargo, la situación del suministro de alimentos ha mejorado en general debido al volumen grande de las importaciones de maíz, que determinaron una fuerte disminución de los precios de los alimentos. A pesar de la reducción de los pastizales, se señala que la situación del ganado es buena.
Varios años consecutivos de sequía han minado gravemente el suministro de alimentos en las regiones septentrionales y centrales del país. Se necesitará asistencia alimentaria para alrededor de 800 000 personas identificadas como afectadas de inseguridad alimentaria, principalmente en las regiones de Dodoma, Mara, Shinyanga, Singida, Tabora, Tanga y el sur de Mwanza, que han sufrido una tercera mala cosecha consecutiva.
UGANDA (14 de febrero)
La recolección de las cosechas de cereales de la segunda temporada de 2000/01 está muy avanzada. Se prevé una producción superior a la media gracias a unas lluvias bien distribuidas durante la campaña.
La producción de la cosecha de la temporada principal, recogida a partir de mediados de 2000, fue inferior a la media debido a la sequía y a unas lluvias irregulares caídas en diversas partes del país. Se estima que la producción de cereales en 2000 fue inferior a la media en alrededor de 12 por ciento, situándose en 1,6 millones de toneladas.
La situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria, pero sigue siendo inestable en los distritos de Gulu, Kitgum, Bundibugyo, y en algunas partes de Kasese y Kabarole, debido principalmente a la mala cosecha e inseguridad del año pasado. La asistencia alimentaria del PMA beneficia a un número de PDI, refugiados, y personas afectadas por la sequía estimado en 1,1 millones.
AFRICA AUSTRAL
ANGOLA* (5 de febrero)
Las perspectivas para los cultivos alimentarios de 2001, que se recogerán a partir de abril, son inciertas debido a la irregularidad de las lluvias caídas desde el comienzo de la campa-ña. Unas rachas secas prolongadas registradas en algunas partes han coincidido con preci-pitaciones excesivas en otras. El tiempo seco imperante durante enero en las partes meri-dionales ha afectado al desarrollo de los cereales y se necesitan más lluvias en esas zonas. Por el contrario, unas lluvias intensas caídas al final de enero en la provincia nordoccidental de Kabinga provocaron pérdidas de vidas humanas y daños a la infraestructura y a los cultivos. Según las estimaciones, la superficie total plantada ha disminuido debido a la intensificación de los conflictos civiles durante el período de siembra, lo cual podría traducirse en otra producción de nivel inferior a la media. Una cosecha de cereales menguada por tercer año consecutivo agravaría la situación inestable del suministro de alimentos en el país, y reforzaría su dependencia de la asistencia alimentaria.
La situación del suministro de alimentos continúa empeorando debido a la persistencia del conflicto civil. La situación de seguridad en el interior del país sigue siendo inestable debido a los incidentes violentos señalados en la provincia septentrional de Uije, la provincia nordoccidental de Bengo y la provincia central de Bie. El número de las personas desplazadas en el interior del país (PDI), estimado en 2,5 millones en junio pasado ha continuado aumentando, particularmente en Bie. También se han señalado nuevas oleadas de personas desplazadas en Benguela en el oeste, Huila y Kuando Kubango en el sur, Malange en el norte y Moxico en el este. Aunque la situación alimentaria y nutricional de las PDI es excepcionalmente crítica, las distribuciones de la ayuda alimentaria continúan siendo problemáticas debido a la inseguridad y a las promesas de ayuda alimentaria que no cubren las necesidades. Para fines de enero, el PMA había recibido promesas que cubrían sólo el 60 por ciento de su actual operación en Angola. Esto obligó a reducir en una tercera parte el número de los beneficiarios, de 1,5 millones a 1 millón, y a limitar las raciones distribuidas. La actual distribución de alimentos se encuentra ante un déficit inminente. Se necesitan con urgencia recursos adicionales para evitar que sigan disminuyendo las distribuciones durante marzo y abril, con todo lo que ello significa en términos de sufrimiento humano.
BOTSWANA (2 de febrero)
El tiempo seco registrado durante la mayor parte de enero afectó al desarrollo de los cultivos de cereales de 2001, particularmente el maíz. Se necesitan con urgencia más lluvias para evitar que disminuyan los rendimientos, y que empeore la situación de los pastizales.
Tras dos cosechas menguadas de cereales consecutivas, el país necesita importar comercial-mente un total de 250 000 toneladas de cereales en la campaña comercial 2000/01.
LESOTHO (2 de febrero)
Las lluvias caídas a partir de finales de enero aportaron alivio a los cultivos de cereales secundarios de 2001, afectados por una racha seca desde el principio del mes. Es probable que en algunas partes disminuyan los rendimientos. En las semanas venideras las lluvias constituirán un elemento decisivo para la recuperación de la cosecha.
Tras la cosecha de cereales menguada de 2000, la necesidad de importaciones en la campaña comercial 2000/01 (abril/marzo) se estima en 248 000 toneladas, que en su mayor parte deberían cubrirse comercialmente.
MADAGASCAR (2 de febrero)
Unas lluvias satisfactorias caídas durante la segunda y tercera décadas de enero beneficiaron a la cosecha de arroz de 2001, que se había visto perjudicada a principios del mes por el tiempo seco. Las perspectivas generales para la cosecha de arroz que comienza a partir de abril son favorables, pero se necesitan más lluvias en el extremo norte y en otras zonas localizadas donde han sido irregulares. En cambio, en las zonas meridionales productoras de maíz, el tiempo seco imperante en las dos últimas décadas de enero han afectado al desarrollo de los cultivos de maíz. Si no se reciben dentro de poco más lluvias, es probable que se obtenga una cosecha escasa por segundo año consecutivo. Las zonas meridionales resultaron afectadas por una grave sequía que redujo en una cuarta parte la producción de maíz del año pasado.
La situación nacional del suministro de alimentos es difícil debido a la mala cosecha de arroz de 2000 y al fuerte aumento de la necesidad de importaciones. En las partes meridionales, se necesita ayuda alimentaria para 240 000 personas vulnerables que en la última campaña obtuvieron una mala cosecha.
MALAWI (26 de febrero)
Unas lluvias continuas e intensas caídas desde finales de enero han provocado grandes inundaciones en 13 de los 27 distritos del país, particularmente en las zonas meridionales situadas a lo largo del río Shire. Los informes oficiales indican que 200 000 personas se han desplazado a causa de las inundaciones. Muchas zonas son inaccesibles como consecuencia de los daños causados a los caminos y puentes. Se estima que en las zonas afectadas por las inundaciones se han destruido 50 000 hectáreas de cultivos. El Gobierno ha lanzado un llamamiento pidiendo asistencia internacional para hacer frente al desastre.
Las perspectivas para las cosechas de cereales de 2001 han empeorado debido al exceso de lluvias caídas en febrero que con toda probabilidad han determinado una disminución de los rendimientos. Los rendimientos se han visto también perjudicados por una racha seca y unas temperaturas elevadas registradas en enero en algunos distritos meridionales, principalmente Balaka, Zomba y Mwanza. Los pronósticos más recientes indican una cosecha de maíz inferior a la excelente cosecha de 2,5 millones de toneladas del año pasado, pero aún así superior a la media. El resultado final dependerá de las lluvias que se reciban en lo que resta del período vegetativo.
La situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria gracias a la buena cosecha del año pasado y al nivel suficiente de las reservas. También se señala como en general satisfactorio el nivel de la seguridad alimentaria familiar.
MOZAMBIQUE (26 de febrero)
Los niveles altos del agua del río Zambezi, debidos a las lluvias torrenciales caídas en los países vecinos, así como a las continuas e intensas lluvias recibidas en las provincias centrales desde la última década de enero, han provocado inundaciones en las provincias de Zambezia, Sofala, Manica y Tete, particularmente al final de febrero. Se estima que han muerto 41 personas, más de 77 000 han perdido sus propiedades y hasta 400 000 resultaron afectadas por el desastre. También se señalan graves daños a la infraestructura del transporte. El acceso al puerto principal de Beira ha quedado interrumpido. Las evaluaciones provisionales de los daños agrícolas realizada por el Gobierno indican que al final de febrero las inundaciones habían destruido 27 000 hectáreas de cultivos comerciales y alimentarios, principalmente en la provincia de Zambezia, afectando a 44 000 familias agrícolas.
Debido a la ruptura de la represa de Chaora Bassa, la más grande del país situada junto al río Zambezi, existe la amenaza de nuevas inundaciones en las partes centrales. Alrededor de 80 000 personas están siendo evacuadas de las ciudades de Marromeu y Luabo y zonas circundantes. Preocupa también la posibilidad de que se sigan produciendo inundaciones a lo largo del río Pungue, en las provincias de Manica y Sofala. Más al sur, hay unas 30 000 personas perjudicadas por las inundaciones debidas a los altos niveles del río Save. El Gobierno ha hecho un llamamiento pidiendo 30 millones de dólares EE.UU. para hacer frente a la emergencia de las zonas centrales. Debido a la interrupción de los caminos, se necesitan con urgencia más aviones para las operaciones de evacuación. Actualmente se está proporcionando asistencia alimentaria de urgencia a 20 000 personas afectadas. Los aperos agrícolas y las semillas necesarias para que los agricultores afectados puedan plantar la cosecha de la segunda temporada se evalúan en 2,3 millones de dólares EE.UU..
En las provincias meridionales, las más afectadas por las graves inundaciones del año pasado, las perspectivas para la cosecha de cereales de este año han empeorado como consecuencia de las precipitaciones muy inferiores a la media recibidas en enero. Puede que las lluvias caídas en la segunda década de febrero hayan llegado demasiado tarde para impedir graves reducciones de los rendimientos. En las principales zonas productoras de cereales del norte, unas buenas lluvias recibidas desde el comienzo de la campaña han favorecido el desarrollo de los cultivos.
En general, las perspectivas para la cosecha de cereales de este año siguen siendo satisfactorias, ya que las pérdidas de cosechas debidas a las inundaciones no son significativas a nivel nacional. Gracias a unas lluvias en general abundantes y a un aumento de la superficie plantada con respecto al nivel del año pasado, el primer pronóstico oficial indicó un aumento del 6 por ciento en la producción de cereales este año. Sin embargo, de continuar las lluvias intensas en lo que falta del período vegetativo, las perspectivas podrían empeorar rápidamente.
En el plano nacional, la situación del suministro de alimentos sigue siendo satisfactoria. Los precios del maíz están por debajo del nivel de hace un año. No obstante, se estima que en 37 distritos hay un total de 165 000 personas afectadas de inseguridad alimentaria que necesitan asistencia alimentaria hasta la próxima cosecha.
NAMIBIA (2 de febrero)
Las perspectivas para la cosecha de cereales de este año han empeorado como consecuencia de una grave sequía registrada durante enero en las zonas productoras septentrionales, después de unas lluvias tardías e irregulares caídas desde el comienzo de la campaña. En febrero y marzo las precipitaciones constituirán un factor decisivo para la recuperación de las cosechas de maíz y sorgo.
La situación del suministro de alimentos sigue siendo satisfactoria como consecuencia de la buena cosecha de cereales de la última campaña y de la capacidad de importaciones comerciales del país.
SUDAFRICA (7 de febrero)
Las perspectivas para la cosecha de maíz de 2000 han empeorado. Unas lluvias muy inferiores a la media y unas temperaturas elevadas registradas en enero y principios de febrero han dado lugar a una reducción de los rendimientos, particularmente en las zonas productoras occidentales más afectadas. Según estimaciones provisionales, puede que hasta un 30 por ciento de la cosecha de maíz se haya visto afectada en las provincias de North West y Northern Cape, que representan una tercera parte de la producción de maíz y un 40 por ciento del maíz blanco. En las semanas venideras las lluvias serán un elemento decisivo para la recuperación de una parte de la cosecha, que está entrando en la fase crítica de la polinización, y para evitar ulteriores daños a los cultivos. Debido al empeoramiento de las perspectivas de la cosecha, los precios de los futuros sobre el maíz aumentaron a más de 900 rand por tonelada en la primera semana de febrero frente a los 700 rand por tonelada de mediados de diciembre.
Las estimaciones oficiales más recientes de las plantaciones de maíz indican una superficie de 2 650 000 hectáreas, cifra mayor de lo previsto pero aún así inferior en un 17 por ciento al nivel del año pasado. La disminución se debe a los bajos precios internos vigentes durante el período de siembra. La reducción de la superficie plantada, unida a una merma de los rendimientos, podría traducirse en un fuerte decrecimiento de la producción de maíz de 2001. Se necesitan con urgencia más lluvias.
Las estimaciones de la producción de la cosecha de trigo de 2000 se han revisado al alza a 2,1 millones de toneladas, una tercera parte más que la mala cosecha del año anterior y un volumen superior a la media.
SWAZILANDIA (5 de febrero)
Las perspectivas para la cosecha de cereales de 2001 han empeorado. Un tiempo seco prolongado durante la mayor parte de enero afectó al desarrollo de los cultivos de maíz. Las lluvias se reanudaron a principios de febrero pero puede que hayan llegado demasiado tarde para impedir que mermaran los rendimientos. Todavía no se dispone de una evaluación de los daños causados a los cultivos por la sequía.
La situación del suministro de alimentos se presenta en general difícil debido a la cosecha de cereales reducida a causa de las inundaciones del año pasado y a las importaciones comerciales realizadas durante la campaña comercial 2000/01 (abril/marzo) que han sido muy inferiores a las necesidades. En particular, están experimentando graves dificultades alimentarias 14 000 personas que obtuvieron una mala cosecha en la última campaña y necesitan ayuda alimentaria hasta la próxima cosecha. El Gobierno ha formulado un llamamiento pidiendo asistencia internacional para ayudar a la población afectada.
