Página precedente Indice Página siguiente


Yute, kenaf y fibras anexas

Introducción

El yute y el kenaf se cultivan casi exclusivamente en los países en desarrollo de Asia oriental y en algunas partes de América Latina. Bangladesh, la India y Tailandia representan más del 90 por ciento de la producción mundial. La fibra se elabora principalmente en los propios países productores y se utiliza para la fabricación de productos tradicionales como arpilleras, bolsas para la compra de alimentos, fondos de alfombras y otros revestimientos de suelos. Los productos de yute diversificados, tales como geotextiles y materiales compuestos, también se manufacturan en cantidades relativamente pequeñas. El yute representa una proporción escasa del valor del comercio mundial, pero su cultivo y elaboración requiere una gran densidad de mano de obra y constituye, por lo tanto, una fuente importante de sustento y de seguridad alimentaria para muchos agricultores asiáticos y sus familias.

En el plazo medio, sobre la evolución del mercado mundial del yute debería repercutir negativamente la intensidad de la competencia con las fibras sintéticas y positivamente la expansión del mercado de los productos de yute diversificados. La continua ampliación de las instalaciones destinadas a la manipulación a granel de diversos productos agropecuarios ejercerá también una presión sobre el mercado del yute, aunque menor que en el pasado y en consonancia con las mejoras introducidas en la infraestructura de los países en desarrollo.

Estas proyecciones resultan de la aplicación de un modelo econométrico de equilibrio parcial que da por supuestas condiciones atmosféricas normales y condiciones económicas también normales. El modelo es dinámico, en el sentido de que permite ajustes paulatinos, pues toma en cuenta la influencia de elementos biológicos, comportamentales y de otro tipo en la producción y el consumo de los productos del yute. El modelo abarca 27 países y regiones y consiste en ecuaciones comportamentales estimadas para la superficie y el rendimiento por hectárea del yute, así como para la demanda, las exportaciones y las importaciones de la fibra de yute y de los productos derivados.

Producción

El yute es predominantemente un cultivo anual de secano. Su cultivo requiere una gran intensidad de mano de obra, pero cantidades relativamente pequeñas de otros insumos, como fertilizantes y plaguicidas, y se puede cultivar en minifundios. Por estas razones, la producción del yute se concentra cada vez más en Bangladesh, la India, China y Tailandia, que desde 1998-2000 representan conjuntamente más del 95 por ciento de la producción mundial, comparado con el 90 por ciento de principios de los años 1990.

El yute compite por la tierra con los cultivos alimentarios, como el arroz en Bangladesh y la India, y la yuca en Tailandia. La asignación de las tierras al arroz o al yute depende de la relatividad y variabilidad de los precios. En general, los productores tratan de adoptar una estrategia de cultivos múltiples, alternando el cultivo del yute con el del arroz. Sin embargo, se tiende a sustituir un cultivo por el otro, pues los productores tratan de reducir al mínimo el riesgo de que disminuyan los rendimientos cuando se retrasa el trasplante del arroz. Ahora bien, según las regiones, las posibilidades de sustituir arroz por yute pueden ser limitadas a causa de las inundaciones.

Hasta finales de los años 1990, la producción mundial de yute había fluctuado entre 3 millones de toneladas y 3,7 millones de toneladas, si se exceptúa la cosecha sin precedentes de más de 6 millones de toneladas obtenida en 1985. Entre 1998 y 2000, la producción mundial disminuyó de forma pronunciada a un nivel medio de 2,6 millones de toneladas. Esta merma se debió a una menor competitividad del yute con respecto al polipropileno debida a la baja de los precios de este último.

Dando por sentado que las condiciones atmosféricas y los rendimientos del yute por hectárea sigan las pautas normales, las proyecciones indican que la producción mundial se situará en 2,4 millones de toneladas en 2010, muy por debajo del volumen medio producido el último decenio. La merma de la producción a medio plazo se debería a un debilitamiento de los incentivos de los precios debido a una disminución de la demanda mundial de fibras de yute.

En el plazo medio, la superficie cultivada con yute en el Lejano Oriente debería de contraerse en un 3,1 por ciento al año con respecto al promedio de 1,6 millones de hectáreas cultivadas en 1998-2000, para situarse en 1,2 millones de hectáreas en 2010, debido a que los productores se ajustan a las condiciones del mercado reduciendo las inversiones. Se prevé que la producción disminuirá en 1,6 por ciento al año con respecto a la media de 2,6 millones de toneladas durante los años 1998-2000, situándose en 2010 en 2,3 millones de toneladas.

