FAO/SMIA - Cosechas y escaseces alimentarias  - 03/03 - ZAMBIA (28 de febrero)

ZAMBIA (28 de febrero)

Las copiosas lluvias caídas en febrero en la provincia del Sur y en algunas partes de las provincias del Oeste y de Lusaka, que anteriormente habían recibido precipitaciones irregulares e inferiores a la media, redundaron en un notable mejoramiento de los cultivos que se encuentran en diferentes fases de desarrollo. Aunque los cultivos sembrados en noviembre con las primeras lluvias se perdieron a causa del tiempo seco, la mayor parte de los agricultores resembró en diciembre y enero. A causa de las precipitaciones muy irregulares recibidas en la presente campaña y de la diversidad de los períodos de siembra, al final de febrero los cultivos oscilaban entre la fase vegetativa y la del llenado de los granos. Si siguiera lloviendo bien hasta finales de marzo todavía se podría obtener en la provincia del Sur una producción en general satisfactoria, muy superior a la de la mala cosecha del año pasado. Habría que intensificar la vigilancia de la pluviosidad y de la situación de los cultivos hasta el final de la estación de las lluvias, particularmente en las zonas en las que los cultivos se vieron más afectados por el tiempo seco y se corre el riesgo de que los cultivos no hayan alcanzado la maduración para principios de abril cuando las lluvias suelen interrumpirse.

En otras partes, incluidas las principales zonas productoras del norte, la situación de los cereales es buena y las perspectivas generales para la producción de 2003 son favorables. Tras un retraso de la estación de las lluvias, en diciembre se recibieron precipitaciones buenas y generalizadas que proporcionaron suficiente humedad del suelo para la siembra y la resiembra. Las lluvias copiosas caídas en febrero provocaron inundaciones localizadas en las provincias del Este y del Centro pero en general beneficiaron a los cultivos que se encontraban en la fase del llenado de los granos. En general, las precipitaciones acumulativas caídas desde el comienzo de la campaña han sido entre normales y superiores a lo normal en la mayoría de las provincias.

La situación alimentaria se ha aliviado gracias a que desde diciembre ha mejorado la distribución de la ayuda alimentaria. En enero, se distribuyeron alrededor de 23 000 toneladas de cereales y se prevé que en febrero y marzo se distribuirán cantidades semejantes. En conjunto, se prevé que frente a las necesidades de 224 000 toneladas de ayuda alimentaria se habrán entregado para finales de abril alrededor de 130 000 toneladas de cereales. El déficit se debe a los retrasos en las distribuciones debidos a la decisión del gobierno de no aceptar como ayuda alimentaria el maíz modificado genéticamente (OMG). Las importaciones comerciales oficiales han disminuido ya que la mayor parte del déficit de alimentos del país se ha colmado con cuantiosas importaciones transfronterizas procedentes de Tanzanía y Mozambique. Los precios del maíz, que habían subido a partir de noviembre, han comenzado a bajar en previsión de una buena cosecha. Los comerciantes y molineros prevén una reducción considerable de los precios en la nueva campaña comercial.