FAO/SMIA - Cosechas y escaseces alimentarias No.5, noviembre 2001

AFRICA ORIENTAL

BURUNDI* (5 de noviembre)

Las precipitaciones entre normales y superiores a lo normal ca�das en septiembre y octubre, particularmente en las partes septentrionales, favorecieron la siembra de los cultivos de la temporada A de 2002 que se recoger�n a partir de enero y beneficiaron a los cultivos tempranos. Las perspectivas de futuro para la paz son tambi�n buenas, gracias a la formaci�n de un nuevo gobierno de coalici�n implantado el 1 de noviembre.

Los rendimientos de los cultivos alimentarios de la temporada B de 2001 fueron satisfactorios. La producci�n total aument� un 10 por ciento con respecto al a�o anterior. Los cereales aumentaron un 10 por ciento respecto a la temporada B de 2000, mientras que las legumbres un 24 por ciento. Estos resultados se deben a unas lluvias en general buenas, a una situaci�n de seguridad mejorada durante el per�odo de las siembras, y a la oportuna distribuci�n de semillas por parte de los organismos internacionales. Tambi�n fue buena la producci�n de la temporada A de 2001, obtenida al principio del a�o.

La situaci�n del suministro de alimentos ha mejorado en general gracias al aumento de la producci�n de alimentos en 2001. Sin embargo, sigue siendo apremiante la situaci�n alimentaria y nutricional de 432 000 personas desplazadas en el interior del pa�s y de otras personas vulnerables, para las cuales continuar� haciendo falta ayuda alimentaria de urgencia hasta la pr�xima cosecha.

ERITREA* (6 de noviembre)

Est� a punto de comenzar la recolecci�n de las cosechas de cereales y legumbres de 2001. Las perspectivas de una cosecha buena de cereales en 2001 han disminuido algo a ra�z de las lluvias inferiores a lo normal recibidas en septiembre, que son importantes para los cul-tivos en las etapas de floraci�n y fructificaci�n. Las evaluaciones realizadas sobre el terreno durante el mes de septiembre para el proceso de llamamientos consolidados indican que se prev� una producci�n inferior a las estimaciones preliminares dadas por el Ministerio de Agricultura a principios de agosto. Aun as�, la estimaci�n revisada de la producci�n de cereales, cifrada en 203 000 toneladas, triplica la cosecha muy inferior a la media del a�o pasado.

La situaci�n alimentaria sigue siendo en general dif�cil debido a los desplazamientos de la poblaci�n causados por la guerra con Etiop�a y por la sequ�a del a�o pasado. La cosecha de cereales del a�o pasado fue muy reducida debido principalmente al desplazamiento de cientos de miles agricultores que abandonaron las regiones ricas en agricultura de Gash Barka y Debub, que representan m�s del 70 por ciento de la producci�n cerealera. En septiembre, el n�mero total de las personas desplazadas en el interior del pa�s descendi� de 70 000 a alrededor de 58 000.

En abril y mayo de 2001 la FAO y el PMA aprobaron conjuntamente dos operaciones de urgencia destinadas a prestar asistencia alimentaria a alrededor de 1,8 millones de personas afectadas por la guerra y la sequ�a, por un valor total de 77 millones de d�lares EE.UU. para un per�odo de diez meses (de mayo de 2001 hasta febrero de 2002). El saldo de las existencias alimentarias del PMA a finales de septiembre se situaba en 66 000 toneladas, que deber�an cubrir las necesidades alimentarias de urgencia hasta el final del primer trimestre o mediados de 2002. Aunque el n�mero de las PDI alojadas en campamentos est� disminuyendo progresivamente, se necesita m�s ayuda alimentaria debido al crecimiento de los refugiados que est�n volviendo del Sud�n.

ETIOPIA* (6 de noviembre)

Est� a punto de comenzar la recolecci�n de la cosecha de cereales "meher" de la temporada principal de 2001. En general las perspectivas son favorables gracias a unas lluvias abundantes recibidas durante el per�odo vegetativo en las principales zonas productoras. La cosecha secundaria "belg" de 2001, que normalmente se recoge a partir de junio, tambi�n fue buena y constituy� una notable recuperaci�n con respecto a la mala cosecha del a�o pasado. Aunque la producci�n belg representa solamente el 8-10 por ciento de la producci�n total de cereales, es importante en algunas zonas en las que provee la mayor parte de los suministros alimentarios anuales.

