En respuesta a la degradación de los suelos, una de las principales problemáticas ambientales en Cuba, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura impulsa la mejora de los análisis de suelos agrícolas en el país, a través de la adquisición de equipamiento avanzado y la capacitación de especialistas, en apoyo a la implementación del Programa Nacional de Conservación y Mejoramiento de Suelos.

Según las investigaciones del Instituto de Suelos del Ministerio de la Agricultura de Cuba, más del 75 % de la superficie agraria de la isla está afectada por factores que limitan su productividad. Esto incluye erosión, compactibilidad, bajo contenido de materia orgánica, salinidad, baja retención de humedad, pedregosidad y drenaje deficiente.

En respuesta a este problema, la FAO prioriza la adquisición de equipos e insumos avanzados para fortalecer las capacidades de análisis de suelos del país en colaboración con el Ministerio de la Agricultura, como parte del proyecto Resiliencia Climática en ecosistemas agrícolas de Cuba (IRES), financiado por el Fondo Verde para el Clima.

El propósito es el fortalecimiento de tres laboratorios de suelos en las provincias de Las Tunas, Villa Clara y Matanzas, garantizando un servicio de mayor calidad en los análisis de suelos y aguas a los beneficiarios.

El nuevo equipamiento adquirido incluye balanzas técnicas de precisión, balanzas analíticas, campana de extracción de gases de laboratorio, fotómetro analítico de llama, así como instrumentos necesarios para muestreos y análisis, como pipetas automáticas, probetas, placas petri, tubos de ensayo, matraz aforado y frascos de cristal. Además, se están adquiriendo diversos reactivos de laboratorio que permitirán desarrollar varios métodos analíticos.

Los laboratorios mejorados permitirán un monitoreo y verificación socio-medioambiental más eficaz de las transformaciones agrícolas, mejorar la caracterización de las fincas y aplicar medidas específicas estipuladas en el Programa Nacional de Conservación y Mejoramiento de Suelos.

El fortalecimiento tecnológico de los laboratorios también se acompañará de capacitación técnica a los especialistas en suelos y a los productores, con el objetivo de potenciar el impacto de estas mejoras.

La FAO está comprometida con el desarrollo de sistemas alimentarios sostenibles y resilientes en Cuba y continuará trabajando en estrecha colaboración con el Ministerio de la Agricultura para maximizar el potencial productivo de los suelos del país.

Con 43,6 millones de USD del Fondo Verde para el Clima, el Fondo para el Medio Ambiente Mundial y la Unión Europea, FAO trabaja en Cuba por una mejor gestión ambiental y una mayor resiliencia climática con la restauración productiva sostenible de 35 000 hectáreas de tierras, la conservación de 12 recursos fito y zoogenéticos de interés para la alimentación y la agricultura y el uso intensivo de la gestión de conocimientos, tecnologías e innovaciones agroecológicas con beneficios para 19 comunidades rurales y  63 000 familias.