FAO en Colombia

Pesca ilegal, amenaza los medios de vida y la seguridad alimentaria de pescadores de pequeña escala

05/06/2022

La pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (pesca INDNR) es un término amplio que engloba una gran variedad de actividades pesqueras. Esta se presenta en todos los tipos y dimensiones de la pesca, tanto en alta mar como en zonas bajo jurisdicción nacional, afectando todos los aspectos y etapas de la captura y utilización del producto pesquero. 

 

La pesca INDNR se refiere a la pesca y actividades relacionadas que operan al margen de la ley y socavan la pesca sostenible; e incluye muchos tipos de actividades ilícitas, por ejemplo, pescar sin licencia o autorización, no informar o informar incorrectamente de las capturas, pescar en zonas prohibidas y capturar o vender especies prohibidas o pescar en zonas no cubiertas por un marco normativo. Se lleva a cabo siempre que los buques pesqueros no operen de acuerdo con los requisitos establecidos por los regímenes normativos y sistemas de ordenación nacionales, regionales e internacionales. 

Se estima que uno de cada cinco peces capturados proviene de la pesca INDNR. Por ello, es importante reconocer este tipo de pesca y como consumidores tener en cuenta que cuando estos peces llegan a nuestros platos, nos convertimos en cómplices involuntarios de prácticas insostenibles, y a menudo delictivas, que son perjudiciales para nuestro bienestar futuro y la sostenibilidad de nuestro planeta. 

Estas problemáticas y detrimentos fueron los que dieron lugar a que, en noviembre de 2017, la Asamblea General de las Naciones Unidas declarara el 5 de junio como Día Internacional de la Lucha contra la Pesca INDNR. Teniendo como objetivo el llamar la atención sobre las amenazas para el uso sostenible de los recursos pesqueros derivadas de las actividades de pesca INDNR, así como para los esfuerzos actuales dirigidos a luchar contra estas actividades. 

Esta pérdida de producto pesquero se suma a la crisis climática, el uso insostenible de los océanos, la contaminación de estos y la sobrepesca, factores que deterioran la sustentabilidad de estos valiosos ecosistemas, que hoy constituyen más del 90% del espacio habitable del planeta y contienen unas 250.000 especies conocidas y muchas más que aún quedan por descubrir. 

Los océanos y la vida que contienen son fundamentales para el funcionamiento saludable del planeta, pues suministran la mitad del oxígeno que respiramos y absorben anualmente un 26% de las emisiones antropógenas de dióxido de carbono emitidas a la atmósfera. Proporcionan innumerables servicios a las comunidades costeras de todo el mundo, entre otros, prestan servicios como: medios de subsistencia, agua limpia, productos forestales y protección contra la erosión y los fenómenos meteorológicos extremos. 

La biodiversidad marina es esencial para la salud del planeta y el bienestar social, gracias a esta los sectores de la pesca y la acuicultura son una fuente de ingresos para cientos de millones de personas, especialmente para las familias de bajos ingresos, y contribuyen directa e indirectamente a su seguridad alimentaria. 

Justamente, dados los recursos que el océano proporciona, con el paso del tiempo ha venido en aumento el desarrollado de asentamientos humanos cerca de la costa: el 38% de la población mundial vive a menos de 100 km de la costa, el 44% a menos de 150 km, el 50% a menos de 200 km y el 67% a menos de 400 km5. 

Es momento de actuar y sumarnos al llamado del 8 de junio, Día Mundial de los Océanos “Revitalización: Acción colectiva por el Océano”. Detener la contaminación y la pérdida de biodiversidad marina es indispensable, pues de los océanos dependemos todos, especialmente las comunidades de pescadores que cuentan con el recurso pesquero como medio de subsistencia y fuente de alimentación, problemática que se aborda en la conmemoración del 2022 como Año internacional de la pesca y la acuicultura artesanales (AIPAA). 

El AIPAA representa una oportunidad para destacar el importante papel que tienen la pesca y la acuicultura artesanales en pequeña escala para los sistemas alimentarios, medios de vida, la cultura y el medio ambiente. Los pescadores, piscicultores y trabajadores del sector pesquero en pequeña escala tienen un enorme potencial para promover cambios transformadores con respecto a la manera en que se producen, procesan y distribuyen el pescado y los productos pesqueros, cuyos efectos positivos en cadena tienen consecuencias en todo el sistema mundial de alimentos. 

Con este Año Internacional se busca crear conciencia sobre la importancia de la pesca y la acuicultura en pequeña escala, fortalecer la interacción entre la ciencia y las políticas, mejorar la protección y seguridad social de los pequeños pescadores y acuicultores, entre otros. 

Así, en esta misiva normas como el Código de Conducta para la Pesca Responsable o las Directrices voluntarias para lograr la sostenibilidad de la pesca en pequeña escala en el contexto de la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza y el Acuerdo del Estado Rector del Puerto (AMERP), pueden facilitar el proceso de adaptación por parte de los países para que los medios de vida de pescadores y acuicultores artesanales y de pequeña escala mejore. 

En Colombia la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca (AUNAP) y el Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras José Benito Vives de Andréis (INVEMAR) se han unidos para fortalecer las políticas y programas en favor de los pescadores y acuicultores de pequeña escala. 

Un ejemplo de ello, es la iniciativa SocPro4Fish, que como parte del proyecto ‘Uso responsable de los recursos pesqueros y acuícolas para el desarrollo sostenible’, busca promover la inclusión económica y fortalecer la resiliencia y la seguridad de los medios de vida de los pescadores y lo trabajadores de la pesca para hacer frente a los efectos y las perturbaciones de las crisis covariables a nivel macro y micro, aumentando la comprensión del escenario actual, reduciendo los obstáculos para acceder a la protección social y promoviendo las oportunidades económicas y una mejor gestión de los recursos, mediante el establecimiento de sinergias con otros sectores. 

Esta alianza viene adelantando diferentes actividades en pro de reconocer el importante papel que realizan los pescadores y acuicultores artesanales y de pequeña escala, buscando acercar a los consumidores para apoyar la compra responsable del producto pesquero, así como el impulso al producto nacional, con el ánimo de favorecer el crecimiento del sector en el país. 

Esta campaña, ‘Pesca y acuicultura artesanales: pequeña escala, gran valor’, busca sumar a todos los actores del sistema alimentario con el fin de construir bases sólidas que permitan mejorar sus condiciones de vida a partir del capital marino y acuícola del país, que brinda productos pesqueros de alta calidad y que hace parte de nuestra nutrición, cultura y gastronomía colombiana.
 

Contacto de prensa:
Ana Milena Reyes Arias
Oficina de Comunicaciones
Representación FAO Colombia