FAO/SMIA - Cosechas y escaseces alimentarias  - 06/03 - SWAZILANDIA (30 de mayo)

SWAZILANDIA (30 de mayo)

Una misión conjunta de evaluación de los cultivos y el suministro de alimentos del PMA y la FAO visitó el país desde el 1 hasta el 10 de mayo de 2003, y estimó la producción de la cosecha principal de maíz en alrededor de 73 000 toneladas, un 6 por ciento más que el año pasado pero un 30 por ciento menos que la media de los últimos cinco años. Ello se debe a un incremento del 19 por ciento de la superficie sembrada con respecto al año pasado, en atención principalmente al alza de los precios y a una disminución de los rendimientos. Los rendimientos se vieron perjudicados por el comienzo tardío de la estación de las lluvias y la acusada disminución de las precipitaciones en enero, a lo que se sumó una ola de calor registrada a mediados del mes. Esto coincidió con la fase crítica de la floración de los cultivos tardíos del maíz sembrado en Lowveld, Lubombo Plateau y el Middleveld seco, donde la producción es escasa. En general, el suministro interno de cereales en 2003/04 se estima en 78 100 toneladas, mientras que la necesidad total del consumo nacional se estima en 205 800 toneladas, lo que se traduce en una necesidad de importaciones de 127 700 toneladas. Las importaciones comerciales se pronostican en 103 400 toneladas y la ayuda alimentaria en 24 300 toneladas, que se cubrirán con las existencias actuales del gobierno y del PMA y con las existencias en circulación. Los precios de los cereales han bajado debido a una producción interna relativamente mejor y a una buena cosecha de maíz obtenida en Sudáfrica. Aunque con una producción interna de cereales mejor, si bien inferior a la media, y una capacidad mejorada de importación de cereales inducen a pensar que no habrá escasez de cereales en el plano nacional, el acceso económico a los alimentos sigue siendo muy difícil para algunos sectores de la población. Swazilandia está atravesando una grave crisis socioeconómica debida a la pandemia del VIH/SIDA que está exasperando los efectos ya graves del alto índice de desempleo, la desigualdad de los ingresos y la pobreza. La misión estima que necesitan ayuda alimentaria inmediatamente 132 250 personas, que en el segundo semestre (julio-diciembre) aumentarán a 157 750, y nuevamente a 217 000 durante el período de carestía (enero-marzo). El volumen total de la ayuda alimentaria necesaria será del orden de las 24 300 toneladas, cubiertas totalmente por las existencias actuales del gobierno y del PMA y por las existencias en circulación.