COMITÉ DE PROBLEMAS DE PRODUCTOS BÁSICOS

62º período de sesiones

Roma, 12-15 de enero de 1999

SITUACIÓN Y PERSPECTIVAS MUNDIALES DE LOS PRODUCTOS BÁSICOS Y TENDENCIAS DEL PROTECCIONISMO EN LA AGRICULTURA

Indice

I. INFLUJO DE LAS CONDICIONES ECONÓMICAS MUNDIALES EN LOS MERCADOS DE PRODUCTOS BÁSICOS

II. RESUMEN DE LA SITUACIÓN EN LOS MERCADOS DE PRODUCTOS BÁSICOS

III. MEDIDAS ADOPTADAS EN CUMPLIMIENTO DE LA RESOLUCIÓN 2/79

IV. CONCLUSIONES


I. INFLUJO DE LAS CONDICIONES ECONÓMICAS MUNDIALES EN LOS MERCADOS DE PRODUCTOS BÁSICOS

1. Desde que se celebró el último período de sesiones del Comité de Problemas de Productos Básicos (CPPB), la situación mundial de los productos básicos ha cambiado considerablemente debido a cambios en las bases del mercado, un clima inusual y el deterioro en el entorno económico mundial. En el presente documento se examinan las últimas novedades registradas en los mercados mundiales y en la economía mundial y se evalúan las perspectivas a corto plazo del mercado de productos básicos. Además, se examinan las medidas adoptadas en cumplimiento de la Resolución 2/791 de la Conferencia y otras novedades en los mercados internacionales de productos básicos. Se ofrecerá información más detallada sobre los productos básicos en un informe de actualización que se facilitará más adelante.

2. En el 61º período de sesiones del CPPB se preveía un descenso gradual de los precios de los productos básicos agrícolas, especialmente de los cereales, puesto que se esperaba que los agricultores de las principales regiones exportadoras y consumidoras ampliarían la superficie de siembra respondiendo a los altos precios del momento. El descenso previsto de los precios de los cereales comenzó a finales de 1996 y continuó en 1997 y 1998, cuando las condiciones favorables de cultivo provocaron un aumento de la producción, a la vez que el empeoramiento de las condiciones económicas provocó una disminución de la demanda mundial de importación. Los precios de la mayor parte de los productos básicos agrícolas restantes, aunque no de todos, bajaron en 1998 a causa de varios factores económicos y de otros tipos (Cuadro 1 del Anexo).

3. Estos cambios en los precios de los productos básicos se deben a diversos factores, tanto generales como específicos para cada uno de los productos. En primer lugar, la crisis financiera y la consiguiente desaceleración del crecimiento de los ingresos, especialmente en Asia y la CEI, pero que afectó a todo el mundo, ha provocado una disminución en la demanda mundial de importación de muchos productos básicos en 1998, que hizo bajar los precios, especialmente los de la carne, los cereales secundarios, el azúcar, las bebidas tropicales y la mayor parte de materias primas agrícolas. La previsión del crecimiento económico mundial es del 2,0 por ciento para 1998 y del 2,5 por ciento para 1999, en comparación con el 4,1 por ciento de 1997. La previsión para 1998 es inferior en más de 2 puntos porcentuales a la que se hizo hace un año2. En segundo lugar, la devaluación de algunas monedas como consecuencia de la crisis financiera, unida al fuerte descenso de los precios del transporte, redujo los precios de algunos productos básicos procedentes de los países afectados, tales como aceites vegetales y productos tropicales. En tercer lugar, el aumento en la disponibilidad de productos alimenticios de climas templados y de algunos productos tropicales como el café o el té, debido al tiempo favorable registrado en muchos países, contribuyó todavía más a bajar los precios.

4. Por otro lado, una disminución de la producción de algunos productos básicos, en especial el arroz, debido a los efectos de El Niño en varios países, ejerció una presión a la alza de los precios. La desaparición del temor de los consumidores a contaminaciones como la encefalopatía espongiforme bovina en la carne, ha contrarrestado en parte la presión a la baja de los precios de la carne, pero otros factores los han mantenido bajos.

5. El deterioro de los precios de mercado de la mayoría de los principales productos básicos es debido a varios factores, pero sería muy difícil cuantificar dichos efectos por separado, puesto que los factores económicos resultantes de la crisis han sido superados por otros elementos, tales como las sequías e inundaciones.

