FAO en Cuba

MINAG y FAO fortalecen capacidades para la producción local de semillas en Cuba

14/11/2023

Compartir tendencias modernas para la producción local de semillas y su conservación artesanal fue el propósito del curso sobre fundamentos y técnicas para la producción local de semillas en la red de fincas de la Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar, celebrado del 6 al 10 de noviembre en La Habana.  

El evento fue organizado por el Ministerio de Agricultura de Cuba (MINAG) con asistencia técnica de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en el marco del Programa de Cooperación Técnica "Apoyo en la respuesta a la COVID 19 para mantener el funcionamiento de los sistemas alimentarios en Cuba" 

Participaron en el encuentro directivos y especialistas de semillas y la agricultura urbana, suburbana y familiar de la región oriental de Cuba; Yanisbell Sánchez Rodríguez, directora de semillas y recursos fitogenéticos del MINAG; Miriam Carrión, especialista de la Dirección de agricultura urbana, suburbana y familiar, investigadores del Instituto de Investigaciones Fundamentales en Agricultura Tropical “Alejandro de Humboldt” (INIFAT) y Nohelia Rodríguez consultora en desarrollo organizativo de bancos locales de semillas de la FAO en Venezuela.   

En las jornadas se compartieron temas relacionados con el proceso de producción, cosecha y beneficio de las semillas en cultivos como la lechuga, la acelga, el rábano, la habichuela, el pepino, el quimbombó, el tomate y otros vegetales y hortalizas de importancia para la alimentación.  

Yanisbell Sánchez Rodríguez compartió aspectos relevantes sobre la política de producción de semillas en Cuba, en referencia al Decreto Ley 388, que regula y explica su conservación, comercialización y producción, el sistema de certificación de semillas, las contravenciones de personas naturales o jurídicas, así como el programa de mejoramiento genético que desarrollan las instituciones científicas cubanas. 

"Contar con semillas de calidad garantiza una parte muy importante del rendimiento que se puede obtener. Por eso se da tanta importancia a las semillas y se trata de priorizar y mantener la capacitación de personas que continuamente pueden ir aprendiendo y mejorando, para que las semillas realmente tengan calidad”, señaló. 

Por su parte Nohelia Rodríguez socializó experiencias de proyectos de la FAO en Venezuela relacionados con el fortalecimiento de capacidades técnico-científicas sobre el manejo de los cultivos con disminución de insumos para la producción de semillas en cereales y leguminosas y destacó la importancia de la organización, establecimiento y producción de bancos locales como estrategia para su conservación. 

La experta también conversó sobre el mejoramiento genético participativo, el incremento y consolidación de la biodiversidad local, la permanencia de la oferta durante el año y el balance nutricional de la población. 

Como parte del curso, los participantes visitaron dos fincas de referencia en la producción local de semillas pertenecientes al municipio San José de las Lajas, en la occidental provincia de Mayabeque.  

Gabriel Suárez, productor de la finca agroecológica "La milagrosa" perteneciente a la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) "Manuel Fajardo" se refirió a la experiencia que tiene la finca en la formación vocacional de las nuevas generaciones en temas vinculados a la producción de semillas. El ingeniero agrónomo también reveló sus aspiraciones de convertir el espacio productivo en una finca escuela para socializar y transmitir sus conocimientos.  

Por su parte, María Luisa García Suárez, de la finca “La Chivería” vinculada a la CCS “Paco Cabrera”, comentó su amplia experiencia en la producción de semillas. 

“Nosotros renovamos las semillas todos los años. Tenemos semillas de cultivos varios, hortalizas y granos y aquellas que no alcanzan para sembrar en las seis hectáreas que tiene la finca se las hacemos llegar a otros productores del municipio con los que también vamos intercambiando y renovando las variedades”, indicó.    

La pandemia de la COVID-19 tuvo un impacto significativo para la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo. La crisis afectó a los sistemas agroalimentarios y los medios de vida rurales como consecuencia del confinamiento, la desaceleración económica mundial, las afectaciones en las cadenas de suministros y las subidas desiguales de precios de los alimentos.  

En tal sentido FAO cuenta con un Programa integral y holístico de respuesta y recuperación a la COVID-19 para abordar de manera proactiva y sostenible los impactos socioeconómicos de la pandemia. En línea con el enfoque de la ONU para "reconstruir mejor", y en la persecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, su objetivo es mitigar los impactos inmediatos de la pandemia al tiempo que fortalece la resiliencia a largo plazo de los sistemas alimentarios y los medios de vida.