Director General QU Dongyu

El Director General de la FAO pronuncia un discurso durante la puesta en marcha de la Iniciativa de alerta temprana para el Caribe

06/02/2023

Bridgetown (Barbados) - El Sr. QU Dongyu, Director General de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), pronunció un discurso hoy en Bridgetown (Barbados) durante la puesta en marcha del Plan de acción ejecutivo de la Iniciativa de alerta temprana para todos para el Caribe (en adelante, “la Iniciativa”), un acto concebido para movilizar entre los gobiernos de la región apoyo a un plan de las Naciones Unidas que ayuda a proteger a la población y sus bienes del creciente número de catástrofes naturales de una forma eficaz y relativamente económica.

El acto contó con el apoyo y el liderazgo de la Sra. Mia Amor Mottley, Primera Ministra de Barbados, y del Sr. Philip J. Pierre, Primer Ministro de Santa Lucía. La Sra. Amina J. Mohammed, Vicesecretaria General de las Naciones Unidas, también pronunció un discurso de apertura en la puesta en marcha regional de la Iniciativa, una iniciativa de las Naciones Unidas presentada durante la 27.ª Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, celebrada el pasado noviembre en Sharm el-Sheikh (Egipto).

En su intervención en Bridgetown, el Director General pidió a la región del Caribe que estableciera “sistemas agroalimentarios más sostenibles”.

El Sr. QU declaró que la FAO contaba con un marco estratégico decenal sobre “la manera de transformar juntos los sistemas agroalimentarios” a fin de hacerlos “más eficientes, más inclusivos, más resilientes y más sostenibles, en aras de una mejor producción, una mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una vida mejor sin dejar a nadie atrás”.

Con su rico caudal de conocimientos especializados en sistemas de alerta temprana y acción preventiva basada en los riesgos, así como con su presencia en más de 130 países, la FAO puede desempeñar un papel fundamental para ayudar a proteger los medios de vida agrícolas y apoyar la producción local de alimentos de cara a las perturbaciones previstas.

Entre 2008 y 2018, el sector agrícola (incluidos los cultivos, la ganadería, la actividad forestal, la pesca y la acuicultura) absorbió el 26 % de las repercusiones globales causadas por catástrofes de mediana y gran escala en países de ingresos bajos y medianos bajos.

Y los pequeños Estados insulares en desarrollo (PEID) como Barbados, donde tenía lugar la reunión, estaban especialmente expuestos. Durante ese mismo período, las pérdidas registradas en la producción agrícola y ganadera de los PEID del Caribe relacionadas con catástrofes ascendían a 8 700 millones de USD, lo que correspondía a alrededor del 14 % de la producción potencial, según datos de la FAO.

El papel de la FAO

Desde 2016, la FAO ha sido uno de los organismos pioneros en acción preventiva y ha ayudado a más de 40 países a vincular las alertas tempranas a la acción preventiva para proteger los medios de vida agrícolas y la seguridad alimentaria de la población más vulnerable.

La FAO también ofrece servicios y herramientas clave de alerta temprana de alcance mundial, como el Sistema mundial de información y alerta sobre la alimentación y la agricultura (SMIA), el Sistema mundial de alerta anticipada de la FAO-OIE-OMS para la detección de nuevas amenazas y riesgos para la salud en la interfaz entre los seres humanos, los animales y los ecosistemas (GLEWS), el Observatorio de la langosta del desierto y el Sistema predictivo de alerta temprana para la ganadería (PLEWS), entre otros.

Asimismo, elabora análisis prospectivos centrados en la inseguridad alimentaria aguda, como el informe “Hunger Hotspots” (Puntos críticos del hambre) de la FAO y el Programa Mundial de Alimentos.

Solo en 2021, la FAO prestó apoyo a más de 90 países para reforzar los sistemas de alerta temprana vinculados a riesgos de catástrofes y en materia de seguridad alimentaria.

En particular, el SMIA ha estado activo en el ámbito de la alerta temprana sobre la alimentación y la agricultura por casi 50 años y está listo para respaldar la Iniciativa de alerta temprana para el Caribe.

Es imperiosa la necesidad de contar con sistemas de alerta temprana sobre amenazas múltiples que sean inclusivos y accesibles, ya que el número de catástrofes registradas se ha quintuplicado, impulsado en parte por el cambio climático causado por el hombre y la intensificación de los fenómenos meteorológicos extremos, así como por otros peligros como terremotos, tsunamis y, más recientemente, pandemias.

Los sistemas de alerta temprana se consideran en general una forma eficaz y relativamente económica de proteger a la población y sus bienes. Por ejemplo, estudios realizados desde el Sudán hasta Mongolia demuestran que, por cada dólar de los EE.UU. invertido en acción preventiva, las familias pueden obtener hasta 7 USD en beneficios y pérdidas evitadas.

Al predecir dónde van a producirse los peligros y destinar recursos cuando todavía se puede salvar a la población y sus bienes, la acción preventiva es más eficaz y más digna, ya que brinda a las personas los recursos para salvar sus medios de vida antes de que sean arrasados y haya que reconstruirlos.

“Juntos podemos llegar lejos y llegar mejor”, afirmó el Director General.