Tras las primeras lluvias tempranas importantes recibidas en junio, que permitieron la siembra temprana de los cereales secundarios, en julio predominó un tiempo seco. A principios de agosto se reanudaron las precipitaciones en forma limitada y desigual en las regiones meridionales y sudorientales, en las que se pudo resembrar, pero en general las condiciones atmosféricas fueron anormalmente secas. Las regiones sudoccidentales (Gorgol Norte, Brakna y Traza) y la región central de Tagant no han recibido precipitaciones significativas. Como consecuencia, para mediados de agosto se había perdido en gran parte del país la mayor parte de la siembra de los cultivos “dieri” (de secano). La producción dieri representa alrededor de una tercera parte de la producción total de cereales en un año normal. El 1 de septiembre el gobierno declaró un estado de desastre nacional y formuló un llamamiento por 51 000 toneladas de ayuda alimentaria de urgencia para prestar ayuda a más de 820 000 personas afectadas.
Las rachas secas y la mala distribución de las precipitaciones en el período vegetativo de 2001 determinaron una grave disminución de la producción de cereales. Las estimaciones definitivas de la producción formulada por los Servicios Nacionales de Estadísticas se sitúan en torno a las 122 177 toneladas, un 32 por ciento menos que el año anterior y un 27 por ciento menos que el nivel medio de producción. Los precios de los cereales han aumentado considerablemente en la mayoría de los mercados. En marzo de 2002, el PMA acometió una operación de urgencia por un valor de 7,5 millones de dólares EE.UU. (16 230 toneladas de alimentos) para prestar asistencia a 250 000 personas gravemente amenazadas por la escasez de alimentos. Para finales de septiembre, debido a una respuesta limitada de los donantes, se había cubierto sólo el 46 por ciento de las necesidades de alimentos de urgencia del PMA. Además de la asistencia de urgencia del PMA, se recibieron contribuciones bilaterales de Francia (600 toneladas de trigo por conducto de la Cruz Roja francesa), e Italia (aproximadamente 920 toneladas de arroz). Una reserva de seguridad alimentaria financiada por la UE, de 6 000 toneladas de trigo, debería de llegar en octubre. Además, el gobierno de Mauritania distribuyó 10 000 toneladas de trigo de sus propios recursos.