Ante el aumento de las temperaturas, la malnutrición, la pérdida de biodiversidad y el incremento de las desigualdades en materia de salud, existe ya un acuerdo prácticamente unánime sobre la necesidad de una transformación fundamental de nuestros sistemas alimentarios. El crecimiento simultáneo de la agroecología en Europa y África puede contribuir a la sostenibilidad de los flujos comerciales entre los dos continentes en el futuro, si se pone en marcha el apoyo adecuado.

Este artículo destaca cómo la cumbre UE-UA podría ser una sólida plataforma para forjar un nuevo tipo de asociación entre dos regiones que se comprometen a remodelar sus sistemas alimentarios para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible y el acuerdo climático de París.