6. Aunque no se dispone todavía de los datos sobre los beneficios totales obtenidos de las exportaciones agrícolas en 1998, cabe prever que se hayan reducido debido a la bajada de los precios y a que los volúmenes del comercio en general no han aumentado o han disminuido. En el caso de los cereales, sobre los que hay algunos datos disponibles, se prevé que los beneficios de exportación en 1998/99 disminuirán, quizás hasta un 20 por ciento con respecto al año anterior, registrándose la mayor parte de la reducción en el trigo y los cereales secundarios. Del mismo modo, las facturas de importación de alimentos de los países de bajos ingresos y con déficit de alimentos probablemente también disminuirán hasta un 20 por ciento, lo que se deberá tanto al descenso de los precios y del volumen de comercio, como al aumento de los envíos de ayuda alimentaria en 1998/99. Un examen de los índices agregados de precios indica que la relación de intercambio agrícola para los países en desarrollo no cambió de manera significativa en 1998. Los índices de precios de sus exportaciones disminuyeron en la misma medida que los índices de precios de los productos exportados por los países desarrollados y, por lo tanto, de los productos importados por los países en desarrollo.

II. RESUMEN DE LA SITUACIÓN EN LOS MERCADOS DE PRODUCTOS BÁSICOS

7. La interacción de los factores económicos, meteorológicos y de otro tipo causó distintos efectos en los mercados de productos básicos agrícolas en 1997 y 1998, tal como se especifica a continuación. La abundancia de suministros de trigo y cereales secundarios procedentes de cosechas extraordinarias obtenidas en los principales países exportadores e importadores causó una presión a la baja de los precios internacionales durante dos temporadas debido a la falta de un aumento de la demanda que la contrarrestara. Los precios, especialmente los del trigo, han aumentado recientemente, ante la perspectiva de importaciones a gran escala de la Federación de Rusia, a pesar de sus dificultades financieras. En cambio, el pronunciado descenso de la producción de arroz causado por el mal tiempo en los principales países productores de Asia, junto con la continuación de una fuerte demanda de importación de países asiáticos donde este producto es el alimento básico, han provocado un aumento de los precios del arroz en la primera mitad de 1998. Alcanzaron el nivel máximo en julio de 1998 en que se satisficieron la mayor parte de las necesidades de importación y los suministros de la nueva cosecha empezaron a llegar al mercado. Los precios de la yuca disminuyeron a pesar de un descenso en la producción mundial debido a su substitución por cereales forrajeros, cuyos precios eran competitivos, en los piensos compuestos.

8. La escasez de suministros en el mercado del aceite vegetal, debido especialmente a una reducción de la disponibilidad del aceite de palma por causa de la sequía en los principales países productores asiáticos, causó un aumento en los precios, mientras los precios de las harinas oleaginosas resultaron afectados por una disminución de la demanda de piensos en las regiones afectadas por la crisis, agravada por la abundancia de suministros competitivos de cereales pienso. El mercado internacional de la carne estuvo determinado por diferentes factores según los tipos de carne, que a veces se neutralizaron y generaron tendencias divergentes en los precios. En efecto, aunque la desaparición del temor de consumir carnes de bovino, cerdo y aves de corral afectadas por la encefalopatía espongiforme bovina y la E-coli, la fiebre aftosa o la gripe de las aves respectivamente, causó un ligero aumento de la demanda en varios países, la disminución del poder adquisitivo en los países afectados por la crisis provocó el efecto contrario, a pesar de los importantes incentivos concedidos por los principales países exportadores. En resumen, el aumento de los suministros de la mayor parte de las carnes, apoyado por unos costes más bajos de producción de piensos y una débil demanda de importación, han mantenido bajo presión a la baja los precios de la carne.

9. Por lo que se refiere a otros cultivos, las expectativas de una producción récord de café y té y una recuperación de la producción de cacao, han provocado una disminución de los precios que se podría mantener, en primer lugar, a causa del descenso de la demanda de importación en la CEI y, después, por el efecto de la desaceleración económica más generalizado que podría reducir el crecimiento de la demanda en todas partes. En el caso del azúcar, el deterioro de las condiciones económicas que inicialmente redujo las importaciones en los principales mercados asiáticos también ha causado una importante disminución de las importaciones en la Federación de Rusia, que es el mayor mercado de importación. Es probable que la regresión económica mundial reduzca la demanda de importación, mientras que la oferta de exportación se mantendría alta y causaría una presión a la baja de los precios durante el resto de 1998 y principios de 1999.

