Líderes del sector público y privado de Colombia y la FAO, se reunieron para conocer avances y propuestas en relación a la resistencia a los antimicrobianos (RAM) bajo el enfoque Una Salud, en especial, la RAM transmitida por los alimentos. 

La RAM es una amenaza mundial para la salud pública, la sanidad animal, vegetal y del medio ambiente. En los sistemas productivos animales, la RAM incrementa la mortalidad y morbilidad animal, reduciendo así la productividad, y con ello el aumento de precios en los productos de origen animal y su comercio. 

En el sistema de producción de alimentos, la RAM también impacta sobre inocuidad de los alimentos, donde la presencia de agentes infecciosos resistentes a los antimicrobianos en los alimentos representa un riesgo potencial para la salud de la población. 

En este sentido, siguiendo los lineamientos de su Plan de Acción sobre la RAM, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) desempeña un papel clave en el apoyo a los gobiernos y otras partes interesadas para fortalecer las acciones en torno a disminuir los impactos de la RAM desde el sector de la alimentación y agricultura bajo el enfoque Una Salud. 

Garantizar el enfoque Una salud es esencial para avanzar en la prevención, detección y control de enfermedades que se propagan entre los animales y los seres humanos, haciendo frente a la RAM, asegurando la inocuidad de los alimentos y previniendo las amenazas para la salud humana y animal relacionadas con el medio. 

“Una Salud es un enfoque integrado y unificador, que tiene como objetivo equilibrar y optimizar la salud de las personas, los animales y los ecosistemas. Reconoce que la salud de los seres humanos, los animales domésticos y salvajes, las plantas y el medio ambiente, están estrechamente vinculados y son interdependientes”, expresó Marisa Caipo, Oficial de Inocuidad y Calidad Alimentaria, y Punto Focal Regional para RAM de FAO para América Latina y el Caribe, al dar apertura al encuentro. 

Esta reunión, realizada el pasado 15 de julio, fue el escenario de socialización del proyecto Implementación de las normas del Codex para apoyar la contención de la resistencia de los antimicrobianos (RAM) transmitida por los alimentos (Proyecto ACT), liderado por la FAO y el Centro Conjunto FAO/OMS (Normas Alimentarias del Codex y Enfermedades Zoonóticas (CJWZ por sus siglas en inglés). 

El proyecto global, que tuvo inicio en julio 2021, y que se desarrollará por 5 años en 2 países de América Latina (Bolivia y Colombia) y en 4 países de Asia (Camboya, Mongolia, Nepal, Pakistán), busca promover acciones mundiales y nacionales para apoyar la implementación, evaluación del uso e impacto de las normas Codex Alimentarius, especialmente las relacionadas con la contención y reduccion de la RAM transmitida por alimentos. 

“Identificar el estado actual y herramientas con las que cuentan los países, así como la vinculación de nuevos actores para fortalecer el trabajo intersectorial desde el sector de la alimentación y agricultura, son las primeras acciones que se adelantarán”, explicó María de los Ángeles Gatica, Coordinadora Regional del Proyecto ACT. 

Por su parte, Carlos Rivera y Aida Rojas, de la Dirección Técnica de Inocuidad e Insumos Veterinarios del Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), socio implementador del Proyecto ACT en Colombia, hicieron un recuento de las acciones que el país ha desarrollado en materia de la gestión de la RAM bajo el enfoque Una Salud y los desafíos en relación a la RAM transmitida por los alimentos. 

Carlos Rivera explicó a los participantes que desde 2007 el ICA viene trabajando en la RAM; en un primer momento con énfasis en el área avícola, y posteriormente con los Planes de vigilancia en RAM (más de 16 a la fecha), construidos a partir de la toma de más de 9.800 muestras. Actualmente se desarrolla el Programa de vigilancia y seguimiento de la RAM en la producción primaria agropecuaria, bajo el modelo de la alianza tripartita (OMS-OMSA-FAO). 

También resaltó la interacción con gremios, empresas, productores y centros de investigación; así como el desarrollo de guías y manuales para el uso adecuado de los antimicrobianos en el marco de estas alianzas. Se destacó además el avanzado desarrollo del Plan piloto integrado para la RAM con  participación gubernamental del Ministerio de Salud y Protección Social, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, ampliando de esta manera el marco de acción e integrando agendas ministeriales, y logrando así el propósito de articulación de acciones por Una Salud. 

“Aún continuan vigentes retos como la formulación de la normativa RAM, el incremento presupuestal, la profundización de áreas de investigación, el fortalecimiento de los laboratorios nacionales y el manejo de la información”, concluyó Carlos Rivera. 

Uriel Sierra, Subgerente de Análisis y Diagnóstico del ICA, y punto focal del proyecto ACT, se adhirió a sus colegas, diciendo que “este proyecto es el reconocimiento a la labor que Colombia ha venido desarrollando en materia de RAM; esperamos seguir fortaleciendo el Plan Nacional e integrando a nuevos actores para fortalecer los objetivos del plan, y así mejorar el sistema de vigilancia para la generación de datos para la toma de decisiones, continuar impulsando la concienciación y la gobernanza”. 

De la misma manera, Ana Carrizosa, punto focal FAO del proyecto en Colombia, dio cierre al encuentro haciendo la invitación a participar activamente del proyecto y a buscar ampliar las alianzas para trabajar juntos por Una Salud, disminuyendo el impacto de la RAM.