Jujuy y La Paz fueron protagonistas de dos eventos que subrayan la importancia de los camélidos en los altiplanos andinos y presentan nuevas estrategias para su desarrollo y sostenibilidad.

El Taller de Validación del Diagnóstico Nacional de la Cadena de Valor de los Camélidos, llevado a cabo en Jujuy durante la semana pasada, es parte de una iniciativa argentina para evaluar y fortalecer dicha cadena en el país. El diagnóstico se centra en identificar desafíos y oportunidades en cada aspecto de la cadena de producción, desde la crianza hasta la comercialización, esenciales para la economía local. Algunas de las iniciativas destacadas del encuentro son capacitaciones y estrategias para mejorar la calidad del ganado y contribuir a un crecimiento sostenible en el sector.

Del taller participaron expertos y productores locales, miembros de la industria de la fibra, representantes del gobierno nacional, provincias, municipios, técnicos del INTA y SENASA, fundaciones afines y la responsable en Argentina del área de desarrollo rural sostenible de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), mientras que el grupo de trabajo que acompañó para dirigir el taller son los técnicos de Ley Ovina y Caprina por Jujuy y Catamarca. 

“Durante el encuentro validamos el FODA Nacional en un marco de discusión saludable y productiva, que nos servirá de punto de partida para plantear estrategias de toda la región”, señaló Marisa Sánchez, representante de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación. 

Por su parte, la Directora de la Estación INTA, Fabiana Brizio, señaló la importancia de ser la sede del encuentro nacional: “Es un honor para nosotros, este encuentro reúne a los principales referentes de la cadena de valor de los camélidos de las provincias de Jujuy y Catamarca. La puna Jujeña tiene un gran potencial y este tipo de iniciativas permiten que se visibilicen y potencien las capacidades locales”. Y concluyó: “La producción de camélidos, además, forma parte de un legado cultural que busca ser preservado y promovido. La mesa, en la medida en que se sostenga en el tiempo, resultará un espacio propicio para la formulación de nuevas estrategias que incentiven la producción, la comercialización y la incorporación de tecnología en los procesos”.

Encuentro regional en Bolivia

Por otro lado, se llevó a cabo este lunes y martes el encuentro Regional de Camélidos en La Paz. El evento, con el lema Nutriendo la vida, preservando el futuro, subraya el liderazgo de Bolivia en la promoción de la importancia cultural, económica, ecológica y social de los camélidos sudamericanos. A la vez, busca formas de proteger a los camélidos y sus hábitats, así como a las comunidades que dependen de ellos.

Bolivia encabezó la iniciativa de impulsar un Año Internacional para estos animales y fue respaldada por la Asamblea General de la ONU en 2017. El Año tiene como objetivo crear conciencia sobre el papel integral que desempeñan los camélidos en la vida de las comunidades indígenas, nativas y campesinas en más de 90 países, en particular en las regiones desérticas y montañosas. La FAO, como agencia líder de la ONU en esta conmemoración, lanzó el Año en su sede en diciembre de 2023. El Director General de la FAO, QU Dongyu, asistió a la sesión inaugural del lunes en La Paz junto al Presidente de Bolivia, Luis Alberto Arce Catacora.

QU destacó la importancia cultural y medioambiental de los camélidos reafirmando la necesidad de salvaguardar estas especies y los ecosistemas que habitan. “Durante 2024, hemos estado trabajando juntos, para crear conciencia sobre el potencial de los camélidos y aumentar la inversión en investigación y extensión para desarrollar el sector de los camélidos. Es fundamental que sigamos trabajando juntos más allá de 2024 para desarrollar de manera sostenible el sector de los camélidos, ya que tiene un potencial sin explotar para ayudar a avanzar en los esfuerzos mundiales para lograr la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y los ODS”, dijo.

Asimismo, Marisa Sánchez y Aranzazu Lentini Ordoqui, técnicas del área de camélidos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, indicaron: “Tuvimos la oportunidad de formar parte de un encuentro regional en el que participamos cinco países: Argentina, Chile, Bolivia, Ecuador y Perú, con una predisposición de todos los participantes en compartir las experiencias de cada país. Superó nuestras expectativas ya que el intercambio fue sustancioso, de gran aprendizaje y con el compromiso de seguir con una red de comunicación que nos permitirá compartir estrategias y a futuro traccionar objetivos en conjunto”.

La reunión congregó a gobiernos, productores de camélidos, organizaciones internacionales y expertos académicos para abordar los retos del sector. El evento sirvió de plataforma para fomentar la cooperación internacional e intercambiar conocimientos sobre prácticas sostenibles para proteger a los camélidos, sus hábitats y las comunidades que dependen de ellos. Del lado argentino, participaron las representantes de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, el investigador de INTA Abra Pampa Agr Hugo Lamas, y cooperativas del sector. 

El papel crucial de los camélidos en el altiplano andino

En Sudamérica en particular, los camélidos como llamas, alpacas, vicuñas y guanacos, han sido esenciales para las comunidades durante milenios, proporcionando no solo recursos económicos, sino también valor cultural y simbólico. Los camélidos sudamericanos son parte integral de las estrategias nacionales para disminuir la inseguridad alimentaria, la malnutrición y la pobreza rural. 200 mil familias crían y gestionan estos animales en el altiplano andino, pero a pesar del alto valor de muchos productos, el sector se enfrenta a retos sociales y económicos.

La iniciativa de Bolivia se centra en la gestión sostenible de las especies de camélidos, cruciales en zonas con riesgo de desertificación y daños medioambientales. Los camélidos están bien adaptados a estos frágiles ecosistemas, con un bajo impacto ambiental y un pastoreo eficiente. Sin embargo, se enfrentan a amenazas como la pérdida de hábitat, la caza furtiva y el cambio climático. La Reunión Regional busca abordar estos retos con soluciones innovadoras y estrategias de colaboración, y la FAO se encuentra trabajando de diversas formas para apoyar la producción y gestión de camélidos en todo el mundo.  

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