ZAMBIA (2 de febrero)
Unas lluvias intensas caídas en enero en la mayor parte del país, salvo en el extremo sur, provocaron inundaciones localizadas pero, en general, beneficiaron el desarrollo de los cultivos de cereales de 2001. Las zonas más afectadas por las pérdidas de cosechas provocadas por las inundaciones son las provincias occidentales (Kalabo, Kaoma Lukulu y Mongu), Luapula y las provincias septentrionales y centrales. Otras de las zonas afectadas son el Valle de Luangwa (incluidas algunas zonas de los distritos de Serenje, Mpika, Mambwe, Lundazi, Katete, Chipata, Nyimba y Luangwa). Las lluvias excesivas han provocado también plagas y enfermedades en algunas partes. En cambio, se prevé que la sequía prolongada registrada en las provincias meridionales (Livingstone y el Valle de Gwembe) y occidentales (Sesheke, Shangombo y Senanga) determinará una fuerte reducción de los rendimientos en esas zonas.
En general, y pese a unas pérdidas de cosecha localizadas, las perspectivas para la producción son favorables gracias a unas buenas lluvias recibidas desde el comienzo de la campaña. Sin embargo, se pronostica que la producción de maíz de 2001 disminuirá con respecto a la excelente cosecha del año pasado, debido a una reducción de la superficie plantada a causa de los bajos precios vigentes durante el período de siembra y a la gran cuantía de excedentes no vendidos de la campaña anterior.
La situación del suministro de alimentos es satisfactoria. Los precios del maíz, que bajaron después de la última cosecha, comenzaron a subir en enero.
ZIMBABWE* (5 de febrero)
Las perspectivas para los cultivos alimentarios de 2001, que se cosecharán a partir de abril, han empeorado debido al tiempo seco registrado en las dos últimas décadas de enero y, en general, a la irregularidad de las lluvias recibidas desde el comienzo de la campaña. Puede que las lluvias de principios de febrero hayan llegado demasiado tarde para impedir la merma de los rendimientos del maíz y de otros cultivos alimentarios. Las precipitaciones inferiores a la media recibidas a partir de mediados de noviembre en las zonas meridionales más afectadas se han traducido en reducciones significativas de la superficie plantada y de los rendimientos. Se estima que en la mayor parte de los distritos las plantaciones son inferiores al 50 por ciento de los niveles normales y se prevé una mala cosecha. Los distritos más afectados son Beitbridge, Matobo y Umzingwane, en la provincia de Matebeleland Sur; Umguza, en la provincia de Matebeleland Norte; Guruve, en la provincia Mashonaland Central; Chiredzi, en la provincia de Masvingo; y Shurugwi, en la provincia Central. En las principales zonas productoras de maíz del norte y el centro las estimaciones más recientes indican una disminución del 26 por ciento de la superficie plantada con maíz, estimándose que las siembras del sector agrícola, en gran medida comercial, han disminuido en un 50 por ciento como consecuencia de los disturbios civiles. Los pronósticos provisionales indican una cosecha de maíz de sólo 1,2 millones de toneladas, o sea 41 por ciento menos que el nivel del año pasado, pero el resultado definitivo dependerá de las lluvias que se reciban en los próximos dos meses en las principales zonas productoras. Sin embargo, de concretizarse este pronóstico bajo de la producción de maíz, las necesidades de importación en la campaña comercial 2001/02 aumentarán de forma pronunciada a alrededor de 500 000 toneladas, en un momento en que el país se encuentra ante una grave escasez de divisas.
La actual situación general del suministro de alimentos sigue siendo satisfactoria gracias a la buena cosecha de maíz del año pasado y a un volumen grande de existencias remanentes. Sin embargo, la situación se presenta difícil para las familias urbanas pobres y las que viven en algunos terrenos comunales que dependen de la compra de maíz. Los precios del maíz y de otros alimentos básicos han aumentado de forma pronunciada el mes pasado debido a los niveles altos de inflación, a la escasez de combustible y a la continua devaluación de la moneda nacional.
ASIA
AFGANISTAN* (14 de febrero)
El país se encuentra paralizado por una grave crisis alimentaria debida a dos años consecutivos de sequía, a los continuos conflictos civiles y a un invierno riguroso. Los últimos informes indican un número cada vez mayor de víctimas causadas por las gélidas temperaturas registradas en las partes occidentales y septentrionales.
La sequía de 2000 ha devastado los cultivos y el ganado en todo el país, quedando gravemente afectadas más de 3 millones de personas. Además, la intensificación del conflicto civil, particularmente en las partes septentrionales, ha dado lugar a nuevas oleadas de personas desplazadas, agravando la ya inestable situación alimentaria. El desplazamiento en gran escala de los pobladores, particularmente de los distritos alejados de las provincias de Ghor, Badghis y Faryab, ya ha comenzado con las familias indigentes a las que se está ubicando en campamentos situados en las afueras de Herat, el principal centro urbano del oeste. Además, sólo en los últimos cinco meses se han pasado a la parte septentrional del Pakistán unas 150 000 personas que están viviendo en condiciones de frío intenso en los campamentos situados en los alrededores de Peshawar.
Las perspectivas para las cosechas de cereales de 2001, que se recogerán a partir de mayo y junio, siguen siendo inciertas debido principalmente a la persistencia de la inseguridad en las provincias del norte, en las que se encuentra alrededor del 40 por ciento de la superficie de regadío del país.
Una misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA que visitó el país a mediados del año pasado advirtió sobre la grave crisis alimentaria que iba surgiendo en el país. La misión estimó la producción total de cereales de 2000 en 1 820 000 toneladas, alrededor de un 44 por ciento menos que en 1999 y 53 por ciento, si se la compara con la de 1998. La necesidad de importación de cereales en la campaña comercial 2001/02 (julio/junio), estimada en un nivel récord de 2,3 millones de toneladas, es casi el doble del volumen de 1999/2000, calculado en 1,3 millones de toneladas. Las escasas precipitaciones recibidas en el invierno pasado y el insuficiente crecimiento de la vegetación en la mayoría de los pastizales altos de las regiones occidentales y meridionales durante la primavera han provocado un número extremadamente elevado de pérdidas de cabezas de ganado de la población nómada.
En 2000, el PMA distribuyó alrededor de 161 000 toneladas de alimentos a 3,3 millones de personas más afectadas, frente a las 82 631 toneladas distribuidas durante el mismo período del año pasado. Las Naciones Unidas han renovado el llamamiento por 220 millones de dólares EE.UU. lanzado en noviembre pasado, habiéndose prometido al final de enero de 2000 menos de 14 millones de dólares EE.UU..
ARABIA SAUDITA (14 de febrero)
Tras unas buenas precipitaciones caídas últimamente, mejoraron las perspectivas para la cosecha de trigo de 2001 que se recogerá en abril y mayo. La producción de trigo en 2000 se estima en 1,5 millones de toneladas, volumen semejante al del año anterior pero inferior en alrededor del 9 por ciento a la media de los últimos cinco años.
Las importaciones de cereales en 2000/01 (julio/junio) se pronostican actualmente en alrededor de 7 millones de toneladas, volumen ligeramente superior al del año pasado.
ARMENIA* (1 de febrero)
Las perspectivas para la cosecha de cereales de 2001 son inciertas. La persistencia de la sequía en 2000 menguó la producción de cereales en 27 por ciento a 219 000 toneladas provocando una escasez de semillas. Como consecuencia, las informaciones iniciales indican que la superficie sembrada con cereales de invierno (principalmente trigo) para la cosecha de 2001 ha descendido en una tercera parte a 65 000 hectáreas. Unas buenas lluvias recibidas al final de 2000 contribuyeron a reparar la escasez de humedad, pero las precipitaciones han disminuido a partir de entonces y hacen falta muchas más. Las imágenes del satélite indican claramente que en el norte (algunas partes de Shirak, Lori, Tavouch y zonas adyacentes de Kotaik y Geharkunik, en una zona que va desde el Lago Sevan hasta la frontera) el desarrollo de los cultivos es marcadamente inferior al del año pasado. Sin embargo, también contribuye a esta conclusión el hecho de que las superficies sembradas con cultivos de invierno se han reducido en esas zonas. La situación de los cultivos es marcadamente mejor que la del año pasado sólo en Siunik. Las perspectivas para el suministro de alimentos de 2001 dependerán decisivamente del aumento de las superficies sembradas con cereales de primavera de menor rendimiento, y de la distribución de papas para siembra a fin de que los agricultores puedan plantar este cultivo básico. También se vieron afectados los forrajes y los pastizales.
Una misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO estimó la necesidad de importación de cereales en 2000/01 (julio/junio) en 515 000 toneladas, incluidas 458 000 toneladas de trigo y 44 000 toneladas de cereales forrajeros, para proporcionar raciones de supervivencia al ganado, importante fuente de proteínas y de ingresos para las familias rurales. La necesidad de importación es muy superior a la media e incluye 146 000 toneladas de ayuda alimentaria. Frente a esta necesidad, hasta finales de 2000 se habían importado alrededor de 200 000 toneladas de cereales, incluidas 68 000 toneladas de ayuda alimentaria.
Los problemas relativos al debilitamiento económico, social y político registrados en el decenio pasado han dado lugar a una situación de desempleo e inseguridad alimentaria en gran escala, de resultas de lo cual un 15 por ciento de los niños campesinos sufre de malnutrición crónica incluso en circunstancias normales. El PMA prevé proporcionar, desde el 1 de noviembre de 2000 hasta el 1 de julio de 2001, asistencia alimentaria selectiva de urgencia a unos 297 000 agricultores de subsistencia y a otras familias vulnerables con 22 480 toneladas de trigo enriquecido con hierro, aceite vegetal y legumbres. La operación de urgencia (OU) propuesta se integrará plenamente con la operación prolongada de socorro y rehabilitación (OPSR) actualmente en curso, que durará también hasta junio de 2001 y favorecerá a otros 170 000 beneficiarios. El tonelaje combinado de la OU prevista y de la OPSR en curso asciende a más de 28 000 toneladas hasta mediados de 2001.
AZERBAIYAN (1 de febrero)
Según los primeros indicios, la superficie sembrada con trigo y cebada de invierno ha continuado aumentando. A raíz de dos años de precipitaciones inferiores a la media y de dificultades en el mercadeo de los cultivos comerciales, como la uva y el algodón, los agricultores están pasando al cultivo de cereales de invierno que maduran en junio, antes de que comiencen los calores del verano y las necesidades de agua alcancen niveles máximos. Los abastecimientos de agua para riego escasean en los embalses tras la sequía registrada el año pasado en las zonas servidas de los países vecinos, y las perspectivas para la cosecha dependerán crucialmente de las precipitaciones que se reciban en febrero y marzo y del deshielo que se produzca en mayo y junio. Los trabajos de urgencia realizados en el invierno de este año (profundización de los canales de riego) podrían contribuir a mantener los niveles de producción de los cultivos remunerativos.
Una misión de evaluación de la sequía enviada por la FAO en enero de 2001 confirmó que la cosecha de trigo de 2000 había escapado en general a los efectos de la sequía, que afectó principalmente a los cultivos plantados en primavera (papas, hortalizas, algodón, forrajes) y, en particular, en las zonas de cultivo situadas al final de los sistemas de canales, en las zonas más altas o donde las bombas no pudieron levantar el agua debido a la fuerte succión necesaria a causa de los niveles muy bajos del agua. Las superficies sembradas habían aumentado notablemente. La producción de cereales de 2000 se estima oficialmente en 1,5 millones de toneladas, alrededor de 400 000 toneladas más que la media quinquenal debido a un fuerte aumento de la superficie y de los rendimientos del trigo, ya que la sequía y la escasez de agua para riego afectaron principalmente a los cultivos sembrados en primavera (por ejemplo las papas y las hortalizas), a los forrajes y a la industria pesquera.
Gracias a una cosecha superior a la media, la necesidad de importación de cereales debería disminuir algo. Es probable, sin embargo, que aumente la producción de forrajes, ya que escasean y los agricultores internos hacen frente a la competencia de las importaciones. La mayor parte de las necesidades de importación de cereales se cubrirá comercialmente, aunque los grupos vulnerables, incluidas las personas desplazadas en el interior del país, siguen necesitando asistencia alimentaria selectiva. El PMA continúa ayudando a 485 000 beneficiarios a través de una operación prolongada de socorro y recuperación de tres años que comenzó en julio de 1999. El total de los productos alimenticios comprometidos para la vida del proyecto asciende a 47 880 toneladas de ayuda alimentaria.
BANGLADESH (5 de febrero)
Actualmente el país se encuentra en su estación invernal, en la que los principales cultivos sembrados son el trigo y el arroz Boro de regadío. El trigo se planta en noviembre y diciembre y se recoge a partir de finales de marzo, mientras que la cosecha boro se planta entre noviembre y enero y se recolecta a partir de abril. El arroz boro representa aproximadamente el 45 por ciento de la producción total anual de arroz, el monzónico (Aman) otro 45 por ciento, mientras que un 10 por ciento más o menos proviene de la tercera cosecha Aus. En 1999/2000, gracias a una combinación de factores, tales como el aumento de la superficie plantada, un tiempo favorable y unos suministros de insumos suficientes, se obtuvo una excelente producción de arroz (elaborado) de 22 789 000 toneladas, alrededor de 14 por ciento más que el año anterior. El pronóstico relativo a la actual campaña comercial 2000/01 es ligeramente superior (23,4 millones de toneladas de arroz), con una producción boro prevista para 2001 en torno a los 11,1 millones de toneladas.
La situación del suministro de alimentos es en general satisfactoria, y el Gobierno cuenta con reservas de cereales alimentarios suficientes. Al final de enero, el sistema público de distribución de cereales alimentarios contaba con un total de 1,1 millones de toneladas de cereales en existencias, incluidas alrededor de 800 000 toneladas de arroz y 332 000 toneladas de trigo.
CAMBOYA (5 de febrero)
En septiembre de 2000 el país se vio afectado por una de las peores inundaciones registradas en los últimos tiempos, que provocó varios centenares de víctimas y una destrucción en gran escala de cultivos, principalmente arroz, infraestructura, propiedades y líneas de comunicación. Alrededor de 3 millones de personas resultaron afectadas, hubo medio millón de personas desplazadas de sus hogares, y murieron casi cuatrocientas. Las inundaciones de septiembre exacerbaron los problemas ya ocasionados por las de julio.
