FAO/SMIA - Cosechas y escaseces alimentarias 06/01 - ARMENIA* (24 de mayo)

ARMENIA* (24 de mayo)

Las perspectivas para la cosecha de cereales de 2001 han mejorado con las lluvias superiores a la media caídas en abril y mayo, que contribuyeron a reponer la humedad del suelo y las reservas de riego. En algunos lugares, sin embargo, las lluvias acumulativas para el período vegetativo de 2000/01 siguen siendo inferiores a lo normal, y en los meses venideros será decisivo que llueva en forma regular para lograr una cosecha de cereales buena. Las imágenes de satélite indican que el desarrollo de la biomasa es en general marcadamente mejor que en el período correspondiente del año pasado. Según los primeros indicios, la escasez de semillas debida a la reducida cosecha de cereales de 2000 afectada por la sequía (225 000 toneladas) se ha traducido en una disminución de alrededor del 34 por ciento de la superficie sembrada con trigo de invierno a 65 000 hectáreas. Se espera aumentar las superficies sembradas con cereales de primavera a 108 000 hectáreas, mientras que el objetivo total para la producción de primavera es de 197 000 hectáreas, incluidos 33 000 hectáreas de papas (2000: 34 000) y 21 000 hectáreas de hortalizas.

Pese a la disminución de las plantaciones de trigo de invierno, la cosecha de granos (cereales y legumbres) de 2001 podría exceder de las 220 000 toneladas previstas por la FAO. Sin embargo, en vista del déficit de precipitaciones invernales, el resultado definitivo y la situación de la seguridad alimentaria en el próximo año dependerán decisivamente de la regularidad de las lluvias que se reciban durante todo el período vegetativo, no sólo para los granos sino también para otros cultivos básicos. Hay indicios de que el país podría importar hasta 400 000 toneladas de cereales en 2000/01 y es probable que se necesite una cuantía semejante en 2001/02.

Los datos de las encuestas indican que hasta un 68 por ciento de la población vive en la indigencia, en la pobreza o cerca de la línea de pobreza, y que el 55 por ciento de la población es pobre o indigente. Por familias pobres se entienden aquéllas cuyo nivel de consumo per cápita es inferior a la línea de pobreza (una cesta mínima de alimentos y bienes de consumo), y por familias indigentes se entienden aquéllas cuyo nivel de consumo per cápita es inferior a la línea de alimentación (una cesta mínima de productos alimenticios), situándose las dos líneas en 11 735 dracmas (21,5 dólares EE.UU.) y 7 194 dracmas por mes. Alrededor del 32 por ciento de la población vive en la pobreza y casi el 23 por ciento en la indigencia. Los porcentajes correspondientes a las familias son del 30 y 19 por ciento, respectivamente. Además, algunas familias se consideran potencialmente pobres, ya que sus ingresos oscilan entre 12 000 y 12 500 dracmas, superando de poco la línea de pobreza. Como consecuencia, hasta un 68 por ciento de la población podría necesitar alguna forma de protección social relacionada con la pobreza. Las encuestas revelan también que el nivel real de desempleo es de 27,3 por ciento, muy superior a la estimación oficial de 10,0-11,5 por ciento. El sueldo mensual medio es de 20 157 dracmas, o sea menos del doble del nivel de pobreza, y alrededor del 17 por ciento de la fuerza laboral gana demasiado poco para asegurarse un ingreso superior a la línea de alimentación. Ahora bien, los salarios no son la fuente principal de los ingresos monetarios: constituyen sólo el 24,6 por ciento de los ingresos, mientras que las ventas de la producción agrícola represen-tan el 32,1 por ciento, los ingresos derivados de actividades emprendidas por cuenta propia el 10,6 por ciento, y las pensiones y los subsidios estatales el 9,3 por ciento. Alrededor del 19,3 por ciento de los ingresos provienen de las transferencias de parientes, incluido un 12,8 por ciento de remesas (este rubro es por sí solo más significativo que las pensiones y los subsidios estatales). Sólo el 0,1 por ciento de los ingresos se relaciona con la propiedad (es decir, arriendos, intereses, dividendos, etc.) lo que permite ver el efecto limitado de la privatización en la modalidad de la remuneración. Hay un alto grado de desigualdad en materia de ingresos. El nivel de los ingresos del 20 por ciento más rico de la población es 32,2 veces más alto que el del 20 por ciento más pobre. La encuesta confirmó también de que por lo menos 620 000 armenios (y posiblemente hasta un millón), sobre una población de 3,8 millones de habitantes, viven actualmente en el extranjero buscando otras fuentes de ingresos. Muchos de ellos están en edad de trabajar, y dos terceras partes son hombres.

Los extenuantes problemas políticos, económicos y sociales del decenio pasado se han traducido en una situación generalizada de desempleo y subempleo y de inseguridad alimentaria . Los niveles de malnutrición crónica entre los niños de 3-59 meses oscilan entre 14 y 32 por ciento, con una media de 22 por ciento. Estos niveles se consideran moderados pero muestran una tendencia creciente de los niveles de malnutrición en los dos últimos años. El PMA ha extendido su asistencia alimentaria de urgencia a las víctimas de la sequía hasta el final de diciembre de 2001 y prevé continuar prestando asistencia alimentaria a cerca de 300 000 agricultores de subsistencia. La operación de urgencia (OU) se integrará plenamente con la próxima operación prolongada de socorro y recuperación (OPSR), efectiva a partir de julio de 2001, que proporcionará alrededor de 60 000 toneladas de suministros alimentarios a alrededor de 280 000 personas afectadas por la sequía. Para mediados de 2003, el PMA habrá distribuido más de 68 000 toneladas de productos alimenticios en el marco de la OU y de la OPSR.