Los Servicios Ambientales y el Fondo Forestal Mexicano

0922-C2

Lic. José Manuel Bulás Montoro[1]


Resumen

Actualmente el valor de los servicios ambientales que provienen de los bosques, incluyendo la captura de carbono, la protección hidrológica, la conservación de la biodiversidad, entre otros, está ganando terrero en la atención de la sociedad a nivel nacional e internacional.

En este sentido México, a través de la Comisión Nacional Forestal, planteó, dentro del Programa Nacional Forestal y en su Plan Estratégico Forestal de largo plazo, la creación y el diseño de un Fondo Nacional Forestal, de carácter privado, el cual promoverá el uso sustentable, conservación y restauración de los recursos forestales, eliminando los obstáculos y facilitando el acceso a los servicios financieros en el mercado, mediante el impulso a proyectos innovadores en toda la cadena productiva hasta el consumidor final y desarrollar los mecanismos de cobro y pago de servicios ambientales. Por primera vez en la historia de México, se diseña y se pone en marcha un mecanismo permanente a nivel nacional, donde se brindará el espacio legal y financiero para el cobro y pago de servicios ambientales en forma ordenada y transparente, a fin de garantizar el monitoreo, la entrega puntual del servicio ambiental que se está pagando y facilitar los pagos a los dueños de las propiedades forestales.

Dicho Fondo estará financiado por todas aquellas aportaciones públicas, privadas, créditos, subsidios, pagos, regalías y derechos tanto nacionales como internacionales, que servirán como capital detonador de proyectos de servicios ambientales, como los casos en Veracruz, Oaxaca o Chiapas. Además, dicho Fondo buscará incentivar la participación activa de la sociedad, para compensar los trabajos de conservación y restauración de bosques que provean de servicios ambientales.

Por tal motivo y dada la enorme importancia económica, ambiental y social que proveen los servicios ambientales forestales, será fundamental el vincularlos a un mercado financiero específico; de no hacerlo así, estaremos condenando a las zonas boscosas a ser sólo áreas protegidas.


Introducción

México define los servicios ambientales en Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable en su artículo 7° como los satisfactores que brindan los ecosistemas forestales de manera natural o por medio del manejo sustentable de los recursos forestales, tales como: la provisión del agua en calidad y cantidad; la captura de carbono, de contaminantes y componentes naturales; la generación de oxígeno; el amortiguamiento del impacto de los fenómenos naturales; la modulación o regulación climática; la protección de la biodiversidad, de los ecosistemas y formas de vida; la protección y recuperación de suelos; el paisaje y la recreación, entre otros.

En este tenor el Programa Estratégico Forestal para México (PEF) 2025 describe ampliamente la participación activa de los servicios ambientales como parte del desarrollo forestal de México, país que cuenta con fortalezas para el desarrollo de un mercado de servicios ambientales, fortalezas que en algunos casos no se han aprovechado al máximo, tales como: la superficie forestal del país, misma que permitiría un volumen interesante de captura de carbono; la diversidad genética de México por mencionar algunos.

No obstante estas ventajas, el mercado para los servicios ambientales es incipiente e imperfecto, en donde la cuantificación de los beneficios generados se dificulta al no existir un precio existente que refleje el costo de su mantenimiento, así como el desconocimiento de sus características o de información entre los oferentes y demandantes dentro de un sistema financiero formal.

La prestación de los servicios ambientales está vinculada con los problemas de la organización del manejo forestal. Para muchos servicios ambientales potenciales, los costos de transacción pueden ser prohibitivos si no se trata de unidades de gran escala y donde la fragmentación en parcelas pequeñas de las áreas forestales puede acentuar el problema.[2]

Otro problema tiene que ver con la tenencia y el productor de los servicios ambientales. Se considera a éstos como una externalidad, no como un producto generado por los propietarios de los recursos forestales, lo que dificulta el cobro directo por su utilización. Falta crear el marco legal y los mecanismos de cobro por su aprovechamiento, que es una condición para el establecimiento del mercado.[3]

Bajo esta problemática descrita en el diagnóstico realizado en el PEF 2025, se proponen varias estrategias, que permitirán dotar de recursos de manera integral al sector forestal, tales como la creación de un Fondo de Manejo Forestal Sustentable, que funja como un instrumento de captación y distribución de recursos, que además detone en nuestro país el mercado de servicios ambientales. Dentro de esta concepción y en cumplimiento del PEF 2025, la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) inicia el diseño de ya mencionado Fondo de Manejo Forestal Sustentable.

El Fondo Forestal Mexicano

Dicho Fondo de Manejo Forestal Sustentable fue denominando Fondo Forestal Mexicano (FFM), cuya misión es y según se expresa en el artículo 142 de la recientemente aprobada Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable:

“El Fondo Forestal Mexicano será el instrumento para promover la conservación, incremento, aprovechamiento sustentable y restauración de los recursos forestales y sus recursos asociados facilitando el acceso a los servicios financieros en el mercado, impulsando proyectos que contribuyan a la integración y competitividad de la cadena productiva y desarrollando los mecanismos de cobro y pago de bienes y servicios ambientales.”