Tras las inundaciones, una misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA visitó el país entre el 6 y el 15 de diciembre para evaluar la situación general del suministro de alimentos y la necesidad de una posible intervención de ayuda alimentaria para la campaña comercial de 2001 (enero/diciembre). La misión observó que los efectos acumulativos de las inundaciones de este año habían menguado la producción arrocera total de la estación húmeda sembrada en alrededor de 400 000 hectáreas, aunque era posible que se recuperara en alrededor de 60 000 hectáreas de la superficie perdida. No obstante las pérdidas causadas por las inundaciones, las precipitaciones de este año fueron en general superiores a la media y, en consecuencia, la campaña fue en general favorable con rendimientos superiores a los de 1999, que fue un año muy bueno. Aunque todavía se está cosechando, la misión estima que la probable superficie cultivada en la estación húmeda de 2000 estará en torno a 1 640 000 hectáreas en total, alrededor de 5 por ciento menos que la media de los últimos cinco años y la superficie más reducida desde 1996/97, cuando también sufrió los efectos de graves inundaciones. Partiendo de rendimientos medios situados en torno a los 1,85 toneladas por hectárea, la producción arrocera de la estación húmeda se estima en alrededor de 3 030 000 toneladas. Además, alrededor del 20 por ciento del total de la producción arrocera anual proviene de las cosechas de aluvión y de la temporada seca. Las perspectivas para la temporada seca son en general favorables, dada la abundancia de superficie autóctona, humedad del suelo y depósitos de limo. Aunque provisionalmente en este momento, ya que la cosecha no se recogerá hasta marzo y abril, la producción de la temporada se pronostica en 735 000 toneladas, semejante a la de 2000. Por lo tanto, la producción arrocera total de 2000/01 se estima en 3 760 000 toneladas de arroz cáscara, o sea 2 330 000 toneladas en equivalente en arroz. Además de la producción de la campaña actual, la misión calculó que había en el país un volumen bastante grande de existencias debido a un mercado interno y transfronterizo en general flojo. Lo cual se refleja en los precios que son más bajos que el año pasado. Teniendo en cuenta dichas existencias, el total del arroz disponible para la campaña comercial de 2001 se estima en 2 433 000 toneladas. Frente a lo cual se estima una utilización total (para el consumo humano, semillas, piensos, otros usos y reducción de existencias) de 2 478 000 toneladas, con lo que queda un déficit descubierto de alrededor de 45 000 toneladas. Déficit que, sin embargo, se colmará totalmente con la asistencia alimentaria en cartera, de manera que en 2001 la oferta y la demanda de arroz estarán equilibradas y no habrá necesidad de importar.
Pese a una situación de la oferta y la demanda relativamente satisfactoria desde una perspectiva nacional, las inundaciones de este año hicieron que un número mayor de personas, que normalmente se encuentran en la línea divisoria entre subsistencia e inseguridad alimentaria, fueran más vulnerables a la escasez de alimentos. En general, hay tres grandes categorías de personas "aquejadas de inseguridad alimentaria" en el país. Actualmente, el grupo más numeroso es el de los que sufren inseguridad alimentaria crónica, que abarca aproximadamente 2 millones de personas. El segundo grupo es el de los "grupos vulnerables" (incapacitados, víctimas de enfermedades, huérfanos, etc.), que representan otras 500 000-600 000 personas. El tercer grupo es el de las personas afectadas de "inseguridad alimentaria transitoria", debida a factores tales como incendios, inundaciones y sequías. Normalmente este grupo representa alrededor de 50 000 personas, pero este año, debido al carácter extraordinario de las inundaciones, se estima en 3 millones de personas. De los cuales, según el análisis de la vulnerabilidad, alrededor de 500 000 personas estarían clasificadas como las más aquejadas de inseguridad alimentaria. Dada la magnitud del problema, este grupo podría pasar a formar parte de los aquejados de inseguridad alimentaria crónica si tuvieran que recurrir a estrategias extremas de supervivencia, como la venta de tierras o la contracción de deudas con un interés alto, etc. para cubrir el déficit de alimentos en la familia derivado de los daños causados por las inundaciones. Pero, si se proporcionara asistencia alimentaria selectiva, casi todo este grupo podría recuperarse para la próxima cosecha. Para satisfacer las necesidades alimentarias del medio millón de personas que se encuentran en situación de mayor riesgo, la misión recomienda que se continúe la asistencia alimentaria durante cuatro meses. Una parte de las necesidades (correspondientes a un mes y medio) se cubrirá a través de la operación de urgencia actual (OU 6296.00), mientras que otras 16 000 toneladas se necesitarán para cubrir el resto.
COREA, REPUBLICA DE (5 de febrero)
Continúan mejorando las perspectivas de recuperación y crecimiento económicos después de la crisis financiera en Asia, lo cual se manifiesta en el fortalecimiento de la demanda de cereales destinados al consumo humano y a piensos. El trigo y el maíz se importan casi totalmente, mientras que el país produce por término medio alrededor de 5 millones de toneladas de arroz (elaborado) al año durante la temporada principal que va de mayo a octubre. En general, el número de las fincas productivas y la superficie plantada con arroz van disminuyendo en el país ya que se están destinando más tierras a la construcción de infraestructuras y a la urbanización. Cualquier expansión que se produzca en el futuro se hará principalmente en las tierras marginales y bonificadas, con inclusión de aquéllas que están expuestas a inundaciones.
COREA, REPUBLICA POPULAR DEMOCRATICA DE* (8 de febrero)
Se renuevan las preocupaciones acerca de la situación nacional del suministro de alimentos tras los efectos generalizados del invierno más frío en decenios. Se señala que a mediados de enero las temperaturas han descendido a los niveles más bajos en 50 años. En la provincia septentrional de Chagang la temperatura bajó a 37 grados centígrados bajo cero, y en Pyongyang, la capital, a 27 grados centígrados bajo cero. La situación se está volviendo cada vez más inestable para grandes segmentos de la población que ya se han debilitado después de años de escasez de alimentos, de acceso limitado a los servicios públicos y a los servicios básicos de salud, y de falta de electricidad y leña para calefacción.
Los informes indican también que debido a la mala cosecha de 2000 es posible que para fines de enero cese en algunas partes del país el suministro de alimentos realizado a través del sistema público de distribución (SPD). Entre febrero y finales de junio, cuando se recogen las papas y algo del doble cultivo, la única fuente de alimentos será la ayuda alimentaria y otros alimentos. En algunas partes, los supervisores del PMA informan que las distribuciones de alimentos que realiza el SPD son del orden de los 200 gramos de cereales por persona y día, equivalentes a alrededor de 720 kilocalorías. La necesidad mínima para la supervivencia de un adulto es de 2 200 kilocalorías diarias.
En noviembre pasado, una misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA evaluó la disponibilidad interna de granos, en equivalente de cereales, para la campaña comercial 2000/01 en 2 920 000 toneladas, frente a una demanda de granos destinados al consumo humano y a otras necesidades de 4 790 000 toneladas. La necesidad de importación, por lo tanto, se estimó en 1 870 000 toneladas, de las cuales se prevé que las importaciones comerciales cubrirán 200 000 toneladas, mientras que otras 600 000 toneladas se cubrirán mediante la asistencia alimentaria prometida por el PMA, y otras 500 000 toneladas mediante importaciones bilaterales en condiciones de favor. Habida cuenta de todo esto, la necesidad de importaciones no cubierta se calcula en 665 000 toneladas, con lo cual el país sigue necesitando asistencia para satisfacer las necesidades alimentarias mínimas. Las promesas hechas hasta ahora se cifran en 651 000 toneladas, de las cuales se han entregado 140 000 toneladas.
CHINA (5 de febrero)
En las últimas semanas murieron alrededor de 30 personas y algunos cientos de miles de cabezas de ganado en la región septentrional de Mongolia a causa del invierno más frío registrado en 50 años. Como continúa todavía la ola de frío, crecen las preocupaciones por la situación de un gran número de familias nómadas de la región que dependen totalmente del ganado y de los productos pecuarios para su sustento y sus ingresos. Desde un punto de vista más general, en la parte septentrional del país una cubierta de nieve suficiente protegió el trigo de invierno en fase de latencia, que se plantó en octubre y noviembre del año pasado y se recogerá en mayo y junio de este año. El trigo de invierno representa la mayor parte del trigo que el país produce anualmente. Debido a una disminución de los precios de sostenimiento de los alimentos básicos, la superficie sembrada con trigo volvió a disminuir en la campaña 2000/01 ya que los agricultores continúan sembrando otros cultivos más lucrativos. La superficie sembrada se estima en alrededor de 23 millones de hectáreas, 1 170 000 hectáreas, o sea casi 5 por ciento, menos que en 1999. En 1999/2000, debido a una combinación de factores tales como una grave sequía y el descenso de la superficie plantada, la producción de trigo disminuyó a alrededor de 101 millones de toneladas, alrededor de 94 millones de toneladas correspondientes al trigo de invierno y 7 millones de toneladas a la cosecha de primavera. Esta cifra es inferior en un 9 por ciento al volumen normal de los últimos cinco años y la más baja desde 1995. Debido a la sequía, la producción de maíz también descendió significativamente a 105 millones de toneladas, alrededor de 18 por ciento menos que el año anterior. La producción arrocera en 2000/01 se pronostica en alrededor de 188,2 millones de toneladas, aproximadamente un 5 por ciento menos que el año anterior.
CHIPRE (14 de febrero)
Ha terminado en condiciones atmosféricas en general normales la siembra de las cosechas de trigo y cebada de 2001 que se recogerán a partir de mayo. La producción total de trigo y cebada en 2000 se estima en 101 000 toneladas, alrededor de 20 por ciento menos que la del año anterior pero en torno a la media.
Las importaciones de trigo en 2000/01 (mayo/abril) se pronostican en 95 000 toneladas, mientras que las importaciones agregadas de cebada y maíz se pronostican en alrededor de 540 000 toneladas, cifra inalterada respecto al año pasado.
FILIPINAS (5 de febrero)
Unas precipitaciones intensas caídas en la última parte de enero en las partes orientales incrementaron los niveles de humedad y provocaron inundaciones localizadas en algunas partes. El Instituto de Vulcanología y Sismología advirtió últimamente sobre la posibilidad de erupciones del volcán Mayon, donde últimamente se han visto salir cenizas. El volcán de 8 000 pies se encuentra en la provincia de Albay, 330 km al sudeste de Manila, la capital.
Ha terminado la recolección del arroz de la temporada principal, mientras que la plantación del arroz y del maíz de la segunda temporada que se recogerán a partir de febrero y marzo debería estar muy avanzada.
La producción arrocera para el año civil 2000 se estimó en un nivel récord de 12,2 millones de toneladas, 2 por ciento más que la cosecha del año anterior, mientras que la de maíz fue de 4,5 millones de toneladas, alrededor de un 2 por ciento menos que la de 1999. Una mayor disponibilidad de agua en las zonas tradicionalmente productoras de maíz indujo a los agricultores a reemplazar el cultivo de maíz por el de arroz, con lo cual disminuyó la producción de maíz.
GEORGIA* (1 de febrero)
Las perspectivas para la cosecha de 2001 son pesimistas. Los cultivos se siguen desarrollando satisfactoriamente pero la superficie sembrada con cereales de invierno ha disminuido como consecuencia de los daños causados por la sequía en 2000 y de la consiguiente escasez de semillas, particularmente en las zonas productoras de trigo del este y del sur. Además, las precipitaciones recibidas durante los meses invernales han sido nuevamente inferiores a la media. También proliferan los roedores. Pese a unas medidas de emergencia adoptadas para distribuir semillas de trigo de invierno, se estima que se ha sembrado alrededor del 62 por ciento de la superficie que se planta normalmente (unas 110 000 hectáreas). Se espera movilizar semillas suficientes para aumentar la superficie sembrada en primavera con papas y maíz, para compensar la disminución prevista de la cosecha de trigo.
La sequía y el estado deficiente del sistema de riego han determinado un fuerte descenso en la producción de cultivos alimentarios de 2000. La producción total de cereales de 2000 es menos que 400 000 toneladas, cerca de la mitad de la obtenida en 1999 y un 40 por ciento menos que la media. También ha disminuido la producción de papas y de otros cultivos alimentarios básicos, y la producción pecuaria se ve afectada por la merma de los suministros de piensos.
Con una necesidad nacional mínima de consumo de cereales estimada en 1,1 millones de toneladas (incluidos los cereales destinados al consumo humano, las semillas forrajeras, y las pérdidas), la necesidad de importación de cereales de Georgia en 2000/01 se calcula en 748 000 toneladas (620 000 toneladas de trigo, 88 000 toneladas de maíz, 35 000 toneladas de cebada y 5 000 toneladas de arroz). Es difícil calcular las importaciones comerciales. Sin embargo, las entregas de la ayuda alimentaria extranjera de trigo están resultando difíciles para el mercado ya que de la CEI se obtienen suministros más baratos. Las importaciones de cereales registradas entre julio y diciembre de 2000 han ascendido a 104 000 toneladas, pero extraoficialmente ingresan volúmenes considerables. Frente a la necesidad de ayuda alimentaria estimada en 311 000 toneladas, las promesas confirmadas hasta ahora ascienden a 76 000 toneladas.
Se necesita ayuda alimentaria de urgencia para unas 696 000 víctimas muy afectadas por la sequía, y el PMA ha hecho un llamamiento pidiendo casi 66 000 toneladas para un período de 8 meses (de noviembre a junio), hasta la próxima cosecha principal.
INDIA (5 de febrero)
Un terremoto, el peor en 50 años que llegó a casi 8 grados de la escala Richter, asoló el estado occidental de Gujarat con el epicentro situado cerca de la ciudad de Bhuj. Además del costo económico de las devastaciones, las estimaciones actuales indican que el número de las víctimas podría estar entre las decenas de miles. En vista de la magnitud del problema, muchos países han ofrecido diversas formas de asistencia humanitaria, incluidos alimentos, agua y suministros médicos de urgencia.
El terremoto agravó los problemas alimentarios e hídricos existentes en el estado, que ya se había visto gravemente afectado por una segunda sequía consecutiva después de la mala temporada monzónica del año pasado. Las capas freáticas habían descendido apreciablemente, y muchas personas habían empezado a emigrar. Por consiguiente, antes del terremoto el Gobierno ya había tomado disposiciones para proporcionar alrededor de 670 000 toneladas de cereales alimentarios a las operaciones de socorro realizadas en 8 estados afectados por la sequía, a saber Gujarat, Himachal Pradesh, Maharashtra, Madhya Pradesh, Orissa, Rajastán y Uttaranchal. El país ha tenido que soportar una serie de desastres naturales el año pasado, tales como la sequía y unas grandes inundaciones registradas en algunos estados durante la última temporada monzónica, que causaron la muerte de muchas personas y dejaron a miles sin vivienda.