10. En cuanto a los cítricos y el banano, los mercados de la CEI, y en particular el de la Federación de Rusia, se han reducido considerablemente. De todas formas, la tendencia general a la baja de los precios se ha invertido en el caso de los cítricos debido a las indicaciones que se tienen al comienzo de la temporada 1998/99 de que las cosechas serán menores en la zona del Mediterráneo, los Estados Unidos y el Brasil. Las importaciones de frutas de clima templado efectuadas por algunos de los principales mercados asiáticos han disminuido en favor de las frutas tropicales de producción propia. La difícil situación económica ha afectado seriamente a los mercados de varias materias primas, especialmente el algodón, el caucho, y los cueros y pieles, mientras que para fibras industriales como el yute o las fibras duras el impacto ha sido menor. Los precios del algodón están a su nivel más bajo de los últimos cuatro años debido a una demanda reducida en varios de los principales países consumidores, mientras que los mercados de caucho, cueros y pieles también han resultado seriamente afectados por la disminución de la demanda. Por otra parte, los bajos precios del yute son la consecuencia del importante aumento de la producción provocado por los elevados precios de 1996, mientras que el mercado del sisal se mantiene relativamente fuerte.

III. MEDIDAS ADOPTADAS EN CUMPLIMIENTO DE LA RESOLUCIÓN 2/79

11. En la Resolución 2/79, se solicita que el CPPB valore los efectos de los resultados de las Negociaciones Comerciales Multilaterales, analice las novedades en materia de proteccionismo y examine las posibilidades de promover el comercio entre los países en desarrollo. Otros de los temas tratados por la Resolución, se refieren al Fondo Común y al Programa Integrado para los Productos Básicos y acuerdos internacionales sobre productos básicos. El Comité en su 61° período de sesiones, examinó detalladamente la evaluación del impacto de la Ronda Uruguay y, durante este período de sesiones, estudiará el seguimiento a dicha evaluación en otro tema del programa. Las actividades relacionadas con el Fondo Común también se tratarán por separado durante el presente período de sesiones. Se examinan a continuación las novedades registradas en los otros sectores a que se refiere la Resolución.

12. El total de transferencias de los consumidores y contribuyentes a la agricultura inducidas por la política en la OCDE continuó disminuyendo en 1997 con respecto al de los comienzos de este decenio, descendiendo a 280 000 millones de dólares EE.UU., cifra prácticamente igual al promedio de 1986-88 (Cuadro 2 del Anexo). El total de transferencias continuó disminuyendo en porcentaje del PIB, bajando hasta un 1,3 por ciento en 1997, frente al 2,2 en el decenio anterior. No hay datos disponibles sobre 1998, pero es posible que el descenso de los precios de los productos básicos a nivel mundial haya interrumpido la disminución de la ayuda en algunos países.

13. En 1997 el Equivalente en Subvenciones al Productor (ESP) total fue de 145 000 millones de dólares EE.UU., en dólares nominales, es decir, el 10 por ciento menos que en 1996 y el 17 por ciento menos que en 19953. Expresado en porcentaje del valor de la producción en la explotación de estos productos básicos, el porcentaje ESP fue del 35 por ciento en 1997 y 1996, frente al 40 por ciento en 1995, siguiendo en su tendencia a la baja desde 1986-88. El Coeficiente Nominal de Ayuda (CNA) al productor, que expresa la proporción entre los precios nacionales (los precios en frontera más el ESP unitario) y los precios internacionales, bajó del 1,8 en 1986-88 al 1,5 en 1997.

14. El cambio progresivo en la estructura de los programas de ayuda agrícola, abandonando los apoyos a los precios de mercado en favor de los pagos directos, se refleja en la pronunciada reducción (tanto en valor absoluto como en términos porcentuales) del impuesto implícito sobre los consumidores debido a las políticas agrícolas, según indican las estimaciones del Equivalente en Subvenciones al Consumidor (ESC) . El ESC total bajó hasta -91 000 millones de dólares EE.UU. en 1997, es decir, un 5 por ciento menos que en 1996 y un 24 por ciento menos que en 1986-88. El ESC, en porcentaje del valor de la producción en la explotación, bajó al -24 por ciento en 1996 y 1997, frente al -37 por ciento en 1986-88. El CNA al consumidor, que indica la diferencia entre los precios nacionales y los precios mundiales debida a las políticas, disminuyó de 1,6 en 1986-88 a 1,3 en 1997.