En cambio, en las zonas ganaderas del sur y este de Etiop�a unas lluvias inferiores a lo normal contin�an minando toda posibilidad de recuperaci�n despu�s de la devastadora sequ�a de los �ltimos tres a�os. Preocupa particularmente la falta de precipitaciones en algunas partes de Gode, Liban, Werder y Afder, lugares en los que el a�o pasado hubo una grave escasez de alimentos. Puede que las lluvias recibidas en algunas partes hayan aliviado en algo la falta de agua pero se necesita que siga lloviendo de forma generalizada para mejorar los pastizales.

En general la situaci�n del suministro de alimentos es estable en el pa�s como consecuencia de la excelente producci�n de cereales de la temporada principal "meher" del a�o pasado y de la buena cosecha de la temporada secundaria "belg" de este a�o. Sin embargo, el descenso brusco de los precios de los cereales registrado en las principales zonas productoras ha afectado gravemente a los ingresos de las familias rurales. El Gobierno y los donantes han hecho algunos intentos para apoyar los mercados locales a trav�s de la compra de cereales.

Una misi�n de evaluaci�n de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA est� en el pa�s desde mediados de noviembre para evaluar la producci�n "meher" y estimar las necesidades de ayuda alimentaria en 2002.

KENYA (6 de noviembre)

Ha terminado la recolecci�n de las cosechas principales de cereales de "lluvias largas" de 2001 en las principales zonas productoras de las provincias del Valle del Rift, Western y Nyanza. La principal estaci�n de las lluvias (marzo-mayo) a la que normalmente corresponde el 80 por ciento de la producci�n total anual de alimentos, ha sido muy favorable y ha mejorado el suministro alimentario en la mayor parte del pa�s. Las estimaciones oficiales preliminares indican una producci�n de ma�z de alrededor de 2 310 000 toneladas para la campa�a, lo que representa un incremento de alrededor del 20 por ciento respecto de la escasa cosecha del a�o pasado. Dado que se prev�n lluvias normales durante la temporada secundaria, la producci�n total de ma�z de 2001/02 se pronostica en 2,7 millones de toneladas, volumen muy superior a la media.

Debido a la buena cosecha de cereales y a los niveles suficientes de las reservas, los precios del ma�z, el cultivo b�sico, han bajado considerablemente, a ra�z de lo cual el Gobierno formul� un llamamiento a los donantes para que incrementaran las compras locales en apoyo a los productores.

Sin embargo, a pesar de la mejora de la situaci�n del suministro alimentario en general, los pastores de las partes septentrionales y orientales del pa�s contin�an tropezando con graves dificultades alimentarias. La situaci�n del abastecimiento de agua y de los pastizales sigue siendo mala y, dados los pron�sticos de precipitaciones inferiores a lo normal desde septiembre hasta diciembre, se prev� que empeorar� m�s todav�a. Estas perspectivas ya han llevado a los campesinos a emigrar lejos en busca de pastoreo, lo que a su vez ha incrementado la probabilidad de una mortalidad en gran escala del ganado.

En septiembre de 2001 el PMA distribuy� ayuda alimentaria a alrededor de 1 560 000 personas en 13 distritos ganaderos y agropecuarios.

RWANDA (5 de noviembre)

Unas lluvias torrenciales ca�das en septiembre provocaron inundaciones localizadas en las provincias de Gisenyi, Gitarama y Gikongoro, causando algunas v�ctimas, da�os a las viviendas y a la infraestructura, y p�rdidas de cosecha. Los distritos m�s afectados son los de Kabagali y Mushubi, donde las p�rdidas de bananos y ra�ces y tub�rculos son elevadas, y considerable la erosi�n del suelo. En conjunto, sin embargo, las copiosas lluvias recibidas en los �ltimos dos meses favorecieron la siembra de los cultivos alimentarios de la temporada A de 2002 y beneficiaron su arraigo. Las semillas de cereales y legumbres, principales cultivos de la temporada, y las estacas de batatas pudieron conseguirse a tiempo y a precios estables. Se se�ala que la situaci�n de los cultivos es buena y las perspectivas iniciales para la cosecha que se recoger� a partir de enero son favorables.

La producci�n de alimentos en la temporada B de 2001 se estim� en 2,7 millones de toneladas, debido al aumento de la superficie plantada y a unas condiciones atmosf�ricas favorables. Aunque el volumen se�alado es inferior en un 10 por ciento al de la misma temporada del a�o pasado, en equivalente de cereales la producci�n es superior en un 9 por ciento. Las necesidades de importaci�n han disminuido en el segundo semestre en comparaci�n con el mismo per�odo del a�o pasado, situ�ndose en 143 000 toneladas de equivalente en cereales, que deber�an cubrirse completamente con importaciones comerciales.

