FAO en Bolivia

Representantes de 16 países acuerdan impulsar políticas públicas de gestión integrada de la sequía

Foto grupal de los participantes de la Conferencia.
21/08/2017

Expertos y representantes de 16 países de América Latina y el Caribe acordaron trabajar con sus gobiernos la inclusión de la gestión integrada de la sequía en el desarrollo y la ejecución de políticas públicas.

Reunidos en la Primera Conferencia Regional para la Gestión y Preparación contra la Sequía “Juntos Contra la Sequía”, concertaron la denominada Declaración de Santa Cruz en la que reconocen que la resiliencia a la sequía es un imperativo para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, incluyendo la meta 15.3 sobre la Neutralidad de la Degradación de la Tierra.

El encuentro, celebrado en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra del 14 al 16 de agosto, fue organizado por el Ministerio de Medio Ambiente y Agua de Bolivia, con el apoyo técnico de la FAO y la Convención de las Naciones Unidas para la Lucha contra la Desertificación (UNCCD).

La temática abordada responde a un interés de los países de analizar y debatir sobre la afectación de las sequias en la región, así como las acciones que se deben emprender para que sus efectos negativos no impacten en poblaciones vulnerables, ni vayan en detrimento de los recursos naturales, como el agua y suelo.

Las grandes pérdidas de cosechas y ganado, la reducción de los niveles de agua en las represas, la proliferación de plagas y enfermedades, la inseguridad energética, el aumento de los incendios forestales, la grave escasez de agua, el aumento de la migración y la inseguridad alimentaria en las zonas afectadas por las sequías, fueron parte de las discusiones en las tres jornadas.

En ese espíritu, la Declaración de Santa Cruzplantea la importancia de considerar los tres pilares sobre la gestión integrada de la sequía en el proceso de elaboración de políticas o planes nacionales: monitoreo de la sequía y alerta temprana; evaluaciones de impacto y vulnerabilidad; mitigación y preparación.

La Declaración “reafirma los desafíos que nos plantea la sequía, la desertificación, la degradación de la tierra para el desarrollo integral de nuestros pueblos”, señaló el Ministro de Medio Ambiente y Agua de Bolivia, Carlos Ortuño.

“Durante estos tres días ha prevalecido una mirada integradora, llamando a trabajar de manera coordinada, articulada, con perspectiva multisectorial e interinstitucional”, dijo por su parte Crispim Moreira, Representante de la FAO en Bolivia.

Para el Representante, los retos planteados por la sequía y los efectos del cambio climático requieren de acciones concertadas si se quiere evitar mayores impactos en el desarrollo económico y social, la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza.

Patricia Mejías, Oficial en la División de Tierras y Agua de la FAO (Roma); Oscar Rojas, Oficial en Recursos Naturales de la FAO (Panamá); y Harry Villarraga, Coordinador Territorial Zona Norte de FAO-Colombia, participaron de la Conferencia, con exposiciones magistrales y ponencias.

Para la FAO la protección de la agricultura y de los medios de vida de poblaciones rurales debería estar en el centro de toda estrategia de gestión de riesgos y de gestión de la sequía. En ese espíritu, la Organización apoya a los países a través de iniciativas que, además de la gestión de riesgos de desastres, promueve el uso sostenible de los recursos naturales y la adaptación al cambio climático.