Reunión de ministros de Agricultura del G-20

Declaración del

Sr. QU Dongyu, Director General de la FAO

Reunión de ministros de Agricultura del G-20, 12 de septiembre de 2020

Traducción de la declaración preparada en inglés

 

 

Ministro Abdulrahman AL FADLEY;

Distinguidos participantes:

 

Es un placer para mí estar con ustedes hoy, les agradezco su amable invitación.

La FAO ha proporcionado apoyo técnico al Grupo de los Veinte (G-20) desde 2011. En aquel momento, trabajamos conjuntamente para abordar el problema de la extrema volatilidad de los precios de los alimentos. Y, juntos, establecimos el Sistema de información sobre el mercado agrícola (SIMA) Me gustaría agradecer al Reino de la Arabia Saudita la generosa financiación que ha proporcionado a esta iniciativa conjunta. El SIMA resulta esencial para mejorar la información sobre los mercados e incrementar la transparencia de estos. Gracias, ministro Al Fadley.

Actualmente, estamos afrontando nuevos desafíos, entre ellos, la pandemia de la enfermedad por coronavirus (COVID‑19), que está afectando a los sistemas alimentarios y agrícolas de todo el mundo y a todas las dimensiones de la seguridad alimentaria. Ningún país es inmune.

A nivel mundial, los países se han asegurado de que las cadenas de valor alimentarias sigan funcionando adecuadamente. Esto garantiza la producción y la disponibilidad de alimentos variados, inocuos y nutritivos. La buena noticia en lo que respecta a los principales cultivos recolectados en 2020 es que será un año de cosechas excelentes. La FAO estima que la producción mundial de cereales prevista todavía se mantendrá en 2 765 millones de toneladas, es decir, un máximo histórico y 58 millones de toneladas más que en 2019. Esto se debe a políticas favorables, innovación (nuevos cultivares, insumos agrícolas y canales de comercialización) e inversiones, así como el trabajo duro de millones de agricultores.

Hasta el momento, los esfuerzos conjuntos han evitado que la pandemia provoque una crisis alimentaria.

Sin embargo, nuestro análisis muestra que, antes de la pandemia, una cifra estimada de casi 690 millones de personas en el mundo estaban subalimentadas en 2019.

Esta situación podría verse fuertemente agravada por la COVID-19. Las personas más vulnerables serán las más afectadas. Nuestra evaluación sugiere que la pandemia de la COVID‑19 podría provocar un aumento de hasta 132 millones en el número de personas subalimentadas en el mundo en 2020.

Los mercados de alimentos mundiales se encuentran bien abastecidos. Sin embargo, mientras la economía mundial trata de recuperarse debido a la pandemia, el acceso a los alimentos se verá afectado negativamente por las reducciones de ingresos y la pérdida de puestos de trabajo.

Esto sería desastroso, especialmente en el contexto de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), sobre todo el ODS 1 y el ODS 2.

Excelentísimos señores ministros:

Mientras que la pandemia evoluciona, esta reunión mantiene el espíritu de colaboración entre países.

Nuestros debates muestran la voluntad política de seguir trabajando juntos para mejorar el acceso a los alimentos, transformar nuestros sistemas agroalimentarios y erradicar el hambre.

• Debemos garantizar que el comercio siga fluyendo sin complicaciones a fin de contribuir a la seguridad alimentaria y la nutrición a nivel mundial.

Este mes, publicaremos El estado de los mercados de productos básicos agrícolas (2020), en el que se examinan las formas en que los mercados y las cadenas de valor pueden contribuir a la seguridad alimentaria y el crecimiento.

El SIMA, una iniciativa que hospeda la FAO, continúa realizando un seguimiento de los mercados mundiales de alimentos y proporcionando información oportuna. La iniciativa precisará su apoyo regular para seguir desempeñando su importante función en la promoción de la transparencia de los mercados de alimentos.

• Debemos intensificar nuestros esfuerzos para promover la inversión agrícola responsable como parte del desarrollo sostenible.

La FAO encomia la Declaración de Riad para el fomento de la inversión responsable en la agricultura y los sistemas alimentarios.

Apoyaremos a los miembros del G-20 y a los Miembros de la FAO en su conjunto con nuestros programas sobre los Principios del CSA para la inversión responsable, las Directrices voluntarias sobre la gobernanza responsable de la tenencia de la tierra, y la Guía OCDE-FAO para las cadenas de suministro responsable en el sector agrícola.

• Deberíamos abordar todos los riesgos, en particular los derivados de las plagas y enfermedades transfronterizas de los animales y las plantas. La FAO está comprometida con la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (CIPF) y con el Marco mundial para el control progresivo de las enfermedades transfronterizas de los animales de la FAO y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE).
• La cuestión de la resistencia a los antimicrobianos requiere una gran atención. Deberíamos mantener nuestro compromiso contra el uso inapropiado de los agentes antimicrobianos en la agricultura y los sistemas alimentarios de todo el mundo. Asimismo, me gustaría agradecerles su apoyo a los organismos de la Alianza Tripartita ampliada.
• Con el potencial peligro de que la pandemia cause perturbaciones en los mercados, debemos seguir realizando esfuerzos por reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos.

Nuestro trabajo en relación con la Plataforma técnica del G-20 sobre la medición y reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos es otro ejemplo de la estrecha colaboración existente entre la FAO y el G-20.

Los invito a unirse a nosotros en el Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos, que se celebrará el 29 de septiembre. La elaboración de la referencia de la FAO sobre la pérdida y el desperdicio de alimentos contribuirá de manera significativa a medir los progresos y realizar un cambio.

• Debemos otorgar prioridad al agua. Se prevé que el cambio climático empeore la disponibilidad de agua y las inundaciones en las distintas regiones.

Teniendo en cuenta que la agricultura utiliza el 70 % del agua dulce extraída a nivel mundial, esta cuestión resulta esencial para nosotros. La iniciativa mundial de la FAO “Coping with Water Scarcity in Agriculture” (Abordar la escasez de agua en la agricultura) promueve el uso sostenible del agua en la agricultura.

Elogio su intención de trabajar en el ámbito de la gestión sostenible del agua, pues la Organización está preparada para contribuir al respecto.

Uno de nuestros informes principales, El estado mundial de la agricultura y la alimentación (2020), que se publicará el próximo mes, se centra en el agua y la agricultura.

Solo aunando esfuerzos y trabajando juntos podremos afrontar satisfactoriamente los desafíos mundiales.

Esta es la razón por la que, en julio de 2020, presentamos el Programa de la FAO de respuesta y recuperación de la COVID‑19, a fin de proporcionar una respuesta mundial ágil y coordinada y garantizar que todas las personas dispongan de alimentos nutritivos, durante la pandemia y después de ella.

La FAO está comprometida y dispuesta a seguir trabajando con sus Miembros en lo que respecta a la transformación agroalimentaria mediante cuatro mejoras, es decir, una producción, una nutrición, un medio ambiente y una vida mejores para un mundo mejor.

Gracias.