Conmemoración Día Internacional de Concienciación sobre Pérdida y Desperdicio de Alimentos

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Antecedentes

La Agenda 2030 fijó el objetivo de Desarrollo Sostenible de Producción y Consumo responsables (ODS 12.3), indicando que para esa fecha se busca “reducir a la mitad el desperdicio mundial de alimentos per cápita en la venta al por menor y a nivel de los consumidores y reducir las pérdidas de alimentos en las cadenas de producción y distribución, incluidas las pérdidas posteriores a las cosechas”. 

Se estima que en América Latina se pierden un 11,6% de los alimentos (FAO, 2019). En tanto, en 2022, el desperdicio de alimentos que se produjo a nivel global en el ámbito del comercio minorista, los servicios de comidas o los hogares se calculó en un 19 % del total de alimentos a disposición de los consumidores (PNUMA, 2024).

Las PDA tienen un impacto medioambiental en cuanto a que esta producción perdida representa entre 8 y 10% de los gases de efecto invernadero, consume el 25% del total de agua dulce que se usa en el planeta, implica un alto consumo de energía, de mano de obra y tierra.

Si las PDA fueran un país, serían el tercer mayor contribuyente de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en el mundo (FAO), lo cual es equivalente a las emisiones de más de 50 millones de vehículos. Todo esto repercute en el cambio climático y agrava las desigualdades, como el acceso a alimentos y el hambre. 

Cada año, en América Latina y el Caribe se destinan más de 130 millones de toneladas de residuos orgánicos a disposición final. Paradójicamente, al mismo tiempo, las cifras del Informe SOFI 2024 dieron cuenta de que 41 millones de personas sufrieron hambre en la región y 187,6 millones de personas (28,2% de la población) padecieron inseguridad alimentaria moderada o grave.

La reducción de las PDA se considera una buena manera de disminuir los costos de producción y aumentar la eficiencia del sistema agroalimentario, mejorar la seguridad alimentaria y la nutrición, y contribuir a la sostenibilidad del medio ambiente (SOFA, 2019). También constituye una solución climática que los países y comunidades puedan utilizar para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Para poder llevarlo a cabo con éxito, será necesario aumentar significativamente la calidad y cantidad de la financiación climática accesible (FAO, 2024), fomentando a la vez la innovación y las tecnologías.

El diálogo a nivel regional de los distintos actores de los sistemas agroalimentarios ofrece una oportunidad para aumentar la conciencia sobre los impactos de las PDA, visualizar los desafíos y valorar los avances. 

Objetivo

La quinta edición del Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos hará hincapié en la necesidad crítica de financiación para impulsar los esfuerzos encaminados a reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos, contribuir al logro de los objetivos climáticos y avanzar en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. 

Paneles temáticos: 

• Políticas públicas en reducción de PDA en la región de América Latina y el Caribe 
• Avances y desafíos de las PDA en la región de América Latina y el Caribe 
• Innovación, tecnologías eIniciativas  para combatir las PDA
• Estrategias Nacionales para la reducción de PDA