En un espacio de participación voluntaria, donde impera el diálogo para construir entre todos los actores de la cadena forestal, en el nivel local estrategias y diseñar planes y políticas que permitan gestionar de manera adecuada los bosques que poseen en su territorio. Corteros, aserradores y delegados de la academia e instituciones locales participaron el 8 de julio en la reunión del comité técnico de la Mesa Forestal del Chocó. 

Esta Mesa, que se reúne periódicamente para atender diferentes aspectos, dentro de los cuales se destacan la incidencia política a nivel local y nacional, la mitigación de la deforestación y el cambio climático y solucionar dificultades que se presentan y que de alguna manera afectan la gestión de los bosques en sus localidades; en esta oportunidad, recibió la visita del señor Alan Bojanic, representante de la FAO en Colombia, con el fin de presentar un balance de lo que se ha trabajado hasta el momento en pro de construir  una buena gobernanza forestal en el departamento. 

La Mesa Forestal del Chocó fue creada en el mes de abril de 2014, momento en el que se reunieron 79 diferentes actores vinculados de forma directa e indirecta con los bosques, los recursos forestales y sus servicios ecosistémicos. La convocatoria fue realizada por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADS), la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Chocó (CODECHOCO), la Gobernación del Departamento del Chocó, el Instituto de Investigaciones Ambientales del Pacifico (IIAP) y la Universidad Tecnológica del Chocó. 

A la fecha son varios los actores que se han venido sumando, como delegados de la academia por parte de la Universidad Tecnológica del Chocó (UTCH) y la Universidad Nacional Abierta y a Distancia (UNAD), asociaciones de productores madereros y reforestadores, organizaciones de comunidades campesinas, indígenas y afrodescendientes, aserradores, procesadores, transformadores y comercializadores de madera, transportadores y asociaciones de ingenieros forestales y agroforestales, además de entidades del orden territorial. 

“El objetivo principal de la creación de la mesa fue actualizar la política forestal a nivel nacional, partiendo desde las regiones, hoy podemos decir que hemos avanzado en esta tarea. El logro más importante de la Mesa del Chocó es contar hoy con el Plan de Desarrollo Forestal del departamento, el cual ya estamos desarrollando, ya estamos aplicando, sumado por supuesto a la estabilidad y ampliación de este espacio”, explicó Jafet Bejarano Sánchez, Coordinador de la Mesa Forestal. 

“El poder integrar a los actores que han sido invisibilizados en la cadena forestal ha sido uno de los propósitos principales de la Mesa, por lo que hemos involucrado a corteros, aserradores, ebanistas y transportadores en un piloto de gobernanza forestal, para hacer de la industria maderera un mercado de madera legal”, aseguró William Klinger Brahan – IIAP, director del Instituto de Investigaciones Ambientales del Pacífico (IIAP), organización que ha liderado las acciones de la Mesa del Chocó. 

Por su parte, “el Consejo Comunitario Mayor de la Asociación Campesina Integral del Atrato (COCOMACIA) se ha integrado a la Mesa Forestal del Chocó aportando su territorio para la investigación y desarrollo, buscando optimizar la utilización de los recursos naturales; para ello ha dispuesto de espacios de socialización con los líderes de las nueve zonas que integran este Consejo Comunitario generando réplicas a nivel territorial sobre qué es y cómo se desarrolla el principio de la gobernanza forestal; en este ejercicio hemos contado con el apoyo de la Mesa y del Plan de Desarrollo Forestal”, así lo manifestó José Luis Bejarano Blandón, uno de sus líderes. 

En este proceso se han adelantado acciones a partir del proyecto de “Fortalecimiento de la Mesa Forestal del Chocó”, derivado del Programa sobre Aplicación de las leyes, gobernanza y comercio forestales (Programa FAO-UE FLEGT), el cual es desarrollado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y es financiado por la Unión Europea y los gobiernos de Suecia y Reino Unido, ayudando a garantizar que la madera aprovechada y comercializada en el país provenga de bosques bajo el manejo forestal sostenible y responsable, generando bienestar humano, seguridad alimentaria y la preservación y buen uso de los recursos naturales. 

Como visita de reconocimiento fue incluido un recorrido por el corregimiento de Tutunendo, ubicado al norte del municipio de Quibdó, con 43 kilómetros cuadrados que albergan un alto índice de biodiversidad y comunidades afrodescendientes e indígenas, de la comunidad embera, especialmente. En medio de la majestuosidad del bosque pluvial húmedo que posee se dan, de forma natural más de 50 especies madereras, entre las que se encuentran con mayor presencia el sande (conocido por corteros del Chocó como lechero), cedro macho, cabuyo, lirio y el choibá. 

Emeterio Hinestroza Palacios y Luis Jairo Mosquera Blandón, aserradores con más de treinta años de experiencia en esta labor, coinciden en afirmar que el ser aserradores, les ha traído una forma de ganarse la vida, pero también algunas desventajas ante accidentes ya que no cuentan con un servicio médico al que puedan acudir. “Otra de las necesidades urgentes es contar con un acompañamiento académico para certificar sus conocimientos”, lo que los pone en desventaja para poder mejorar sus condiciones de vida. Ellos, como sus compañeros aserradores, alternan la explotación de la madera con las labores de agricultura, pues no todos los meses llegan las solicitudes de madera y mientras tanto hay que buscar otros medios de vida para llevar el sustento familiar a sus casas. 

“El propósito es que, a partir del reconocimiento de cada uno de los actores de la cadena de valor forestal en su integralidad, podamos ver mecanismos para la buena gobernanza de los recursos forestales en el Chocó, con el fin de buscar mayores beneficios para quienes integran la cadena, pero con un propósito común de conservación ambiental. Debemos apuntar a un mayor y mejor aprovechamiento de los bosques, asegurando siempre el principio de la sostenibilidad, que está en el corazón de la gobernanza forestal” concluyó Alan Bojanic, representante de FAO en Colombia.

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