Según las proyecciones, la India aumentará su predominio en la producción mundial de yute, con el 66 por ciento en 2010, en comparación con el 58 por ciento registrado durante el período 1998-2000- En el plazo medio, se prevé que la superficie cultivada con yute en la India se contraerá en un 2,7 por ciento al año, aunque la producción debería mantenerse en aproximadamente 1,6 millones de toneladas debido al aumento de los rendimientos. Entre 1990 y 2000, los rendimientos pasaron de 1,60 a 1,86 toneladas por hectárea y se prevé que llegarán a 2,1 toneladas por hectárea en 2010.

Según las proyecciones, en Bangladesh la superficie cultivada con yute pasará de 447 000 hectáreas a 387 000 hectáreas en 2010, pues los productores reaccionan ante la baja de los precios de mercado destinando la tierra a los cultivos alimentarios competidores. La contracción de la tierra cultivada con yute se verá compensada en parte por el aumento de los rendimientos que, según las proyecciones, pasarán de un promedio de 1,70 toneladas por hectárea en 1998-2000 a 1,76 toneladas por hectárea en 2010. Como consecuencia, la producción disminuiría en un 1,9 por ciento anual, de 768 000 toneladas en 1998-2000 a 681 000 toneladas en 2010.

Según las proyecciones, la superficie y la producción de yute continuarán contrayéndose en China. En el curso de los años 1990 la producción pasó de 726 000 toneladas a 126 000 toneladas y se prevé que continuará disminuyendo a 7 000 toneladas en 2010 ya que se están sembrando más tierras con cultivos alimentarios. Durante el mismo período, la producción disminuiría en Tailandia a 17 000 toneladas, mientras que en Viet Nam debería mantenerse estable en 12 000 toneladas.

Consumo

El yute se utiliza para hacer hilados destinados a la fabricación de arpillera, sacos, alfombras y fondos de alfombras y otros revestimientos de suelos. En los países en desarrollo, se utiliza principalmente en arpillera y sacos para los cereales y el azúcar, mientras que los fondos de alfombras constituyen el producto principal del yute que se consume en los países desarrollados. Los productos diversificados, como materiales compuestos, geotextiles, pulpa de papel y tejidos ornamentales, comprenden una proporción pequeña del consumo total.

Durante el último decenio, el consumo mundial de yute se contrajo ya que el mercado continuó configurándose en función de dos factores importantes, a saber: por un lado, la intensidad de la competencia con las fibras sintéticas y su desplazamiento por parte de éstas; y, por otro, la ampliación de las instalaciones de manipulación a granel de los productos. Estos factores contribuyeron a un decrecimiento del 16 por ciento del consumo mundial de yute, de 3,4 millones de toneladas de equivalentes en fibra en 1988-90 a 2,9 millones de toneladas en 1998-2000. En los países desarrollados el consumo de productos de yute descendió en un 40 por ciento, pasando de 668 000 toneladas en 1988-90 a 395 000 toneladas en 1990-2000. En los países en desarrollo, el mercado de yute se contrajo en un 10 por ciento, de 2,8 millones de toneladas en 1988-90 a 2,5 millones de toneladas en 1998-2000.

La competitividad del yute en relación con el polipropileno se determina en función de los precios y de otros factores. Los crecientes rendimientos a escala obtenidos en la industria petroquímica, así como su estructura verticalmente integrada que permite una distribución flexible de los elementos del costo a lo largo de las fases de elaboración de los diferentes productos, contribuyen a reducir los costos unitarios. Esto hace que el polímero de polipropileno y los productos sintéticos conexos sean competitivos con sus contrapartidas de yute. Entre los otros factores que influyen en la competitividad del yute figuran las características técnicas, como el peso excesivo y la consecuente ineptitud de los sacos de yute para los sistemas de llenado automático en comparación con los sacos de polipropileno; la permeabilidad superior de los sacos de yute frente a las calidades resistentes al agua de los sacos sintéticos; y la biodegrabilidad del yute. Además de estas características técnicas, otros factores importantes, como el suministro seguro y regular de las fibras de calidad consistente, han determinado un ulterior desplazamiento del yute por parte de las fibras sintéticas, debido a que el yute es un cultivo anual expuesto a la inestabilidad causada por las condiciones atmosféricas y los transportes de larga distancia.

