Crece conciencia mundial sobre protección de los suelos
La Habana.- En 2015 el mundo adquirió mayor conciencia de la necesidad de preservar los suelos, que constituyen un recurso esencial para garantizar la seguridad alimentaria, dijo hoy aquí un funcionario de la FAO.
Entrevistado por Prensa Latina, el representante en Cuba de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Theodor Friedrich, aseguró además que la celebración del Año Internacional del Suelo fue una gran contribución en ese sentido.
También coadyuvó de manera notable la actividad de la Alianza Mundial por el Suelo, y sus mensajes y los de otras instituciones a favor del cuidado de la capa cultivable, sin la cual no se puede producir alimentos, añadió.
A juicio de Friedrich, un resultado muy importante lo constituye que la FAO ha sido convocada para establecer un código conductor del manejo del suelo, una guía para la acción.
También en 2015 se reportaron avances en cuanto a las legislaciones relacionadas con ese recurso, más aun teniendo en cuenta que incluso hay países que han carecido de estos documentos normativos.
El representante de la FAO consideró que el tema del suelo es permanente, dada su importancia.
Su formación- agregó- es muy lenta y delicada y los procesos de degradación tan globales, que hacen que si no se detiene esta tendencia el mundo quedará sin terrenos productivos, lo que representaría una amenaza para la supervivencia humana.
Ponderó la experiencia que lleva a cabo la agricultura cubana con la creación de los polígonos de suelos, una concepción sostenible sobre el cuidado y conservación de ese recurso, la cual se extiende por provincias y municipios de la isla.
Además de mantener el 95 por ciento de la producción de alimentos, esa capa cultivable alberga más de una cuarta parte de la biodiversidad del planeta, representa una fuente importante de productos farmacéuticos, y desempeña un papel fundamental en el ciclo del carbono.
Según expertos, actualmente la degradación del suelo se calcula en un 33 por ciento a nivel mundial, lo cual, además de ser alarmante, tiene el potencial de poner en peligro la seguridad alimentaria y enviar muchas personas a la pobreza, que alcanza a 800 millones de personas.
Se calcula que para el 2050 la población mundial crecerá a nueve mil millones de habitantes, cuya alimentación será un gran reto si no se pone freno a la degradación de los suelos. (Por Roberto Salomón. Tomado de Prensa Latina)