FAO/SMIA - Cosechas y escaseces alimentarias 06/01 - BURUNDI* (5 de junio)

BURUNDI* (5 de junio)

Según las estimaciones, la producción de las cosechas de la temporada A de 2001 es satisfactoria. Una evaluación FAO/PMA/UNICEF organizada localmente estimó la producción de alimentos en 85 000 toneladas de cereales, 68 000 toneladas de legumbres, 483 000 toneladas de raíces y tubérculos y 465 000 toneladas de bananos y plátanos, lo que representa un aumento del 15 por ciento, 10 por ciento, 4 por ciento y 1 por ciento, respectivamente, con respecto a la temporada A de 2000. Pero las producciones siguen siendo inferiores a los niveles medios anteriores a la crisis (1988-1993), debido a la inseguridad y al trastorno de la producción desde 1994. La superficie plantada aumentó significativamente en la presente campaña debido a una situación de seguridad relativamente mejor en las partes occidentales, particularmente en las provincias de Bubanza y Cibitoke, y al cierre de los campamentos de reagrupación en la Provincia rural de Bujumbura, que permitió a los agricultores volver a sus campos. Otro de los factores que contribuyeron al aumento de las plantaciones en la campaña actual fue la distribución oportuna de semillas por parte del Gobierno y de los organismos internacionales, principalmente en las provincias de Kirundo y Muyinga, las más afectadas por la sequía durante la temporada A de 2000.

Pese al retraso de la estación de las lluvias, las precipitaciones fueron copiosas y bien distribuidas de octubre a noviembre, lo que benefició el desarrollo de los cultivos. En algunas partes, sin embargo, las lluvias excesivas provocaron inundaciones y pérdidas de cosecha y, en general, redujeron los rendimientos, particularmente de los frijoles. Los rendimientos de los bananos y plátanos deberían aumentar recién a partir de marzo/abril, ya que las plantas resultaron gravemente afectadas por el tiempo seco prolongado registrado anteriormente. La temporada C de 2000 en las zonas pantanosas, que va de mediados de junio hasta septiembre, fue una temporada mala debido al tiempo seco de los meses anteriores. Según las estimaciones, la producción de alimentos fue inferior en un 4 por ciento al nivel de la temporada C de 1999.

La difícil situación alimentaria se ha aliviado con la llegada de la nueva cosecha. Ello no obstante, debido a varias cosechas inferiores a la media consecutivas, a la persistencia de la inseguridad y a los desplazamientos de la población, así como a la reciente epidemia de paludismo, la situación alimentaria y nutricional de los grupos vulnerables sigue siendo inestable. Difícil, en particular, para las 324 000 personas desplazadas en el interior del país y para las personas afectadas por la sequía en las provincias de Karuzi, Gitega, Kayanza y Muyinga. Una encuesta nutricional realizada recientemente en 7 provincias del país arrojaba una tasa del 10 diez por ciento de malnutrición global aguda. Análogamente, en un informe reciente de MSF se indica que el número de los niños malnutridos atendidos en sus centros de alimentación terapéutica de la provincia de Karuzi se ha duplicado en enero de 2001. Se sigue necesitando ayuda alimentaria de urgencia para los sectores vulnerables de la población.