Unas lluvias invernales tardías y una racha fría registrada en enero favorecieron al trigo de invierno y mejoraron algo las perspectivas después de la racha seca anterior que había reducido la superficie sembrada con trigo para la campaña de 2000/01, principalmente en los estados donde la cosecha es de secano, a saber Madhya Pradesh, Rajastán y en algunas partes de Uttar Pradesh. Los pronósticos actuales sugieren que el invierno de este año puede prolongarse, lo cual mejoraría las perspectivas. En 2000, el país produjo una cosecha de trigo sin precedentes de alrededor de 76 millones de toneladas. El objetivo de producción de cereales alimentarios para la campaña comercial 2000/01 es de 212 millones de toneladas, comparados con los 209 millones de toneladas para 1999/2000.
Las existencias de trigo poseídas por el Gobierno a principios de diciembre del año pasado se cifraban en un nivel alto de 26,0 millones de toneladas, frente a los 18,5 millones de toneladas del año anterior. En vista de la gran cantidad de existencias de trigo, el Gobierno ha autorizado las exportaciones de 2 millones de toneladas, aunque éstas han sido en general lentas. También ha autorizado la exportación de 2 millones de toneladas de arroz para reducir las existencias, que a principios de diciembre del año pasado se cifraban en 19,5 millones de toneladas, frente a unos 3,3 millones de toneladas del año anterior.
INDONESIA* (5 de febrero)
Una lluvia estacional recibida durante la última década de enero proporcionó humedad para el arroz de la temporada principal de la mayor provincia productora de Java. La cosecha se planta en el período comprendido entre noviembre y enero y se recoge a partir de abril. Al final de enero, Irian Jaya se vio afectada por un terremoto de leve intensidad (5,7 grados de la escala Richter), aunque se han recibido informes de víctimas y daños.
La producción arrocera para el año civil 2000 estuvo en torno a los 51 millones de toneladas, alrededor de 2 por ciento más que el año pasado y un 4 por ciento más que la media de los últimos cinco años. El aumento de la producción se atribuye a una estación húmeda prolongada y a una presencia sólo mínima de plagas y enfermedades. La superficie cultivada se mantuvo en torno a la media de 11,5 millones de hectáreas. Debido al aumento de la producción interna, es posible que la estimación de las importaciones en 2000 se revise algo a la baja. Desde finales de 1998, el Gobierno ha permitido las importaciones privadas de arroz.
La situación humanitaria y de seguridad alimentaria es inestable en la zona central de Kalimantan, a raíz de un brote de disturbios civiles y violencias, que ya han causado la muerte de varios centenares de personas y desplazado a otras miles.
En general, la situación alimentaria continúa estabilizándose en el país, tras la crisis económica registrada en 1997/98, agravada además por la mala campaña agrícola debida ese año a El Niño. Sin embargo, los informes indican que en 11 de los 14 distritos de la provincia de Nusa Tenggara Este escasean los alimentos a causa de la sequía y de la mala cosecha.
IRAN, REPUBLICA ISLAMICA DE (5 de febrero)
En la última década de enero se recibieron unas lluvias ligeras en las partes occidentales del país, que se intensificaron en torno a la costa del Mar Caspio. El trigo, principal alimento básico del país, se planta normalmente en septiembre y octubre y se recoge en abril y mayo. La cebada de secano, que es esencial para los piensos, se planta también a partir de septiembre y se recoge en marzo.
En 2000, el efecto de dos años consecutivos de sequía afectó gravemente a la producción agropecuaria. La sequía, la peor desde 1964, afectó a unos 37 millones de personas, o sea a más del 50 por ciento de la población. Por consiguiente, se estima que la producción de trigo de 2000 ha descendido a alrededor de 8 millones de toneladas, unas 700 000 toneladas menos que la cosecha ya menguada a causa de la sequía de 1999 y casi 2 millones de toneladas menos que la media quinquenal.
IRAQ* (14 de febrero)
Las perspectivas para la cosecha de cereales que se recogerá en mayo/junio de 2001 siguen siendo inciertas. Es probable, además, que la producción se vea limitada por los efectos de dos años consecutivos de graves sequías y la insuficiencia de insumos agrícolas esenciales. En mayo de 2000, una misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA observó que en las zonas más afectadas del centro y el sur no sólo había disminuido la superficie plantada sino que también alrededor del 75 por ciento de la superficie cultivada con trigo y cebada había sufrido graves daños y se utilizaba principalmente para el pastoreo. Los rendimientos de los cereales disminuyeron a niveles bajos sin precedentes. Como consecuencia, la producción total de cereales en 2000, estimada en alrededor de 796 000 toneladas, es inferior a la de 1999 en alrededor de 47 por ciento e inferior en 64 por ciento a la media de los últimos cinco años.
Las importaciones de cereales realizadas en el marco del acuerdo "petróleo por alimentos" de la RCS 986 han producido notables mejoras en la situación del suministro de alimentos. Sin embargo, se siguen señalando grandes demoras en el flujo de las importaciones de alimentos. Además, pese a los notables aumentos registrados en la ración alimentaria desde la RCS 986, no pareciera que las tasas de malnutrición infantil hayan mejorado notablemente en el centro y sur del país, y los problemas nutricionales siguen siendo graves y generalizados. Las actuales raciones alimentarias no proporcionan una dieta nutricionalmente suficiente y variada, ya que carece de hortalizas, frutas y productos pecuarios y, por lo tanto, es deficiente en micronutrientes.
ISRAEL (14 de febrero)
Unas lluvias recibidas últimamente mejoraron las perspectivas para las cosechas de trigo y cebada de 2001, que se recogerán a partir de abril. En años normales la producción interna de trigo cubre menos de una quinta parte de las necesidades totales, y el resto se importa comercialmente. La producción de trigo en 2000 se estimó en 50 000 toneladas, alrededor de 58 por ciento menos que la media, debido a una grave sequía que afectó a varios países del Cercano Oriente. Las importaciones de cereales en 2000/01 (julio/junio) se pronostican en alrededor de 2,9 millones de toneladas.
JAPON (1 de febrero)
La única cosecha actual es la de trigo de invierno sembrada en algunas partes. Desde 1995, como parte del programa nacional de ajuste de la superficie sembrada con arroz, ésta ha disminuido en alrededor de 16 por ciento. Como consecuencia, la producción interna de arroz (elaborado) ha pasado de alrededor de 11 millones de toneladas en 1994 a una media de alrededor de 9 millones de toneladas en los últimos cinco años.
En vista de la baja de los precios agrícolas, y del desincentivo que esto significa para los agricultores, es probable que se emprenda un examen y planificación de la política de precios. Un equipo oficial ha propuesto que se prestara ayuda a alrededor de 400 000 agricultores, incluidas las corporaciones agrarias, para contrarrestar el efecto de la disminución de los ingresos agrícolas.
JORDANIA (14 de febrero)
Las perspectivas para las cosechas de trigo y cebada de 2001, que se recogerán en mayo y junio, siguen siendo inciertas debido a los efectos persistentes de dos años consecutivos de graves sequías y a la irregularidad de las precipitaciones caídas durante la campaña actual. En 2000, la producción total de trigo y cebada, estimada en 42 000 toneladas, fue más del doble de la producción del año anterior pero todavía inferior a la media en alrededor de 54 por ciento. También se vio gravemente afectado el sector ganadero, particularmente los pastores de ovejas en pequeña escala.
Sin embargo, a pesar del grave efecto de la sequía en los cultivos de secano y el ganado, la producción de hortalizas del Valle del Jordán ha aumentado considerablemente. Como consecuencia, los precios de las hortalizas cayeron verticalmente afectando a los ingresos de los agricultores. Los problemas principales son la falta de servicios de proceso y mercados de exportación suficientes.
Una misión de la FAO que visitó el país en septiembre de 2000 identificó las necesidades prioritarias de asistencia para mitigar el efecto de la sequía en la producción agrícola. En consecuencia, el 21 de diciembre de 2000 se lanzó un llamamiento pidiendo 13,5 millones de dólares EE.UU. para proporcionar semillas y otros insumos destinados a la campaña agrícola de 2001, para prestar asistencia en la distribución de piensos y servicios sanitarios, y para proteger las reservas de bosques y pastizales.
KAZAJSTAN (12 de febrero)
La mayor parte de los cereales se siembran en la primavera. El objetivo de plantación es de 11,7 millones de hectáreas que se sembrarán con cereales, previéndose una producción de 11,6 millones de toneladas.
La estimación oficial preliminar de la cosecha de 2000 es de 11,6 millones de toneladas de cereales y legumbres, incluidos 9,1 millones de toneladas de trigo. Esto representa una producción inferior a la abundante cosecha de 14 millones de toneladas de los años anteriores, pero todavía permite que el país satisfaga las necesidades internas y exporte 4-5 millones de toneladas de cereales.
En 1999/2000, el país exportó cerca de 7 millones de toneladas de cereales, incluidos 6 millones de toneladas de trigo, principalmente a otros países de la CEI.
KIRGUISTAN, REPUBLICA DE (12 de febrero)
Ahora una gran parte del país está cubierta de nieve, pero el desarrollo de los cultivos en el Valle de SyrDarya es satisfactorio. Un invierno frío y unas nevadas intensas están contribuyendo a reponer los abastecimientos de agua para riego. La cosecha de cereales de 2000 se estima ahora oficialmente en 1 570 000 toneladas, incluidos 1 040 000 toneladas de trigo. Este nivel es algo inferior al de la cosecha del año anterior (1 630 000 toneladas), debido a las pérdidas de cosecha causadas por el tiempo seco y las nevadas tempranas. La producción de 2000 también fue inferior al objetivo de 1 704 000 toneladas de cereales.
La situación del suministro de alimentos sigue siendo en general satisfactoria, y el país exporta cereales a los vecinos países de Tayikistán y Afganistán. Sin embargo, una parte importante de la población vive en condiciones de pobreza, y el acceso a alimentos suficientes es un problema para los más pobres ya que en los meses más rigurosos del invierno los precios son altos. El país también importa trigo, debido en parte a la demanda de trigo de calidad para complementar la reserva de seguridad estatal (a través de las entregas de ayuda alimentaria) y a la deficiencia de las comunicaciones internas.
LAOS* (5 de febrero)
Como parte de un fenómeno más amplio que afectó a los países vecinos de la región, se produjeron grandes inundaciones que causaron daños a extensas zonas del país. En total, las inundaciones cubrieron siete provincias del centro y el sur durante la temporada monzónica causando graves daños a los cultivos y, en menor medida, al ganado y a la pesca. En algunas zonas los arrozales quedaron sumergidos hasta tres semanas. Las provincias más afectadas fueron Khammouane, Savannakhet y Champasack. El Ministerio de Agricultura y Silvicultura describió las inundaciones como las peores que habían azotado el país desde 1978. Se vieron afectadas alrededor de 450 000 personas, muchas de las cuales quedaron sin vivienda. Es probable que las inundaciones den lugar a un crecimiento más lento de la agricultura y que tengan un efecto importante en la seguridad alimentaria de la población más vulnerable y en situación de riesgo ya que se prevé un alza de los precios del arroz y un descenso de los ingresos y del acceso a los alimentos. El arroz es el principal cultivo del país que representa el 85 por ciento de la superficie total cultivada. Otros de los cultivos que se producen son el maíz (segundo en cuanto a la extensión de la superficie cultivada), la caña de azúcar y el maní. La mayor parte del arroz se produce en la estación húmeda (de junio a noviembre), principalmente en condiciones de secano y en las provincias del centro y el sur situadas en el Valle del Río Mekong, donde las precipitaciones anuales oscilan entre 1 500 mm y 2 200 mm, de los cuales el 70 por ciento se recibe entre mayo y octubre. Los agricultores no suelen aplicar fertilizantes al arroz de secano durante la estación húmeda. Las graves inundaciones registradas en 1995 y 1996 determinaron un déficit considerable de arroz, de resultas de lo cual el país necesitó asistencia alimentaria externa para los grupos vulnerables.
Una misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA está evaluando actualmente la situación del suministro de alimentos y la necesidad de ayuda alimentaria. Además, la FAO proporcionará semillas de arroz y hortalizas a alrededor de 8 000 familias rurales afectadas por las inundaciones del año pasado.
LIBANO (14 de febrero)
Hasta ahora las perspectivas para la cosecha de invierno que se recogerá en junio/julio de 2001 son favorables. Sin embargo, la producción interna de cereales cubre generalmente sólo alrededor del 10 por ciento de las necesidades de consumo. La producción total de trigo y cebada en 2000 se estima en 62 000 toneladas, volumen semejante al del año anterior.
Las importaciones de trigo en 2000/01 (julio/junio) se pronostican en alrededor de 510 000 toneladas, volumen semejante al del año pasado.
MALASIA (5 de febrero)
El país produce normalmente alrededor de 2 millones de toneladas de arroz al año, de los cuales el 60 por ciento corresponde a la temporada principal y el 40 por ciento a cultivos fuera de estación. Normalmente, el país importa una tercera parte de las necesidades del consumo interno de arroz, mientras que se importa casi todo el trigo y el maíz. Para aumentar la producción, el Gobierno anunció últimamente diversas estrategias encaminadas a permitir una producción de alimentos sostenible para reducir la dependencia de las importaciones. Entre las estrategias figuran la mejora de la eficacia y la productividad, la designación de zonas productoras de alimentos, el fortalecimiento de los sistemas de comercialización y de las industrias elaboradoras de alimentos, el desarrollo de la infraestructura y la promoción de los recursos humanos. Los sectores prioritarios serán el arroz, las frutas, las hortalizas, la pesca y la cría de aves de corral.