Entre 1988-1990 y 1998-2000, los precios de las fibras de polipropileno bajaron a una tasa media de 2 por ciento anual, en términos reales, mientras que la demanda mundial ha ido creciendo durante el mismo período en aproximadamente un 8-10 por ciento anual. Durante el decenio pasado, el consumo mundial de fibras y productos de yute bajó en un 1,54 por ciento al año a 2,9 millones de toneladas en 1988-2000. A plazo medio, se prevé que la capacidad adicional de producción de polipropileno obtenida en Asia a través de la construcción de grandes unidades de producción contribuirá a bajar los costos unitarios y a ejercer una presión sobre el mercado del yute.

En general, la tasa de utilización de las instalaciones de manipulación a granel y, por consiguiente, la tasa de sustitución del embalaje de los alimentos en sacos para el transporte, depende de la inversión de capital en infraestructura, tales como servicios portuarios, carreteras y almacenamiento. Es difícil ofrecer estimaciones sobre los efectos de la manipulación a granel en el mercado del yute, aunque el hecho de que el consumo de yute en los países en desarrollo haya disminuido menos durante el último decenio denota el uso generalizado de sacos para el embalaje de los alimentos y un ritmo más lento de la adopción de tecnologías de manipulación a granel debido al mal estado de los caminos y de los ferrocarriles. En el plazo más largo, sin embargo, se prevé que las mejoras introducidas en la infraestructura de los países en desarrollo continuarán limitando la demanda de telas para sacos.

Durante el último decenio, la fibra se ha utilizado en cantidades pequeñas para usos diversificados del yute, pero su proporción en el valor de las exportaciones totales va en aumento. Entre los diversos productos derivados del yute figuran los geotextiles, que se utilizan en la lucha contra la erosión de los suelos, los plásticos reforzados con yute, los laminados de yute, la pulpa y el papel, los tejidos ornamentales, las alfombras y las artesanías. Entre 1997-1998 y 2001-2002, la proporción de las exportaciones de productos diversificados del yute de la India aumentaron en valor, pasando del 10 al 24 por ciento del valor total de las exportaciones, lo que demuestra el potencial de crecimiento a medio plazo y la oportunidad de expansión del mercado en el caso de que se promuevan estrategias eficaces de investigación y desarrollo y se intensifiquen las iniciativas en materia de comercialización.

En el período comprendido entre 1998-2000 y 2010, el consumo mundial de yute debería de continuar contrayéndose debido a la competencia del polipropileno y de la tecnología de la manipulación a granel. Según las proyecciones, el consumo mundial disminuirá en 1,07 por ciento al año, pasando de 2 890 000 toneladas en 1998-2000 a 2 620 000 toneladas en 2010. Se prevé que el consumo de yute y de los productos derivados continuará disminuyendo en los países desarrollados en el plazo medio, aunque a un ritmo más lento que en los años 1990. Una desaceleración de la contracción del mercado puede deberse a un progresivo agotamiento de las posibilidades de sustitución del yute por productos o tecnologías competidores, al menos en esos países. En los países en desarrollo, se prevé que el consumo disminuirá a una tasa anual de 0,95 por ciento, pasando de 2 490 000 toneladas en 1998-2000 a 2 330 000 toneladas en 2010.

En la India, el mercado más importante del mundo, es probable que el consumo de los productos de yute se mantenga en aproximadamente 1,6 millones de toneladas, a pesar de las reglamentaciones administrativas revisadas que determinan los porcentajes de yute y de fibras sintéticas que pueden utilizarse en los sacos destinados a los productos agrícolas destinados al consumo humano. Las nuevas disposiciones, introducidas en 2002-2003, permiten una reducción de 100 a 80 por ciento de la cantidad de cereales alimentarios embalados en yute y una reducción de 90 a 75 por ciento de la cantidad de azúcar envasada en yute. Estos porcentajes disminuirán ulteriormente en la campaña 2002-2004 a 60 por ciento para los cereales alimentarios y a 50 por ciento para el azúcar. La atenuación de las reglamentaciones debería de debilitar la demanda de yute en la India, ejercer una presión a la baja sobre sus precios, y reducir el crecimiento del mercado de yute a una tasa inferior a la del último decenio. Existen, sin embargo, algunos factores, como la preferencia por la utilización de envases de yute para los cereales alimentarios debido a su permeabilidad y a la posibilidad de volverlos a usar, que podrían contrarrestar el efecto de dichas reglamentaciones.

