ALIMENTOS PARA TODOS: CONFLICTOS ALIMENTARIOS Y EL FUTURO DE LOS SISTEMAS ALIMENTARIOS

ALIMENTOS PARA TODOS: CONFLICTOS ALIMENTARIOS Y EL FUTURO DE LOS SISTEMAS ALIMENTARIOS

Discurso del
Sr. QU Dongyu, Director General de la FAO

Lunes, 31 de mayo de 2021

 

Distinguidos participantes,

Señoras y señores:

1. En la edición de 2017 de El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo ya se nos advertía que, junto con las perturbaciones relacionadas con el clima, los conflictos y la recesión económica eran la causa en gran parte del incremento de la inseguridad alimentaria.

2. Los datos mostraban niveles más elevados de inseguridad alimentaria y desnutrición crónica y aguda en los países afectados por conflictos.

3. A principios de este mes, la FAO y sus asociados presentaron la edición de 2021 del Informe mundial sobre las crisis alimentarias.

4. El informe confirmó la aceleración de la tendencia al alza de la inseguridad alimentaria aguda; los conflictos, las crisis económicas y los fenómenos climáticos extremos siguen siendo los factores principales.

5. En 2020, al menos 155 millones de personas en 55 países y territorios experimentaron inseguridad alimentaria aguda —a nivel de crisis o peor—, lo que supone un aumento de unos 20 millones de personas respecto al año anterior.

6. Dos tercios de estas personas —casi 100 millones— se vieron afectadas por la inseguridad alimentaria aguda a causa de conflictos.

7. Los conflictos y el hambre se potencian mutuamente, tenemos que abordarlos juntos para acabar con este círculo vicioso.

8. Hablando claro: abordar el problema del hambre es la base para la estabilidad y la paz.

9. La FAO es un miembro activo del Equipo de tareas de alto nivel del Secretario General de las Naciones Unidas para la prevención de la hambruna en 2021, que busca precisamente eso.

10. Esto es, en efecto, fundamental.

11. Y, sin embargo, es más importante que nunca que abordemos las causas profundas de los crecientes niveles de inseguridad alimentaria aguda.

12. Sí, queremos superar el riesgo de vivir situaciones más graves en 2021.

13. Pero no podemos permitirnos tener que volver a hacerlo el año que viene o el siguiente.

14. ¡El ciclo debe terminar!

 

Señoras y señores:

15. Las perspectivas para 2021 y los años siguientes son sombrías.

16. La pandemia de la enfermedad por coronavirus (COVID-19) ha puesto de manifiesto la fragilidad de nuestros sistemas agroalimentarios mundiales.

17. Ha evidenciado la necesidad de contar con sistemas agroalimentarios más eficientes, inclusivos, resilientes y sostenibles.

18. Más de 1 500 millones de personas viven en países afectados por situaciones de fragilidad y conflictos.

19. Uno de los mayores y más urgentes retos de nuestro tiempo es, por tanto, ayudar a esos países a encontrar un camino hacia la paz y el desarrollo sostenibles.

20. Se necesitan acciones coherentes entre los actores humanitarios, del desarrollo y de la paz, para abordar las causas subyacentes de la inseguridad alimentaria aguda.

21. Para la FAO, aumentar la resiliencia de los medios de vida basados en la agricultura es una prioridad institucional.

22. La experiencia de la FAO muestra que las intervenciones que apoyan los medios de vida y la seguridad alimentaria tienen importantes repercusiones en la paz local, ya que abordan no solo los síntomas, sino también las causas fundamentales de los conflictos.

23. Por ejemplo, la inestabilidad se ha convertido en una característica prominente en el Sahel, donde los países se han visto especialmente afectados por la inseguridad alimentaria aguda en 2020.

24. A pesar de los esfuerzos a gran escala y con respaldo internacional, la paz sigue siendo frágil en muchas zonas.

25. Este ha sido el caso, en particular, de las comunidades pastoriles y agropastoriles, cuyos medios de vida se han visto cada vez más erosionados en el Sahel y en otros lugares.

26. En esta región, la producción ganadera aporta casi la mitad del producto interno bruto (PIB) agrícola.

27. Además, el pastoreo representa una de las opciones de subsistencia más viables en las zonas áridas y contribuye al bienestar social, medioambiental y económico.

28. En muchas zonas, la relación entre los agricultores y los pastores, que antes era de colaboración, se ha convertido en una confrontación, ya que compiten por los mismos recursos escasos.

29. La FAO y otros organismos están reforzando la resiliencia de estas comunidades, centrándose en las zonas transfronterizas, donde la inseguridad y la fragilidad son especialmente graves.

30. Los conflictos también causan alteraciones en la producción, la elaboración y la distribución, lo que provoca pérdidas de alimentos.

31. Los análisis han demostrado una correlación inversa entre la producción de alimentos y los casos de violencia.

 

Estimados amigos:

32. La evidencia es clara: donde hay conflictos e inestabilidad generalizados hay inseguridad alimentaria, pérdida de alimentos y sistemas agroalimentarios menos resilientes.

33. Y el hambre suele contribuir a la inestabilidad y a los conflictos.

34. Es probable que múltiples perturbaciones sigan abocando a más personas a la inseguridad alimentaria aguda.

35. Para hacer frente a las crisis alimentarias se necesitan inversiones suficientes y bien orientadas en todo el nexo entre la ayuda humanitaria y el desarrollo para apoyar la paz, además de una respuesta humanitaria sostenida.

36. Podemos invertir las tendencias de aumento de la inseguridad alimentaria aguda y transformar los sistemas agroalimentarios.

37. ¡Aunemos nuestros esfuerzos y alcancemos juntos un futuro mejor!

38. Con una mejor producción, una mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una vida mejor para todos.

39. ¡Sin que nadie se quede atrás y con alimentos para todos!

40. Gracias.