MONGOLIA* (5 de febrero)
Tras el peor invierno en decenios registrado el año pasado, que minó gravemente la seguridad alimentaria de un gran número de personas, especialmente pastores nómadas, el país enfrenta nuevamente este año un invierno devastador que agravará considerablemente los problemas relacionados con el suministro de alimentos. Una gruesa capa de nieve ha cubierto los pastizales en los que suelen apacentar los rebaños durante el invierno y las temperaturas han descendido a 50 grados centígrados bajo cero. Las condiciones atmosféricas ya han causado la muerte de ocho pastores y de alrededor de 500 000 animales, de los cuales una tercera parte de la población depende totalmente para su sustento y sus ingresos. Debido a las condiciones atmosféricas, existen también considerables problemas para el transporte de los alimentos y de los suministros médicos a las zonas cuya población es particularmente vulnerable a la escasez de alimentos. El invierno frío se suma además a la sequía estival que redujo los forrajes para los animales. Se prevé que las condiciones atmosféricas irán empeorando a medida que avanza el invierno. En enero las Naciones Unidas formularon un llamamiento urgente pidiendo asistencia internacional para el país.
El efecto de otro invierno frío y la disminución de los forrajes para el ganado serán de inmensa importancia. El sector juega un papel extremadamente importante en la economía ya que constituye la fuente principal de los ingresos familiares y una fuente importante de divisas. Las grandes pérdidas de cabezas de ganado y la consiguiente merma de los suministros de carne han aumentado mucho los precios del ganado (hasta 40 por ciento). Esto a su vez ha repercutido en la inflación y el costo de vida exacerbando ulteriormente la seguridad alimentaria de los grupos pobres y vulnerables. Además de la carne, hay también una grave escasez de leche, especialmente en las zonas rurales, lo que restringe aún más una fuente importante de proteínas y nutrientes en la alimentación. Para las familias de pastores nómadas ha sido muy difícil encontrar otras fuentes de ingresos, debido a que la mayoría tiene poca instrucción y capacitación para realizar otros empleos. No obstante, muchos han emigrado a los pueblos y centros urbanos, agravando los problemas de desempleo y de vulnerabilidad a la escasez de alimentos ya existentes en esos lugares.
La actual escasez de alimentos viene después de varios años en los que los niveles nutricionales han ido descendiendo en el país debido a los importantes cambios registrados en la situación económica de grandes sectores de la población, al dejar de ser la economía una de planificación centralizada para pasar a ser una economía de mercado. Esto ha dejado a muchos grupos que anteriormente dependían del empleo y el bienestar social estatales expuestos a las incertidumbres económicas debidas a las limitadas posibilidades de ingresos alternativos. En diversos informes producidos a mediados de los años noventa se indicaba que las personas más afectadas por la pobreza y la inseguridad alimentaria eran los desempleados, los ancianos, las familias encabezadas por una mujer, los niños, los jubilados y los pequeños pastores. Estudios realizados últimamente por ONG señalan que sigue habiendo niveles altos de malnutrición crónica en algunas zonas nómadas, en las que muchas familias viven en extrema pobreza casi sin recursos.
Una misión interinstitucional de las Naciones Unidas, en la que se incluye la FAO, visitó Mongolia en enero para evaluar la situación y ha lanzado un llamamiento pidiendo socorro de urgencia. El llamamiento de las Naciones Unidas es en favor de las poblaciones vulnerables de las provincias afectadas más gravemente y para la creación de capacidad de gestión y coordinación, en caso de desastres, de la Comisión Estatal de Emergencias y de otros asociados nacionales pertinentes con el fin de mejorar la preparación y la capacidad de respuesta en el futuro. El llamamiento comprende un período de cuatro meses, desde el 1 de febrero al 31 mayo de 2001, y es por 7 millones de dólares EE.UU. en efectivo y 4,7 millones de dólares EE.UU. en especies para prestar asistencia a los beneficiarios de 73 distritos afectados. El llamamiento orientará la asistencia hacia los siguientes sectores: ganado (4 millones de dólares EE.UU. en efectivo y 4,7 millones de dólares EE.UU. en especie), salud, agua y saneamiento (2,3 millones de dólares EE.UU.), y nutrición (608 000 dólares EE.UU.).
MYANMAR (5 de febrero)
Ha terminado la recolección de la cosecha principal de arroz (monzónica). El arroz de la temporada principal representa normalmente alrededor del 85 por ciento de la producción total, y el 15 por ciento restante proviene de la segunda cosecha, o sea la de la temporada seca, que se planta en octubre y noviembre y se recoge en abril y mayo del año siguiente. Según los pronósticos actuales, la producción arrocera de la campaña comercial 2000/01 será semejante a la de 19,8 millones de toneladas obtenida en 1999.
NEPAL (5 de febrero)
Ha terminado la recolección del arroz de la temporada principal, y las estimaciones actuales indican una producción de arroz cáscara situada, por término medio, en alrededor de 3,7 millones de toneladas.
Los informes señalan que el Gobierno podría prestar asistencia a los agricultores afectados por la baja de los precios agrícolas introduciendo precios fijos de sostenimiento. El año pasado, el precio del arroz descendió de forma pronunciada debido a las importaciones procedentes de la India. También ha aumentado el costo de producción al haberse eliminado diversas subvenciones a los insumos, tales como los fertilizantes y el riego.
PAKISTAN (5 de febrero)
La cosecha principal que está sembrada actualmente es la del trigo de invierno que se planta en octubre y noviembre y se recoge en abril y mayo. Tras las preocupaciones que existían acerca del descenso de la producción en 2001 debido a las elevadas temperaturas y condiciones secas, últimamente las perspectivas para la cosecha mejoraron algo gracias a unas lluvias tardías recibidas en diciembre y al descenso de las temperaturas en enero. El año pasado el país produjo una cosecha de trigo sin precedentes de alrededor de 21 millones de toneladas, y antes de la última mejora registrada en las condiciones atmosféricas los pronósticos indicaban una merma del 9 por ciento de la producción.
En Baluchistán (al noroeste) y en Sind (al sur), crecen nuevamente las preocupaciones por la escasez de alimentos y agua debida a la sequía que provocó pérdidas de cosecha y un descenso de las vertientes. Las provincias se vieron gravemente afectadas el año pasado también por la sequía. Los informes señalan que la situación de los grupos vulnerables se está volviendo crítica.
SIRIA (14 de febrero)
Las perspectivas para las cosechas de cereales de invierno, que se recogerán a partir de mediados de mayo, son favorables debido a las buenas lluvias recibidas hasta ahora. La producción agropecuaria en 2000 se ha recuperado de la cosecha menguada a causa de la sequía de 1999. La producción de trigo de 2000, estimada en 3,6 millones de toneladas, supera en alrededor del 31 por ciento a la cosecha del año anterior y se sitúa en torno a la media. La producción de cebada, casi toda de secano, se estima en 800 000 toneladas, el doble de la de 1999, pero aún así inferior en alrededor del 28 por ciento a la media de los últimos cinco años.
SRI LANKA (5 de febrero)
La cosecha principal sembrada actualmente es la cosecha principal de arroz Maha, que se planta en octubre-diciembre y se recoge a partir de marzo. Esta cosecha se produce durante la principal estación de las lluvias del país, el monzón nordoriental. La cosecha principal representa dos terceras partes de la producción anual, y el resto proviene de la cosecha de la estación seca (Yala). La producción arrocera ha alcanzado un promedio de alrededor de 2,5 millones de toneladas en los años comprendidos entre 1995 y 1999. Además del arroz, el principal alimento básico del país, se importan anualmente 850 000-900 000 toneladas de trigo para satisfacer la demanda de pan y de otros productos basados en el trigo.
TAILANDIA (5 de febrero)
Unas lluvias generalizadas caídas en la última década de enero aumentaron la reserva de humedad del suelo. La recolección de la cosecha principal de arroz de la estación húmeda debería haber terminado, mientras que debería haber comenzado en algunas partes la plantación de la segunda cosecha de la temporada seca. Los pronósticos más recientes del Ministerio de Agricultura señalan que la producción arrocera de la cosecha principal de 2000/01 estará en torno a los 19 040 000 toneladas, mientras que la segunda cosecha actual que se recogerá en mayo y junio del año próximo debería producir alrededor de 4 950 000 toneladas. Por lo tanto, la producción total estará en torno a los 24 millones de toneladas, o sea 16 millones de toneladas en equivalente en arroz.
El año pasado las exportaciones de arroz alcanzaron los 6,6 millones de toneladas, 100 000 toneladas menos que el año anterior.
TAYIKISTAN* (12 de febrero)
Hacen falta un tiempo frío y nevadas que contribuyan a reponer los abastecimientos de agua para el riego durante la primavera y el verano próximos, pero las condiciones atmos-féricas registradas en enero han sido excepcionalmente benignas. Además, las perspectivas para la cosecha de cereales de 2001 se ven ensombrecidas por la escasez de semillas tras la cosecha menguada as causa de la sequía del año pasado, el estado deficiente del sistema de riego y ordenación de aguas, y el avenamiento insuficiente que está causando salinización. Una grave sequía ha reducido la cosecha de cereales de 2000 a 236 000 toneladas, 47 por ciento menos que la de 1999. También se ha visto afectada la producción de todos los otros cultivos, con inclusión de las papas, las hortalizas y el algodón.
La grave sequía del año pasado ha dejado a casi la mitad de los 6,2 millones de habitantes del país en una situación vulnerable a la escasez de alimentos, y la respuesta de los donantes a los llamamientos en favor de ayuda alimentaria ha sido lenta. La necesidad de importación de cereales en la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) se estima en 791 000 toneladas. Habida cuenta de las importaciones comerciales previstas en alrededor de 400 000 toneladas y la ayuda alimentaria prometida (104 000 toneladas), las necesidades no cubiertas de ayuda alimentaria son de 285 000 toneladas. Un déficit de esta magnitud para un país empobrecido como éste, podría tener consecuencias desastrosas para la población si no interviene la comunidad internacional. Muchas familias se encuentran ya en condiciones críticas y la situación podría empeorar para un número cada vez mayor de personas en el período de escasez (final del invierno-primavera), cuando se agoten todas las reservas alimentarias y los otros medios de subsistencia que poseen. Hay unos 3 millones de personas que pertenecen a esta categoría, de los cuales alrededor de 2 millones se encuentran en situación desesperada. Las críticas situaciones relativas al suministro, producción y acceso a los alimentos debe ser vigilada atentamente con vistas a realizar los ajustes necesarios a los programas de asistencia en curso y a formular otros nuevos que sean apropiados.
El PMA ha lanzado un llamamiento pidiendo 126 000 toneladas de ayuda alimentaria por un valor de 62 millones de dólares EE.UU. para ejecutar una operación de urgencia destinada a prestar asistencia a más de 1 millón de personas que correrán el riesgo de atravesar una si-tuación de hambruna en los próximos nueve meses. Sin asistencia, alrededor de 1,2 millo-nes de personas se encontrarán en una situación desesperada, prácticamente sin oportuni-dades de empleo ni otras fuentes de ingresos que les permitan comprar alimentos en el mercado.
TIMOR ORIENTAL (5 de febrero)
Las cosechas principales de arroz y maíz, plantadas en noviembre y diciembre, están despuntando actualmente y se recogerán a partir de abril y mayo. Pese al trastorno del sector agrícola debido a los disturbios civiles registrados en 1999, la recuperación de la agricultura continúa registrando mejoras en cuanto al acceso y la comercialización. La FAO estimó la producción de arroz y maíz en 2000 en alrededor de 30 500 toneladas (elaborado) y 94 000 toneladas, respectivamente.
TURKMENISTAN (12 de febrero)
Los informes oficiales señalan que la cosecha de cereales de invierno de 2000 alcanzó los 1,7 millones de toneladas, más que el objetivo (1 645 000 toneladas) y alrededor de 280 000 toneladas más que en 1999. El incremento se debe principalmente a la producción privada realizada en régimen de arrendamiento y se ha alcanzado pese a la escasez de agua que ha habido en algunas zonas productoras y en la mayoría de los países vecinos. La mayor parte de los cereales se siembran en el invierno, y escaparon a los daños como consecuencia del tiempo cálido y la escasez de agua para riego. El resultado de la producción del arroz de regadío todavía es incierto, pero es probable que sea muy inferior al objetivo, como lo fue la del algodón de 2000, que descendió un 20 por ciento a 1 030 000 toneladas.
En diciembre, un terremoto afectó a las partes occidentales del país (Nebit Dag) y las zonas circundantes, causando pérdidas de vidas humanas y daños a las viviendas y existencias alimentarias, no tanto en la capital regional cuanto en las aldeas cercanas.
TURQUIA (14 de febrero)
Las perspectivas para la cosecha de invierno de 2001 son favorables hasta ahora gracias a unas lluvias buenas recibidas en zonas agrícolas importantes. La producción de trigo de 2000 se estima en 19 millones de toneladas, alrededor de 5 por ciento más que la cosecha menguada del año anterior pero en torno a la media.
En junio de 2000, el Gobierno ha bajado significativamente los precios de sostenimiento de los cereales con objeto de reducir las presiones inflacionarias y reducir los gastos públicos. Por ejemplo, los precios de sostenimiento del trigo rojo duro de Anatolia, que es el que se produce más comúnmente, se han rebajado en alrededor de 14 por ciento a 166 dólares EE.UU. por tonelada en comparación con 1999.
Según las estimaciones, en 2000 la Junta estatal de granos (TMO) compró a los agricultores alrededor de 4,4 millones de toneladas de cereales.
UZBEKISTAN (12 de febrero)
En esta fase inicial de la campaña el desarrollo de los cultivos es inferior al del período correspondiente del año pasado, pero esto podría deberse al tiempo, que es más frío, o al hecho de que se ha sembrado más tarde. En general, las perspectivas iniciales para los cereales de invierno son satisfactorias. Los primeros informes señalan que la superficie sembrada con cereales de invierno ha aumentado un poco, pese a la siembra tardía y a la disminución de la superficie plantada en las zonas septentrionales afectadas en el verano y el otoño de 2000 por una grave escasez de agua. El resultado final dependerá crucialmente del deshielo de los glaciares de los países vecinos que alimentan los dos ríos principales de los que depende el país para los abastecimientos de agua para riego.