A plazo medio, las proyecciones indican que el consumo de yute en Bangladesh crecerá a una tasa anual de aproximadamente 1 por ciento, pasando de 152 000 toneladas en 1998-2000 a 162 000 toneladas en 2010. Ello se debe en parte a la prohibición impuesta en 2002, por razones ambientales, de la utilización de sacos de polietileno para las compras, lo cual debería fortalecer la demanda de yute. En China, se prevé que el consumo de yute disminuirá en alrededor de un 13 por ciento anual, es decir a un ritmo más rápido que durante el último decenio, a causa de los aumentos de capacidad de producción de las fábricas de fibras sintéticas y la consiguiente intensificación de la competencia de los sacos sintéticos. También debería continuar disminuyendo el consumo en otros países del Lejano Oriente, como Tailandia, Viet Nam, el Nepal y el Pakistán, mientras que en el Cercano Oriente se prevé un crecimiento lento, impulsado principalmente por el aumento del consumo de hilados para fondos de alfombras en el Irán. Según las proyecciones, en África y América Latina el consumo seguirá una tendencia descendente debido a la competencia de los materiales sintéticos.

Comercio

Durante el período comprendido entre 1998-2000 y 2010, el comercio de fibras y productos de yute se contrajo en un 3,0 por ciento anual, siguiendo una tendencia descendente a largo plazo determinada inicialmente por la transferencia de la industria elaboradora desde los países desarrollados hacia los países en desarrollo, así como por unas tasas de disminución del consumo más rápidas en los países no productores que en los países productores. Como consecuencia, durante los años 1990 el comercio mundial absorbió una proporción menor de la producción mundial total.

A medio plazo, dado que el consumo continuará disminuyendo tanto en los países no productores como en los países productores, se prevé que el comercio de fibras y productos de yute se irá contrayendo lentamente pasando de 948 000 toneladas en 1998-2000 a 920 000 toneladas en 2010.

Según las proyecciones, las exportaciones de fibra se mantendrán en torno a las 250 000 toneladas. Ulteriores reducciones del comercio a medio plazo deberían verse limitadas por el crecimiento de la demanda de importaciones de China. Durante el período 1979-1994 China era un país exportador neto, y aunque las importaciones netas han sido irregulares durante los últimos años del decenio de 1990 (por ejemplo, 100 000 toneladas en 1998 y de 4 500 toneladas en 2000), se prevé que la producción se contraerá más rápidamente que el consumo, determinando un incremento de las importaciones a 41 000 toneladas para el año 2010. El surgimiento de China como importador neto en el mercado mundial debería de acrecentar la proporción del yute comercializado, de 36 por ciento de la producción mundial en 1998-2000 a 39 por ciento en 2010. Se prevé que la tasa de crecimiento de las importaciones de fibra en China compensará la rápida disminución del consumo y de la demanda de importaciones en Pakistán, un tradicional importador de fibras.

Como las industrias de elaboración han pasado ahora enteramente a los países en desarrollo, se prevé que las exportaciones de hilados disminuirán en consonancia con el mercado mundial. La intensa competencia del polipropileno deprimirá el comercio de arpillera, que con toda probabilidad disminuirá a un ritmo más rápido que el comercio total. Es probable que los principales productos de yute exportados sean los sacos y los fondos de alfombras.

Según se prevé, Bangladesh seguirá siendo el país exportador neto más importante, con más del 75 por ciento del comercio mundial de fibras y productos de yute. Sin embargo, las proyecciones indican que las exportaciones se contraerán en consonancia con la evolución del mercado mundial en una tasa anual de 0,62 por ciento, de 742 000 toneladas en 1998-2000 a 703 000 toneladas en 2010. Las exportaciones netas de la India, el segundo país exportador neto más importante, se mantendrían estables en aproximadamente 185 000 toneladas.

