La Organización de las Naciones Unidas para la alimentación y la agricultura FAO y la Unidad de Planificación de Tierras Rurales, Adecuación de tierras y Usos agropecuarios UPRA, se encuentran  desarrollando un Convenio denominado “Marco conceptual, legal e institucional de la concentración y extranjerización de tierras rurales productivas en Colombia, como una contribución a la aplicación de las Directrices Voluntarias de la gobernanza responsable de la tierra, la pesca y los bosques en el contexto Colombiano”. La Mesa de Expertos se convino como un aporte técnico dentro del Convenio. 

Conclusiones 

1. La concentración de tierras como fenómeno mundial motivó la formulación de las Directrices Voluntarias sobre la Gobernanza responsable de la tenencia de la tierra, la pesca y los bosques.
2. Es necesario armonizar las políticas públicas existentes y sus instrumentos, con las Directrices Voluntarias sobre la Gobernanza responsable de la tenencia de la tierra, la pesca y los bosques y sus principios; y que las nuevas políticas públicas y los cambios institucionales también los tengan en cuenta.
3. Es necesaria la discusión técnica y abierta respecto a la concentración y extranjerización de tierras y a partir de ella generar lineamientos de regularización en estos temas.
4. Es evidente la necesidad de generar una política pública que aborde el tema del acaparamiento en sus dimensiones de concentración y extranjerización desde sus diferentes aristas, sectores y competencias.
5. Para combatir la concentración inequitativa de tierras en Colombia es necesario promover el cumplimiento de la función social y ecológica de la propiedad, orientando el uso eficiente del suelo de acuerdo con su aptitud.
6. Se deben tomar medidas que permitan poner a producir la tierra haciendo un uso eficiente de ella, para ello se propone recurrir a instrumentos fiscales y tributarios que incentiven su uso adecuado y se trabaje por una mejor distribución de los ingresos y de la renta. En este escenario es importante definir la frontera agrícola. .
7. La concentración de tierras tiene relación directa con los conflictos por el uso del suelo entre diferentes sectores (agricultura, ambiente, minería).
8. Los análisis de concentración de tierras deben hacerse simultáneamente con los relacionados con el fraccionamiento de la propiedad. Estos dos fenómenos coexisten en Colombia y son expresiones de la desigualdad en la distribución de la tenencia de la tierra.

9. Es necesario coordinar el trabajo nacional y territorial dentro del marco del acceso y distribución  de la tierra, teniendo en cuenta que el problema de la tierra no es un  asunto local sino universal.
10. Se debe pensar en el modelo de      país que queremos y con base a ello definir cuál debe ser el modelo de      ocupación del territorio. Se debe hacer una política en la que TODOS      podamos coexistir en el país, grandes, medianos y pequeños; que parta del      reconocimiento de que la tierra es un recurso limitado, escaso e      irreproducible
11. Existen actualmente múltiples normas e instrumentos pero no han tenido efecto en una distribución equitativa de      la propiedad y tenencia de la tierra, por lo que un nuevo marco regulatorio      debe tener en cuenta:

-          Cuáles son las tierras disponibles (oferta y demanda).

-          La necesidad de producir alimentos en el marco de la seguridad y soberanía alimentaria.

-          Los requerimientos de coordinación interinstitucional, intersectorial y trabajo nación y territorios.

-          La participación en la toma de decisiones frente al territorio de los diferentes actores y de la población afectada.

12. El mercado asistido de tierras, la expropiación, la extinción de dominio son instrumentos de la legislación agraria vigente que deben usarse para limitar la concentración de la tierra rural.

13. Para un adecuado análisis y seguimiento de los fenómenos de concentración y extranjerización de tierras es necesario contar con información registral y catastral actualizada.

14. La consolidación del Catastro Multipropósito Nacional permitirá conocer la realidad del país en cuanto al fraccionamiento antieconómico y la concentración inequitativa de la propiedad rural y avanzar en la elaboración de lineamientos e instrumentos de política pública efectivos que permitan contrarrestar estos fenómenos extremos.