15. Continúa habiendo grandes variaciones en los niveles de ayuda a la agricultura entre los países miembros de la OECD, ya que los porcentajes ESP varían entre el 3 por ciento de Nueva Zelandia y el 76 por ciento de Suiza. En tres de los principales exportadores de productos agrícolas, Canadá, Nueva Zelandia y los EE.UU., se ha registrado una reducción substancial de los ESP y ESC porcentuales y absolutos desde 1986-88 y, lo mismo que en Australia, los niveles de ayuda son considerablemente inferiores a la media de la OECD. Algunos países importadores de productos agrícolas, Islandia, Japón, Noruega y Suiza, han registrado pequeñas disminuciones en sus porcentajes ESP y reducciones ligeramente más importantes en sus porcentajes ESC desde 1986-88, lo que se debe al abandono del apoyo a los precios del mercado en favor de pagos directos, aunque sus niveles de ayuda se mantienen por encima de la media de la OECD. En la UE, el ESP total aumentó considerablemente en 1995 después de la adhesión de tres nuevos estados miembros pero el ESP porcentual prácticamente no varió, y tanto el ESP total como el porcentual bajaron en 1996 y 1997 a niveles ligeramente superiores a los promedios de la OECD.

16. En cuanto a los cultivos en los países de la OECD en 1996 el ESP porcentual continuó en su tendencia bajista a largo plazo bajando al 34 por ciento de un 45 por ciento, pero aumentó ligeramente en 1997 (al 37 por ciento) debido principalmente al descenso de los precios mundiales de los cereales. La mayor parte de la reducción a largo plazo de los ESP porcentuales para los cultivos ha correspondido a los de trigo, maíz y semillas oleaginosas, sin que prácticamente haya habido cambios desde 1986-88 en los del arroz y azúcar, los cuales continúan teniendo los ESP más altos con gran diferencia (el 80 y el 49 por ciento, respectivamente). El ESP porcentual medio para todos los productos pecuarios disminuyó ligeramente en 1997 (al 32 por ciento, frente al 34 por ciento 1996 y al 35 por ciento en 1986-88). La leche continúa teniendo el ESP más elevado de todos los productos pecuarios (el 52 por ciento) a pesar de haberse reducido significativamente desde 1986-88 en que fue del 61 por ciento.

17. Por lo que respecta a otros países desarrollados, en julio de 1998, el Gobierno de Rumania, aumentó los aranceles de importación aplicados al trigo y la harina de trigo a un 60 por ciento, con efectividad para un año. En junio de 1997, el Gobierno de Ucrania aplicó impuestos estacionales de importación sobre los productos agrícolas y, en julio de 1998, anunció que los impuestos sobre muchos productos agrícolas aumentarían el doble o más en los cuatro últimos meses del año, elevando al 60 por ciento los impuestos sobre el trigo, el centeno, la avena y el maíz.

18. Aunque no se dispone de series cronológicas completas de datos sobre las tasas de protección y ayuda a la agricultura en los países en desarrollo, como se dispone para los países de la OECD, en un informe4 de la FAO de próxima aparición se señala que en muchos países en desarrollo se están realizando reformas orientadas al mercado, incluso en países que se esfuerzan por incrementar la producción y los ingresos agrícolas frente a los retos que plantea la situación económica internacional actual. En 1998, se han elevado en varios países los apoyos a los precios nacionales y los aranceles de importación para proteger a los productores nacionales de los efectos de los bajos precios mundiales.

19. En septiembre de 1998, el Gobierno de Indonesia anunció cambios fundamentales concernientes a la importación y distribución de arroz, trigo y harina de trigo, soja y azúcar, como parte de un paquete de medidas para acelerar la aplicación de las políticas orientadas al mercado que se pusieron en marcha en 1997 y a comienzos de 1998. Los cambios incluyen, entre otras cosas, la anunciada supresión del monopolio del Organismo Nacional de Logística (Bulog) sobre las importaciones de arroz y la eliminación de la subvención del tipo de cambio para la soja, el trigo y el azúcar. Como parte del esfuerzo para centrar las subvenciones al consumidor sobre los productos esenciales, el Gobierno de Indonesia ha reducido las subvenciones del azúcar y de la harina de trigo a principios de 1998 y anunció la intención de eliminarlas completamente al final del año. Al mismo tiempo, Bulog ha aumentado el suministro de arroz subvencionado para los más pobres destinándolo a 17,5 millones de familias. Con la intención de aumentar la producción nacional e incrementar los ingresos agrícolas, el Gobierno de Indonesia elevó el precio del arroz cáscara de 700 a 1 000 rupias en junio de 1998.

