Director General QU Dongyu

Primera Conferencia Mundial de Trabajo de Representantes de la FAO, 2023 Discurso de apertura

del Sr. QU Dongyu, Director General de la FAO

12/12/2023

Estimados y estimadas colegas:

 

Bienvenidos a la Sede de la FAO y de todos ustedes.

 

Cuando asumí el cargo en agosto de 2019, dije a mi Director General Adjunto Superior de aquel entonces, Dan Gustafson, que me proponía formar una gran familia de la FAO. Desde hoy y a lo largo de esta semana me complace ver a la familia entera reunida aquí.

 

Se trata sin duda de una ocasión histórica que, espero, inaugure una larga tradición en años venideros. Cada año celebraremos una conferencia de trabajo anual; hemos empezado por Roma, pero iremos rotando para celebrarla en todas las regiones siguiendo el orden cronológico de las conferencias regionales.

 

Me complace ver a tantos colegas enérgicos y motivados de todas las oficinas de la FAO en el mundo, junto con el Equipo directivo central y colegas de la Sede.

 

Debemos esforzarnos por rendir cuentas ante nuestros Miembros y nuestros asociados.

 

Hoy asistimos a la encarnación del acto de pensar juntos, trabajar juntos, aprender juntos y crecer juntos como una familia de la FAO.

 

Como familia que somos, debemos apreciar nuestros valores familiares, incluso cuando estemos en desacuerdo.

 

Esta reunión también me ofrece la oportunidad de transmitir en persona mi agradecimiento y reconocimiento a quienes de ustedes trabajan en primera línea.

 

Esta semana tienen lugar varios actos importantes: el galardón para los mejores 100 jóvenes y 100 jóvenes de espíritu, los premios de reconocimiento a los empleados, la ceremonia de entrega de medallas por 25 años de servicio y la presente Conferencia Mundial de Trabajo de Representantes de la FAO. Me complace de verdad que hayan podido sumarse a nosotros en la Sede de la FAO para asistir a estas importantes ceremonias.

 

Gracias a todos por su dedicación, su pasión y su contribución a la Organización a favor de nuestros Miembros, especialmente a quienes trabajan en situaciones sumamente complejas. Deseo hacer particular mención del Afganistán, el Sudán, el Yemen, la región de Tigray en Etiopía, Sudán del Sur, Haití, Somalia, etc.

 

Recuerden que no somos una organización “de moda”. Representamos a los agricultores, trabajamos a favor de la población vulnerable. No somos una organización rica y debemos generar resiliencia. Como Director General de la FAO me rijo a diario por esta filosofía.

 

Nos hemos reunido en Roma para elaborar juntos un plan de acción concreto dirigido a fortalecer nuestra labor con fines como los siguientes:

  • mejorar nuestra gestión interna con apoyo adecuado de la Sede para hacer frente a las dificultades específicas que ustedes encuentran; no podemos cambiar nuestra historia, pero sí podemos cambiar nuestra cultura;
  • garantizar una red coherente;
  • incrementar nuestras capacidades sistemáticas;
  • redirigir nuestra labor para que se oriente en mayor medida a la obtención de resultados.

 

También debemos renovar, restablecer y reorientar nuestra estrategia de trabajo y modelo operativo —cada uno de ustedes debe determinar un modelo operativo propio que encaje en su contexto particular—, así como nuestro compromiso con nuestro mandato, lo cual allanará el camino a una ejecución y operaciones eficaces que desemboquen en resultados concretos sobre el terreno.

 

Para ello, deben actuar en consonancia con la Constitución de la FAO y con los Textos fundamentales y el Reglamento General de la Organización y en función de sus condiciones locales específicas.

 

Recordemos que nuestros principales clientes son los agricultores, los consumidores, las mujeres, los jóvenes, los Pueblos Indígenas y las poblaciones rurales de todo el mundo.

 

Nuestra aspiración centrada en las cuatro mejoras, que estructuran nuestro Marco estratégico de los próximos ocho años, orienta nuestras medidas dirigidas a ayudar a los Miembros a acelerar el logro de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

 

Las cuatro dimensiones interconectadas de la transformación de los sistemas agroalimentarios también concuerdan directamente con nuestro mandato.

 

Las cuatro mejoras llevan cuatro años siendo nuestra prioridad y seguirán siéndolo los próximos cuatro años y, cabe esperar, en adelante a medida que trabajemos juntos por la transformación de nuestros sistemas agroalimentarios a fin de que sean más eficientes, inclusivos, resilientes y sostenibles.