Es en este sentido, que el Fondo Forestal Mexicano se constituye un instrumento económico de carácter privado para el fomento de la actividad forestal, dirigido específicamente al fortalecimiento de las cadenas productivas y la instrumentación de mecanismos de cobro y pago de los servicios ambientales que la actividad forestal lleva aparejada. Estos pilares constituyen las líneas de trabajo del Fondo.

Es de conocimiento común que la dinámica en el aprovechamiento de los bosques y selvas de México, se ha orientado fundamentalmente a satisfacer la demanda de productos maderables, sin considerar la importancia que representan los servicios ambientales que éstos generan, este último punto constituye uno de los retos del Fondo, ya que este se convertirá en el mecanismo de cobro y pago que active este mercado incipiente en nuestro país, ya que la permanencia de estos servicios representa un valor muy importante para la sociedad, por lo que FFM tendrá como una primera meta a lograr el poder cuantificar el valor de estos servicios proveídos por el bosque y generar el cobro y pago de los mismos, esta misma valorización permitirá la diversificación de ingresos en el largo plazo de las comunidades forestales que mitigue la pobreza y reduzcan la presión ejercida sobre los recursos forestales y con ello incrementar la participación del sector forestal en la economía local y nacional.[4]

Cabe mencionar, que esta es la primera vez en la historia de México que se diseña y se pone en marcha un mecanismo permanente a nivel nacional que brinde el espacio financiero y legal para el cobro y pago de servicios ambientales de manera ordenada y transparente, que garantice y facilite el monitoreo y la entrega puntual del servicio ambiental en donde concurran aportaciones públicas, privadas, créditos, subsidios, pagos, regalías, derechos y otros recursos en numerario o en especie nacionales e internacionales que funjan como capital detonador de proyectos concretos de servicios ambientales.

El Fondo Forestal Mexicano entiende como mecanismo de cobro y pago de servicios ambientales como la construcción de un instrumento o instrumentos, mediante los cuales se retribuya a los propietarios o poseedores de los recursos forestales, los beneficios por los servicios ambientales que brinden dichos recursos (pago de servicios ambientales); o mediante los cuales se establezca una carga, cuota o gravamen a los terceros que se beneficien directa o indirectamente de los servicios ambientales que brinden los ecosistemas forestales (cobro de servicios ambientales). Es decir, lograr una ecuación ambiental - financiera - técnica - legal - política - fiscal - cultural - operativa que conserve para siempre las áreas estratégicas que benefician a todos.

Para la realización de cobro y pago de servicios ambientales es necesario cruzar la oferta con la demanda, encontrándose con mayor viabilidad para ello el cobro y pago por producción de agua en cuencas específicas; y captura de carbono dentro de los criterios del Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL), no obstante es importante reconocer que el mercado de servicios ambientales depende también de:

Las características del área natural.
Las condiciones socioeconómicas del entorno.
La ubicación del mercado.
La cultura forestal.
El régimen de tenencia de la tierra.
El régimen actual de uso de los recursos.
La oferta y la demanda.

No olvidando con ello, aquellos requisitos que permitan dar la viabilidad al mercado de servicios ambientales, como lo son:

Un espacio donde los demandantes y los oferentes coincidan.
Una inversión inicial.

Un contrato claro que brinde certeza jurídica, certifique las mediciones, y establezca los acuerdo en plazos, montos y formas de pago y que al mismo tiempo respete la forma de organización de comunidades y ejidos

Respaldo técnico y científico certificado y reconocido para cuantificar la dimensión del servicio ambiental y que a su vez permita monitorear su calidad y medir los costos de transferencia de los mismos.

Otro de los objetivos del Fondo es servir como intermediario entre los productores y beneficiarios de los servicios ambientales producidos por los dueños y poseedores de bosques y selvas en México. Estos servicios pueden ser producción de agua, captación de dióxido de carbono, conservación de biodiversidad, servicios de recreación, entre otro, donde la participación de los productores puede ser voluntaria, donde la contraparte de estos proyectos serán los gobiernos municipales, estatales o consejos de cuenca, sectores privado y social.

Diversos servicios ambientales pueden ofrecerse en paquete y éste tendrá un valor de acuerdo a las condiciones locales. Las experiencias que se vayan obteniendo pueden aportar indicadores para perfeccionar y extender el modelo.[5]

El Fondo Forestal Mexicano como intermediario financiero en un mercado de cobro y pago de servicios ambientales tendrá como principales acciones específicas:

El Fondo Forestal Mexicano como todo instrumento, tendrá para su manejo varias cuentas, que en el caso de cobro y pago de servicios se aplicarán:

Serán objeto de apoyo con los recursos económicos que constituyen el patrimonio del Fondo, los proyectos de servicios ambientales que satisfagan, preferentemente, los siguientes criterios cualitativos y prioridades:

Para el caso de proyectos de cobro y pago de servicios ambientales, el FFM contará con un Comité Técnico, mismo que aprobará los montos mínimos y máximos, según las características, tipos y condiciones de los mismos.