La situaci�n del suministro de alimentos es en general satisfactoria gracias a un crecimiento de la producci�n total de alimentos en 2001. Los precios de los cultivos b�sicos se mantienen estables o est�n bajando como consecuencia de una buena oferta, interna y transfronteriza, a los mercados. En particular, ha mejorado el suministro de alimentos en zonas afectadas anteriormente por una serie de sequ�as.

SOMALIA* (12 de noviembre)

La situaci�n alimentaria est� empeorando r�pidamente en Somalia tras la cosecha de la temporada principal "Gu" de 2001, la m�s baja obtenida en los �ltimos siete a�os a causa de la sequ�a. Unas lluvias intensas ca�das �ltimamente en las vecinas tierras altas et�opes han hecho desbordar los r�os en algunas partes del sur de Somalia, desplazando a un gran n�mero de personas y agravando una situaci�n alimentaria ya de por s� apremiante.

Al cabo de m�s de un decenio de disturbios civiles Somalia ha quedado empobrecida y sumida en una crisis humanitaria de grandes proporciones. La infraestructura b�sica y los servicios gubernamentales, incluida la capacidad de prestar servicios sanitarios elementales, educaci�n y otros servicios sociales, han sufrido un colapso. Si bien la recuperaci�n de la producci�n de alimentos en las dos campa�as agr�colas anteriores ha aliviado en alguna medida las dificultades alimentarias, la mala cosecha de la campa�a actual ha contrarrestado ese respiro temporal debido al debilitamiento de los medios de subsistencia provocado por una serie de sequ�as anteriores y por los efectos a largo plazo de a�os de inseguridad. Adem�s, la prohibici�n de las importaciones de ganado procedente de Africa oriental que siguen manteniendo los pa�ses situados a lo largo de la Pen�nsula Ar�biga debido a la fiebre del Valle del Rift est� causando considerables p�rdidas de ingresos, particularmente en el norte de Somalia. Se estima que la prohibici�n impuesta en septiembre de 2000 ha costado al pa�s p�rdidas de ingresos de moneda fuerte calculadas en 120 millones de d�lares EE.UU..

Ante unas perspectivas alimentarias horribles, se supone que los precios de los cereales subir�n y que ello minar� gravemente el poder adquisitivo de un sector grande de la poblaci�n. Adem�s, el valor del chel�n somal� y del chel�n de Somaliland ha descendido espectacularmente. Entre agosto de 2000 y agosto de 2001, en Mogadishu el valor del chel�n somal� disminuy� de 9 500 por un d�lar a 20 500, lo que representa una depreciaci�n de cerca de 116 por ciento, mientras que en Hargeysa el valor del chel�n de Somaliland descendi� de 3 000 a 6 000 por un d�lar, o sea en un 100 por ciento.

Como consecuencia de la contracci�n econ�mica mundial, se prev� que disminuir�n notablemente las remesas que normalmente aportan a la econom�a unos 500 millones de d�lares EE.UU. anuales, frente a los 60 millones de d�lares EE.UU. de la ayuda alimentaria. Est� previsto que el acceso a los alimentos de un gran n�mero de familias que dependen de las remesas resultar� gravemente afectado.

En vista de una situaci�n alimentaria en r�pido deterioro, los campesinos est�n abandonando sus aldeas, dirigi�ndose muchos de ellos con sus ganados hacia zonas urbanas en busca de alimentos y agua, y hacin�ndose en torno a centros de alimentaci�n en los que reciben asistencia de la comunidad internacional. Seg�n informes recientes, han quedado afectadas unas 800 000 personas, que necesitar�n 70 000 toneladas de ayuda alimentaria de urgencia hasta la pr�xima cosecha de la temporada "Gu" que se recoger� en agosto de 2002. Preocupan en particular unas 300 000 personas vulnerables que corren riesgo de inanici�n, particularmente en la regi�n de Gedo en el sudeste de Somalia, as� como en Hiran, Bay y Bakool. Pese a unas recientes precipitaciones que permitieron efectuar algunas plantaciones, las perspectivas para la temporada secundaria "Deyr", que va de octubre a febrero, son inciertas debido al retraso de las lluvias.