Problemas e incógnitas

En general, se prevé que el mercado mundial de yute continuará contrayéndose a medio plazo, aunque a un ritmo más lento que en el último decenio. La mayor capacidad de la industria de fibras sintéticas, especialmente en Asia oriental, debería aumentar la competitividad del polipropileno frente a las fibras de yute, y socavar ulteriormente la demanda de los principales productos del yute, como las telas para sacos y los fondos de alfombras, ejerciendo una presión a la baja sobre los precios del yute. Según las previsiones, los productores reaccionarán a la baja de los precios del yute reduciendo la superficie dedicada a las plantaciones de yute y disminuyendo la producción.

Cuadro 2.72. Yute: superficie sembrada y producción de fibra, efectivas y previstas

SUPERFICIE

EFECTIVA

PREVISTA

TASAS DE CRECIMIENTO

Promedio
1988-1990

Promedio
1998-2000

2010

1988-90 a 1998-2000

1998-2000 a 2010

miles de hectáreas

porcentaje annual

MUNDO

2 066

1 607

1 155

-2,8

-3,0

EN DESARROLLO

2 066

1 601

1 155

-2,8

-3,0

ÁFRICA

8

8

6

-0,1

-2,2

AMÉRICA LATINA

56

23

12

-6,3

-3,9

CERCANO ORIENTE

3



-28,3

-9,1

LEJANO ORIENTE

2 000

1 570

1 137

-2,8

-3,0

Bangladesh

549

447

397

-2,0

-2,3

China

288

70

3

-17,2

-30,0

India

947

969

702

-0,1

-2,8

Nepal

14

13

16

0,1

0,6

Tailandia

139

22

10

-20,2

-6,7

Viet Nam

15

10

9

-4,1

-0,7


PRODUCCIÓN

EFECTIVA

PREVISTA

TASAS DE CRECIMIENTO

Promedio
1988-1990

Promedio
1998-2000

2010

1988-90 a 1998-2000

1998-2000 a 2010

miles de toneladas

porcentaje annual

MUNDO

3 311

2 644

2 342

-1,9

-1,6

EN DESARROLLO

3 309

2 637

2 342

-1,9

-1,6

ÁFRICA

10

13

11

3,7

-1,2

AMÉRICA LATINA

58

26

18

-5,6

-3,2

CERCANO ORIENTE

8

4


-6,2

-6,3

LEJANO ORIENTE

3 233

2 595

2 255

-1,9

-1,6

Bangladesh

850

768

721

-0,9

-1,3

China

642

179

9

-14,8

-28,2

India

1 472

1 548

1 494

1,4

-0,8

Nepal

16

15

18

0,7

0,3

Tailandia

172

36

20

-17,7

-5,1

Viet Nam

32

12

12

-9,8

0,1

Cuadro 2.73. Yute: consumo aparente, efectivo y previsto


EFECTIVO

PREVISTA

TASAS DE CRECIMIENTO

Promedio
1988-1990

Promedio
1998-2000

2010

1988-90 a 1998-2000

1998-2000 a 2010

miles de toneladas

porcentaje annual

MUNDO

3 454

2 895

2 624

-1,5

-1,1

DESARROLLADOS

668

395

322

-5,2

-1,8

AMÉRICA DEL NORTE

116

80

52

-4,0

-4,1

Estados Unidos

108

72

46

-4,4

-4,3

EUROPA

266

189

152

-4,4

-1,9

UE-15

224

178

145

-3,6

-1,6

Bélgica

67

68

79

-1,7

1,0

Alemania

24

15

8

-6,3

-5,4

Reino Unido

53

32

21

-5,9

-3,4

OTROS PAÍSES DE






EUROPA

42

12

7

-12,2

-5,6

OCEANÍA

64

65

60

1,1

-1,1

Japón

64

29

30

-8,6

0,5

EN DESARROLLO

2 786

2 499

2 328

-0,8

-1,0

ÁFRICA

111

58

52

-8,6

-0,4

Côte d'Ivoire

8

12

16

-10,4

3,6

AMÉRICA LATINA

100

52

39

-5,3

-3,2

CERCANO ORIENTE

203

234

255

0,5

0,7

Egipto

34

22

19

-5,1

-1,7

Irán

40

63

73

3,2

1,4

Sudán

51

47

43

-3,2

0,3

LEJANO ORIENTE

2 372

2 155

1 917

-0,5

-1,1

Bangladesh

131

152

162

1,9

1,0

China

537

218

4

-10,9

-12,7

India

1 341

1 602

1 608

2,7

-0,5

Nepal

5

4

3

-9,2

-0,2

Pakistán

121

85

65

-2,5

-2,2

Tailandia

80

35

28

-12,1

-2,5

Viet Nam

34

9

3

-12,8

-11,9

Cuadro 2.74. India: exportaciones de productos de yute diversificados

CAMPAÑA

1997-98

1998-99

1999-2000

2000-01

2001-02

Tasa de variación entre 1997-98 y 2001-02


mllones de dólares EE.UU.