20. El Gobierno de Filipinas adoptó un programa de medidas de reforma agrícola en 1997 para mitigar la pobreza rural y promover la seguridad alimentaria y el crecimiento sostenible. Este Gobierno también ha anunciado el objetivo de establecer los precios de los productos agrícolas a través de la acumulación de existencias orientadas al mercado, mejorando la transparencia del mercado, intensificando la participación del sector privado y reduciendo los aranceles de importación. Los aranceles NMF aplicados a varios productos agrícolas básicos fueron reducidos a la mitad en 1998, y se ha programado otra reducción para el año 2000 (trigo, centeno, cebada, azúcar, semillas oleaginosas y sus productos derivados, productos lácteos, carnes y otros). En el año 2000 la mayoría de los aranceles NMF sobre los productos agrícolas variarán entre el 3 y el 10 por ciento, en comparación con el 20-40 por ciento de antes de las reducciones.

21. En abril de 1998, el Gobierno de la India proporcionó una prima de adquisición de 550 rupias (14 dólares EE.UU.) por tonelada de trigo con el fin de incrementar las compras de trigo elevando así los precios de sostenimiento efectivos para el año de comercialización 1998/99 a 5 100 rupias (129 dólares EE.UU.) por tonelada. En marzo de 1998, el Gobierno de Marruecos anunció la decisión de aumentar los aranceles sobre el trigo duro del 17,5 al 50,5 por ciento y, sobre el trigo blando del 64 al 101 por ciento. En enero de 1998, el Gobierno de Arabia Saudita aplicó un arancel estacional a la importación de muchos productos agrícolas, imponiendo un arancel adicional del 25 por ciento durante la correspondiente temporada agrícola. Además el arancel sobre el trigo y la harina de trigo aumentó del 12 al 100 por ciento mientras que el comercio de estos productos continúa bajo control del Gobierno.

22. Brasil aumentó un 3 por ciento su arancel externo sobre todas las importaciones provenientes de países no miembros de la unión aduanera MERCOSUR ( Argentina, Paraguay y Uruguay ) y de la área de libre comercio ( Bolivia y Chile ). De este modo los aranceles sobre la mayoría de los productos agrícolas aumentaron del 10 al 13 por ciento.

23. En 1997/98 muchos países africanos, especialmente Kenya, Nigeria y Tanzanía redujeron o suspendieron los derechos de importación sobre los cereales para permitir al sector privado acumular reservas de emergencia e importar productos para colmar el déficit de productos en el mercado debido a la sequía. El Gobierno de Zimbabwe anunció un aumento del precio al productor para el maíz de 1 200 dólares de Zimbabwe (64 dólares EE.UU.) por tonelada hasta 2 400 dólares de Zimbabwe (138 dólares EE.UU.) con el fin de ayudar a compensar los bajos precios mundiales e impulsar la producción nacional. En Kenya las medidas estudiadas por el Consejo Nacional de Cereales y Producción (NCPB) empezaron a aplicarse en 1997. El Consejo estaba dividido en dos secciones: una desempeñaba las funciones de una entidad comercial y la otra coordinaba las reservas estratégicas de cereales del Gobierno, siendo ambas de propiedad gubernamental. Se espera que la sección comercial del NCPB participe en el comercio de cereales de forma autónoma y que no haya necesidad de que actúe como comprador de último recurso para los productores nacionales.

24. En 1997 y 1998 hubo varios cambios en los acuerdos internacionales concernientes a los productos básicos. El Convenio Internacional del Yute expira en abril del 2000 y por esta razón se ha establecido un Comité Preparatorio para elaborar el proyecto de un nuevo convenio. La primera reunión de este Comité, celebrada en octubre de 1998, recomendó que se llevase a cabo el trabajo preparatorio necesario para las negociaciones del nuevo convenio. El Convenio Internacional de la Carne Bovina y el Convenio Internacional de los Productos Lácteos expiraron en diciembre de 1997. Los dos convenios fueron establecidos el 1º de enero de 1995 por un período de tres años.