El �rgano de coordinaci�n de la ayuda a Somalia (SACB), integrado por organismos de las Naciones Unidas, organizaciones no gubernamentales y donantes asociados, formul� un llamamiento pidiendo urgentemente ayuda alimentaria para la poblaci�n afectada. Tambi�n necesitan asistencia no alimentaria, como agua y suministros m�dicos, miles de ni�os que corren riesgo de enfermedades y malnutrici�n. Hace unos meses las Naciones Unidas lanzaron un llamamiento consolidado interinstitucional por 130 millones de d�lares EE.UU. para mantener los medios de vida y contribuir a la recuperaci�n del pa�s. Se insta a la comunidad internacional de donantes que formulen urgentemente promesas y hagan aportaciones, sin las cuales crece la probabilidad de que cunda una hambruna en gran escala en las zonas m�s afectadas.

SUDAN* (6 de noviembre)

Una misi�n de evaluaci�n de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA enviada �ltimamente al sur del Sud�n indic� una situaci�n alimentaria en general mejorada en comparaci�n con el a�o pasado pero estim� deficitaria la producci�n cerealera. Una lluvias intensas ca�das en agosto causaron inundaciones localizadas y anegamientos en las tierras bajas, particularmente en el este. Se se�ala, con todo, que hasta ahora las ventajas de las precipitaciones superan a las desventajas.

Pese al mejoramiento de la situaci�n, quedan focos de inseguridad alimentaria y las necesidades de ayuda ser�n mayores ya que la fragmentaci�n de las regiones y la falta de rutas comerciales normales excluye la posibilidad de transportar f�cilmente cereales o harina de yuca desde las zonas excedentarias hasta las deficitarias.

En el centro y norte del Sud�n reci�n se han empezado a recoger las cosechas de cereales de la temporada principal de 2001. Pese a las grandes inundaciones que desplazaron a numerosas personas y destruyeron cultivos, en general las perspectivas han mejorado gracias a unas buenas lluvias y al aumento de la producci�n de cereales en las estructuras de riego. Desde mediados de noviembre hay en el pa�s una misi�n de evaluaci�n de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA para evaluar las importaciones/exportaciones comerciales y las necesidades de ayuda alimentaria en 2002.

TANZANIA (6 de noviembre)

Se han comenzado a plantar los cultivos de cereales de la temporada principal de 2002 en las zonas unimodales del centro y el sur, as� como los de temporada corta ("Vuli") en las zonas bimodales del norte. Dado que se prev�n precipitaciones entre normales y superiores a lo normal durante el per�odo de septiembre a diciembre en la mayor parte del pa�s, las perspectivas son en general favorables.

La cosecha de cereales de 2001, principalmente ma�z, se estima en alrededor de 4 millones de toneladas, 14 por ciento m�s que la del a�o pasado pero ligeramente inferior a la media de los �ltimos cinco a�os. La Reserva Estrat�gica de Granos ha comprado alrededor del 56 por ciento de las 25 000 toneladas que preve�a comprar para la campa�a comercial de 2001/02 (junio/mayo), lo que lleva las existencias totales a 59 000 toneladas. Que representan alrededor del 84 por ciento del total de las reservas, previstas en 70 000 toneladas.

La situaci�n del suministro de alimentos es en general satisfactoria, y los precios de los cereales se mantienen estables o est�n bajando en el centro, este y norte de Tanzan�a y en la regi�n de los lagos. Sin embargo, en las tierras altas y las zonas costeras del sur se observaron fuertes aumentos debidos en parte al incremento de la demanda de cereales de pa�ses vecinos, como Zambia, la Rep�blica Democr�tica del Congo y Malawi, que experimentaron importantes d�ficit debidos al mal tiempo o a la inseguridad. Se se�ala, adem�s, que unos 12 distritos del norte y centro de Tanzan�a, situados principalmente en las regiones de Arusha, Kilimanjaro, Dodoma, Morogoro, Shinyanga y Singida, est�n experimentando diversos grados de inseguridad alimentaria.

UGANDA (6 de noviembre)

Unas lluvias copiosas y generalizadas recibidas en septiembre y octubre beneficiaron el desarrollo de los cultivos alimentarios de la segunda temporada de 2001. Las perspectivas para la cosecha que se recoger� a principios del a�o pr�ximo son favorables. Las lluvias ca�das en los �ltimos diez meses tambi�n han mejorado la situaci�n de los pastizales y la disponibilidad de agua para el ganado en los distritos ganaderos de Kotido y Moroto.

En general, la situaci�n del suministro de alimentos es satisfactoria. Pero en el distrito de Katakwi sigue siendo inestable debido principalmente a la inseguridad y a la p�rdida de ganado por actos de cuatrerismo. Se sigue necesitando ayuda alimentaria tambi�n para cerca de 112 000 personas del distrito de Bundibugyo, en el oeste, desplazadas a causa de los disturbios civiles.