Oficina Regional de la FAO para América Latina y el Caribe

Informe FAO analiza fortalezas y brechas de la producción láctea en América Latina y el Caribe

06/11/2022

Quito, octubre de 2022.- Con más de tres millones de productores familiares y miles de emprendimientos industriales, América Latina participa con un 12% de la producción mundial de leche bovina, un 7% de exportaciones y un 13% de importaciones globales de productos lácteos. Dada la capacidad del sector para crear extensas cadenas de valor, la actividad lechera contribuye con la generación de más de cuatro millones de empleos directos y con, aproximadamente, medio millón de empleos indirectos.

Estas son parte de las principales conclusiones del estudio “Más allá de la finca lechera, enmarcando el diálogo de la política lechera en América Latina” realizado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Federación Panamericana de Lechería (FEPALE), y que fue dado a conocer en el marco del 16 Congreso Panamericano Lácteo que se realizó en Quito.

Esta radiografía regional identificó las principales fortalezas, así como brechas que presenta la producción láctea en los países latinoamericanos. La región cuenta con unos 3,3 millones de productores, responsables de 81 millones de toneladas por año. El estudio concluye que sólo el 20% de estos productores son especializados, pero generan aproximadamente el 80% de la producción total de la región.

Mayoritariamente la estructura productiva está compuesta por un amplio número de pequeños productores, pero con un bajo promedio de producción en una importante mayoría de países. Y es en este punto que Alejandro Acosta, Oficial de Política Ganadera de FAO y coautor de la publicación, sostiene que se debe focalizar los esfuerzos, pero hacerlo de una manera eficiente y sostenible: “Uno de los desafíos para mejorar el nivel de productividad láctea en la región está asociado con incrementar la eficiencia de escala”.

El volumen promedio de producción por día en los países del Cono Sur (Argentina, Uruguay y Chile) es significativamente mayor al del resto de los países de la región. Sin embargo, cuando se compara el resultado con países de referencia en otras regiones, como Australia, Nueva Zelanda y Estados Unidos, se observó que la producción promedio de las explotaciones lecheras en la región es casi una décima parte de los volúmenes alcanzados por esos países de referencia.

Mejorar la eficiencia, el desafío

Según el estudio, entre los países con mejor desempeño en términos relativos de la productividad total de los factores se destacan Brasil y Costa Rica. El primero muestra una tasa de crecimiento del 4% anual, explicada por un cambio de eficiencia del 1,4% anual y un cambio tecnológico del 2,5% anual. Costa Rica en tanto presenta una tasa de crecimiento del 3,3%, reflejada en un cambio de eficiencia del 1,2% anual, acompañada de un cambio tecnológico del 2,1% anual.

El análisis evidenció que durante la última década, el incremento de la productividad del sector lechero latinoamericano alcanzó una tasa de crecimiento promedio del 0,7% anual. Este resultado obedece a un crecimiento positivo en la innovación (2,2%) asociado a un crecimiento negativo en eficiencia (–1,5%). “Lo cual indica que, si bien el cambio tecnológico está impulsando el nivel de productividad, en la región el factor determinante para mejorar la relación insumo/producto es mejorar el nivel de eficiencia, es decir la capacidad de utilizar los recursos y tecnologías actualmente disponibles para producir más” agregó Acosta.  

“Enfrentar estos desafíos requerirá desarrollar incentivos y mecanismos financieros en los países, direccionados a incrementar la productividad, fomentar la integración de productores, entre muchos otros. Para ello, desde la Comisión de Desarrollo Ganadero para América Latina y el Caribe, CODEGALAC, y como parte de su mandato, apoyaremos a los gobiernos a impulsar estos cambios, que ayudarán finalmente a mejorar la calidad de vida de los miles de productoras y productores de nuestra región, haciendo de la ganadería un sector más productivo, resiliente, competitivo y amigable con el medio ambiente” aseveró Andrés González, Oficial de Ganadería, Sanidad Animal y Biodiversidad de la FAO.

El estudio analizó las tendencias, la productividad de los factores, el nivel de protección y el grado de integración del sector en el mercado global, con el objetivo de fortalecer el diálogo del futuro del sector lácteo en la región.

Para ver el estudio completo hacer clic aquí: Más allá de la finca lechera