La cosecha de cereales se estima oficialmente en 3 916 000 toneladas, inferior al objetivo (5,8 millones de toneladas) e inferior en alrededor de un 10 por ciento a la del año anterior. La disminución de la producción se debió al nivel inferior a lo normal de las precipitaciones de invierno, y a la escasez de agua para riego debida a un invierno benigno y a una ordenación deficiente de los recursos hídricos, que produjeron efectos catastróficos en la agricultura de las regiones de río abajo - AmuDarya, la Región Autónoma de Karakalpakstan y Khorizem - pero particularmente en la primera. La producción de algodón, importante cultivo de exportación con el que se financian las importaciones de trigo y de maquinaria, ha descendido a 3 millones de toneladas frente a los 3,6 millones de toneladas del año pasado. La cosecha de arroz (de regadío) también ha descendido de forma pronunciada a 155 000 toneladas con respecto a las 421 000 toneladas de 1999.
Las importaciones de productos alimenticios han disminuido en los últimos años debido en parte a un fuerte aumento de la producción de cereales (principalmente trigo) y, en parte, porque las importaciones se han mantenido en un nivel bajo para aumentar al máximo los fondos disponibles para la creación de industrias de sustitución de las importaciones. Ello no obstante, la necesidad de importación de trigo en 2000/01 se estima en más de 800 000 toneladas. La mayor parte de las importaciones de cereales se movilizará comercialmente, pero el Gobierno ha pedido (y recibido) 38 200 toneladas de trigo duro para la producción de pastas alimenticias.
Tendrán que transportarse volúmenes mayores de lo normal de cereales a las poblaciones afectadas por la sequía. Puede que las limitaciones presupuestarias reduzcan la capacidad del gobierno para asegurar provisiones suficientes a las poblaciones afectadas, pero el go-bierno central no ha pedido asistencia de urgencia adicional. Una evaluación nutricional rá-pida efectuada en noviembre y diciembre en Karakalpakstan indicó niveles bajos de malnu-trición grave (2,6 por ciento de los niños menores de cinco años con MUAC<13,5 cm), pero bastante malnutrición crónica en comparación con las referencias del Centro Nacional de Estadísticas Sanitarias y de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (15,4 por ciento).
VIET NAM (5 de febrero)
Un tiempo estacionalmente seco imperante durante la mayor parte de enero favoreció los preparativos de la tierra y la plantación del arroz de invierno y primavera. En el norte, la cosecha se siembra entre enero y marzo y se recoge en junio y julio, mientras que en el sur la siembra y la recolección se hacen un mes antes. En vista del debilitamiento de los precios, el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural informa que en el norte la superficie cultivada disminuyó de forma pronunciada. La superficie sembrada con maíz es inferior en alrededor del 29 por ciento a la del año anterior, mientras que la sembrada con batatas y frijoles decreció del 27 por ciento a 91 000 hectáreas y 19 000 hectáreas, respectivamente. En algunas zonas los agricultores están reemplazando estos cultivos con girasol y trigo.
Debido a una disminución del comercio de arroz en el mercado mundial, en 2000 los ingresos de exportación del arroz fueron menores de lo previsto. Se exportaron alrededor de 3,7 millones de toneladas, frente a un objetivo revisado de 3,8 millones de toneladas.
YEMEN (14 de febrero)
La producción de la cosecha de sorgo de 2000 recogida últimamente se estima en 380 000 toneladas, alrededor de 8 por ciento menos que la media de los últimos cinco años, debido a una disminución de los rendimientos.
Por lo que se refiere a la langosta del desierto, la situación se mantiene calma, pero es probable que las condiciones favorezcan la reproducción después de las últimas lluvias de invierno que cayeron en las llanuras del litoral del Mar Rojo.
Las importaciones de cereales en 2000, principalmente trigo, se estiman en alrededor de 2,6 millones de toneladas.
AMERICA CENTRAL (incluido el Caribe)
COSTA RICA (1 de febrero)
Ha terminado la recolección de la cosecha de cereales de la segunda temporada de 2000/01. La producción de maíz (blanco) debería ser inferior a la del año pasado, como consecuencia de la disminución de la superficie plantada. En 2000 (enero/diciembre), la producción arrocera alcanzó un nivel récord de 329 000 toneladas. Para la campaña agrícola de 2001, los pronósticos iniciales indican que las intenciones de siembra pueden ser ligeramente menores.
Es probable que aumenten en la actual campaña comercial 2000/01 (julio/junio) las importaciones de trigo, en consonancia con la expansión de la demanda interna observada en los últimos años. También deberían aumentar en la campaña comercial 2000/01 (julio/junio), con respecto al período anterior, las importaciones de maíz, principalmente amarillo, como consecuencia del crecimiento de la demanda de piensos.
CUBA (1 de febrero)
Las copiosas lluvias recibidas durante diciembre contribuyeron a reponer parcialmente los embalses de agua que habían quedado con un nivel bajo después de la racha seca del año pasado. Los embalses son importantes en vista de la próxima cosecha de la primera temporada que comenzará en marzo. Sin embargo, la elevada humedad causada por las lluvias intensas afectó a la calidad de los cultivos de arroz, y no favoreció la concentración de nutrientes en la caña de azúcar. La cosecha de caña de azúcar que se está recogiendo actualmente había quedado afectada anteriormente por una sequía y es probable que su producción decrezca con respecto a los 4,1 millones de toneladas del año pasado. En enero dejó de llover, y ello contribuyó a mejorar la calidad de los cultivos de arroz y caña de azúcar.
Según los pronósticos, las importaciones de trigo en la campaña comercial 2000/01 se mantendrán en torno a las 900 000 toneladas del año anterior. En la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) también deberían acercarse a las del año anterior las importaciones de maíz amarillo (alrededor de 260 000 toneladas).
EL SALVADOR (20 de febrero)
Desde enero, el país se vio castigado por una serie de terremotos. El 13 de enero de 2001, uno grave causó la muerte de más de 800 personas y destruyó total o parcialmente más de 140 000 viviendas, particularmente en las cercanías de la ciudad capital. La comunidad internacional está proporcionando ayuda alimentaria de urgencia y otros tipos de asistencia de socorro a las familias afectadas de las zonas urbanas y periurbanas. Según los informes oficiales, el sector más castigado fue el de la importante industria cafetera orientada a la exportación. Los daños causados a los cultivos de cereales fueron mínimos, ya que el fenómeno ocurrió cuando se había terminado de recoger la cosecha de la segunda temporada. A mediados de febrero, un segundo terremoto provocó la muerte de más de 270 personas. Como las cosechas de la primera y segunda temporadas habían sufrido anteriormente los efectos de unas condiciones atmosféricas negativas, se prevé que la producción total correspondiente a la campaña de 2000 disminuirá con respecto a las 650 000 toneladas del año anterior a alrededor de 570 000 toneladas. Se supone que las producciones de arroz y frijoles alcanzarán el nivel medio de los años anteriores. Una preocupación importante para el gobierno es la de la cosecha de la primera temporada de 2000/01 que se sembrará a partir de abril y mayo. Se teme que el total de la superficie cultivada pueda disminuir a raíz de los trastornos causados por el terremoto en la infraestructura, la mano de obra y las importaciones agrícolas en general.
Según las previsiones, las importaciones de trigo en la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) serán de 180 000 toneladas, mientras que las de maíz deberían situarse entre 260 000 y 280 000 toneladas. Las importaciones de arroz en la campaña comercial de 2001 (enero/diciembre) deberían mantenerse en las 20 000 toneladas del año pasado.
GUATEMALA (2 de febrero)
Ha terminado la recolección de la cosecha de cereales de la segunda temporada de 2000/01. Se prevé una ligera disminución de la producción de maíz con respecto a los 1,1 millones de toneladas del año pasado, debido principalmente a los daños causados en octubre por el huracán "Keith" a los cultivos de la segunda temporada, principalmente en la costa meridional del país. En el año 2000, la producción arrocera fue de alrededor de 35 000 toneladas.
Se prevé que las importaciones de trigo aumentarán ligeramente en la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) a alrededor de 400 000 toneladas (el total del año pasado fue de 380 000 toneladas). También es probable que aumenten en el mismo período las importaciones de maíz para compensar los daños causados por el huracán "Keith". En la campaña comercial de 2000 (enero/diciembre) las importaciones de arroz fueron de alrededor de 35 000 toneladas. Una cuantía semejante se pronostica inicialmente para la campaña comercial de 2001.
HAITI* (20 de febrero)
Ha terminado la recolección de las cosechas de cereales secundarios de la segunda temporada de 2000/01, estimándose provisionalmente una producción inferior a la media de 150 000 toneladas de maíz y 65 000 toneladas de sorgo. Se considera que la producción total de cereales secundarios será inferior en un 20 por ciento a la del año pasado a causa de la racha seca que afectó a los cultivos de la primera temporada en sus fases iniciales de crecimiento. Recién ha comenzado la plantación de la cosecha de arroz de regadío de la primera temporada de 2001. La comunidad internacional continúa proporcionando asistencia alimentaria.
Según los pronósticos, las importaciones de maíz en la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) aumentarán a alrededor de 90 000 toneladas con respecto a las 66 000 toneladas del año pasado. Se pronostica provisionalmente que las importaciones de arroz para la campaña comercial de 2000 (enero/diciembre) se mantendrán cercanas a las 170 000 toneladas del año anterior. Las promesas de ayuda alimentaria ascienden a 72 000 toneladas, de las cuales se han entregado 20 000 toneladas.
HONDURAS (2 de febrero)
La recolección de las cosechas de cereales secundarios y frijoles de la segunda temporada de 2000/01 está muy avanzada. La cosecha de maíz de la primera temporada resultó perjudicada a principios de 2000 por la canícula estival, mientras que unas intensas lluvias e inundaciones causadas por el paso del huracán "Keith" obstaculizaron el cultivo de las cosechas de cereales secundarios de la segunda temporada. Como consecuencia, se pronostica que la producción total de cereales secundarios (de la primera y segunda cosechas) decrecerá con respecto a la producción afectada por el mal tiempo del año pasado. La producción de maíz podría ser de alrededor de 500 000 toneladas o, incluso, menor. También se prevé una disminución de la producción de sorgo.
Según las estimaciones, las importaciones de trigo durante la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) aumentarán a alrededor de 210 000 toneladas. Es probable que, para compensar la merma de la producción, aumenten también las importaciones de maíz a alrededor de 280 000 toneladas frente a las 250 000 toneladas de la campaña comercial anterior. En la campaña comercial de 2000 (enero/diciembre) las importaciones de arroz aumentaron a 97 000 toneladas (1999: alrededor de 82 000 toneladas).
MEXICO (2 de febrero)
Los cultivos de trigo se están desarrollando normalmente y cabría esperar un ligero aumento de la producción debido en parte a una expansión de la superficie cultivada y, en parte, a las condiciones atmosféricas frías imperantes en febrero que favorecen la granazón. El tiempo seco está favoreciendo los preparativos de la tierra para la próxima cosecha de cereales secundarios de la primera temporada que se plantará en abril y mayo. Con respecto al sorgo, las intenciones de siembra deberían mantenerse en 1 150 000 hectáreas, como el año pasado.
Según las previsiones, las importaciones de trigo para la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) aumentarán ligeramente a alrededor de 2,7 millones de toneladas. Se pronostica que las de sorgo aumentarán en el mismo período aproximadamente 200 000 toneladas debido a una demanda fuerte de la industria de piensos. En la campaña comercial de 2000 (enero/diciembre) se preveía un ligero descenso de las importaciones de arroz.
NICARAGUA (2 de febrero)
Una canícula estival prolongada y las intensas lluvias e inundaciones de octubre están afectando a los cultivos de cereales secundarios de 2000/01. Aunque pareciera que las pérdidas totales de sorgo y frijoles no fueran importantes, se produjeron en zonas que en los últimos años ya habían sido castigadas por catástrofes naturales (El Niño y el huracán "Mitch"). Sin embargo, la recolección de las cosechas "apante" de maíz y frijoles de la tercera temporada se está realizando en condiciones atmosféricas normales. La canícula afectó también a los cultivos de arroz, y es probable que la producción del año 2000 decrezca respecto del nivel récord del año pasado, pero manteniéndose en un nivel superior a la media.
Las importaciones de trigo para la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) se estiman en alrededor de 100 000 toneladas, cifra semejante a la del año anterior. Las de maíz deberían aumentar ligeramente, alrededor de 10 000 toneladas, principalmente para compensar las pérdidas de producción provocadas por la sequía. Las importaciones de arroz para la campaña comercial de 2000 (enero/diciembre) se estiman en 95 000 toneladas.
REPUBLICA DOMINICANA (1 de febrero)
Las actividades agrícolas están marchando normalmente gracias a unas condiciones atmosféricas favorables que imperan en las principales zonas productoras del país. Se están realizando los preparativos de la tierra para la plantación de las próximas cosechas de cereales secundarios de la primera temporada de 2001 que tendrá lugar en marzo, mientras que ya ha comenzado la de la cosecha de arroz de este año. Las condiciones atmosféricas también han beneficiado el desarrollo de otros cultivos alimentarios secundarios.
En la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) las importaciones de trigo deberían pasar de las 277 000 toneladas a alrededor de 300 000 toneladas. También se prevé un aumento de las de maíz para satisfacer la creciente demanda de piensos. Las importaciones de arroz en la campaña comercial de 2001 (enero/diciembre) deberían situarse en torno a las 70 000 toneladas.
AMERICA DEL SUR
ARGENTINA (20 de febrero)
En la campaña de 2000 se cultivaron entre 6,3 y 6,4 millones de hectáreas de trigo. La producción total se estima en 15,5 - 16,5 millones de toneladas, volumen superior al estimado inicialmente pese a las intensas lluvias caídas en enero durante la cosecha en la importante provincia productora de Buenos Aires. La superficie plantada con maíz en 2000/01 es de alrededor de 3,1 millones de hectáreas (según las estimaciones oficiales de mediados de enero). Las lluvias recibidas hasta ahora han favorecido el desarrollo del maíz. La recolección comenzará a partir de marzo y, al parecer, la situación de la cosecha es buena. También se están plantando alrededor de 787 000 hectáreas de sorgo, y los pronósticos iniciales indican una producción de 3,5 millones de toneladas. Se considera que la superficie plantada con arroz es ligeramente inferior a la del año pasado (175 000 hectáreas, frente a las 195 000 hectáreas del año 2000), y el pronóstico inicial se cifra en 846 000 toneladas.