25. Los acuerdos regionales y de comercio preferencial constituyen un aspecto importante del comercio agrícola. Se han iniciado las negociaciones para un acuerdo que substituya a la cuarta Convención de Lomé, la cual expira en febrero del 2000. La Convención Lomé regula el comercio preferencial y otras relaciones entre la UE y 70 países de África, el Caribe y el Pacífico. Desde su creación en 1996, el Comité de Acuerdos Comerciales Regionales de la OMC ha continuado o iniciado el examen de mas de 40 acuerdos regionales, entre ellos: la ampliación de la UE para incluir Austria, Finlandia y Suecia; el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC); acuerdos de libre comercio de la UE y los países miembros de la Asociación Europea de Libre Comercio con un gran número de países de Europa central y oriental (p.e. Hungría, Polonia, Bulgaria, la República Checa, la República Eslovaca, Rumania, Bulgaria, Estonia, Letonia y Lituania).

IV. CONCLUSIONES

26. El deterioro del ambiente económico mundial supone un riesgo para las perspectivas de los mercados de productos básicos agrícolas a corto plazo, pero a pesar de estos problemas es importante tener en cuenta que se prevé que el crecimiento económico en 1998 será positivo en la mayoría de las regiones del mundo y de los países en desarrollo, y se espera que el crecimiento se recupere modestamente en 1999.

27. La caída de los precios de los productos básicos agrícolas registrada en 1997 se ha mantenido en 1998 para la mayoría de productos, aunque ha sido mayor en precios de los productos alimenticios que en los de otros productos básicos. En 1998, los precios de la mayoría de los productos básicos, en términos reales, han sido similares a los registrados en los primeros años del decenio. La desaceleración del crecimiento económico mundial fue una de las causas de la debilitación de los precios aunque hubo otros factores, incluidos los meteorológicos, que también jugaron un papel importante. El descenso de los precios y el estancamiento de los volúmenes del comercio implican una reducción de los ingresos obtenidos de la exportación de productos agrícolas en 1998, así como unas facturas de importación de alimentos más bajas en los países en desarrollo. Aunque la situación en 1999 es difícil de prever, hay algunos datos que muestran que la caída de los precios de los productos básicos puede cesar gracias tanto a la recuperación del crecimiento económico, como al hecho que la producción agrícola se adapte a la debilidad de los actuales precios del mercado.

28. Hubo pocos cambios importantes en los convenios internacionales de productos básicos, siendo el más destacado la terminación del Convenio Internacional de la Carne Bovina y del Convenio Internacional de Productos Lácteos. En el ámbito de los mercados agrícolas internacionales se da un fenómeno reciente, que se espera que vaya a más: la ampliación y fortalecimiento de los acuerdos comerciales regionales.

29. Aunque el proteccionismo en la agricultura de los países de la OECD aún es elevado, se registra una tendencia a la baja hasta 1997, último año del cual se dispone de datos. Concretamente, el apoyo a los precios de mercado en la agricultura disminuyó tanto en los EE.UU. como en la CE y se produjo un cambio de tendencia hacia la ayuda desconectada a los productores. En los países en desarrollo la tendencia es hacia una liberalización ulterior y una mayor orientación al mercado. Queda por ver si la complicada situación económica en que se encuentran varios países y el debilitamiento de los precios de los productos básicos en 1998 han frenado la tendencia hacia unos niveles de ayuda más bajos y la aplicación de reformas orientadas al mercado.

CUADRO 1 DEL ANEXO: Índice de los precios de exportación de los principales productos básicos agrícolas ) valores reales, 1980=100)1/

1/ Deflacionado por el índice del valor unitario de exportación de los fabricantes de países industrializados.

2/ Promedio de enero-octubre de 1998.

3/ El índice se basa en los valores medios de exportación de 1986-88 como ponderaciones.

4/ En alimentos básicos se incluyen principalmente alimentos de clima templado (cereales, carne, productos lácteos, azúcar y aceites vegetales y tortas y semillas oleaginosas).

5/ En otros productos básicos se incluyen principalmente productos tropicales (bebidas, banano y materias primas agrícolas).



CUADRO 2 DEL ANEXO: Transferencias totales relacionadas con la política agrícola en la OECD

1/ El CNA al productor (consumidor) es la relación de la suma del precio en frontera más el ESP (ESC) unitario ala precio en frontera.

1 Resolución 2/79 de la Conferencia: "Comercio de productos básicos, proteccionismo y reajuste agrícola", 20º período de sesiones, Roma, 10-28 de noviembre de 1979.

2 FMI, Perspectivas de la Economía Mundial , octubre de 1998.

Por motivos económicos se han producido un número limitado de copias de este documento. Se ruega a los delegados y observadores que lo traigan a las reuniones y que eviten hacer copias a no ser que sea estrictamente necesario.