porcentaje annual

Productos tradicionales

156,69

106,15

94,77

107,65

89,38

-14

de los cuales







Arpillera

75,89

46,81

44,00

44,85

39,33

-16

Sacos

10,47

4,80

2,12

1,97

1,54

-48

Fondos de alfombras

10,50

11,01

4,72

3,05

2,07

-41

Hilados

59,83

43,53

43,93

57,77

46,44

-6

Embalaje para alimentos

-

-

1,92

5,49

3,77

-

Productos diversificados del yute

17,54

23,81

23,52

29,94

29,73

13

de los cuales







Geotextiles de yute

0,98

0,94

1,43

1,30

1,28

7

Revestimientos de suelos

8,92

12,73

11,16

14,22

16,08

15

Sacos de mano y de compras

4,16

4,48

6,56

10,16

8,39

18

Tapices

1,00

1,31

1,69

1,21

1,34

7

Artículos de regalo

0,90

2,04

1,80

2,23

1,94

19

Tejidos ornamentales

1,46

1,16

0,64

0,72

0,53

-25

Otros

0,11

1,14

0,24

0,09

0,16

10

Total

174,23

129,96

120,20

143,07

122,88

-9

Cuadro 2.75. Yute: importaciones netas, efectivas y previstas


EFECTIVA

PREVISTA

TASAS DE CRECIMIENTO

Promedio
1988-1990

Promedio
1998-2000

2010

1988-90 a 1998-2000

1998-2000 a 2010

miles de toneladas

porcentaje annual

MUNDO

1 285

948

919

-3,0

-0,4

DESARROLLADOS

678

389

361

-5,4

-1,9

AMÉRICA DEL NORTE

116

74

49

-4,6

-4,2

Estados Unidos

107

66

42

-5,1

-4,4

Europa

277

190

153

-4,6

-1,9

UE-15

230

178

146

-3,7

-1,6

Bélgica

65

68

79

-1,5

1,0

Alemania

28

15

8

-6,8

-5,4

Reino Unido

60

32

21

-6,4

-3,4

OTROS PAÍSES DE EUROPA

48

13

7

-12,1

-5,6

OCEANÍA

64

65

61

1,1

-1,1

Japón

64

29

30

-8,6

0,5

EN DESARROLLO

521

450

457

-2,2

0,1

ÁFRICA

100

45

42

-10,6

-0,1

Côte d'Ivoire

8

12

16

2,4

3,6

AMÉRICA LATINA

43

26

28

-5,3

-1,9

CERCANO ORIENTE

193

231

255

1,0

0,7

Egipto

29

21

19

-4,2

-1,7

Irán

40

63

73

2,8

1,4

Sudán

48

44

43

-3,4

0,3

LEJANO ORIENTE

185

149

104

-2,1

-0,4

China

n/a

38

41

n/a

3,6

Pakistán

117

77

65

-4,8

-2,2

Cuadro 2.76. Yute: exportaciones netas, efectivas y previstas


EFECTIVA

PREVISTA

TASAS DE CRECIMIENTO

Promedio
1988-1990

Promedio
1998-2000

2010

1988-90 a 1998-2000

1998-2000 a 2010

miles de toneladas

porcentaje annual

MUNDO

1 285

948

919

-3,0

-0,4

EN DESARROLLO

1 285

948

919

-3,0

-0,4

AMÉRICA LATINA

2

-

-

n/a

n/a

LEJANO ORENTE

1 283

948

919

-3,0

-0,4

Bangladesh

821

742

703

-1,0

-0,6

China

105

-

-

n/a

n/a

India

227

184

185

-2,2

0,3

Myanmar

-

7

5

n/a

n/a

Nepal

20

11

14

-5,7

0,5

Tailandia

109

14

8

-20,7

-5,0


Página precedente Inicìo de página Página siguiente