FAO en Argentina

Lanzamiento de la Iniciativa Global “One Country One Priority Product” en Argentina

05/10/2021

A partir de la iniciativa global “One Country One Priority Product” (“Un País, un Producto Prioritario”) la Agencia de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) apunta a establecer alianzas con institutos de investigación nacionales y actores del sector privado con el fin de movilizar conocimientos y tecnologías para el producto elegido en cada país.

En el caso de Argentina el producto seleccionado es la miel y se trabajará en 3 aspectos básicos: mejorar la producción y la productividad; aumentar la sostenibilidad ambiental y la resiliencia climática; y brindar valor agregado y acceso a los mercados.

La FAO apoyará al Ministerio de Agricultura en los vínculos con las asociaciones que representan a los productores de miel, las empresas privadas de comercialización y procesamiento, y los centros de investigación nacionales y / o internacionales.

El objetivo es brindar asistencia técnica al Gobierno para avanzar en políticas de diferenciación de la miel argentina, logrando de este modo que se garantice un desarrollo de triple impacto en el territorio, con beneficios económicos, sociales y ambientales para el país”, resumió Verónica Caride, oficial de Programas de FAO Argentina, dando inicio al encuentro.

Tito Efraín Díaz, representante interino de la FAO en Argentina y Uruguay expresó: “Esta es una iniciativa global impulsada por el director general de la FAO y en este contexto apoyaremos a Argentina en el fortalecimiento de la cadena de valor apícola, clave para la economía del país y sus territorios. Se trata de productos que ya tienen reconocimiento internacional, como ocurre con la miel de Argentina, y que además se producen de manera sostenible y se vinculan con una alimentación saludable. One Country One Product busca fortalecer las alianzas ya existentes en el país y articular todos los actores de la cadena, con el objetivo de mejorar los ingresos de los productores, su calidad de vida y asegurar que estos productos estén conectados a la consolidación de sistemas alimentarios eficientes, inclusivos y sostenibles”.  

El secretario de Alimentos, Bioeconomía y Desarrollo Regional del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación (MAGyP), Marcelo Alós, enfatizó la importancia que tiene la apicultura: “Es generadora de un alimento que se ha revalorizado mucho, sobre todo con la pandemia, por ser un producto sano y natural. Argentina es el tercer productor mundial de miel y nuestro objetivo es fortalecer a los productores que componen un sector que genera grandes aportes en el territorio. Con este proyecto esperamos comenzar un camino para darle valor agregado a la miel y dar un salto en términos de calidad y de mayor producción. Están dadas las condiciones para que logremos todo lo que nos hemos propuesto”.

Por su lado Pablo Morón, director de Alimentos, ofreció los servicios que lleva adelante la Secretaría de Alimentos; en particular colaborar en materia de indicaciones geográficas y denominaciones de origen y con el sello Alimentos Argentinos como estrategia de diferenciación muy aplicable al proyecto.

 “Con 50 años en la actividad me emociona que FAO, el MAGyP, la UBA, el INTA y la Sociedad Argentina de Apicultores (SADA) estemos todos reunidos y hablando de la posibilidad de crecimiento para todo el sector”, dijo Carlos Levin, presidente de la Cámara Argentina de Fraccionadores de Miel (CAFRAM). La actividad apícola en Argentina se desarrolla en casi todas las provincias y representa una gran posibilidad para trabajar con los jóvenes, porque tenemos que evitar que se vayan del campo y una forma es mejorando su calidad de vida en el lugar donde nacieron. La apicultura representa la oportunidad de una producción alternativa para generar trabajo, riqueza genuina y productos exportables. ´Miel argentina natural´ es nuestra bandera y queremos incorporar este producto tan noble a la alimentación diaria de todos y todas”.

 “La interacción entre el sector público y el privado, junto con la Academia, es el mejor camino porque permite conjugar distintas visiones”, aseguró el especialista en Bioeconomía Fernando Vilella. “En casi cualquier rincón del país puede haber apicultura y muchas son PyMes asociativas que permiten un entramado social indiscutible, con historia y potencialidad. Desde la bioeconomía no solo se trata de miel ya que existen otros productos de la colmena (como polen, propóleo o insumos para la salud humana) y, además, la apicultura es una actividad donde puede haber igualdad de género, lo cual es algo a tener presente. En este proyecto de One Country One Product analizaremos las brechas de exportación para la miel, qué elementos hay que elaborar para diferenciarla y realizaremos un mapeo con georreferenciación para contar con información de fácil acceso que sirva de base para concretar políticas públicas adecuadas”.