 

Desde el comienzo de mi segundo mandato como Director General de la FAO, he puesto de relieve la necesidad adicional de orientar el cambio interno de la Organización desde la óptica de las “cuatro erres”:

  • La primera es la RECUPERACIÓN de la pandemia y las instalaciones averiadas, especialmente sobre el terreno. Estamos en contacto con las oficinas regionales pertinentes para velar por la mejora y modernización de las instalaciones.
  • La segunda es la REFORMA de nuestros sistemas y nuestra gestión de manera que se ajusten a los fines previstos y a nuestro mandato.
  • La tercera es la RECONSTRUCCIÓN de la red y la amplia capacidad de la FAO.
  • La cuarta es el RENACIMIENTO de la Organización en aras de un futuro mejor. En la historia de Europa, donde se acuñó este término, “renacimiento” se refiere a un nuevo comienzo tras un período de oscuridad prolongado.

 

Las “cuatro erres” parten de la labor que emprendimos juntos en el marco de las “cuatro es”:

  • Eficiencia
  • Eficacia
  • Desempeño extraordinario
  • Excelencia

 

Habrán observado que tengo cierta preferencia por el número cuatro. La explicación científica es que, por ejemplo, las sillas tienen cuatro patas para ser estables.

 

El número cuatro es un símbolo poderoso, por ejemplo, de los cuatro elementos (fuego, agua, tierra y aire) que en muchas culturas de la antigüedad representaban los componentes básicos de la vida, además de ejercer gran influencia en nuestro bienestar físico y emocional.

 

También simboliza las cuatro semanas de un mes y las cuatro estaciones del año (invierno, primavera, verano y otoño), que son fundamentales para el ciclo de la vida y necesarias para que las plantas crezcan como deben.

 

Además, se creía que los cuatro puntos cardinales sostenían el mundo en tanto debía reinar la armonía entre los cuatro confines del planeta para que prosperáramos.

 

Estimados y estimadas colegas:

 

El Programa de trabajo y presupuesto para 2024-25 respalda las cinco dimensiones clave para los próximos cuatro años que establecí en relación con mi segundo mandato:

  • Primera: fortalecer aún más la movilización de recursos y ampliar tanto las asociaciones tradicionales como las nuevas.
  • Segunda: aprovechar plenamente el potencial de la FAO y avanzar en la innovación impulsada por la transformación.
  • Tercera: a través del Foro Mundial de la Alimentación, ayudar a promover planes de inversión específicos de los países que forman parte de la Iniciativa Mano de la mano para prestar apoyo a los países menos desarrollados.
  • Cuarta: fortalecer la capacidad de la FAO y su competencia para servir a sus Miembros.
  • Quinta: mejorar el desarrollo de los recursos humanos y atraer talentos de todos los rincones del mundo.

 

La nueva estructura orgánica modular y flexible de la Sede es una de las principales iniciativas que emprendí desde que llegué a mi cargo y sigue siendo uno de los componentes fundamentales para la ejecución del Marco estratégico.

 

Ahora centramos nuestra atención en una red descentralizada eficiente, ágil y moderna tras haber ultimado el examen y la reestructuración de las oficinas regionales y subregionales.

 

Entramos ahora en la fase de transformación del modelo operativo de la FAO en lo que respecta a las oficinas en los países.

 

Por eso estamos celebrando la presente Conferencia Mundial de Trabajo.

 

El propósito es promover la calidad, las oportunidades y la eficacia de la red regional y el apoyo a las oficinas de la FAO en los países, fomentando a la vez la colaboración y poniendo fin a la compartimentación entre los equipos y las unidades regionales, subregionales y nacionales.

 

A raíz de una colaboración y un intercambio de experiencias de ámbito intercontinental entre los representantes de la FAO se prestará a nuestros Miembros un mayor volumen de servicios de forma más eficiente y eficaz, lo cual redundará en beneficio de quienes más necesitan la FAO.

 

Los aliento a que forjen relaciones válidas y firmes con los gobiernos de los países en que están ubicadas las oficinas y a que se pongan en contacto con colegas de distintas regiones y continentes.

 

Tras la reestructuración de las oficinas regionales y subregionales en 2022, las oficinas descentralizadas deben posicionarse estratégicamente dentro del sistema de las Naciones Unidas.

 

El Marco estratégico de la FAO sirve a las oficinas en los países de poderosa hoja de ruta y conjunto de instrumentos que pueden aprovechar para reposicionarse.

 

Debemos seguir trabajando con más ahínco como Una FAO unificada para velar por que nuestros colegas que trabajan en el ámbito nacional dispongan de los instrumentos y los conocimientos técnicos que necesitan para reforzar la credibilidad de la FAO en el contexto más amplio de las disposiciones de programación conjunta por países de las Naciones Unidas.

