El sector agrícola contribuye aproximadamente al 10-20% del total de las emisiones antropogénicas de gases de efecto invernadero (GEI). En consecuencia, el cambio climático puede afectar negativamente al rendimiento de los cultivos y a la producción ganadera, amenazando así la seguridad alimentaria, especialmente en un continente vulnerable como África. Esta revisión ofrece una visión general de las prácticas de agricultura climáticamente inteligente (CSA) y sus impactos en los pequeños agricultores de cinco países africanos (Argelia, Senegal, Benín, Nigeria y Zambia).