Expertos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Centro Nacional de Sanidad Agropecuaria (CENSA) desarrollan un programa de asistencia técnica para promover el enfoque "Una Salud" en Cuba y la agenda de sanidad agropecuaria en apoyo al fortalecimiento de la agricultura sostenible.  

El enfoque "Una Salud" fomenta la coordinación y la colaboración entre los diferentes marcos de gobernanza de los programas de salud humana, animal, vegetal y medioambiental, con el propósito de mejorar la prevención y la preparación para los retos actuales y futuros a la salud en la interfaz entre los seres humanos, los animales y el medioambiente.

Como parte de las actividades, se desarrolló este martes un intercambio en el que participaron Nivian Montes de Oca, directora del CENSA; Ileana Morales, directora de ciencia e innovación tecnológica en Ministerio de Salud Pública, así como directivos e investigadores de los ministerios de Agricultura y Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, el Instituto Nacional de Higiene Epidemiología y Microbiología, Instituto de Investigaciones en Sanidad Vegetal, entre otros.  

Jaime Cárdenas, especialista en protección vegetal y gestión de riesgos de la FAO, destacó que entre los objetivos de la misión se encuentra el fortalecimiento y determinación de posibles mecanismos de vigilancia epidemiológica multidisciplinaria e intersectorial para la alerta temprana y la respuesta rápida ante emergencias.  

Otro de los propósitos es la elaboración de recomendaciones para el desarrollo de protocolos de actuación ante plagas y enfermedades de importancia global y el fortalecimiento de capacidades nacionales en cuanto a la situación fito/zoosanitaria, y estrategias de manejo y control, precisó Cárdenas. 

El experto reconoció el trabajo multidisciplinario e intersectorial que desarrolla Cuba para garantizar alertas tempranas y respuestas rápidas para el pronóstico y modelación.  

Por su parte Eva Bravo, especialista en sanidad animal de la Oficina Regional de la FAO para Mesoamérica, subrayó que el 60 por ciento de las enfermedades infecciosas en humanos son de origen animal, y el 75 de las enfermedades humanas infecciosas emergentes también tienen un origen animal. 

María Irian Percedo, investigadora titular del Centro Nacional de Sanidad Agropecuaria, socializó algunas de las experiencias del trabajo intersectorial para la implementación de la estrategia nacional de Una Salud en Cuba.  

Percedo explicó que para Cuba se define como la estrategia para el logro de la salud óptima de las personas, animales, plantas y el ambiente mediante acciones de prevención, control y respuesta rápida ante cualquier peligro, acciones que deben desarrollarse a través de la colaboración intersectorial y multidisciplinaria, desde las comunidades hasta el nivel nacional, maximizar el uso racional de los recursos del país, y que garantice el desarrollo armónico y sostenible de la sociedad. 

Dentro de las capacidades existentes en la isla, resaltan los estudios territoriales  sobre desastres sanitarios en animales, plantas y personas, y programas de prevención y control de enfermedades. Acompañados de sistemas de vigilancia epidemiológica, laboratorios de diagnóstico y centros de referencia e investigación para diferentes peligros en sectores responsables, instituciones docentes, un plan de Estado para enfrentar el cambio climático (Tarea Vida), entre otros, indicó. 

Durante su estancia en Cuba, los expertos abordarán otras áreas de trabajo prioritarias y sostendrán intercambios con diferentes institutos y ministerios en torno a la vigilancia epidemiológica y el diagnóstico, la resistencia antimicrobiana, la zoonosis, la inocuidad y seguridad alimentaria, así como las experiencias del enfoque “Una salud” en el sector agropecuario.  

FAO, junto con otros programas y organismos internacionales, promueve la aplicación de “Una salud” entre las áreas programáticas prioritarias de su Marco Estratégico para 2022-2031, con el propósito de fortalecer el funcionamiento de los sistemas integrados “Una salud” nacionales e internacionales con la mejora de la prevención de plagas y enfermedades, la alerta temprana y la gestión de riesgos sanitarios.

(Con información de Prensa Latina)