Las lluvias copiosas recibidas en las partes meridionales y centrales en la tercera década de octubre y la primera semana de noviembre beneficiaron la siembra de los cultivos de cereales de 2003, principalmente maíz. Pero se necesitan más lluvias en las partes nordorientales en las que reina un tiempo seco no estacional. Para sostener la producción de maíz de la presente campaña, tras dos malas cosechas consecutivas, el gobierno ha ejecutado un programa destinado a distribuir 48 000 toneladas de fertilizantes a precios subvencionados a 120 000 pequeños agricultores.
La cosecha del maíz de invierno, provisionalmente estimada en 15 000 toneladas, está aliviando temporalmente la difícil situación en el suministro de alimentos tras la menguada producción de maíz de la campaña principal de 2002 y el retraso de las importaciones comerciales y de las distribuciones de ayuda alimentaria. Frente a las necesidades de importación de maíz en la campaña comercial 2002/03 (mayo/abril) estimadas en 575 000 toneladas, las importaciones comerciales previstas por los molineros privados ascienden a 150 000 toneladas, y el gobierno ofreció en subasta a los comerciantes privados otras 300 000 toneladas subvencionadas. Sin embargo, las importaciones recibidas en el país son mucho menores ya que hasta principios de noviembre ascendían a alrededor de 50 000 toneladas, en su mayor parte comercio extraoficial procedente de Mozambique y Tanzanía. Los precios del maíz, que habían subido moderadamente después de junio, se mantuvieron estables durante octubre. La situación podría, sin embargo, empeorar rápidamente ya que se prevé que las reservas de los molineros deberían de alcanzar sólo hasta principios del año próximo.
El número de las personas que necesitan asistencia de socorro se estima en 2,9 millones, o sea una cuarta parte de la población. La situación alimentaria es particularmente grave para los grupos vulnerables de las zonas alejadas que han agotado sus reservas de alimentos. Las necesidades mensuales de ayuda alimentaria del PMA son de 21 000 toneladas, pero en octubre alcanzó solamente para la mitad de la población destinataria. Es probable que se retrasen ulteriormente las distribuciones de alimentos debido a la decisión adoptada por el gobierno a finales de octubre de rechazar los suministros de ayuda alimentaria producidos con organismos modificados genéticamente (OMG). El PMA está utilizando las últimas contribuciones en dinero para comprar en la región productos no modificados genéticamente, y está retirando alrededor de 15 000 toneladas ya en el país para reasignarlas a otros países de la subregión que los aceptan. Urge la necesidad de encontrar otras fuentes de alimentos.