BOLIVIA (20 de febrero)
El gobierno declaró el estado de emergencia en los departamentos de La Paz, Cochabamba, Oruro y Beni a raíz de unas lluvias superiores a la media histórica caídas durante la estación de las lluvias que causaron inundaciones localizadas y aludes de intensidades variables. La comunidad internacional está distribuyendo ayuda alimentaria a la población afectada. Todavía no se dispone de una evaluación pormenorizada de los daños causados a los cultivos por las lluvias. En algunas zonas de sequía, la comunidad internacional se hace presente también con asistencia alimentaria. Anteriormente se había informado de un aumento de la superficie plantada con la mayoría de los cereales, y los pronósticos indican un incremento de la producción. La producción de maíz en el año 2000 se estima provisionalmente en alrededor de 700 000 toneladas, y la de sorgo en torno a las 135 000 toneladas. Se han plantado 135 000 hectáreas estimadas de arroz que se recogerá en abril y mayo, y el pronóstico inicial indica una producción de alrededor de 324 000 toneladas para el año 2001.
BRASIL (2 de febrero)
Se están realizando los preparativos de la tierra para la plantación de trigo en abril y mayo. La plantación del maíz se retrasó en el este y centro del país a causa de la escasa humedad del suelo, pero los informes más recientes indican que la superficie total cultivada aumentó del 10 por ciento con respecto a la del año pasado. Los cultivos de maíz de la primera temporada, que representa hasta un 90 por ciento de la producción total de maíz, se están beneficiando de las buenas condiciones atmosféricas imperantes en Paraná, el mayor estado productor, y en otras partes del centro sur del Brasil. Todavía no se dispone de estimaciones de la superficie que se plantará para la cosecha de maíz de la segunda temporada. La superficie que se está cultivando actualmente con arroz se estima en 3 550 000 hectáreas, algo menor que la del año pasado a causa de las limitaciones crediticias y de los bajos precios internacionales del arroz, y actualmente se pronostica que la producción total se mantendrá en el mismo nivel del año pasado (alrededor de 11,4 millones de toneladas).
COLOMBIA (2 de febrero)
Unas condiciones atmosféricas normales están permitiendo tanto la recolección de la cosecha de maíz de la segunda temporada de 2000 como los preparativos para la cosecha de maíz de la primera temporada en abril y mayo de 2001. La disponibilidad del agua en las zonas septentrionales del litoral caribeño también favorece la siembra de las cosechas de arroz de la campaña de febrero de 2001.
Según las estimaciones, las importaciones de trigo para la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) serán semejantes a las del año pasado (1 150 000 toneladas), y las de maíz (principalmente para piensos) deberían también estar en torno a los 1 650 000 toneladas.
CHILE (2 de febrero)
Se ha comenzado a recoger la cosecha de trigo de 2000/01 y, si el tiempo lo permite, se prevé una producción total de alrededor de 1,5 millones de toneladas. La superficie cultivada con maíz en la campaña actual es ligeramente superior a la del año pasado, y los cultivos se están desarrollando en condiciones atmosféricas normales. Según los pronósticos iniciales, es probable que la producción alcance las 700 000 toneladas (de las plantaciones de otoño de 2000).
Es probable que las importaciones de trigo disminuyan un poco en la campaña comercial 2000/01 (julio/junio), previéndose en alrededor de 550 000 toneladas, y se pronostica un ligero incremento de las de maíz.
ECUADOR (2 de febrero)
La plantación de la cosecha de maíz amarillo (de invierno) continuará hasta abril, pero unas lluvias superiores a la media recibidas en las zonas costeras del centro y del sur han retrasado algo las actividades agrícolas. Se estima que la producción de maíz para el año 2000 será de alrededor de 570 000 toneladas. Está en marcha la plantación de los cultivos de arroz de invierno (de secano), y la disponibilidad del agua ofrece buenas perspectivas para el año 2001.
Las importaciones de trigo para la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) se cifran en el mismo nivel del año pasado (490 000 toneladas). Se pronostica una disminución de las de maíz, de 170 000 toneladas a alrededor de 110 000 toneladas.
PERU (2 de febrero)
Los embalses de agua del norte y del sur se consideran suficientes para las necesidades de las principales cosechas de cereales. Ya se ha sembrado la mayor parte de la cosecha de trigo de 2001, y se ha observado una disminución del número de las hectáreas plantadas con respecto a la campaña anterior. También se ha señalado una disminución de la superficie plantada con maíz blanco, y se prevé una reducción de alrededor del 15 por ciento de toda la superficie cultivada para la campaña agrícola de 2001 con respecto a la del año pasado. La superficie plantada con maíz amarillo continúa aumentando, y los pronósticos iniciales indican que incluso podría superar el 10 por ciento (el año pasado, el Perú plantó alrededor de 268 000 hectáreas). Está en marcha la plantación del arroz, y se prevé que la superficie plantada será semejante a la del año pasado.
Las importaciones de trigo en la campaña comercial 2000/01 (julio/junio) deberían ser de 1,2 millones de toneladas. Es probable que las de maíz disminuyan a alrededor de 900 000 toneladas.
URUGUAY (2 de febrero)
Unas lluvias prolongadas caídas durante el cultivo de la campaña del trigo de 2000 afectaron a la plantación y no permitieron una recuperación completa de la cosecha reducida a causa de la sequía del año pasado. Según las estimaciones, la producción de trigo fue de alrededor de 400 000 toneladas. Se estima que las intenciones de siembra de trigo en el año 2001 decrecerán a alrededor de 150 000 hectáreas, comparadas con las 196 000 hectáreas del año pasado. Las lluvias de verano están favoreciendo el crecimiento normal de los cultivos de cereales secundarios, cuyas producciones deberían recuperarse de los niveles de 1999. Unas condiciones atmosféricas normales también están favoreciendo los cultivos de arroz, cuya producción total se estima en alrededor de 1,1 millones de toneladas, volumen semejante al del año pasado.
VENEZUELA (2 de febrero)
El tiempo se ha normalizado tras las intensas lluvias caídas durante noviembre, que obligaron al gobierno a declarar el estado de emergencia en los estados situados al norte y oeste de Caracas. Actualmente, se dan las condiciones suficientes que permiten emprender los preparativos de los suelos para la plantación de los cultivos de cereales de 2000/01. Se prevé que la superficie plantada con maíz tendrá el mismo nivel del año pasado (alrededor de 373 000 hectáreas), pero inferior a la media quinquenal (400 000 hectáreas). La producción arrocera debería mantenerse en el mismo nivel del año pasado (750 000 toneladas).
Según se prevé, las importaciones de cereales serán semejantes a las del año pasado: alrededor de 1 280 000 toneladas de trigo y 1,3 millones de toneladas de maíz amarillo.
EUROPA
CE (13 de febrero)
En la CE las condiciones atmosféricas durante el otoño de 2000 fueron en general desfavorables para la plantación de los cereales de invierno, y se supone que ha disminuido la superficie sembrada para la cosecha de 2001. La mayor parte de la disminución debería haberse registrado en la superficie de trigo ya que, además de los problemas atmosféricos, se prevé que este año se sembrarán cereales forrajeros y cultivos de semillas oleaginosas en previsión del aumento de la demanda de la industria de piensos a raíz de la prohibición del uso de harina de carne con hueso. Se señalan importantes reducciones de la superficie de trigo de invierno en Francia y el Reino Unido, que probablemente compensarán con creces los incrementos señalados en algunos otros países, a saber Austria, Alemania y Suecia. Una característica positiva del período otoñal de 2000 fueron las temperaturas superiores a lo normal, que favorecieron el arraigo de los cultivos, de suerte que en este momento las perspectivas podrían ser algo superiores a la media.
BELARUS (13 de febrero)
Hasta ahora las condiciones de crecimiento para la cosecha de cereales de invierno de 2000/01 han sido satisfactorias. La cosecha de cereales y granos de 2000 se señala oficialmente en 4,7 millones de toneladas, lo que representa una buena recuperación respecto de la mala cosecha de 1999 (3,6 millones de toneladas), pero un volumen todavía inferior a la media.
En 2000/01, el país necesitará importar cereales destinados al consumo humano y ya ha contratado alrededor de 350 000 toneladas de Kazajstán.
BOSNIA Y HERZEGOVINA* (13 de febrero)
Las perspectivas iniciales para los cereales de invierno son satisfactorias. Sin embargo, es probable que persista la tendencia descendente de las plantaciones de cereales de invierno, debido a la baja rentabilidad del trigo. Para satisfacer la demanda de consumo, las importaciones de trigo han ido aumentando constantemente, previéndose que en la campaña comercial de 2000/01 superarán las 290 000 toneladas importadas en 1999/2000.
BULGARIA (13 de febrero)
En Bulgaria la superficie sembrada con trigo de invierno se estima oficialmente en alrededor de 1,2 millones de hectáreas, hasta alrededor de un 10 por ciento más que en 1999. También se estima que ha aumentado la superficie de cebada hasta en alrededor de 230 000 hectáreas. Las perspectivas para la cosecha mejoraron a mediados de enero con la llegada de la nieve, que proporcionará la humedad necesaria para el desarrollo de los cultivos durante la primavera. Los informes más recientes de finales de enero indican que la situación de la cosecha es en general buena y casi ciertamente mejor que la del mismo período del año pasado.
CROACIA (13 de febrero)
Las perspectivas iniciales son inciertas. La sequía de 2000 duró hasta el otoño retrasando las plantaciones de cereales de invierno que, según se prevé, serán inferiores a las del año pasado. A partir de diciembre las precipitaciones han mejorado pero la intensidad del desarrollo de los cultivos es inferior a la del año pasado, cuando la cosecha de trigo alcanzó un nivel excelente de 1 080 000 toneladas. La superficie que se sembrará con cultivos de primavera disminuirá algo, pero la sembrada con maíz aumentará a 386 000 hectáreas con respecto a las 361 000 hectáreas sembradas en 2000 para contribuir a reponer los suministros de maíz después de la cosecha reducida a causa de la sequía de sólo 1,5 millones de toneladas, comparados con los 2,1 millones de toneladas de 1999. A pesar de las malas cosechas, se están exportando cantidades de maíz al vecino país de Bosnia y Herzegovina. El país prevé también la exportación de alrededor de 200 000 toneladas de trigo en 2000/01.
ESTONIA (13 de febrero)
Las perspectivas iniciales para los cereales de invierno son satisfactorias. La cosecha de cereales de 2000 se estima en un nivel abundante de 0,6 millones de toneladas, peso limpio, obtenida en 330 000 hectáreas. Se prevé un descenso de los precios de los piensos como efecto de la buena cosecha, superior en un 25 por ciento a la del año pasado, y de la disminución de la producción pecuaria en el primer semestre de 2000. El primer censo agropecuario desde 1939 se realizará a mediados de 2001.
EX REPUBLICA YUGOSLAVA DE MACEDONIA (13 de febrero)
Se señala que las condiciones son en general satisfactorias para la cosecha de cereales de invierno y la superficie sembrada debería ser semejante al nivel normal del año pasado.
El PMA continúa prestando asistencia alimentaria a alrededor de 7 500 refugiados que viven en centros comunitarios o con familias hospedantes. También está proporcionando programas de repatriación para los refugiados que regresan voluntariamente a la provincia de Kosovo de la República Federativa de Yugoslavia.
FEDERACION DE RUSIA (13 de febrero)
Las perspectivas iniciales para los cereales de invierno de 2001 son buenas. La superficie sembrada con cultivos de invierno que se cosecharán en la primavera y el verano de este año aumentó en 0,5 millones de hectáreas a 14 660 000 hectáreas, debido principalmente al incremento de las plantaciones en el Cáucaso Norte. Las condiciones de crecimiento han sido en general buenas. Las imágenes del satélite indican un desarrollo mejor de las cosechas en la mayoría de las zonas, salvo en los oblast de Volgograd y Saratov. Las condiciones en general benignas del invierno de este año han beneficiado a los cultivos. Aunque algunas rachas de frío extremo han causado sufrimientos humanos, en general los cultivos han tenido protección suficiente.
La estimación de la FAO de los cereales y legumbres de 2000 es de 71 millones de toneladas, lo que representa un volumen en torno a la media y alrededor de 11 millones de toneladas más que la estimación correspondiente a la producción de 1999. En ambos años las estimaciones de la FAO superan en alrededor del 10 por ciento a las oficiales (2000: 65,4; 1999: 54,7 millones de toneladas) en vista de una subestimación sistemática. La FAO estima ahora la producción de trigo en 38 millones de toneladas (alrededor de un 10 por ciento más que el pronóstico oficial) y la proporción del trigo de calidad es superior a la del año pasado. La producción de cereales secundarios se estima en 31 millones de toneladas, frente a los 25 millones de toneladas del año pasado.
Hay indicios de que la cosecha de 2000 es suficiente para satisfacer las necesidades internas de consumo humano y de piensos y para permitir alguna pequeña reposición de las existencias. Según los pronósticos, las importaciones de cereales en la campaña comercial 2000/01 descenderán a la mitad del nivel del año pasado (8,4 millones de toneladas) y se compensarán parcialmente con las exportaciones, que ascienden a alrededor de 2 millones de toneladas.
La inseguridad alimentaria es primordialmente un problema de acceso más que de disponibilidad, ya que la distribución de los ingresos es muy desigual. Alrededor del 50 por ciento de la población vive por debajo de la línea de pobreza de 4,30 dólares EE.UU. por persona y día. Las causas específicas de la pobreza son, entre otras, el retraso en el pago de las jubilaciones, sueldos y salarios.
En Chechenia, también se señala que las perspectivas para la plantación de cereales de in-vierno para la cosecha del año que viene son malas debido a la falta de recursos financieros y de combustibles. La producción agrícola de 2000 se vio muy comprometida por la situa-ción de seguridad así como por la escasez de maquinaria, combustibles e insumos.
El conflicto en Chechenia continúa causando graves dificultades a la población local y a las personas desplazadas, particularmente en estos meses de invierno riguroso. Dentro de Chechenia sigue habiendo unas 170 000 personas desplazadas. Las operaciones de socorro se ven gravemente impedidas por los problemas de seguridad y la escasez de recursos. El PMA y las ONG están proporcionando asistencia alimentaria básica y complementaria a prácticamente todas las personas desplazadas en el interior (PDI) de Ingushetia, que suman otras 160 000, de las cuales alrededor de 30 000 siguen viviendo en campamentos.