 

A fin de mejorar el apoyo prestado a los equipos de las Naciones Unidas en los países, los coordinadores residentes y los asociados locales para transformar los sistemas agroalimentarios nacionales y las vías nacionales, el Centro de Coordinación para el Seguimiento de la Cumbre de las Naciones Unidas sobre los Sistemas Alimentarios, que la FAO alberga en nombre del sistema general de las Naciones Unidas, es un importante instrumento de apoyo a las vías nacionales.

 

Estimados y estimadas colegas:

 

La reforma y la transformación de las oficinas descentralizadas es un paso obligatorio para asegurarnos de que trabajamos de manera eficiente, eficaz y coherente como Una FAO unificada.

 

Sean representantes de la FAO modernos, profesionales y digitales, no burócratas tradicionales.

 

Para garantizar una FAO más eficiente y moderna en el futuro, debemos prestar atención a varias esferas clave como las siguientes:

  • la gestión operativa;
  • los recursos humanos;
  • una FAO digital;
  • la gobernanza;
  • las comunicaciones;
  • el multilingüismo;
  • los servicios de seguridad, protección y salud;
  • el bienestar general del personal.

 

A fin de abordar el contexto cambiante y los desafíos y carencias detectados en cuanto al fortalecimiento de la red de oficinas descentralizadas, durante las conferencias regionales ministeriales de 2024 se deliberará acerca de otras medidas que permitan contemplar más adecuadamente los contextos de los países.

 

He pedido a Laurent Thomas, mi Representante Especial, que, junto con Beth Crawford, Subdirectora General, colaboren con cada región en torno a la mejor manera de fortalecer las oficinas en los países antes y después de las conferencias regionales ministeriales.

 

A lo largo de mi dilatada carrera he emprendido en China cuatro reformas extensas que siempre se referían al logro de una reforma sistémica para aumentar la eficiencia y la eficacia y no a funcionarios en particular. 

 

Las conferencias regionales son fundamentales para orientar nuestra labor y velar por que los programas de la FAO se ajusten a cada contexto.

 

Cuando nos volvamos a reunir a fines de 2024 informaremos de avances y resultados sólidos. Los invito a todos a asumir la responsabilidad que les corresponde a efectos de rendir cuentas ante los Miembros, especialmente tras el aumento del presupuesto del 5,6 % que han aprobado.

 

Los sistemas agroalimentarios van íntimamente ligados al medio ambiente. Como afirmé ante el Consejo la semana pasada, la agricultura opera a escala regional en la medida en que depende de los recursos naturales y el medio ambiente regionales.

 

Por ello, las conferencias regionales pueden definir sus requisitos y prioridades específicos, y debemos esperar a que emitan sus recomendaciones para elaborar un plan de ejecución sólido.

 

Seguiremos fortaleciendo las asociaciones mediante el establecimiento de centros de conocimiento regionales, que tendrán características distintivas y funciones complementarias y se ubicarán en países con conocimientos y capacidad e instrumentos concretos que ofrecer tanto a escala regional como mundial.

 

Me complació que la semana pasada el Consejo de la FAO reconociera la importancia primordial de empoderar a los jóvenes y las mujeres al establecer oficialmente la Oficina de la Juventud y la Mujer de la FAO en aras de una transformación eficaz de los sistemas agroalimentarios y del desarrollo rural.

 

La Oficina prestará un importante apoyo a la labor que ustedes llevan a cabo sobre el terreno. Las mujeres y los jóvenes son agentes que realmente cambian las reglas del juego en pro de las cuatro mejoras, así como catalizadores transversales de la ejecución del Marco estratégico de la FAO.

 

Recuerden que incluso los países desarrollados necesitan agricultores jóvenes.

 

Estimados y estimadas colegas:

 

Los aliento a que a lo largo de los próximos tres días compartan experiencias y enseñanzas extraídas en la totalidad de la red y a que estrechen los vínculos con colegas pertinentes de la Sede y de otras regiones.

 

Ustedes son el motor y el personal responsable de la reforma y la renovación en curso de la FAO. Son el instrumento y la imaginación de la FAO a efectos de obtener resultados en los países. La nueva FAO está en sus manos.

 

Hagamos lo que hagamos, el mundo nos observa. No solo escucha lo que decimos; observa lo que hacemos, lo que vamos a entregar.

 

El renacimiento de la FAO solo será posible si estamos determinados a pensar juntos, trabajar juntos y contribuir juntos a la recuperación, la reforma y la reconstrucción.

 

Trabajar juntos como un solo equipo mundial y hacer frente a todas las dificultades mano de la mano y codo con codo, de ese modo cumpliremos el objetivo de lo que hemos trazado.

 

Muchas gracias.