FAO en Colombia

Los ahorros en los proyectos PIDAR de Boyacá se reinvirtieron en las asociaciones

17/02/2022

La escena es poco común y así lo sintieron los productores de Boyacá: fue una reunión de asociados con los representantes del convenio ADR – FAO para definir la destinación de unos recursos adicionales. Los productores de leche, papa y alfalfa escucharon -palabras más, palabras menos-, la siguiente información: “Teníamos unos recursos para invertir aquí, quedaron unos ahorros y ahora queremos que ustedes decidan en qué quieren invertirlos”. 

“Eso nos devolvió la credibilidad en los entes nacionales porque así es que se demuestra el compromiso con las asociaciones”, dice de manera contundente Consuelo Murcia de la Asociación de Productores de Leche de Saboya (APROLESAB), y agregó “fueron un ejemplo de transparencia y de honestidad. Vimos cómo los profesionales manejaron los recursos honestamente. Con los ahorros se fueron comprando más elementos para fortalecer la asociación”. 

Esta generación de ahorros benefició a 733 familias de 52 asociaciones de Boyacá, dedicadas a la producción de papa, leche y alfalfa. 

Consuelo Murcia se refiere a los proyectos de Desarrollo Agropecuario y Rural (PIDAR), que son una iniciativa productiva que buscan crear, ampliar, mejorar o recuperar la capacidad de producción o de provisión de bienes o servicios en el sector rural. Los PIDAR son liderados por la ADR con la cooperación técnica de la FAO. 

Así las cosas, la alianza ADR y FAO realiza la implementación de esos proyectos a través de procesos de formación técnica, socio empresariales y de corresponsabilidad con el medio ambiente; y con la entrega de insumos o bienes de acuerdo con las características de cada proyecto. 

En los PIDAR de Boyacá, la administración eficiente de los recursos que hizo FAO generó unos ahorros que permitió entregar muchos más insumos de los que contemplaba el convenio. El profesional de la FAO, Gilberto Murcia explicó que se tenía contemplado la entrega de 49 tractores y 117 aperos de tractores. La lista cambió radicalmente: se entregaron 49 tractores agrícolas de doble transmisión; 172 aperos para tractor (146 ya entregados y 26 que próximamente se entregaran); 42 guadañadoras de espalda; 114 fumigadoras estacionarias y un motocultor con remolque. Adicionalmente, cada asociación fue dotada con un computador y una impresora.  

Adicionalmente, los operadores de los tractores y el personal administrativo de las asociaciones fueron capacitados en la operación, mantenimiento y seguridad en el manejo del tractor, en la administración del banco de maquinaria y finalmente, en el cuidado del medio ambiente conservando tanto los páramos como las áreas de protección ambiental.  

Por ejemplo, APROLESAB y 28 asociaciones de productores de leche más hacen parte del PIDAR 634 cuya meta fue fortalecer sus capacidades y dotarlos con maquinaria agrícola. En ese caso, con los ahorros generados se adquirieron fertilizantes, material vegetal para siembra de pasto de corte, 29 renovadores de pradera, 29 kits para operación de la maquinaria, 29 equipos de cómputo y ampliación del tiempo de asistencia técnica.   

 “Nos entregaron todo lo que nos dijeron, con la última tecnología, nuevo y con las marcas que nos habían dicho”, precisa Alexander Espinosa, de la Asociación de Productores Agropecuarios de San José de Gacal (ASOPSAG). Él junto a 18 asociaciones de pequeños productores de papa hicieron parte del PIDAR 456 que tuvo como propósito fortalecer capacidades y dotar los bancos de maquinaria y equipos, para la producción de papa.  

Los ahorros de este PIDAR se reinvirtieron en la adquisición de un motocultor Ferrari 360L con remolque; 42 guadañadoras a gasolina Stihl FS 250, 14 rastras 18 discos x 24 pulgadas Inamec R55-18 RC, 8 surcadoras agrícolas ancho 2,1m Inamec SCL 3R; 19 computadores portátiles Dell y 19 impresoras Epson, superando los objetivos del proyecto formulado.   

En el caso de las asociaciones de lecheros, la profesional María Knowles señala que se lograron ahorros por $715 281 650. Dentro de muchas de las acciones que se adelantaron está: el establecimiento de 58 ha de avena forrajera, proceso que resulta en un trabajo asociativo con muy buenos resultados desde el punto de vista social y económico. Con estos mismos ahorros se adquirieron 29 renovadores y equipos de oficina para el desarrollo de las actividades del componente empresarial tales como seguimiento a los costos de producción de cada modelo de negocio y proyecciones, actividades que realizan las 29 organizaciones con mucha destreza. 

En esa gestión también se evidenció con las 30 familias de Iza, Sogamoso, Firavitoba y Tota el fortalecimiento de la cadena de frío en la producción de leche. Ellos conformaron el PIDAR 202 y acordaron destinar los ahorros para la adquisición de insumos para la desinfección del centro de acopio.  

Mientras que para para los integrantes de la Cooperativa Agropecuaria Multiagro de Zetaquira del PIDAR 527, cuya propuesta fue fortalecer la capacidad productiva y asociativa mediante el mejoramiento de las condiciones nutricionales del hato lechero, los recursos adicionales se destinaron para la adquisición de 2 motocargueros, 1 kit de inseminación, complementar la cantidad de semilla de pasto empleada, aumentar la cantidad de filtros desechables, fertilizantes y jabón industrial.  

De otra parte, las 40 familias de la Asociación de Ganaderos de Páez, que conformaron el PIDAR 604, y cuyo propósito fue fortalecer la cadena de frio y aumentar la producción de leche, decidieron invertir los ahorros en la adquisición de 4 picadoras de pasto, 40 cintas bovinometricas, y otros equipos necesarios para complementar la dotación del centro de acopio. 

Además de los productores de leche y papa, también se registraron ahorros para los productores de alfalfa. En efecto, las familias afiliadas a la Asociación de Alfalferos de Socha (ASOALFASOCHA), agrupados en el PIDAR 687, y cuyo propósito fue el establecimiento del cultivo de alfalfa y la dotación de maquinaria para su producción y transformación en harina como suplemento alimenticio pecuario, acordaron destinar los recursos para la adquisición de un remolque y tres meses más de asistencia técnica integral. 

Estos constituyen algunos ejemplos, pero hay muchos que cobijan a la gran mayoría de organizaciones de los 22 departamentos donde la alianza FAO – ADR está implementando los PIDAR. En todas ellas, las asociaciones destinaron los ahorros para el beneficio comunitario.
 

Contacto de prensa:
Nancy Villescas Sánchez
Oficina de Comunicaciones
Representación FAO Colombia