HUNGRIA (13 de febrero)
Las plantaciones de trigo y cebada de invierno se estiman en 1,2 millones de hectáreas y 200 000 hectáreas respectivamente, algo más que el nivel del año anterior, lo que podría permitir alguna recuperación de la producción de este año. Sin embargo, se señala que las reservas de humedad del suelo son muy bajas debido a una sequía prolongada. Se necesitan pronto precipitaciones buenas para reponerlas en vista de la producción de primavera.
LETONIA (13 de febrero)
Las imágenes del satélite indican un crecimiento vegetativo de los cultivos de invierno inferior al del período correspondiente del año pasado. Es probable que la superficie sembrada haya sido inferior a la media.
La producción de cereales de 2000 se pronostica provisionalmente en cerca de 0,9 millones de to-neladas, un volumen situado en torno a la media y superior en casi 0,1 millones de toneladas al del año pasado. Debido a la escasez de la producción pecuaria, las importaciones de cereales de los últimos años se limitan a alrededor de 50 000-70 000 toneladas al año, principalmente de trigo panificable.
LITUANIA (13 de febrero)
Las perspectivas iniciales para la cosecha de cereales de invierno de 2001 son satisfactorias, pero el desarrollo de los cultivos en el ángulo nordoriental del país, que limita con Letonia, es marcadamente inferior al de hace un año. Se prevé que la cosecha de cereales de 2000 se recuperará a un volumen medio de 2,4 millones de toneladas frente al nivel bajo del año pasado (2,1 millones de toneladas), incluidos cerca de 0,9 millones de toneladas de trigo.
MOLDOVA (13 de febrero)
Tras dos años malos, unas precipitaciones y temperaturas normales favorecieron en el otoño la plantación del trigo y la cebada de invierno que se recogerán en 2001. Las condiciones de crecimiento han sido buenas en lo que va de la presente campaña y el desarrollo de los cultivos es marcadamente mejor que el del período correspondiente del año pasado.
Se informa oficialmente que la cosecha de cereales de 2000 ha alcanzado los 2,1 millones de toneladas, volumen significativamente superior a las estimaciones oficiales y sólo marginalmente inferior al de la cosecha afectada por la sequía de 1999. Sin embargo, los agricultores, comerciantes y analistas independientes cuestionan la estimación oficial, mientras que otros analistas evalúan el rendimiento del trigo en un 75-50 por ciento de la estimación oficial situada en más de 2 toneladas por hectárea. En noviembre de 2000, el precio interno del trigo se había duplicado con creces, índice de una situación más difícil del mercado de cereales. La producción de trigo, prevista inicialmente en 1 millón de toneladas, se cifra oficialmente en 780 000 toneladas, pero los analistas la colocan en un nivel inferior de 500 000 toneladas. Asimismo, la cosecha de cereales de 2000, pronosticada oficialmente en 1 091 000 toneladas, podría ser inferior.
La cosecha de trigo es suficiente para satisfacer las necesidades de consumo humano, aunque en vista de la mala calidad de una gran parte del trigo, se necesita importar trigo de alto contenido de gluten para mezclar con los suministros locales con el fin de obtener un pan de buena calidad. Se informa que el poder adquisitivo podría mantener bajo el nivel de dichas importaciones. Debido a la segunda mala cosecha consecutiva, la disponibilidad de cereales forrajeros es muy escasa y sus altos precios obligarán a que continúe la reducción de la cabaña ganadera. Este año el Gobierno ha prohibido las exportaciones de trigo y está tratando de comprar 60 000-80 000 toneladas para las reservas internas, pero con poco éxito.
POLONIA (13 de febrero)
Las precipitaciones de otoño e invierno se han acercado más a lo normal que en los países más meridionales, previéndose alguna recuperación de la producción de cereales de invierno tras la menguada producción del año pasado.
REPUBLICA CHECA (13 de febrero)
La superficie de cereales de invierno se estima oficialmente en poco más de 1 millón de hectáreas, de las cuales 865 000 hectáreas son de trigo y 165 000 de cebada. Se señala que la situación de los cultivos es algo más favorable que en los países vecinos del sur ya que las precipitaciones han estado más cerca de lo normal.
REPUBLICA ESLOVACA (13 de febrero)
En la República Eslovaca, las perspectivas para la cosecha de cereales de invierno son satisfactorias y es probable que las plantaciones sean semejantes a las del año pasado.
RUMANIA (13 de febrero)
Los primeros indicios sugieren que la superficie de trigo de invierno es semejante a la del año anterior (alrededor de 1,9 millones de hectáreas). Tras una prolongada sequía estival, unos chaparrones aislados caídos en el otoño permitieron que la plantación se realizara satisfactoriamente en las principales zonas productoras. Sin embargo, las condiciones se mantuvieron predominantemente secas hasta finales de enero cuando se registraron algunas precipitaciones importantes. Se necesitan muchas más lluvias en Rumania para reponer las reservas de humedad del suelo en vista del crecimiento de los cultivos en la primavera.
UCRANIA (13 de febrero)
Las perspectivas iniciales para los cereales de invierno de 2001 son buenas. La superficie sembrada aumentó unos 0,8 millones de hectáreas a 8,4 millones de hectáreas. Las condiciones de crecimiento han sido positivas en lo que va de la campaña 2000/01 y un 88 por ciento de los cultivos se encuentra en una situación entre buena y satisfactoria. Las imágenes del satélite indican condiciones marcadamente mejores que en el período correspondiente del año pasado, aunque en el sudeste los cultivos necesitan lluvias.
La cosecha de cereales de 2000 se vio afectada por la sequía. La FAO estima ahora la cosecha de cereales de 2000 en sólo 22,9 millones de toneladas, menos que la mala cosecha de 1999 (26,4 millones de toneladas) y que el pronóstico oficial de 24,4 millones de toneladas, en vista de los informes de sobreestimación de los comerciantes y expertos, principalmente de la cosecha de cereales secundarios de primavera (maíz).
A pesar de otra mala cosecha, el país podría continuar siendo un exportador neto de cereales. En los primeros seis meses de la actual campaña comercial, el país ha exportado más de 0,8 millones de toneladas (principalmente cebada) e importado alrededor de 0,4 millones de toneladas (principalmente trigo). En la campaña comercial 2000/01 se prevé que las exportaciones totales de cereales se reducirán a la mitad (1,4 millones de toneladas), mientras que las importaciones aumentarán a alrededor de 900 000 toneladas, frente a poco más de 600 000 toneladas en 1999/2000.
YUGOSLAVIA, REP. FED. DE (SERBIA Y MONTENEGRO)* (13 de febrero)
Las perspectivas para el trigo de invierno que se recogerá en los próximos meses han mejorado algo pero siguen siendo inciertas. La sequía, que redujo de forma pronunciada la cosecha de cereales de 2000 se prolongó hasta el otoño retrasando la plantación del trigo de invierno e impidiendo el arraigo de los cultivos. El Instituto Agrícola de Novi Sad, situado en Voyvodina, la mayor zona productora, señala que a pesar de las malas condiciones económicas de los agricultores se han sembrado unas 750 000 hectáreas con trigo de invierno. Esta cifra es menor de lo previsto - 800 000 hectáreas - pero de ser cierta, superaría a la de la superficie sembrada y cosechada efectivamente el año pasado (más o menos 600 000 hectáreas) y más cercana a la media. Unas lluvias mejores y las temperaturas benignas registradas desde finales de diciembre han mejorado las perspectivas, pero las reservas de humedad del subsuelo siguen siendo inestables. El trastorno de los sistemas administrativos que rigen la agricultura, y la escasez de fondos en todos los niveles del sector, harán que el uso de insumos, y probablemente los rendimientos, sean muy inferiores al potencial.
La FAO estima la producción total de cereales de 2000 en sólo 5,2 millones de toneladas, frente a los 8,6 millones de toneladas de 1999. En junio y julio, una misión de evaluación estimó la cosecha de trigo de 2000 en sólo 1,7 millones de toneladas, debido a la escasez de incentivos ofrecidos para la siembra de trigo, la limitada disponibilidad de insumos, y los daños causados a los cultivos primero por las inundaciones y después por la sequía. Una grave sequía registrada en la primavera y el verano menguó las cosechas de cereales secundarios y otros cultivos alimentarios de primavera. La cosecha de maíz de 2000 se estima oficialmente en sólo 3,1 millones de toneladas, alrededor de la mitad de la abundante cosecha obtenida en 1999 (6,1 millones de toneladas).
La situación general del suministro de cereales es difícil y existen pocas posibilidades o ninguna de exportar cereales, a pesar de la cantidad considerable de existencias remanentes, particularmente de maíz. El alza de los precios de los cereales perjudicará a la producción pecuaria.
La población continúa sufriendo a causa de la escasez de energía y de los fuertes aumentos de los precios de los alimentos básicos, ya que el nuevo Gobierno ha comenzado a liberalizar los precios anteriormente controlados.
Actualmente, el PMA está prestando asistencia a alrededor de 700 000 refugiados y personas socialmente vulnerables. Además, la CICR ayuda a 200 000 PDI con una ración alimentaria individual y a 100 000 beneficiarios (casos sociales) con una comida caliente en el marco de su programa de comedores gratuitos.
AMERICA DEL NORTE
CANADA (13 de febrero)
Las estimaciones más recientes cifran la producción de trigo de 2000 en alrededor de 26,8 millones de toneladas, volumen prácticamente inalterado respecto al año anterior. Sin embargo, la cosecha se vio impedida por el tiempo húmedo y se señala que la cosecha de calidad media será algo inferior a lo normal. Las informaciones iniciales relativas a la cosecha de trigo de 2001, cuya mayor parte se sembrará en abril y mayo, indican una superficie semejante a la del año anterior. La superficie sembrada con trigo para molienda podría aumentar a expensas del trigo duro y de los cultivos oleaginosos. La producción total de cereales secundarios en 2000 se estima en 24,5 millones de toneladas, alrededor de 9 por ciento menos que el año anterior y la cosecha más exigua desde 1995. La disminución se debe principalmente a las condiciones húmedas y frías imperantes durante la campaña, que afectaron a los rendimientos.
ESTADOS UNIDOS (13 de febrero)
A mediados de febrero, las condiciones atmosféricas en las Grandes Praderas, la mayor zona productora de trigo de invierno de los Estados Unidos, continuaron siendo satisfactorias para la cosecha de trigo de 2001. En general las condiciones han sido más frías de lo normal, lo cual ha hecho que el desarrollo de los cultivos marchara a un ritmo lento. Se señala que en el norte de Texas y Kansas algunos cultivos han sufrido importantes daños a causa de los vientos y las heladas. Según el informe del USDA sobre las siembras (11 de enero), la superficie sembrada con trigo de invierno para la cosecha de 2001 ha disminuido a 16,7 millones de hectáreas, alrededor de 800 000 hectáreas, o sea 5 por ciento, menos que el año anterior y el nivel más bajo desde 1971. Se considera que la causa principal de la reducción ha sido la sequía que impidió la plantación en las principales zonas productoras.
OCEANIA
AUSTRALIA (13 de febrero)
En Australia, la cosecha de trigo de invierno de 2000 terminada recientemente se estima ahora oficialmente en 21,2 millones de toneladas, volumen ligeramente superior al del pronóstico anterior pero aún así considerablemente inferior a la cosecha de 25 millones de toneladas de 1999. La reducción de los rendimientos en Western Australia y Queensland, debida al tiempo seco, compensa con creces las cosechas abundantes obtenidas en algunas otras regiones. La producción de los cereales secundarios de invierno (principalmente cebada y avena) se recuperó del nivel bajo de 1999 debido a un aumento de la superficie plantada, pero fue inferior a la media de los últimos cinco años. La producción total de cereales secundarios en 2000 se estima en 9,5 millones de toneladas, alrededor de un 10 por ciento más que la cosecha menguada del año anterior. Las perspectivas iniciales para las cosechas de cereales secundarios del verano de 2001 (principalmente sorgo), que se han plantado últimamente, son algo desfavorables a causa de la sequía y es probable que la superficie disminuya. Está en marcha la plantación del arroz de la campaña de 2001 y los informes del Gobierno indican que la superficie plantada podría aumentar un 19 por ciento.
FIJI (5 de febrero)
Las precipitaciones caídas en diciembre fueron copiosas y generalizadas, con niveles totales que oscilaron entre 200 y 400 por ciento sobre los niveles medios en algunas zonas, particularmente durante las dos primeras semanas. En enero predominaron condiciones cercanas a lo normal, y en algunas regiones se registraron niveles de lluvias incluso inferiores a la media. En general, las condiciones han sido favorables para los principales cultivos que se producen en el país, entre ellos la caña de azúcar, el coco, el lengibre y las frutas, tales como el mango y la papaya. La situación del suministro de alimentos en el país es en general buena, pero se señalan algunos problemas nutricionales graves en algunas zonas.
ISLAS SALOMON (5 de febrero)
La situación de seguridad sigue siendo inestable desde que se firmó el acuerdo de paz en octubre pasado para poner fin a dos años de disturbios civiles en las islas. En enero de 2001, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas manifestó su fuerte apoyo al acuerdo y ahora diversos donantes de Europa, Asia y el Pacífico se están ofreciendo para prestar asistencia y contribuir al proceso de rehabilitación, reconstrucción y desarrollo económico.
PAPUA NUEVA GUINEA (5 de febrero)
Una serie de terremotos castigaron el país en diciembre de 2000, afectando principalmente a las zonas septentrionales. Aunque algunos alcanzaron los 6 y 8 grados de la escala Richter, los daños señalados son relativamente limitados en comparación con catástrofes similares en años anteriores, como el de 1998 que causó la muerte de muchas personas y destruyó cultivos y propiedades.
SAMOA (15 de febrero)
Tanto en diciembre como en enero predominaron condiciones secas, lo cual es algo excepcional en la temporada. Se necesitan más lluvias generalizadas durante los próximos cuatro meses para un desarrollo normal de los cultivos.