No obstante de la labor que realice el Fondo Forestal Mexicano en el facilitamiento del cobro y pago de los servicios ambientales, es importante reconocer que es necesaria la realización de ciertas acciones que se consideran prioritarias por parte del gobierno para el asegurar el desarrollo y sostenibilidad del mercado, tales como:

Establecer una normatividad que permita el desarrollo y consolidación del mercado de servicios ambientales.

Desarrollar un programa para integrar información básica para sustentar el mercado potencial de servicios ambientales.

Formular proyectos de investigación que permitan determinar las técnicas y procedimientos para la medición de la captura de carbono en el suelo y la vegetación, así como la producción del agua en cuencas determinadas

México ya cuenta con algunas experiencias exitosas en cobro y pago de servicios ambientales, mismas que están comenzando a tener un efecto multiplicador, tales como Coatepec, en el Estado de Veracruz, en donde el objetivo es promover las acciones relativas al incremento en la cantidad del agua, retención de la misma así como su infiltración y evitar la erosión en las cinco cuencas hidrológicas del municipio de Coatepec, Veracruz, mediante el pago de servicios ambientales en lo referente a la producción sustentable de servicios hidrológicos. Este proyecto, incluye la participación de la sociedad civil, el gobierno municipal, la comisión municipal de agua potable y el gobierno federal a través de la CONAFOR.

El proyecto de cobro y pago por servicios ambientales en Coatepec, Veracruz, tiene una característica singular respecto de la participación de los actores involucrados, como es la sociedad civil, quien por voluntad propia decidió realizar un pago adicional equivalentes a $0.20 de dólar americano en su recibo de toma de agua, mismo que será destinado al pago de los servicios ambientales de los propietarios de predios forestales en la zona alta de la cuenca que abastece de agua al municipio, teniendo así un impacto directo a la misma sociedad que realiza el pago.

A esta iniciativa se suma la participación del gobierno en los niveles municipal, federal y de la Comisión Municipal de Agua Potable, con la aportación de recursos que permitan el pago de servicios ambientales por las actividades de conservación, protección y restauración de los recursos forestales, totalizando una bolsa de 100 mil dólares americanos para la consecución del proyecto, y cuyos primeros pagos a los dueños de terrenos forestales comenzaron a realizarse el pasado 11 de Diciembre.

Referente a la captura de carbono, México ha comenzado a despertar con algunos proyectos de relevancia a nivel nacional e internacional como es el Proyecto Piloto para el Manejo Sustentable del Suelo y Captura de Carbono Scolel Té en Chiapas, cuyo objetivo es la captura de carbono en el largo plazo a costos económicamente viables que contribuyan al desarrollo de las comunidades forestales, incluyendo mecanismos internos y externos de monitoreo y verificación. El proyecto se fondea a través de compañías, individuos u organizaciones que compran reducción de emisiones voluntarias de carbono a través de un depósito vía el Fondo Bio Climático.

Como un aporte más a los servicios ambientales, la Comisión Nacional Forestal, destinará por concepto del uso y explotación de las aguas nacionales la cantidad equivalente a 20 millones de dólares americanos para el desarrollo y operación de programas de servicios ambientales en México para el 2003, mismos que quedaron plasmados en la Ley Federal de Derechos en su artículo 223, inciso A. Este es un aporte histórico en materia de servicios ambientales en nuestro país, ya que por primera vez se reconoce la importancia de los recursos forestales como proveedores de servicios ambientales y se destina un recurso económico para su conservación, mantenimiento e incremento como una primera iniciativa que se realiza en la materia y que busca experiencias replicables en este mismo sentido.

Conclusión

Finalmente es importante considerar que los servicios ambientales deben ser parte de una estrategia mayor ya que por sí mismos no son la solución a los problemas de deforestación. El reto para el FFM es doble: demostrar que se cuenta con una oferta que permita vincular los servicios ambientales a un sistema financiero formal, y crear conciencia de la necesidad de pagar por ellos por los beneficios sociales y ambientales que se obtienen, de lo contrario estaremos condenando a las zonas boscosas de México.

Referencias

SEMARNAT/CONAFOR (2001). Programa Estratégico Forestal para México 2025, Guadalajara, 189 p.


[1] Jefe de la Unidad de Cooperación y Financiamiento de la Comisión Nacional Forestal. Carretera a Nogales esq. Periférico Poniente S/N 4to. Piso, Col. San Juan de Ocotán, C.P. 45190, Zapopan, Jalisco, México. Tel +52 (33) 3777-7047. Fax +52 (33) 3110-0820. E-mail: [email protected]
[2] Comisión Nacional Forestal. 2001 Programa Estratégico Forestal para México 2025. Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos, México, p. 31
[3] Comisión Nacional Forestal. 2001 Programa Estratégico Forestal para México 2025. Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos, México, p. 31
[4] Comisión Nacional Forestal. 2001 Programa Estratégico Forestal para México 2025. Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos, México, p. 43
[5] Comisión Nacional Forestal. 2001 Programa Estratégico Forestal para México 2025. Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos, México, p. 111